La paz es en concreto. Asdi. Número 56. Con el auspicio de:

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1 Una publicación de: Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, PNUD. Año 6 Octubre - Noviembre de 2010 ISSN Con el auspicio de: Asdi Número 56 La paz es en concreto

2 Asdi Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo - Pnud Año 6, N 56, Octubre - Noviembre de 2010 issn Bruno Moro Representante Residente, Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo Pnud Alessandro Preti Coordinador del Área de Paz, Desarrollo y Reconciliación - Pnud Dirección y edición Olga González Reyes Investigación y redacción Astrid Elena Villegas Fotografías especiales Convenio Taller 5 Centro de Diseño Alexis Forero Luis Sanmiguel Andrés Paredes Agradecimientos Mercedes Borrero María Teresa Muñoz Diana Urbano C. Centro regional del PNUD Octavio Aguirre Bibiana Mercado Víctor Manuel Mejìa Borja Paladini Adell Animarte Programa de Promoción de la Convivencia, PNUD Ruta Pacífica de las Mujeres Simone Bruno Ana Lucía Ducuara Piedad Martín página web Javier Augusto Núñez Reconocimiento especial Dirección de Prevención de Crisis y Recuperación del Pnud, Nueva York Diseño, impresión y acabados Impresol pbx: Revista Hechos del Callejón Avenida 82 N 10-62, Piso 3, Bogotá, Colombia Teléfono: (57-1) ext Comentarios: olga.gonzalez@pnud.org.co astrid.elena.villegas@pnud.org.co Las opiniones y planteamientos expresados no reflejan necesariamente las opiniones del Pnud, su junta directiva, ni los Estados miembros. editorial La paz en concreto La llave de la paz, que está en manos del Gobierno nacional, también se abre con las regiones de Colombia. En barrios, en los campos, colegios, resguardos, mesas y consejos comunitarios y en tantos otros espacios se ha venido gestando durante varios años, con entusiasmo y compromiso, una gran cantidad de iniciativas, experiencias y procesos locales que han transformado situaciones de conflicto y contribuido significativamente a construir la paz en sus entornos más cercanos y sus territorios. Sus protagonistas son actores activos de la sociedad civil, organizaciones de afrocolombianos, indígenas, campesinos, mujeres, jóvenes, sectores sociales populares y de base tradicionalmente excluidos y afectados directa o indirectamente por la violencia, pero también la academia, representantes de entidades privadas, los gobiernos locales y las instituciones del Estado. Todos ellos han desarrollado e impulsado propuestas de construcción de paz por medios no violentos, de manera participativa e incluyente y entendiendo la paz como el resultado de procesos de cambio labrados con, junto y desde los actores locales, con visiones y apuestas transformadoras en lo político, económico, cultural, social y ambiental. En la mayoría de los casos, esa construcción se ha dado en medio de situaciones adversas. Las iniciativas y experiencias territoriales de desarrollo y paz también son actores determinantes para lograr la aspiración del Gobierno de sembrar las bases de una verdadera reconciliación entre los colombianos, como lo dijo el Presidente en su discurso de posesión. La necesidad de fortalecer la construcción de paz desde las regiones es una de las apuestas del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo y por eso, con organizaciones y entidades nacionales e internacionales, realizaremos en este mes de octubre una gran feria de experiencias locales de construcción de paz que hemos denominado Expopaz, la paz en concreto. Buscamos unir en un mismo escenario a los protagonistas de una amplia y diversa muestra de experiencias que han logrado transformaciones significativas en busca de la paz. Pretendemos que este sea un espacio de reflexión y diálogo entre la sociedad civil, las regiones y las entidades públicas y privadas locales y nacionales sobre los aprendizajes y experiencias de los territorios en sus procesos de construcción local de paz. Esperamos que este sea un escenario para la creación y fortalecimiento de alianzas y redes institucionales y sociales, así como para nutrir el debate sobre la construcción de paz con enfoque territorial. Sabemos que la alianza entre actores locales, nacionales e internacionales será la clave para el éxito de Expopaz. Y buscamos que a través de esta feria las regiones de Colombia impacten la política pública sobre los temas de paz y desarrollo para sentar las bases que lleven a superar las décadas de violencia que ha sufrido el país. Ya que Expopaz se realiza en un momento clave para Colombia se pueden tomar en