En esta ponencia se ubica el Trabajo Social como disciplina profesional en el Area de Vida Estudiantil.

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1 EL AREA DE VIDA ESTUDIANTIL EN LAS UNIVERSIDADES ESTATALES: EXPERIENCIA DE INTERVENCION EN TRABAJO SOCIAL EN LA UNIVERSIDAD ESTATAL A DISTANCIA Y EL INSTITUTO TECNOLOGICO DE COSTA RICA Lic. Johanna Fernández Gómez 1 y Lic. Adelita Sibaja Salguero 2 I. INTRODUCCION Reflexionar críticamente sobre el Trabajo Social en general y sobre el quehacer profesional en particular, es un acto de trascendental importancia para n perder la visión global del contexto y los fines que persigue esta disciplina. La reflexión que debe darse el III Congreso Nacional de Trabajo Social, permitirá descubrir el todo del cual los profesionales e l Trabajo Social formamos parte y trazar metas y orientaciones nuevas del quehacer profesional. En el marco de este congreso, se presenta la oportunidad de referirse al campo de intervención en que desempeñamos nuestro quehacer profesional: el Area de Vida Estudiantil en las Universidades Estatales de nuestro país. En esta ponencia se ubica el Trabajo Social como disciplina profesional en el Area de Vida Estudiantil. El trabajo se inicia haciendo un esbozo de lo que es el Sistema de Educación Superior Estatal en Costa Rica, se compara luego el método presencial y el método a distancia de Educación Superior. Se presenta el marco conceptual en que se fundamenta el Área de Vida Estudiantil en las Universidades Estatales. Luego se hace una comparación de metodologías de intervención en Trabajo Social, tomando para ello el Instituto Tecnológico de Costa Rica con su metodología presencial y la Universidad Estatal a Distancia son su metodología de Educación a Distancia. Finalmente se dedica un capítulo a lo que consideramos son las perspectivas de acción del Trabajo Social en el área de Vida Estudiantil en las Universidades Estatales. II. EDUCACIÓN SUPERIOR UNIVERSITARIA ESTATAL Aunque en Costa Rica la primera universidad, la de Santo Tomás, se toma en 1843, por su efímera existencia, ya que fue abolida en 1888,se considera que la historia de la Educación Superior de interés jurídico se inicia con la fundación de la Universidad de Costa Rica, mediante La ley #326 de 26 de agosto de Por tanto, hubo un largo período de más de medio siglo de carencia de una institución de Educación Superior con rango de universidad. A partir de 1940, la educación costarricense, cuyo objetivo en todos los niveles es fortalecer los valores en que está fundado el Estado Costarricense; ha tenido una continua expansión debido al crecimiento de la población, a las expectativas de la clase media y a las demandas por parte de la economía de la fuerza laboral mejor formada. Como consecuencia surgieron una gran cantidad de escuelas y colegios, lo que produjo un crecimiento considerable en la demanda por la Educación Superior. Durante treinta años la Universidad de Costa Rica se mantuvo como única alternativa de Educación Superior Universitaria Estatal. 1 Trabajadora Social, Instituto Tecnológico de Costa Rica. 2 Trabajadora Social, Universidad Estatal a Distancia. 1

2 En la década de los años setenta, se empiezan a gestar en el país diferentes movimientos de demanda de alternativas que le permitiera a una mayor población ingresar a la educación superior, dado que para la Universidad de Costa Rica se hizo insostenible la situación de dar cabida a la alta demanda en este nivel de educación. No sólo se dan con mayor fuerza las presiones por obtener cupo, sino que también se dan replanteamientos de programas académico y la necesidad de idear un medio que permitiera que el sector universitario se hiciera más sensitivo a las necesidades cambiantes. La siguiente institución de Educación Superior con rango universitario que se establece en el país es el Instituto Tecnológico de Costa Rica (ITCR) en Mediante la Ley #5182 del 12 de enero de 1973 y con sede en la provincia de Heredia, se crea la Universidad Nacional. En 1977, por Ley #6044 del 22 de febrero se crea la Universidad Estatal a Distancia (UNED), como institución de Educación superior especializada en la enseñanza a través de los medios de comunicación social, siendo la primera y única de su género en Costa Rica. El ordenamiento jurídico presenta de la Educación Superior Universitaria tiene sus orígenes en la Asambleas Nacional Constituyente de 1949, cuyos artículos 77, 84, 85 y 87 son los cimientos de este marco legal. Mediante el artículo 77 los constituyentes concibieron la educación pública nacional como un proceso integral correlacionado en sus diversos ciclos, y en el cual la educación superior universitaria ocupa la etapa final. En el artículo 84 plasmaron con claridad la triple autonomía de las Universidades Estatales: administrativa, política y organizativa. Con este marco jurídico interinstitucional, el 4 de diciembre de 1974, los Rectores de la Universidad de Costa Rica, el Instituto Tecnológico de Costa Rica y la Universidad Estatal a Distancia, suscriben el documento: Convenio de Coordinación de la Educación Superior de Costa Rica. Se fijan mediante este Convenio disposiciones a temas trascendentales para el respectivo establecimiento de carreras, reconocimiento de la educación superior entre otros. (1) La Universidad Estatal a