ESTUDIO DE LA ADMINISTRACIÓN SUBCRÓNICA DEL TÉ DE CHAYA (CNIDOSCOLUS CHAYAMANSA) EN LA DIABETES INDUCIDA QUÍMICAMENTE EN RATAS. Giovanna María del Rosario Palos Suárez 1, Minerva Ramos-Gómez 2, Rosalía Reynoso-Camacho 2, Eva González-Jasso 1. 1 CICATA-IPN, Querétaro. Querétaro, 764. 2 Departamento de Investigación y Posgrado en Alimentos, UAQ. Querétaro, 761. eglezjasso@yahoo.com.mx RESUMEN En México, la diabetes representa el primer lugar de mortalidad en nuestro país debido a sus complicaciones cardiovasculares, generadas por las alteraciones metabólicas en carbohidratos, lípidos y proteínas, que se manifiestan principalmente por hiperglicemia e hiperlipidemias. Los tratamientos con medicamentos son costosos y con el riesgo de desarrollar reacciones adversas, o intolerancia después de su empleo crónico, razones por las que se ha incrementado el empleo de productos naturales, entre los que destaca la chaya (Cnidoscolus chayamansa). En el presente trabajo se evaluó el efecto subcrónico del té de chaya sobre los niveles de glucosa, colesterol y triglicéridos sanguíneos y su relación con los indicadores tempranos de daño renal como la microalbúmina, en un modelo de diabetes inducida químicamente. Para lo cual, se utilizaron ratas Wistar (25-28g) inducidas con una dosis de estreptozotocina (45 mg/kg/ip), después de 72 h se confirmó la hiperglucemia ( 18 mg/dl). El té de chaya (2%) se dio ad libitum durante 7 semanas, se realizó registro semanal de peso, consumo de alimento y líquidos; niveles sanguíneos de glucosa, triglicéridos y colesterol; niveles de microalbúmina y creatinina urinarias. Los resultados indicaron que la Chaya en las ratas diabéticas no modificó el consumo de alimento, ni líquido, y no modificó los niveles sanguíneos de glucosa y colesterol; pero sí redujo los triglicéridos, comparados con su grupo control diabético que solo recibió agua. El funcionamiento renal valorado por la microalbuminuria y creatinina urinaria mostraron niveles que indicaron un probable daño renal que fue similar tanto en el grupo de ratas diabéticas que recibieron chaya como en sus controles con agua. Estos resultados nos indican que la chaya puede mejorar algunas de sus complicaciones cardiovasculares al reducir el nivel de triglicéridos en sangre. Palabras clave: diabetes experimental, chaya (Cnidoscolus chayamansa), microalbuminuria INTRODUCCIÓN A nivel mundial la diabetes mellitus representa uno de los principales problemas de salud pública, en México presenta una prevalencia cercana al 1% y en el estado de Querétaro del 8% (Velásquez y col., 23). La diabetes es una enfermedad crónica-degenerativa que se presenta por alteraciones metabólicas en la glucosa, lípidos y proteínas; y se refleja por niveles elevados de los mismos, en sangre. Se genera por el desequilibrio entre la producción de glucosa por el hígado y su utilización por los tejidos dependientes e independientes de insulina, o por una secreción deficiente de insulina y/o por una resistencia o disminución en la sensibilidad de la insulina (Becker 21). Empieza como una enfermedad silenciosa, acompañada por alteraciones bioquímicas y manifestaciones clínicas que se caracterizan por hiperglicemia, poliuria, polidipsia, polifagia y pérdida de peso. Las complicaciones crónicas comprenden
alteraciones microvasculares como la neuropatía, retinopatía y nefropatía; y macrovasculares como la enfermedad vascular cerebral y la cardiopatía isquémica, esta última responsable de la primera causa de mortalidad en nuestro país. Con un gran impacto económico y social, que genera gastos elevados para la población y el sector salud, por las discapacidades, terapias de rehabilitación y medicamentos necesarios para su tratamiento, los cuales se acompañan de diversos efectos secundarios (Barquera y col., 23). Por lo que existe gran necesidad de estudiar alternativas que eleven la calidad de vida del enfermo diabético, entre éstas se tiene a la medicina tradicional. En México, se conocen alrededor de 15 plantas para el tratamiento de la diabetes (Alarcón-Aguilera, 1998), de las cuales sobresale la chaya (Cnidoscolus chayamansa), por sus propiedades nutritivas se le compara con la espinaca aunque su valor