cuenta las propuestas de las regiones para construir una política pública de paz. La feria tiene una vocación regional y nacional, pero también quiere visibilizar y fortalecer experiencias internacionales de construcción de paz con enfoque regional, con el objetivo de incidir en la política colombiana y en estrategias internacionales sobre el tema. Por eso hay personalidades internacionales que ya han sido invitadas a Expopaz. A este empeño se han unido entidades regionales y nacionales y organizaciones de la cooperación internacional, sin las cuales este esfuerzo no sería posible, como la Agencia Sueca de Cooperación Internacional para el Desarrollo (asdi), la Unión Europea, la Agencia de Cooperación Alemana (gtz), la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Aecid) y la Alcaldía Mayor de Bogotá. El Departamento Nacional de Planeación y diferentes organizaciones de la sociedad civil también comparten este importante trabajo. A todos ellos un especial reconocimiento y agradecimiento. Estamos trabajando unidos para apoyar esas voces regionales que siguen insistiendo en afirmar que la paz es en concreto y que, para mostrarlo, tienen experiencias, iniciativas y procesos. Bruno Moro Representante Residente del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (Pnud) 2 hechos del callejón

3 Redoblemos nuestros esfuerzos por incluir a los jóvenes en las políticas, programas y procesos decisorios que benefician su futuro y el nuestro, Ban Ki Moon, Secretario General de las Naciones Unidas, , Año Internacional de la Juventud agenda de paz Expopaz, la paz en concreto Entre el 27 y 29 de octubre se realizará en el Centro de Convenciones de Compensar en Bogotá la feria nacional e internacional de construcción de paz, Expopaz, la paz en concreto, que unirá en un mismo escenario alrededor de 80 iniciativas regionales que construyen paz en su territorio. Este evento será un espacio para intercambiar experiencias y expresiones, fortalecer alianzas, compartir herramientas de trabajo en la construcción de paz, y para contribuir a la generación de insumos para las políticas públicas de paz y desarrollo con base en las experiencias de los territorios. Expopaz es un proyecto del PNUD con el apoyo de Unión Europea, ASDI, AECID, GTZ y la Alcaldía Mayor de Bogotá Ampliada la convocatoria al Premio Nacional de Paz Hasta el 20 de octubre está abierta la convocatoria para presentar postulaciones al Premio Nacional de Paz que cada año se otorga a quienes han contribuido de manera destacada a la superación del conflicto, con procesos de reconciliación, recuperación de la memoria histórica, el respeto por las diferencias, el apoyo a víctimas y la reconstrucción del tejido social. El premio, convocado por Caracol Televisión, El Tiempo, Semana, Fescol, Caracol radio y el PNUD, será entregado en el mes de noviembre. Mayores informes pnp@fescol.org.co El país contado desde las regiones El premio de periodismo regional El país contado desde las regiones, que cada año otorgan Semana y Petrobras, será entregado el 9 de noviembre a aquellos periodistas que hayan realizado el mejor reportaje en prensa escrita o internet, la mejor crónica o reportaje en televisión, la mejor fotografía publicada en prensa escrita o Internet, el mejor aporte original a la radio, la mejor columna de opinión y el mejor cubrimiento de los derechos de las víctimas. Se entregará el Premio Orlando Sierra como Homenaje a una vida. Mayores informes: premioregional@semana.com Construir la paz desde las regiones 4 Lo que encontrará en Expopaz 6 La voz de las regiones 8 Cultura de paz Construir la paz comienza por transformar los conflictos 11 Mampuján: la memoria en tapices 13 Arte y deporte para la vida 15 Gobernabilidad y participación ciudadana Democracia para la paz es dialogar en y con las regiones 16 Respetar los derechos sindicales: un reto para la paz 18 Justicia, derechos humanos y derechos de las víctimas La justicia y los derechos humanos en la construcción de paz 19 Las viudas y víctimas de Huila 21 Desarrollo socioeconómico para la paz La paz se logra según el desarrollo que se tenga 23 ANUC y su experiencia de paz por la tierra 25 En Las Varas sí se puede 27 cartas de los lectores Los jóvenes piden la palabra Los saludo cordialmente desde un pequeño municipio del Valle. En nuestro grupo juvenil leímos el artículo titulado Por la inclusión de los indígenas, los afros y los jóvenes y nos pareció muy importante, precisamente porque éste es el Año Internacional de la Juventud. Nosotros como jóvenes nos hemos propuesto que este