Distancia, de más reciente creación, entra al Convenio de Coordinación el 25 de mayo de Con este breve esbozo se demuestra como la Educación Superior Estatal de Costa Rica, ha tenido un proceso gradual de crecimiento, mediante el cual se ha consolidado y fortalecido su quehacer en los campos en que desarrolla su acción. III. EDUCACION SUPERIOR A DISTANCIA EN COSTA RICA En el Plan Nacional de Educación Superior, para el período , bajo las directrices del Consejo Nacional de Rectores, plantea el problema del aumento de la demanda por Educación Superior. (2) Asimismo, a nivel Latinoamericano a partir de la década de los años setenta, se empieza a dar una corriente que buscaba alternativas viables para alcanzar la meta de la educación universal, amenazada cada vez más por le crecimiento de la población y los problemas económicos que habían llevado a los gobiernos a reducir los programas de gastos públicos. Es así como se plantea la Educación a Distancia, que ha sido utilizada con éxito en todos los niveles educacionales, ya sea como método exclusivo o como a los sistemas tradicionales de enseñanza. La educación a Distancia, se caracteriza por estar dirigida a poblaciones de estudiantes relativamente dispersas y por una dependencia mínima de la enseñanza presencial, la que cuando existe tiene una función significativamente distinta a la que poseen sistemas de enseñanza tradicional. Es una función tutora, orientadora, 2

3 asesora del proceso de enseñanza que se basa fundamentalmente el autoaprendizaje con apoyo de textos autoinstructivos, programas de televisión, radio y otros materiales didácticos. Orígenes de la Universidad Estatal a Distancia En Costa Rica se empieza a gestar la idea de crear una institución de educación superior con una metodología de estudios que permitiera proporcionar nuevas oportunidades a estudiantes que, por una u otra razón, no podían asistir a una institución ubicada en su propio campus universitario. Lo anterior, mediante la utilización de una gran variedad de medios, con el aprovechamiento máximo la utilización de una gran variedad de medios, con el aprovechamiento máximo de las ventajas de cada uno de estos medios. Profesionalmente preocupados por la educación costarricense, se trasladan a observar y vivenciar las experiencias de Educación Superior a Distancia de otros países que ya contaban con esta modalidad para adecuarla ala realidad nacional. Luego de una etapa de formulasen y motivación, se plantea el Proyecto de Creación de la Universidad Estatal a Distancia a la Asamblea Legislativa, que la estableció mediante Ley de la República #6044, del 22 de febrero de Cabe destacar que las Universidades con modalidad de educación a distancia más conocidas y que han influido significativamente en la UNED son la Open University de Inglaterra, la Universidad Nacional a Distancia de España y la Universidad Nacional Abierta de Venezuela. La UNED brinda acceso a toda aquella persona que, cumpliendo con los requisitos de ingreso desee hacerlo, no importando sus condiciones sociales, económicas, geográficas o de profesionales en áreas prioritarias para el desarrollo del país. Para facilitar el proceso de enseñanza aprendizaje del estudiante, que por lo general debe combinar con otras actividades, la Universidad ha puesto al servicio de sus alumnos 29 Centros Universitarios distribuidos en todo el territorio nacional. En estos Centros se les ofrece a los alumnos servicios docentes, administrativos y estudiantiles. Cada Centro cuenta para su funcionamiento adecuado con una biblioteca básica, salas de reuniones, aulas para impartir tutorías, y medios de apoyo para la labor académica. En la metodología a distancia, los Centros Universitarios son el punto de reunión del estudiante con el tutor y el lugar donde pueden gestionar los trámites administrativos y hacer uso de los diferentes servicios que ofrecen los mismos. De igual forma, se desarrolla una labor de enlace entre las inquietudes de los estudiantes, la actividad universitaria y las necesidades culturales y de difusión académica de la comunidad en que se desenvuelve. IV. LA EDUCACIÓN TECNOLÓGICA EN COSTA RICA Orígenes de la Educación Tecnológica El Instituto Tecnológico de Costa Rica se crea el 9 de junio de 1971 con la promulgación de la Ley #4777, como una institución de educación superior con personería jurídica y con independencia administrativa. La citada ley le asigna asimismo la autonomía, que le fue formalmente reconocida en 1975, cuando se incluyó tal condición en la Constitución Política del país. 3

