Web de la Sociedad de Pediatría de Atención Primaria de Extremadura 1º Foro de Pediatría Extrahospitalaria en Extremadura

Transcripción

1 Web de la Sociedad de Pediatría de Atención Primaria de Extremadura 1º Foro de Pediatría Extrahospitalaria en Extremadura INTERVENCIÓN DEL PEDIATRA EN LA GUARDERÍA Felipe Toledo Ortiz. Jefe Sección Pediatría Social y del Adolescente. H. Reina Sofía. Córdoba. Desde la implantación de la LOGSE en 1991, la atención a la infancia se viene realizando cronológicamente de acuerdo a los ciclos que el Sistema educativo español entiende como educación infantil. El primer ciclo que abarca los tres primeros años de vida del niño es atendido en guardería y su educación cultural y social financiada en Andalucía por el JASS. El segundo ciclo, llamado también de educación preescolar, se extiende desde los 3 a los 6 años y su formación depende de Educación. Estos límites no son tan estrictos, por un lado porque la demanda de plazas para niños menores de un año es escasa y por tanto hasta ahora muchas guarderías no poseen niños de esta edad y sí de uno a dos años, de dos a tres años y de tres a cuatro años. Periodo este último que en Andalucía concluye en el presente curso escolar. En el segundo ciclo o preescolar la edad de seis años, en determinadas ocasiones, cuando la madurez de un niño no ha alcanzado los objetivos que requiere su acceso escolar, se le permite un año más de formación infantil. La atención sanitaria de todos estos niños está desempeñada en todo tiempo por el Servicio Andaluz de Salud, a través de sus Médicos de Atención Primaria. Existen además los Equipos de Orientación Educativa integrados por médicos, psicólogos, logopedas, pedagogos y trabajadores sociales, dependientes de educación encargados de la valoración de niños con necesidades educativas especiales que requieren la adaptación y aplicación de su currículum según las discapacidades motoras o enfermedades crónicas que padezcan. La atención sanitaria del niño menor de 6 años la realiza el pediatra de atención primaria, ya de ambulatorio o del centro de salud. Sólo en determinadas guarderías privadas que tengan concertado este servicio con un pediatra concreto será éste el encargado de dicha atención. Desde el Centro de Salud se organizan por el equipo de atención primaria (pediatras y médicos de familia) las actividades del Programa de Salud integradas en cuatro grupos: 1. -EL PROGRAMA DEL NIÑO SANO.- Se articula de acuerdo al Programa de vacunaciones que facilita el control y seguimiento del niño. Partiendo de la época de recién nacido y controles a los 2, 4, 6, 9,12 y 15 meses y después cada año desde los 2 a los 6 años. La primera visita coincide con la extracción de sangre del talón para detección de hipotiroidismo y fenilcetonuria y realizar la vacunación de hepatitis B, caso de no haberse realizado en la maternidad de origen. Se realiza la historia clínica, se obtienen los datos antropométricos y se consigna el tipo de alimentación láctea y el apoyo para la lactancia materna. Detección de riesgo social en caso de madre joven y adolescente, padres drogadictos, pertenecientes a minorías étnicas o nivel socioeconómico bajo. Resolver interrogantes sin ansiedades ni angustias. Detectar anomalías morfológicas y funcionales. El segundo control se realiza a los dos meses. Se valora el crecimiento y desarrollo (peso, talla, perímetros), abducción de caderas, pliegues, estrabismo, hernias, comienzo de la sonrisa, fijación de la mirada, balbuceo, señales de golpes y traumatismos (malos tratos), vacuna, prevención de accidentes. Tercer control el cuarto mes: destacar factores de riesgo, control antropométrico, exploración aparato locomotor (caderas, pliegues, pies), sinequias vulvares, criptorquidias, fontanelas, auscultación cardiaca, coge objetos, se sienta con apoyo, se lleva todo a la boca, se coge los pies, se vuelve a la voz, prevención de accidentes, vacunación, alimentación complementaria a partir del 5º mes. Cuarto control al sexto mes: somatometría, dentición, estrabismo, audición, sedestación, balbuceo imitativo, reconoce a familiares, miedo ante extraños, vacunación, juguetes, prevención de accidentes. Quinto control a los 9-12 meses: Se mantiene de pie, inicia la marcha, presión de pulgar e índice, saca cosas de recipiente, palabras aisladas, reconoce su nombre, diversificación alimentaria con aproximación a