año logremos que los adultos nos tengan en cuenta, pero no sólo en la familia y en el estudio, sino también que escuchen lo que tenemos que decir frente a la pobreza y la violencia. Ojalá así sea. Christian Mojica - Valle La mano en el corazón En su revista pasada ustedes escribieron sobre las mujeres, la paz y el desarrollo y decían que, aunque las mujeres estamos tan preparadas como los hombres, sufrimos más el desempleo. Eso nos afecta muchísimo porque nosotras tenemos que sacar los niños adelante. Hoy en día muchas mujeres somos cabeza de hogar y si no nos dan empleo no podemos responder por la educación y la salud de nuestros niños. El país debe ponerse la mano en el corazóny dar más empleo a las mujeres, que hemos demostrado ser más responsables. Gracias. María del Carmen Zuleta - Ataco, Tolima Foto JUAN MOLINA hechos del callejón 3

4 Construir la paz desde las regiones La paz es y se construye en concreto. Así lo definen líderes de Chocó, Meta, Huila, Nariño, Cesar, Antioquia, Caquetá y regiones como Montes de María, en Colombia, cuando se les pregunta qué es para ellos construir la paz: Es trabajar por la comunidad. Es una apuesta por una paz sostenible en armonía con la naturaleza y con las prácticas tradicionales. Es la construcción y promoción de maneras nuevas-renovadas de vivir, pensar, hablar, sentir y actuar que transforman realidades y generan esperanza. Es mantener la justicia social alrededor de la cultura, las creencias y la idiosincrasia de cada región. Es ayudar a construir el desarrollo de la región. Se construye mediante la autodeterminación de los pueblos y su posibilidad de contar con un proyecto de vida integral. Una manera de construir la paz es trabajar en red. Es construir una cultura de paz en donde se escuchen las víctimas y se reivindique la voz de los ciudadanos. Esta forma de construir la paz desde las regiones, que en muchas ocasiones se ha complementado con otros esfuerzos de diálogos de paz formales, ha sido impulsada por diferentes actores sociales e institucionales y en diferentes escenarios: el hogar, un colegio, una asamblea constituyente, un resguardo, un consejo comunitario afrocolombiano o una audiencia nacional. Ellos han liderado iniciativas y procesos regionales que demuestran, como lo dice la experiencia local, nacional e internacional, que la paz se construye por vías no violentas, de manera participativa e incluyente, aun en medio de la violencia, y que sus protagonistas son los diversos actores sociales e institucionales representados en el territorio, en especial aquellos sectores tradicionalmente excluidos y afectados directa o indirectamente por la violencia. Muchas de estas iniciativas trabajan con enfoques centrados en cinco dimensiones clave para construir la paz: mar la violencia y los conflictos y que encuentre en el diálogo la ruta para enfrentar un conflicto escolar o familiar o comunitario. 2. La justicia, los derechos humanos y los derechos de las víctimas Uno descansa y siente alivio, dice una víctima de Huila cuando habla del proyecto en el que participa para que se reconozca públicamente que su esposo no era un guerrillero sino un líder campesino acusado injustamente y asesinado. En Buenaventura, una experiencia de los afros busca una atención integral a las víctimas ante la violencia consecuencia del conflicto armado. Y en Cali, una iniciativa pretende transformar el modelo de ejercer la autoridad en el hogar rompiendo los paradigmas de letra con sangre entra. Estos son otros ejemplos de cómo en las regiones están buscando la justicia, no solo la que implica castigar a los culpables, sino tener acceso a ella; la justicia que conlleva promover, defender y proteger los derechos humanos, especialmente los de quienes están en un mayor estado de vulnerabilidad; la justicia que es sinónimo de garantía de los derechos a la verdad, la reparación y la no repetición; y la justicia que equivale a respetar la diferencia y la cosmovisión indígena. 1. Una cultura para la paz Los telares de las mujeres de Mampuján, Montes de María, han sido el mecanismo que ellas han usado para exorcizar sus temores y para reconstruir la memoria de lo que sufrieron y de cómo lo han ido superando. En el Oriente antioqueño, unos jóvenes están usando el teatro, la música y el deporte para educar en valores y prevenir el reclutamiento forzado. Estos son algunos ejemplos de iniciativas sociales que buscan promover una cultura para la paz; es decir, una cultura que afiance los valores de la democracia, la tolerancia, el respeto de los derechos humanos, la educación para la paz, la comunicación y la participación cualificada de la mujer y de los demás actores sociales. Una cultura que impulse la convivencia, que sea una vía para prevenir y transfor- Las manifestaciones y acciones de la sociedad colombiana por hacerse oír. Cortesía Ruta Pacífica de las Mujeres 4 hechos del callejón