4 La Institución se crea después de un largo proceso de casi seis años, en los cuales se estudiaron varios proyectos para establecer una entidad universitaria de tipo tecnológico. La Ley de Creación asigna a la Institución la enseñanza de la tecnología y las ciencias conexas, orientadas a llenar las necesidades del proceso productivo a nivel nacional en sus diferentes campos. Nace la Institución como una respuesta educativa ante las demandas que se general a finales de la década del 60 e inicios de los años 70, como resultado de una nueva definición a nivel nacional para favorecer el desarrollo económico y social. En los años setenta se orientó el desarrollo económico del país bajo un modelo de sustitución de importaciones amparado al Mercado Común Centroamericano A inicios de la década del 70, luego de las experiencias del modelo de desarrollo económico indicado y considerando la creciente deuda externa del país y le tamaño y características del mercado costarricense; nuestro país se plantea una nueva estrategia económica fundamentada en las exportaciones como motor del desarrollo industrial. Este modelo se sustenta en el principio de que el desarrollo económico es el resultado del incremento en la productividad de empresas con capacidad de exportación. La nueva estrategia de desarrollo nacional requirió, por tanto, una respuesta académica a nivel superior que formara profesionales capaces de adaptar, aplicar y generar tecnología que permita una diversificación en la producción nacional, un incremento en la productividad y el aprovechamiento de la mano de obra calificada disponible en el país. Con este propósito surge el Instituto Tecnológico, como una opción académica con carreras no tradicionales, que no se atendían en el país. Se establecieron esas carreras con el objetivo de que los graduados se integraran al proceso económico y productivo en el menor tiempo posible; por lo cual los programas de estudio buscan acortar la permanencia de los estudiantes en la casa de estudios, sin afectar su calidad como futuros profesionales. Se plantea la educación tecnológica con un alto interés de que el educando combinara y aplicara sus conocimientos teóricos en el campo práctico en los diferentes talleres y laboratorios de la Institución. Paralelamente se introdujo en el plan de estudios de cada carrera la realización durante un semestre de una Práctica de Especialidad, a efectuarse en una empresa o industria vinculada con la carrera del estudiante. Con estos antecedentes la Práctica inicia sus actividades en Fines de la Educación Tecnológica El Instituto Tecnológico de Costa Rica, según se define en su Estatuto Orgánico, es una práctica nacional autónoma de educación superior universitaria, dedicada a la docencia, la investigación y la extensión de la Tecnología y Ciencias Conexas necesarias para el desarrollo de Costa Rica. (3) La acción institucional en los campos de Docencia, Investigación y la extensión, se fundamenta en los siguientes fines: - Formar profesionales en el campo tecnológico que aun en al dominio de su disciplina una clara conciencia del contexto socioeconómico, cultural y ambiental en que la tecnología se genera, transfiere y aplica, lo cual les permite participar en forma crítica y creativa en las actividades productiva nacionales. - Generar, adaptar e incorporar en forma sistemática y continua la tecnología necesaria para utilizar y transformar provechosamente para el país sus recursos y fuerzas productivas. 4

5 - Contribuir al mejoramiento de la calidad de vida del pueblo costarricense mediante la proyección de sus actividades a la atención y solución de los problemas prioritarios del país a fin de edificar una sociedad más justa. - Estimular la superación de la comunidad costarricense mediante el patrocinio y el desarrollo de programas culturales. V. ASPECTOS CONCEPTUALES DEL ÁREA DE VIDA ESTUDIANTIL Antecedentes del Área de Vida Estudiantil En Latinoamérica podría afirmarse que la denominada Área de Vida Estudiantil o Asuntos Estudiantiles, es de reciente constitución y que su origen puede referirse a la universidad norteamericana. No significa que la universidad europea colonial y republicana no hubiese concebido esta área en su quehacer, no hubiera tomado en consideración el bienestar de sus estudiantes. Lo hicieron a su manera en otro contexto y coyuntura histórica. Debe tenerse presente que el estudiante de la universidad colonial por ejemplo, procedía de la clase económica dominante y por tanto, presentaba mucha similitud y características con respecto a su nivel social y cultural, así como su visión de mu ndo con dicha clase. También debe considerarse para esa época el reducido número de estudiantes que tenían acceso a la educación superior. Podría inferirse que con esas características no se presentaban situaciones conflictivas ni problemáticas que incidieran en el bienestar estudiantil. En el siglo XX, en los años setenta, se presenta en Latinoamérica una expansión educativa, especialmente a nivel superior. El crecimiento estaba orientado a satisfacer las necesidades de la sociedad de contar con profesionales, técnicos y científicos para el necesario avance y desarrollo industrial. En razón del crecimiento de la población estudiantil, se hizo necesario que la s universidades brindaran algunos servicios dirigidos a atender necesidades básicas del gran número de estudiantes, referidas a viviendas, alimentación, transporte, salud y financiamiento. La diversidad y complejidad de los programas académicos hizo necesario asimismo, que las instituciones brindaran algún tipo de asistencia y asesoría sobre los cursos. De esta manera se establecieron los programas de servicios estudiantiles, respondiendo a las demandas del creciente número de estudiantes que se dio en esa década. Las instituciones contrataron a profesionales en Ciencias Sociales, de la Salud y Educadoras para que atendieran situaciones perentorias y de emergencia, que se presentaban a los estudiantes que podrían incidir en su rendimiento académico. En sus orígenes los servicios estudiantiles se concibieron