2 la normal (restricciones), uso de vaso y cubiertos, deambula, gatea, arrastra juguetes, prevención de accidentes. Sexto control a los 15 meses: Somatometría, valorar marcha y postura camina bien, patadas a pelota, palabras con significado, señala partes de su cuerpo, hace torres de tres-cuatro cubos, cariñoso con su madre, áspero con los demás, refuerzo vacunal, abandonar el chupete, prevención de accidentes, garabatea, actitud imitativa, juguetes, corregir posibles malos hábitos alimenticios, dieta correcta y variada. Séptimo control a los dos años: Detección de anomalías: Crecimiento, visión, caries, maloclusión, hipertrofia adenoidea, infecciones de repetición, criptorquidia, hernia umbilical, marcha. Desarrollo psicomotor: Hace torre de seis cubos, vocabulario de 25 palabras, come sólo, se lava las manos, conoce partes de su cuerpo, hace círculos con lápices. Educación para la salud: comienza la socialización, juegos en paralelo y en grupos, higiene dental y corporal, televisión supervisada, prevención de accidentes en las calle, normas de nutrición. Octavo control a los tres años: Prevención de la obesidad. Control del crecimiento, detección anomalías columna, pies planos, tensión arterial, valoración visual, control dentición, adaptación familiar; compartir actividad con otros niños y aprende sus nombres, se viste y desviste sólo regula esfínteres, baja y sube escaleras alternando el pie, salta sobre un pie, dibuja círculos y los nombra, reconoce dos o tres colores. Prevención de accidentes en la calle, estimulación de conducta y de autonomía. Control noveno a los 4 años: Exploración completa y sistematizada: escoliosis, agudeza visual, testículos en bolsa, dentición (20 piezas), se viste sólo, dibuja hombres (3 partes), copia cruces, círculos, cuadrados, hace muchas preguntas y se interesa por palabras nuevas, distingue lo grande y lo pequeño, adaptación familiar y social, prevención de accidentes, valorar posibles causas de riesgo, estado nutricional, mal trato, vacunaciones, trastornos del sueño. Control décimo a los seis años: Revisión del calendario vacunal. Examen de salud buco-dental. Antropometría (peso-talla). Exploración de la agudeza visual y estrabismo. Consejo sobre alimentación, higiene y prevención de accidentes. EL programa de vacunaciones es casi siempre coincidente con el control del niño sano. Todo niño al ingresar en una guardería debe acompañar certificado de salud acompañado de la situación vacunal. El programa del niño sano y de vacunaciones estará coordinado por un epidemiólogo a quien habrá de comunicarse todo caso localizado en una guardería o centro escolar de EDO (enfermedades de declaración obligatoria) quien inmediatamente realizará los trámites de control y vigilancia a través del SVEA (Servicio de Vigilancia Epidemiológica de Andalucía). 2. -CONTROL DEL MEDIO AMBIENTE ESCOLAR.- Realizado por médicos de atención primaria de Centros de Salud (pediatras y médicos de familia) de acuerdo a un cuestionario de control de medio ambiente y coordinado por la Sección de Sanidad Ambiental. El control del medio ambiente escolar realiza dos actividades fundamentales: inspección del entorno (estado de conservación, limpiezas, medidas de seguridad, iluminación, ventilación, calefacción, barreras arquitectónicas, lugares prohibidos para fumar, riesgos de zonas cercanas al centro, botiquín escolar, saneamientos e higiene de las aguas para bebidas y residual, etc. estas últimas, coordinadas por farmacéuticos de la Unidad de Salud ambiental, mientras que la otra actividad referente a vigilancia de comedores escolares, cocina, manipulaciones de alimentos y en especial la atención a la alimentación, estará coordinada por un veterinario de la Unidad de Salud Ambiental. El medio ambiente escolar tiene gran importancia por ser el lugar donde niños y personal docente pasan gran parte de su tiempo. Aprender la importancia del medio ambiente escolar permite conocer la situación higiénico-sanitaria de todos los centros escolares de un distrito o una provincia; promover un entorno escolar saludable; identificar y prevenir riesgos ambientales; poder adoptar medidas correctoras particulares y generales; motivar a la comunidad escolar, a los Ayuntamientos y a la Delegación de Servicios Sociales y

3 Educación; asesorar al Consejo de Salud Escolar a la hora de planificar, evacuar y ejecutar actividades educativas. Los resultados de esta investigación deben ser notificados mediante acta que será remitida al centro, al distrito de Salud Ambiental y quedando una tercera para los médicos que han realizado la cumplimentación del protocolo de inspección. El cuestionario que ha clasificado las deficiencias en graves y muy graves y que se ha cumplimentado conjuntamente por Técnicos de Educación y Ciencia y de Salud, informar al Centro Escolar o Guardería de las deficiencias encontradas con las propuestas correctoras que se estiman oportunas deben realizarse. De dicho resultado se informa también a los distintos Ayuntamientos donde están ubicadas las guarderías y centros escolares, a fin de que todas las alteraciones encontradas sean conocidas, estudiadas y subsanadas. Un aspecto que comienza a ser valorado y que requiere se le preste suficiente atención consiste en el estudio y formación de todo el personal en cuanto a seguridad, ya que normalmente no se realizan ejercicios de evacuación de emergencia. 