5 Foto Astrid Elena Villegas Cuando todas las poblaciones acceden al desarrollo, entonces se abre el camino a la paz. 3. La gobernabilidad y la participación ciudadana para la paz El proyecto que hay en Cartagena para estimular el ejercicio firme y serio del periodismo y para que haya ciudadanos y ciudadanas con una conciencia crítica o las iniciativas de Manizales y Villavicencio para que los jóvenes participen e incidan en las políticas públicas son una muestra de las apuestas regionales por una gobernabilidad orientada a construir la paz. Para estas y otras iniciativas, el objetivo es fortalecer la democracia local, las redes sociales y los espacios y escenarios de participación y toma de decisiones; empoderar a poblaciones excluidas e impulsar la incidencia en política pública. Todas estas son vías para prevenir y transformar los conflictos. 4. El desarrollo socioeconómico para la paz La paz también se construye con desarrollo y por eso mujeres desplazadas del Chocó, que han sufrido un fuerte trauma, como lo dicen, impulsan un proyecto para superar la dependencia, la caridad y fortalecer nuestras capacidades, nuestra creatividad, nuestro emprendimiento y nuestros negocios. Ellas y otros sectores del país impulsan espacios de concertación entre actores económicos para definir modelos de desarrollo incluyente y alternativo. Están liderando iniciativas para crear estrategias de desarrollo regionales, empoderar y mejorar los niveles de vida de las poblaciones excluidas del desarrollo y garantizar medios de vida sostenibles para poblaciones afectadas por la violencia, con el fin de estimular procesos colectivos y alianzas empresariales en torno a las iniciativas de paz desde lo local. 5. Las mujeres constructoras de paz Las desplazadas de Chocó que promueven proyectos productivos o las de Nariño que han incidido en las políticas públicas del departamento mediante un trabajo concertado o quienes están luchando para que se repare también a las víctimas de violencia sexual en medio del conflicto son expresiones de las apuestas de las mujeres por la paz. Las mujeres se han organizado o integrado en redes o mesas de trabajo para contribuir en la construcción de paz de diferentes maneras: visibilizando el impacto diferenciado de los conflictos en ellas y su labor contra la violencia de género en contextos de crisis; luchando para que se incluya el enfoque de género en las políticas públicas de paz y desarrollo; promoviendo la protección de sus derechos; fomentando la participación activa de la mujer en la toma de decisiones y los lineamientos de políticas públicas y apuntando a que cada vez sean más y más fuertes sus organizaciones. Un intercambio de experiencias Iniciativas como estas que se desarrollan en diferentes regiones de Colombia se conocerán en Expopaz, la paz en concreto, una feria que se realizará en Bogotá del 27 al 29 de octubre. Allí se concentrarán algunos de los principales aprendizajes obtenidos por organizaciones y redes de mujeres, jóvenes, poblaciones campesinas, afrocolombianas e indígenas y otros sectores sociales, así como por instituciones públicas, privadas y de la cooperación internacional. Más que una muestra de las iniciativas territoriales, lo que se busca es que este sea un punto de encuentro y de intercambio de la sociedad civil, las instituciones estatales y la cooperación internacional. Porque en Expopaz intervendrán personalidades internacionales, universidades, centros de investigación, empresas privadas, ONG, instituciones del Estado, del Gobierno nacional y de los gobiernos locales, además de Naciones Unidas y las agencias de cooperación que han acompañado diversas experiencias. Este escenario nacional e internacional busca: Contribuir a producir insumos de política pública de paz y desarrollo. Visibilizar aprendizajes, compartir logros y experiencias significativas y evidenciar buenas prácticas de construcción de paz desde los territorios. Crear o fortalecer alianzas y redes institucionales y sociales en los ámbitos nacional e internacional. Contribuir al debate internacional sobre el modelo de construcción de paz con enfoque territorial. Esta feria tendrá varios escenarios de participación e interacción, como los espacios para exhibir las experiencias, los de reflexión, discusión y diálogo y los laboratorios de conocimiento, entre otros (ver Lo que encontrará en Expopaz). Este especial de la revista Hechos del Callejón busca visibilizar los esfuerzos de construcción de paz locales y regionales y mostrar algunas experiencias que como las que se presentarán en Expopaz son una demostración de la paz en concreto. hechos del callejón 5