como unidades de emergencia para atender necesidades primarias. En muchas instituciones, estos programas se han caracterizado por su falta de continuidad y de recursos, ya que dependen de la voluntad de las autoridades universitarias para su funcionamiento. Si consideramos que la Educación Superior tradicional ha tenido como objetivo fundamental la preparación académica para la vida productiva del educan do, el desarrollo integral del estudiante en el campo social y emocional, no ha constituido el objeto de este tipo de educación. Dentro de este concepto, el Área de Vida Estudiantil se considera al interior de las Universidades como una serie de actitudes y servicios, no necesariamente vinculados con el proceso educativo, asignándoles un papel periferal. Sin embargo, el profesional del Área de Vida Estudiantil, quien ha estado interesada no solo en el desarrollo del 5

6 intelecto del educando, si no en el desarrollo de todas sus potencialidades en el campo personal, emocional y social, no solo en la medida como éstos incidían en su rendimiento, sino por su valor con miras a lograr la formación integral del educando. (4) Si partimos de una conceptualización de Educación Superior humanista, las universidades deben propiciar una formación que aspire a un hombre pleno, realizado como persona integral. El hombre no puede ser exclusivamente Ciencia y Técnica, sino que debe ser primordialmente humano. Desde esta perspectiva la educación no debe estar subordinada exclusivamente a una fin utilitario. El rol que se asigna al Área de Vida Estudiantil bajo esta concepción, toma un papel preponderante ya que facilitará el desarrollo personal del educando así brindará una visión humanística al proceso de enseñanza aprendizaje. De esta manera, el Área de Vida Estudiantil, no será algo distintivo y a veces accesorio al proceso académico, ya que desde esta perspectiva no se concibe solo como servicios de apoyo para atender necesidades primarias, sino que si quehacer estará inmerso en la acción educativa con objetivos comunes. (5) Área de Vida Estudiantil en la Educación Superior Estatal en Costa Rica. Las Universidades Estatales de Costa Rica, son las únicas que cuentan dentro de su estructura orgánica con dependencias encargadas de desarrollar y fortalecer lo que se conoce como el Area de vida Estudiantil. Los objetivos planteados para este desarrollo están estructuralmente vinculados con la Misión Social que con fundamento en sus respectivas Leyes de Creación, les corresponde cumplir a las Universidades Estatales: Democratizar la Educación Superior. Las universidades han planteado paralelamente, tanto la entrega del conocimiento sustentado en una continua búsqueda de la excelencia académica, como la formación de profesionales que actúen críticamente, creativos consientes de sí mismos y del medio económico y social que les da sustento y razón de ser. Por el cumplimiento de este segundo objetivo, se dice que la educación es un proceso social que se ocupa de la Formación Integral del Hombre. Paralelo a una continua búsqueda de excelencia académica, se dedican esfuerzos para que la población estudiantil que constituye las Universidades Estatales logre no solo una mejor integración al ámbito universitario, a su profesión y a la vida; sino también a propiciar su adaptación al sistema educativo, a la realidad estudiantil buscando prevenir, corregir y ayudar a superar las diferencias o carencias ya existentes, que puedan afectar al educando como individuo, como universitario, como miembro de una sociedad y que dificultan su permanencia en la Universidad. A esto precisamente responde lo que se ha denominado el Área de Vida Estudiantil en las Universidades Estatales. Para el desarrollo de los programas en el Área de Vida Estudiantil, las Universidades Estatales han contado con la participación de profesionales en los campos de la Ciencias Sociales, la educación y Ciencias de la Salud. A la luz de las políticas propias de cada universidad, se han establecido programas de vida estudiantil, bajo diferentes modalidades de intervención profesional en cada uno de los campos citados, como lo han sido la atención individualizada, la intervención grupal, la metodología de equipos interdisciplinarios, la intervención a distancia, la descentralización de servicios por facultades y carreras, etc. Al analizar la orientación y desarrollo del Área de Vida Estudiantil en las universidades estatales, es evidente el liderazgo que Trabajo Social como disciplina ha tenido en la conceptualización, organización y consolidación de esta área. Los principios filosóficos en que se fundamenta esta disciplina y los profesionales en trabajo social, formados con concepción humanística, facilitan los instrumentos adecuados para una intervención acorde con los objetivos que se persiguen en el Área de Vida Estudiantil. Al ser el estudiante universitario el sujeto de la intervención del Trabajador Social y estar inmerso en un proceso formativo, este profesional tiene el compromiso de que por su intervención se logre un estudiante con 6