3. -EDUCACIÓN PARA LA SALUD.- Aunque en el primer ciclo de la Educación Infantil no existe un programa de educación para la salud en el sentido de informar y preparar a los menores, si, en cambio, es importante organizar reuniones dedicadas a los padres de los niños de la guardería y a los miembros de la institución infantil que son sus cuidadores y quienes los atienden. Estas reuniones pueden realizarse de forma periódica contando con un grupo de trabajo constituido por educadores y sanitarios, a ser posible la directora y pedagoga de la guardería y los miembros encargados de la medicina primaria de estos niños. Reunión que debe celebrarse en la misma guardería, cada dos-tres meses, después de la salida vespertina de los niños. Los temas que deben proponerse inicialmente corresponden a aquellos que afecten a la salud a través de la higiene personal y de la ropa; a la higiene buco-dental con la costumbre desde época precoz del uso del cepillado de dientes después de las comidas; al por qué de una alimentación variada y completa y cuáles son las razones para establecer diferentes menús que de forma precisa se suelen anunciar en un lugar determinado para toda la semana y por qué motivos existen unos menús para el invierno y otros para la época de calor; al programa de vacunaciones siguiendo un calendario cronológico de los avances sanitarios que ha determinado en especial en esta época de la infancia donde suelen presentarse la mayoría de enfermedades infecto-contagiosas; a conocer las áreas y puntos de riesgo susceptibles de ocasionar accidentes y que deben estar más estrechamente vigilados e incluso menos accesibles para los niños. Estos temas que pueden repetirse año tras año suelen estar pronto acompañados por otros más específicos demandados por las mismas madres de los niños, ya sea por su mayor incidencia en el lugar, por su actualidad o por constituir temas menos conocidos o que plantean más dudas a los miembros adultos de la comunidad. Estas reuniones permiten un mejor acercamiento entre la comunidad familiar de los niños y los equipos docentes y sanitarios y una mayor colaboración mutua. El juego como elemento educativo de los pequeños posee una función socializadora que va a ir marcando paulatinamente su personalidad como individuo. Aunque los más pequeños están juntos y parece que juegan juntos, esto no es así, porque cada uno sigue una normativa diferente. Es con el tiempo, conforme se va integrando en el grupo, cuando va aprendiendo las reglas necesarias para adaptarse al mismo, cuando va siendo consciente de que participar, compartir, comprender y aceptar, definen el mejor camino para su desarrollo social. El juego, la representación teatral o el guiñol donde manifiestan su fantasía, son los elementos fundamentales en la educación del niño pequeño, donde educadores y sanitarios están de acuerdo porque a través de ellos está la mejor educación para la salud en la etapa infantil. Para los niños del segundo ciclo de Educación Infantil se pueden sugerir diferentes actividades relacionadas directamente con educación para la salud. Cuando nos referimos a educación ambiental, les enseñaremos la necesidad de la limpieza de la guardería, de la influencia de la luz y el agua para el crecimiento de las plantas en el jardín, de la necesidad del agua y de la comida para el crecimiento de los animales y pájaros en la casa o en el campo, plantar semillas para ver como nacen árboles o hierbas. De la

4 necesidad del lavado de las manos y del cepillado de los dientes para estar sanos. La actividad física mediante el paseo o la marcha, a veces con pequeños obstáculos (taludes, troncos para poder saltarlos, la búsqueda de hojas de árboles para analizarlas posteriormente con el profesor. Con respecto a la alimentación, conocer las diferentes comidas, animales, plantas, distinguir si son sólidos o líquidos, cuál es su gusto (dulce, salado), su color (rojo, verde) su olor (fuerte, débil dibujar alimentos, animales, plantas, modelarlos en plastilina, dibujar y luego recortar, jugar al mercado, etc.). Sobre higiene, hablamos de la boca, de los dientes, de las encías, de la lengua; del lavado de manos, del de la cara, de los ojos, la ducha. Hablamos del sexo: de la diferencia entre el niño y la niña; de la diferencia entre animales (machos y hembras). Cuáles son los nombres de los órganos genitales. Una buena higiene mental en los niños consiste en eliminar la incomprensión, la