6 Lo que encontrará en Expopaz Exposiciones, intercambios de saberes y experiencias, laboratorios de conocimiento, encuentros con los protagonistas de las regiones que están impulsando la paz, diálogos públicos y actos simbólicos serán las principales características de Expopaz, la paz en concreto, la feria nacional e internacional que se cumplirá en Bogotá entre el 27 y el 29 de octubre. Los líderes de las experiencias e iniciativas de construcción de paz que participarán en esta feria que se efectuará en el centro de convenciones de Compensar compartirán sus aprendizajes y, además, tendrán la oportunidad de hacer parte de diálogos, debates y propuestas sobre cómo seguir construyendo la paz desde y con las regiones. Exhibiciones Los protagonistas de la construcción de paz Entre las exhibiciones de Expopaz, que incluyen experiencias internacionales y de programas de acompañamiento, la Muestra de Experiencias Locales de Paz será el principal escenario. Acá se apreciará una variedad de iniciativas y experiencias que han hecho aportes concretos para construir la paz en las regiones en cinco ejes: Cultura de paz En este escenario estarán iniciativas de educación, comunicación, arte y cultura para la paz; experiencias que promocionan los valores de la democracia y la tolerancia; las que buscan la inclusión social de poblaciones marginadas y la que se han caracterizado por la resolución pacífica de conflictos, el respeto a los derechos fundamentales y la no-violencia. Gobernabilidad para la paz Justicia, derechos humanos y derechos de las víctimas Acá se exhibirán las experiencias que promueven el acceso de poblaciones vulnerables a la justicia y la protección de los derechos humanos y las que luchan por garantizar la verdad, la justicia y la reparación a las víctimas y la no repetición de la violencia. Mujeres constructoras de paz Intercambios de expresiones, saberes y experiencias Maloka El lugar de encuentro Como en las culturas indígenas, la Maloka será el centro de encuentro de las experiencias e iniciativas regionales y nacionales, el espacio para compartir, intercambiar lecciones aprendidas y crear nuevos lazos. Historias de vida, relatos y testimonios La Maloka será el escenario para escuchar historias de vida y relatos sobre cómo los actores sociales e institucionales han logrado impulsar sus procesos de construcción de paz. Laboratorios de conocimiento Diálogos de saberes En esta sala se conocerán algunos de los procesos que en el país contribuyen a la democracia local, a la participación ciudadana, Acá se presentará una muestra de las iniciativas de organizaciones de mujeres o de la institucionalidad que trabajan a la organización de la ciudada- por la equidad de género, por incluir a Este será el espacio para que las iniciativas locales compartan entre ellas y con nía y a consolidar una institucionalidad las mujeres en los espacios de poder, por pública transparente y democrática. visibilizar el impacto del conflicto sobre académicos y expertos sus lecciones ellas y lo que están haciendo para construir la paz con enfoque de género. aprendidas y los modelos y estrategias Desarrollo para la paz que han utilizado en sus procesos. En este espacio se mostrarán algunas iniciativas que impulsan empoderar a Experiencias internacionales Los modelos poblaciones excluidas del desarrollo Esta será una muestra de algunas iniciativas que en diferentes partes del mundo Cómo lo han hecho? Qué metodologías y las herramientas de trabajo para que mejoren sus niveles de vida, su acceso a la tierra y la concertación de han logrado la transformación pacífica han utilizado? Cuáles son esas herramientas que han empleado en sus procesos estrategias de desarrollo regional, entre de los conflictos. otros aspectos. de construcción de paz? Las respuestas a estas preguntas se encontrarán en este Exposición de programas de acompañamiento espacio en el que las organizaciones y Acá se exhibirán las estrategias y las metodologías que han utilizado entidades y organizaciones entidades comparten aprendizajes útiles en su acompañamiento a los procesos locales de construcción de paz. en este campo. 6 hechos del callejón