7 conciencia de sí mismo y que como futuro profesional conozca la enorme responsabilidad que tiene ante sí mismo y ante la sociedad; manteniendo para ello la integridad de su condición humana y de su ser como individuo crítico dentro del medio en que está inmerso. Bajo esta concepción, el rol del Trabajador Social en el Área de Vida estudiantil es de gran responsabilidad, que aunado al aporte de otras disciplinas profesionales, contribuyen a lograr la atención Integral del estudiante universitario en los diferentes campos que lo conforman. Se define esta Atención Integral como un conjunto de acciones profesionales y técnicas, tendientes a contribuir al bienestar personal y académico del individuo como un ser biopsico-social. Su objeto de trabajo es el estudiante universitario como un ser humano integral que debe atenderse en todos los aspectos de su complejo desarrollo y vinculado critica y creativamente a la sociedad costarricense. VI. ÁREA DE VIDA ESTUDIANTIL EN LA UNIVERSIDAD ESTATAL A DISTANCIA. El autoaprendizaje en el que se basa la modalidad de enseñanza a distancia, no favorece la pronta incorporación e integración del estudiante a la Universidad. Desde su creación, la UNED le dio a este aspecto fundamental importancia, definiendo claramente objetivos que tienden a lograr el conocimiento e identificación del estudiante con el sistema de estudios, su interrelación y convivencia para la permanencia y éxito de los estudiantes. Los programas que se desarrollan plantean como objetivo contribuir al desarrollo integral del educando que permita dar a la sociedad, profesionales comprometidos con su realidad. Desde su creación, el Área de Vida estudiantil en la UNED, está atendida por la Dirección de Asuntos estudiantiles, actualmente a cargo de una profesional en Trabajo Social, dependiente de la Vicerrectoría Ejecutiva y conformada por dos oficinas: - Oficina de Registro, actualmente a cargo de un profesional en Trabajo Social, tiene como misión el proceso de Admisión y Matrícula. - Oficina de Bienestar Estudiantil, que en sus catorce años de existencia ha estado dirigida por un profesional en Trabajo social y por tanto, todos los programas que se han establecido bajo los principios propios del quehacer profesional de esta disciplina. Con el objeto de facilitar el proceso de enseñanza-aprendizaje y en procura de una formación integral de los estudiantes, se planean, ejecutan y evalúan programas orientados hacia la atracción y permanencia de los estudiantes, así como su mejor integración al sistema de educación a distancia. Se distinguen en esta forma dos grandes líneas de acción que establecen dos etapas bien definidas en su quehacer. - Inducción al sistema: Atracción de estudiantes a una modalidad de estudios que no les resulte desconocida e incomprensible. - Permanencia en el sistema: Integración del alumno a un sistema universitario que está ideado para lograr de éste, una mejor identificación con su medio y con la sociedad en general. Su acción orientada por estos objetivos y lineamientos, se ha traducido en programas que tratan de contribuir en los campos de la Orientación, la Atención socioeconómica, la divulgación Académica, Actividades Culturales y Deportivas, Organización Estudiantil, Salud, Bolsa de Empleo y otros programas con el propósito de lograr la mejor integración de los alumnos a una metodología educativa a distancia. 7

8 El trabajo Social como disciplina profesional, se ubica en la Oficina de Bienestar Estudiantil. Es una labor de equipo y de relación continua con los alumnos y sus organizaciones estudiantiles, tiene entre sus objetivos, contribuir a superar los múltiples problemas que la integración a la modalidad de estudios a distancia pudieran provocar para el buen desempeño académico del estudiante. El trabajador social se convierte en orientador, asesor y facilitador de este proceso de integración y de proceso de organización estudiantil. Su interés principal está dirigido a la persona y a la atención individualizada y grupal de la problemática a que se enfrenta el educando en una modalidad de estudios a distancia. VII. ÁREA DE VIDA ESTUDIANTIL EN EL INSTITUTO TECNOLÓGICO DE COSTA RICA El Area de Vida Estudiantil en el Instituto Tecnológico de Costa Rica, ha estado presente desde que esta Institución inició sus programas académicos en Los servicios estudiantiles se brindaron mediante el Departamento de Psicopedagogía, creado en ese año, como una dependencia de la Vicerrectoría de Docencia. En sus inicios comprendió servicios de: Orientación Académica y Profesional, Cursos de Técnicas de Estudio, Orientación Educativa, Asesoría Psicopedagógica, Bienestar Estudiantil y Programas Culturales y Deportivos. Con el transcurrir de los años, el proceso de consolidación de la Universidad y la ampliación de la oferta académica; el Área de Vida Estudiantil va ampliando sus campos de acción. Factores como la ubicación geográfica de su campus central en la provincia de Cartago, la orientación tecnológica de las carreras que se ofrecen y el perfil socioeconómico y académico de la población estudiantil; justifican que la Institución dedique recursos humanos y materiales para atender y desarrollar los servicios estudiantiles. Es de esta manera como se organizan y gradualmente se fortalecen programas de bienestar estudiantil, asesoría académica, estimulación socio-cultural, y de manejo de adecuados modelos de enseñanza, los cuales se orientan a cumplir los siguientes objetivos: - Ofrecer a los estudiantes mejores condiciones para llevar a cabo con éxito su carrera. - Contribuir