inadaptación, la explotación y la deshumanización de relaciones. Hay que favorecer el desarrollo de sus capacidades, de su lenguaje, de su destreza manual; de la atención, memoria, imaginación, y juicio; educar su voluntad y estimularlo, saberlo respetar y querer, así conseguimos el desarrollo de una personalidad equilibrada. El niño que presenta anomalías físicas o psíquicas requiere una ayuda adecuada y un tratamiento precoz de su defecto físico o de sus problemas de conducta o de su personalidad. Corresponde al médico, al profesor y a la familia de un niño con problemas requerir que sus compañeros tomen a estos niños como personas que necesitan más afecto, más consideración, más apoyo para que se encuentre más seguro en el grupo. Para prevenir los accidentes se requiere informar de la posibilidad de que ocurran y de resaltar las precauciones, que hay que tomar en cada caso. Es una buena norma detectar los posibles elementos que pueden ocasionar dicho peligro tanto en la casa, como en el colegio o en la calle. El riesgo existe cuado estamos cerca de un fuego, de un producto tóxico, de una medicina, de un enchufe eléctrico, de objetos cortantes y puntiagudos porque pueden ser causantes de quemaduras, intoxicaciones o envenenamiento, electrocución, heridas que se evitan adoptando medidas de seguridad en cada caso, en especial no haciendo uso ni aproximándose a ellos. Deben cruzarse las calles utilizando los pasos de cebra o cuando esté abierto el semáforo, mirando siempre a ambos lados y no haciéndolo de forma atolondrada. La clase debe poseer un pequeño botiquín para su uso en el momento oportuno y conocer que las heridas se lavan primero con agua y jabón. Un mural en la clase donde se colocan dibujos, fotografías alusivas a accidentes permite concienciar a los niños de este peligro. Los cursillos de natación a edad temprana permiten garantizar un menor riesgo de ahogamiento. En el momento del baño es imprescindible la presencia de un mayor en el entorno de la piscina o en la playa. Debe estar proscrito a todo menor de diez años la bebida de alcohol o el uso del tabaco para fumar. El exceso y abuso de comidas y bebidas es pernicioso. Pueden real izarse carteles con dibujos, comics y fotografías donde se expongan los hábitos y actitudes de vida saludable. Se consideran bebidas saludables los zumos de frutas y todos los batidos de frutas. Ante un caso de enfermedad infectocontagiosa se deben extremar las medidas precautorias: evitando el hacinamiento de los niños, ventilando las aulas, utilizando pañuelos de un solo uso y no intercambiándolos, apartarse del que tose, extremando las medidas generales y personales de limpieza, aislando a los niños enfermos a su domicilio o al hospital. Las persona que ha padecido la enfermedad no debe incorporarse al centro hasta haber obtenido el alta médica. Si aparece una intoxicación alimentaria hay que revisar la procedencia de los alimentos, su consumo lo más fresco posible, que haya estado en el refrigerador, que no se haya descongelado y vuelto a congelar, si existe infección de algún cocinero por herida, infección cutánea, ocular o respiratoria o diarrea; posea carnet de manipulador de alimentos. Extremar la lucha contra moscas e insectos en la cocina y el comedor, no permitir acceso de animales a la cocina ni al comedor. Cuidadosa limpieza del utillaje y de las instalaciones de cocina y comedor.

5 La presencia de pediculosis requiere un tratamiento individual de cuantos niños la presenten mediante el lavado de la cabeza con champú insecticida y comprobando posteriormente que no existen piojos vivos ni liendres adheridas al cabello. Debe desecharse inmediatamente todo tipo de agujas o jeringuillas que se encuentren los niños en las proximidades del colegio por el riesgo a pincharse y contraer hepatitis, SIDA u otra enfermedad contagiosa. 4. -APOYO A OTROS PROGRAMAS.- El programa de salud buco-dental que se realiza a los niños mayorcitos está coordinado por un equipo sanitario y un estomatólogo que detectan la existencia de caries y maloclusiones dentarias y la necesidad de emplear selladores y obturadores. La existencia de un caso de tuberculosis o de un pequeño brote en una comunidad estudiantil obliga al estudio de la familia de estos niños y de toda la clase. El Programa RAI (riesgo anual de infección TBC) permite conocer la seroconversión de la tuberculina y su índice de contagio en la población escolar. Otro programa conjunto de educación y Sanidad se refiere a la necesidad de impedir a los fumadores que dicha actividad se realice en aquellos lugares donde comparten actividades alumnos y profesores. Sólo está permitido fumar en un lugar donde no tengan acceso los alumnos. Constituye el programa de consumo de tabaco