7 Debates y propuestas para el país Lúdica, arte y expresión Esta será la sala para mostrar que el arte y las diversas expresiones artísticas también se han comprometido con la prevención de los conflictos, su solución y la paz. Varios serán los espacios lúdicos de la feria: Espacios para la creatividad En los diferentes espacios de la feria habrá espacios para que los participantes se expresen usando diferentes caminos artísticos. La paz, la cultura y los símbolos Los actos simbólicos que las víctimas y organizaciones sociales han promovido en sus regiones se traerán a la feria para compartirlas con los demás participantes de Expopaz. Ágora Este será el espacio para las reflexiones, los debates y las propuestas sobre los desafíos actuales del país en la construcción de la paz y, por lo tanto, los caminos trazados por las iniciativas locales y las instituciones y las recomendaciones internacionales al respecto. El ágora, que evoca el espacio de deliberación ciudadana en la antigua Grecia, pretende ser el escenario para incidir en políticas públicas relacionadas con la construcción de paz, mediante diferentes herramientas. Encuentros con las experiencias de paz para la incidencia en políticas públicas Acá estarán expertos nacionales e internacionales, representantes de la empresa privada y la comunidad internacional dialogando sobre los retos para lograr la paz. Ventana al mundo Comunicación para construir paz Acá se presentarán los trabajos periodísticos con enfoque de construcción de paz que se han promovido en las regiones y el ámbito nacional. Cine y video sobre la paz Esta será una sala en la que proyectarán trabajos audiovisuales sobre la construcción de paz en las regiones del país y el mundo. Expopaz comunica Esta será la sala de comunicaciones que ayudará a que las regiones puedan seguir paso a paso los acontecimientos de la feria y los participantes tengan conexión con sus territorios. Artistas por la paz En los tres días de la feria, artistas locales y nacionales presentarán sus obras de danza, canto y otras expresiones artísticas, que han sido la ma- Diálogos con instituciones públicas Será el encuentro de las iniciativas con los diferentes representantes de las entidades públicas que trabajan por la paz. nera de expresar su compromiso con la paz. Pactos y compromisos En este espacio se busca que se celebren y se sellen acuerdos y consensos como resultado de la feria Expopaz. cortesía CARLES HERNÁNDEZ hechos del callejón 7

8 r la capacidad de conversar que tiene un territorio y sus comunidades, porque unas comunidades no se hacen daño. Padre Rafael Castillo,director de la Fundación Red Desarrollo y Paz de de La María. Cuando voz uno de trabaja por la comunidad está construyendo paz. Y también cuando p rtante que a toda la gente se le respeten sus derechos y hace algo para que todo ser humano se las regiones respetado en lo que hace y las comunidades puedan resistirse a la violencia. No se construye pa a uno que olvide. Gloria Ramírez Organización de víctimas Asovida Granada, Antioquia.Son lo ecanismos encaminados a solucionar los conflictos violentos y trasformarlos en relaciones de resp iento para alcanzar unos niveles sostenibles de desarrollo y garantizar el respecto de los derech Es activar en los ciudadanos, mediante estos mecanismos, procesos de reflexión profunda sobre s en la solución de un conflicto social. Rosa Liliana Ortiz Perdomo, directora ejecutiva torio Surcolombiano de Derechos Humanos y Violencia.Las comunidades y organizaciones de C Construir la paz desde las regiones significa construir la paz desde abajo, desde adentro y con la gente; evidenciar la capacidad de conversar que tiene un territorio y sus comunidades, porque unas comunidades que dialogan no se hacen daño. Padre Rafael Castillo Director de la Fundación Red Desarrollo y Paz de los Montes de María. stado a una paz sostenible, en armonía con la naturaleza y las prácticas tradicionales de produc gral no solamente es la ausencia de los actores armados sino un proceso de paz desde las comu e esto se refleja en la Ley 70 de 1993 sobre comunidades afrocolombianas y en el trabajo que s o en busca de su autonomía, una autonomía vista desde el fortalecimiento de su autoridad tradici ión de sus planes de vida y su organización en sus consejos comunitarios. Padre Sterlin Londo ario de la pastoral afro de la Diócesis de Quibdó en Chocó. Construir paz es el ejercicio huma o de convertir en obra el deseo de bien que hay en los corazones, cuando tenemos la esperanza que es