al equilibrio entre la formación técnica y profesional y la formación humana y social de los estudiantes. Al especializarse los servicios, se van agrupando en diferentes unidades orgánicas que los desarrollan y ejecutan, a la vez que se incorporan nuevos servicios como lo relacionado con los procesos de Admisión y Registro de Estudiantes. En 1985, cinco años después de la creación del Área de Vida Estudiantil, como producto de una Jornada de Estudio Institucional del rango de departamento alcanza el status de División de Servicios Estudiantiles y Académicos, convirtiéndose de esta forma en una instancia institucional de igual relevancia y status que las actividades Docentes, Administrativas y de Investigación y extensión. Los programas se organizan en departamentos según su especialidad se incorporan nuevas áreas como la Biblioteca y los Servicios Audiovisuales. Acorde con el proceso de cambio y modernización institucional, que se gesta en 1982, el Área de Vida estudiantil, con pleno convencimiento de que su acción debería reconocerse con el status correspondiente a la nueva organización institucional, prepara una propuesta de un modelo conceptual y estructural para la Vida Estudiantil y los Servicios Académicos. Se plantea en dicha propuesta otorgar el rango de Vicerrectoría al Área de Vida Estudiantil, como una condición necesaria para contar con una vinculación directa con el sector estudiantil y directivo de la estructura institucional, para responder con la eficiencia y recursos necesarios ante una mayor democratización y participación de la comunidad universitaria. 8

9 La propuesta en mención es acogida en el Estatuto orgánico aprobado en Diciembre de 1982, se asigna el rango de Vicerrectoría de Vida Estudiantil, y Servicios Académicos. Esta Vicerrectoría sustenta sus actividades bajo el principio de formación integral del estudiante y el compromiso de estimular la superación de la comunidad costarricense. El Area de Vida estudiantil tiene un objetivo general definido que consiste en Facilitar la atracción, el bienestar y el éxito académico de los estudiantes del I.T.C.R., mediante la orientación, asesoría, asistencia socioeconómica, salud, investigación educativa, deporte, arte y acción social; esto con miras a lograr la formación integral del educando y a contribuir con la excelencia académica de la institución. (6) Desarrolla con este propósito acciones en el campo de la atracción y permanencia de estudiantes, procurando el éxito académico, el desarrollo estudiantil y la interacción comunal. Estas acciones se organizan por medio de programas de asesoría y asistencia a estudiantes, así como programas docentes en el campo cultural y deportivo y de extensión socio-cultural. La Vicerrectoría, que en los últimos 6 años ha estado a cargo de un profesional en Trabajo Social, organiza su acción por medio de los siguientes departamentos: Trabajo Social y Salud, Orientación y Psicología, Cultura y Deporte, Biblioteca y la de Medios y Ayudas Audiovisuales. Trabajo Social como disciplina ha estado presente en el Instituto Tecnológico desde que se inició la prestación de programas de Vida estudiantil. El aporte del Trabajador Social quedó plasmado en la conceptualización y organización de programas como la atención socioeconómica, alojamiento y salud. Correspondió a este profesional la dirección de la Unidad de Trabajo Social y Salud, que posteriormente se consolidó en el Departamento de Trabajo Social y Salud, que desde su conformación hasta el presente ha estado a cargo de un profesional en Trabajo Social. El Departamento de Trabajo Social y Salud, enmarca su quehacer en el campo del Bienestar estudiantil mediante servicios cuyo objetivo es favorecer la atracción y permanencia de estudiantes por medio de programas como: Financiamiento de Estudios, cuyo propósito es que estudiantes de recursos limitados puedan continuar estudios superiores, Salud; brindando servicios de atención médica, Enfermería y Odontología, Alojamiento mediante instalaciones de Residencias Estudiantiles y Atención y Asesoría en la problemática socioeconómica y de salud que presenta el estudiante. Es importante destacar que la conformación de este departamento integra dos áreas: Trabajo Social y Salud, que han crecido y se han consolidado en forma paralela. Al interior de esta estructura, tanto Trabajo Social como Salud, compuesto por Medicina, Enfermería y Odontología han tenido el mismo sujeto de intervención con el estudiante universitario y participan en forma interdisciplinaria en la atención de las necesidades y problemática que enfrenta el alumno en su adaptación y ajuste al medio de educación superior. Es indudable que la conformación e integración de dichas áreas, Trabajo Social y Salud, en una dependencia se ha favorecido porque precisamente ha correspondido a Trabajo Social la conducción y organización del departamento y como disciplina por su formación, que le permite analizar al individuo como persona y como parte de una contexto social; ha favorecido la integración y el trabajo conjunto de dichas áreas para beneficio de la población estudiantil. Podría concluirse que esta experiencia de trabajo interdisciplinario ha permitido que los programas de cada área, Trabajo Social y Salud se fortalezcan y desarrollen en forma paralela, cuyo sujeto de intervención es el estudiante como un integral. 9