nutricional es superior en proteína, calcio, potasio, hierro, vitamina C, beta-carotenos, fibra (Kuti y Torres, 1996). Aunque por su contenido de glucósidos cianogénos (.17±.2 mg HCN/g/hoja) las hojas de chaya preferentemente deben cocerse, (Molina y col., 1997). Sin embargo, existe controversia y escasa evidencia científica sobre su efecto antidiabético. En el presente trabajo se evaluó el efecto del té de chaya administrado de forma subcrónica, sobre los niveles de glucosa, colesterol y triglicéridos, y su relación con los indicadores tempranos de daño renal, en un modelo de diabetes inducida químicamente en ratas. MATERIALES Y MÉTODOS Animales: Se trabajó con 19 ratas Wistar macho (25 28 g) provenientes de Harlan México, S.A. de C.V., que se mantuvieron bajo un ambiente controlado de luz/oscuridad de 12 h. recibieron alimento y agua ad libitum. Materiales: Las hojas frescas de chaya (Cnidoscolus chayamansa) fueron colectadas de dos árboles. La estreptozotocina fue de Sigma Chem. Co (St. Luis, MO), los kits de glucosa, colesterol y triglicéridos de Randox Lab. Todos los días se preparó el té de chaya (2%) en agua. Inducción experimental de diabetes. Se realizó con una dosis de estreptozotocina (STZ) (45 mg/kg. ip), los animales se consideraron diabéticos, cuando al tercer día de la STZ la glucosa sanguínea en ayuno fue 18 mg/dl. Diseño experimental. Comprobada la hiperglicemia, empezó el tratamiento con el té de chaya ad libitum durante 7 semanas. Se agruparon en diabéticas control (n=6) recibieron agua, diabéticas tratadas (n=7) recibieron té y el grupo de sanas tratadas (n= 6) recibieron té. Cada semana se realizó: control de peso corporal, consumo de alimento y líquido; medición de glucosa, colesterol y triglicéridos en ayuno, de la vena caudal por medio de un glucómetro (Roche); y microalbúmina en orina de 12 h. Al final, todas las ratas fueron sacrificadas con éter, la sangre fue tomada por punción cardiaca de la cual se separó el suero y se congeló a -2 C hasta su análisis, por espectrofotometría, empleando kits específicos. Análisis estadístico. Los resultados son expresados como la media ± desviación estándar, y las medias comparadas por la prueba de Duncan. P<.5 fue considerada significativa.
RESULTADOS Peso corporal. Las ratas diabéticas que recibieron el té de chaya disminuyeron 25% su peso inicial de 259±12 a 19±27g (P<.5), comparado con el 15% de las diabéticas que solo recibieron agua (255±18 a 218±32g). Por el contrario, las sanas que recibieron el té de chaya lo incrementaron significativamente 52% (Figura 1). Figura 1. Control de peso semanal. Los resultados muestran la media ± desviación estándar. La estreptozotocina (STZ) fue inyectada (45 mg/kg. ip) en la semana 1 (flecha). P<.5 del valor inicial. P e s o C o rp o ra l (g ) Diabéticas Chaya Diabéticas Agua Sanas Chaya n = 7 n= 6 n=6 5 4 3 2 1 1 2 3 4 5 6 7 Consumo de alimento e ingesta de líquido. Las ratas diabéticas que recibieron agua o el te de chaya aumentaron hasta el 25% y 35% respectivamente su consumo de alimento. Este incremento correspondió al 96% (52±13 g/día/rata) y 61% (42±1 g/día/rata), del grupo de las sanas (29±7 g/día/rata). Por otro lado, las ratas diabéticas tratadas con te o con agua, desde el inicio de su hiperglicemia presentaron una ingesta de líquido superior (Figura 2), que fue de 6.6 y 9.3 veces respectivamente, de la ingesta constante del grupo de ratas sanas (36 ± 8 ml/día/rata). STZ Figura 2. Consumo de líquido (agua o té de chaya) por día por rata. Los resultados muestran la media ± desviación estándar. P<.5 respectodel control de ratas sanas. Consumo de líquido (ml/día) Sanas Chaya Diabéticas Chaya Diabéticas Agua 5 45 4 35 3 25 2 15 1 5 1 2 3 4 5 6 Concentración de glucosa sanguínea. El té de chaya no disminuyó la hiperglicemia (Figura 3) en las ratas diabéticas, de manera similar se comportaron las controles diabéticas que solo recibieron agua. Por el contrario, en ambos grupos los niveles de glucosa se incrementaron 28% y 45% respectivamente de sus valores iniciales (235 ± 44 mg/dl). Sin embargo, en las ratas sanas que recibieron el té de chaya los niveles de glucosa (132 ± 21 mg/dl) se mantuvieron sin cambios significativos.