10 VIII. COMPARACIÓN DE MÉTODOS DE INTERVENCIÓN EN EL ÁREA DE VIDA ESTUDIANTIL: UNA UNIVERSIDAD PRESENCIAL Y UNA UNIVERSIDAD A DISTANCIA El fundamento teórico que sirve de marco para desarrollar los diferentes programas del Área de Vida Estudiantil en una y otra universidad es el mismo, tal y como se ha expuesto en el capítulo correspondiente. Las metodologías de intervención profesional que ha utilizado cada universidad, responde prioritariamente a las características y necesidades de su población estudiantil. La diferencia esencial se basa en la particular metodología que emplea cada una de estas universidades para la entrega de la docencia, a saber el Instituto Tecnológico de Costa Rica con una metodología presencial y la UNED con una metodología a distancia. Mientras en el Instituto Tecnológico, los alumnos se concentran en su propio campus universitario, asisten a lecciones programadas, se ubican en los alrededores del mismo y están en contacto personalmente con la universidad, los alumnos de la UNED solo asisten a Centros Universitarios esporádicamente a recibir tutoría presenciales, a realizar sus exámenes, a presentar sus tareas académicas, a recibir servicios bibliotecarios y audiovisuales; todo en un tiempo muy limitado por factores sociales y demográficos. Tenemos que partir de que la población estudiantil de la UNED es de características diferentes a las del Instituto Tecnológico de Costa Rica. En la UNED es una población dispersa que en su mayoría son trabajadoras, amas de casa, madres con edades y obligaciones de personas adultas. Por tanto, se dispone en la UNED, de menor tiempo para la socialización del estudiante, para su interacción personal, su integración y para el desarrollo de su sentido de pertenencia a la Universidad, aspecto en el cual el Area de Vida Estudiantil tiene mucho que aportar. Situación muy diferente se presenta en el Instituto Tecnológico de Costa Rica, ya que al estar el estudiante presente en su campus universitario, los programas del Área de vida Estudiantil se ofrecen a éste directamente mediante la metodología de atención y asesoría individual o grupal. Se posibilita de esta forma una comunicación ágil y directa con el educando, donde éste puede acudir en el momento que lo requiera, sin limitaciones; más que de horario de prestación de los servicios. La atención directa favorece un clima de interacción e identidad con la Universidad, propicia asimismo, el ajuste personal y social al nuevo medio de educación y a las exigencias que éste demanda. Por su metodología a distancia, el Área de Vida Estudiantil ha tenido que adecuar los procedimientos para ampliar la cobertura de sus programas a una población dispersa. Se han adaptado a la propia metodología tomando como base de la práctica y un convencimiento muy profundo de lo que se hace. El Trabajo Social como disciplina profesional ha sido determinante para el éxito del Área de Vida Estudiantil en la UNED, ya que se aplica Teoría y Práctica profesional altamente consecuentes con los objetivos de esta Área. Los programas son coordinado por Trabajadores Sociales, se seleccionan áreas geográficas donde previo diagnóstico, se ofrecen los programas, se coordina con organizaciones que ubicadas en sus propias comunidades son un gran recurso para un trabajo mancomunado. La UNED hace llegar a través de diferentes medios audiovisuales, escritos, por la vía telefónica entre otros, con toda claridad, los procedimientos que se siguen para el uso de los programas de Vida Estudiantil. En el proceso de admisión y matrícula se orienta al alumno antes de su ingreso a la Universidad, para que éste clarifique sus ideas con respecto a la metodología de enseñanza a distancia. El personal de los diferentes Centros Académicos de la UNED y los tutores son un gran recurso para desarrollar las actividades propias del Área de Vida Estudiantil. Es importante señalar, que en el caso del Área de Vida Estudiantil es este un campo nuevo, del cual no se conocen otras experiencias sistemáticas en Universidades a Distancia. 10

11 Por su parte como se indicó con anterioridad, la metodología presencial que caracteriza la docencia en le Instituto Tecnológico, favorece que el Área de Vida estudiantil pueda tener una acción más directa con el educando. De esta forma, se posibilita asimismo, la evaluación y el seguimiento del proceso de adaptación del estudiante a las exigencias del medio académico. Asimismo, se puede intervenir fácilmente en la atención directa de toda la problemática que enfrenta el estudiante durante su permanencia en la universidad. Al estar presente el alumno, se posibilita efectuar diagnósticos para determinar sus necesidades y características, como un insumo importante para orientar los programas del Área de Vida Estudiantil. Para concluir es importante destacar que en las Universidades Estatales en Costa Rica, en el Área de Vida Estudiantil a través del Consejo Nacional de Rectores, coordinan y retroalimentan sus programas mediante el trabajo de comisiones específicas en cada área: Becas, Salud, Deporte, Cultura, Divulgación y Orientación y Admisión y Matrícula. El Instituto Tecnológico y la UNED por tanto, participan en eventos conjuntos con las otras Universidades Estatales, situación que ha servido para enriquecer y ampliar los niveles de intervención profesional. Ambas Universidades utilizan como método constante de su accionar en el Área de Vida Estudiantil, una revisión, actualización y control constante de procedimientos y métodos. PERSPECTIVAS DE INTERVENCIÓN EN TRABAJO SOCIAL Para referirse a las perspectivas de intervención profesional en el Área de Vida Estudiantil, es necesario reflexionar sobre el modelo de educación superior que se debe plantear ante las puertas del siglo XXI. La Universidad Estatal tiene el ineludible compromiso de evaluar su sistema educativo, para que éste pueda responder a las demandas y características del proceso de modernización que se vislumbra ante la llegada de un nuevo siglo. Bajo esta perspectiva, el educando debe estar formado con una motivación y orientación tendiente a promover y favorecer el cambio y a responder a las exigencias de una sociedad y un modelo de desarrollo cada vez más dinámico y absorbente de la condición de su ser como individuo. La educación, por tanto, debe orientarse a lograr que el educando sin perder su identidad como individuo y como miembro de una sociedad, pueda equilibrar esta posición combinando el cientificismo que su formación debe promoverle. Es asimismo, necesario que la Universidad Estatal mantenga dentro de sus fines y principios la democratización de la educación, haciendo posible el acceso a la misma a jóvenes sin distinción de su condición económica. Partiendo de las anteriores consideraciones, las perspectivas e intervención profesional del Trabajador Social, se enmarcan en un rol que les significa cada vez más un mayor compromiso, como sustancial de un proceso educativo. El reto para el Trabajador Social es encontrar modelos metodológicos que permitan una mayor cobertura de los programas y servicios y una mayor calidad, formas inteligentes y claras de resolver lo que se proponga según la manera más conveniente tanto para la población que atiende como para las universidades, según sus limitaciones presupuestarias. El Trabajador Social tendrá que mantenerse atento a las necesidades del educando, crear conciencia reiterando las veces que sea necesario, estas necesidades, problemas e inquietudes a los niveles superiores, procurando estar presente en forma planificada en los procesos democráticos que vivan las Instituciones, demandando y ganándose con su actuación y con su seguridad profesional un lugar en los órganos decisorios fundamentales que le permitan beneficiar a los estudiantes. 11

12 El Trabajador Social en el Área de Vida Estudiantil, debe abrir nuevas líneas de acción hacia otros campos, desarrollando programas para atender aspectos relacionados por ejemplo con: - Seguimiento de graduados para conocer su situación real en el mercado de trabajo y la relación de ésta con su formación profesional. - Rendimiento académico estudiantil, la incidencia y aspectos que favorecen el rendimiento académico. - Definir políticas de trabajo comunal universitario. - Identificar críticamente y proponer nuevas opciones a las políticas y objetivos de los Programas de Acción Social. En el futuro, al Trabajador Social del Área de Vida Estudiantil en la UNED, le corresponderá un papel más activo y comprometido para demandar con toda propiedad al interior de los órganos decisorios de la Universidad, que se establezca una clara política institucional que le dé al Área de Vida Estudiantil, el reconocimiento, apoyo y fortalecimiento necesarios, a fin de que adquiera igual relevancia a la de otras áreas substantivas del quehacer universitario. El Trabajador Social debe dirigir sus esfuerzos a lograr que el Área de Vida Estudiantil en igual forma que en el resto de las Universidades estatales, se le asigne el rango de Vicerrector. De ahí la necesidad de lograr una condición autónoma de su gestión, dirigida a brindar servicios a los estudiantes y facilitar el proceso de enseñanza-aprendizaje, como uno de los pilares fundamentales para hacer viable la real democratización de la Educación Superior. Corresponderá al Trabajador Social en el Instituto Tecnológico, favorecer las condiciones para que el Area de Vida Estudiantil y sus programas se fortalezcan y mantengan en la estructura con el status y rango que han tenido a la fecha. A nivel de intervención profesional, el Trabajador Social en el ITCR, deberá proponer nuevas formas de vinculación directa con las necesidades del conglomerado estudiantil, procurando que la orientación tecnológica que sigue la Institución no relegue a un segundo plano el compromiso de la Universidad de proporcionar una formación integral al educando. Es imprescindible que el Trabajador Social evalúe permanentemente su quehacer para adecuarlo asimismo al modelo educativo que la universidad planteará de acuerdo con las exigencias de la época y del medio social. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS (1) CONARE Leyes, Convenios y Decretos de la Educación superior. OPES, (2) CONARE Plan Nacional de Educación Superior, 1975 (3) Instituto, Tecnológico de Costa Rica, Estatuto Orgánico, Título I, Fines y Principios. (4) Essenfeld de Breur, Senta Reflexiones Doctrinarias en Torno a los Asuntos Estudiantiles, Universitas 2000, Volumen 4, (5) Essenfeld de Breur, Senta, Opus Cit. (6) Instituto, Tecnológico de Costa Rica, Quehacer de la Odisea,