Glucosa (mg/dl) Sanas Chaya Diabéticas Chaya Diabéticas Agua 45 4 35 3 25 2 15 1 5 1 2 3 4 5 6 7 Figura 3. Concentración de glucosa sanguínea. Concentración de triglicéridos y colesterol. Los niveles de triglicéridos sanguíneos en las ratas diabéticas que recibieron el té de chaya disminuyeron 4% comparado con 28% de las diabéticas que solo recibieron agua. Sin embargo, el grupo de sanas normoglicémicas tratadas con chaya también mostraron una reducción del 3% (Figura 4). Por otro lado, los niveles de colesterol (datos no mostrados) no resultaron modificados en ninguno de los grupos estudiados. Triglicéridos Sanas con Chaya Diabéticas Chaya Diabéticas Agua 6 4 2-2 -4-6 1 2 3 4 5 6 Figura 4. Cambio en los niveles de triglicéridos sanguíneos. Funcionamiento renal. Se valoró por los niveles de microalbúmina en las ratas diabéticas que recibieron te de chaya o agua, estos fueron mayores a 3 mg/dl, lo que indicó un posible daño renal así como una respuesta vascular anormal. Sin embargo, al final del experimento, este efecto fue menor (5%) en el grupo de diabéticas con te con respecto a las diabéticas que solo recibieron agua. DISCUSIÓN En el presente estudio, se evaluó la administración subcróncia del té de chaya sobre el efecto diabetogénico de la estreptozotocina (STZ), en ratas. La severidad de la diabetes experimental depende de la dosis de STZ (Tancrede G., y col. 1983). Las
manifestaciones clínicas que caracterizan la existencia de la diabetes en humanos como hiperglicemia, pérdida de peso, polifagia, poliuria, polidipsia, se presentaron también en el modelo experimental con STZ en ratas, coincidiendo con Ravi y col., (24). En relación a la pérdida de peso, nuestros resultados mostraron una disminución del 15-25% similar a lo encontrado en otros reportes (Madar Z., 1983 y Ravi y col., 24). La polifagia evaluada por el consumo de alimento fue mayor en el grupo de las diabéticas que recibieron agua que té de chaya, el cual se incrementó el 9 y 53% con respecto al grupo de ratas sanas. Sin embargo, no se reflejó en el peso corporal de estos grupos. Con respecto a la polidipsia evaluada como el consumo de líquido, el grupo diabético con agua consumió 3 veces más líquido que el tratado con el té y 9 veces más que el grupo sano. El té de chaya no mostró actividad antihiperglicémica ni hipoglicémica en este estudio, lo cual confirma un estudio de Vergara y col., (23) realizado en ratas Wistar y en el de Alarcón-Aguilera, (1998) en conejos. Por el contrario, Kuti y Torres, 1996 observaron un efecto hipoglucemiante en conejos, mientras que Sandoval H., (24) observó en ratas Zucker disminución de la hiperglicémia solo al inicio del tratamiento. CONCLUSION. La administración del té de chaya atenuó los efectos severos de la diabetes en cuanto al consumo de líquido, alimento y disminución de peso. No presentó efecto antihiperglicémico, pero disminuyó los niveles de triglicéridos sanguíneos. BIBLIOGRAFÍA 1. Alarcón-Aguilera F.J., Roman-Ramos R., Pérez-Gutierrez S., Aguilar-Contreras A., y Flores-Saenz J.L. 1998. Study of anti-hyperglicemic effect of plants used as antidiabetics. J. Ethnopharmacol. 61: 11-11 2. Barquera, S., Tovar-Guzmán V., Campos-Nonato I., González-Villalpando C. y Rivera Dommarco J. 23. Geography of diabetes mellitus mortality in Mexico: An epidemiologic transition análisis. Arch Med Res. : Vol. 34(5): 47-414 3. Becker K.L., 21. Principles and practice of endocrinology and metabolism. 3a. edition. Lippincott Williams & Wilkins, Philadelphia. USA. 133-136 p 4. Hugués Hernandorena B., Rodríguez García J., Rodríguez González J., y Marrero Rodríguez M. 22. Animales de experimentación como modelos de la diabetes mellitus tipo 2. Rev. Cubana Endocrinol. 13(2): 16-8 5. Iwase M., Nunoi K., Wakisaka M., Kikuchi M., Maki Y., Sadoshima S., Fujishima M. 1991. Spontaneus recovery from non-insulin-dependent diabetes mellitus induced by neonatal streptozotocin treatment in spontaneously hypertensive rats. Metabolism 4. 1-14 6. Kuti, J.O. and E.S.Torres. 1996. Potential nutritional and health benefits of tree spinach. P. 516-52. In: J.Janick( ED.), progress in new crops. ASHS Press, Arlington, VA 7. Madar Zacharia. 1983. Effect of brown rice and soybean dietary fiber on the control of glucosa and lipid metabolism in diabetic rats. Am J Clin Nut 38:388-393 8. Ravi K., Ramachandran B., and Subramanian S. 24. Protective effect Eugenia jambolana seed kernel on tissue antioxidants in streptozotocin-induced diabetic rats. Biol. Pharm. Bull 27 (8): 1212-1217 9. Simon OR., and West ME. 1992. Unstable diabetic state produced by a small dose of streptozotocin in rats. West Indian Med J. 41: 146-149 1. Tancrede G., Rousseau-Migneron s., Nadeau A. 1983. Long- term changes in the diabetic state induced by different doses of streptozotocin in rats. Br J Exp Pathol 64: 117-123 11. Velásquez M. O., Rosas P. M., Hernández P. G., y Tapia R. 23. Prevalencia de enfermedades crónico no transmisibles y factores de riesgo cardiovascular en México: Resultados de la Encuesta Nacional de Salud 2. Arch. Card Mex.: V. 73 (1): 62-77 12. Sandoval Hernández M. 24. Potencial hipoglucémico de la chaya en un modelo de diabetes tipo II. Tesis. UAQ.