posible aportar, poner en juego nuestra opción por una sociedad en la que la convivencia sa se convierta en una realidad. También, cuando realizamos un trabajo festivo y alegre con y p cuando las organizaciones suman las máximas voluntades de construcción de escenarios de inclusi humanos, desarrollo humano y democracia. John Jairo Serna SánchezUniversidad Católica de La paz se construye mediante la autodeterminación de los pueblos y su posibilidad de contar con un proyecto de vida integral. No es posible la paz cuando un pueblo no tiene salud, educación, alimentación y su pensamiento ha sido invisibilizado o tomado por los efectos del conflicto. Para construir la paz primero es necesario que tengamos libertad, que el miedo no nos impida practicar nuestras costumbres. Que la gente pueda volver a manifestarse desde su propia identidad y reflejar las tradiciones culturales de su pueblo. Daira Elsa Quiñones Asociación Mutual de Desarrollo Integral de la Afrocolombianidad y el Empresarismo ( AMDAE) Tumaco, Nariño. Cuando uno trabaja por la comunidad está construyendo paz. Y también cuando para uno es importante que a toda la gente se le respeten sus derechos y hace algo para que todo ser humano sea dignificado y respetado en lo que hace y las comunidades puedan resistirse a la violencia. No se construye paz cuando le piden a uno que olvide. Gloria Ramírez Organización de víctimas Asovida. Granada, Antioquia onstrucción y promoción de maneras nuevas-renovadas de vivir, pensar, hablar, sentir y actuar a Las comunidades y organizaciones de Chocó le han apostado a una signos, valores, ideales, creencias, ritos y expresiones paz sostenible, artísticas, en armonía transmitidos con la naturaleza y las de prácticas generación tradicionales en g sforman realidades y generan esperanza desde la de perspectiva producción. Esa paz de integral la no solamente violencia. es la ausencia Esto de los procura actores ho armados sino un proceso de paz desde las comunidades. Esto se refleja con actos humanizantes que promuevan relaciones en el de trabajo equidad, que se ha realizado justicia, en busca amor, de su autonomía, inclusión, vista desde solidarida el de los conflictos, reconociendo derechos y exigiendo fortalecimiento el cumplimiento de su autoridad tradicional, de los la deberes. elaboración de Pastoral sus planes Soc de vida y su organización en sus consejos comunitarios. uroriente Colombiano Una manera de construir la paz es trabajar en red, como lo hacemos co asociaciones municipales de víctimas del Oriente antioqueño, Padre Sterlin Londoño en la que Palacios nos une la necesidad de tr Vicario de la pastoral afro de la Diócesis de Quibdó en Chocó derechos de las víctimas. Por ejemplo, aportamos a la verdad a través de los proyectos de mem os a una cultura de no violencia cuando ofrecemos atención psicosocial a las víctimas y contribu a elaboración del duelo sino también a cerrar los ciclos de violencia y transformar el impulso d uz Dary Valencia Asociación Provincial De Víctimas a Ciudadanos (Aproviaci)Oriente antioq strucción de paz se inicia al valorar y respetar, en su justo sentido y dimensión, los derechos n s fundamentales de los habitantes del territorio a través del cumplimiento de las obligaciones del bierno. Construir paz es formar, organizar y articular a la ciudadanía para que asuma el rol de intereses socioculturales, socioambientales, políticos y económicos comunes, sobre la base de un nu, más responsable, solidario, equitativo y respetuoso para consigo misma y con los demás.josé eno AcostaAsociación Nacional de Usuarios Campesinos Sincelejo Construcción de paz es ma social alrededor de la cultura, las creencias y la idiosincrasia de cada región, con políticas inclu a consolidar una paz duradera. En el caso montemariano, esa construcción es a través de un pr Son los mecanismos encaminados a solucionar los conflictos violentos y trasformarlos en relaciones de respeto y entendimiento para alcanzar unos niveles sostenibles de desarrollo y garantizar el respeto de los derechos humanos. Es activar en los ciudadanos, mediante estos mecanismos, procesos de reflexión profunda sobre su responsabilidad en la solución de un conflicto social. Rosa Liliana Ortiz Perdomo Observatorio Surcolombiano de Derechos Humanos y Violencia Construir paz es el ejercicio humano y ciudadano de convertir en obra el deseo de bien que hay en los corazones, cuando tenemos la esperanza activa y creemos que es posible aportar, poner en juego nuestra opción por una sociedad en la que la convivencia social respetuosa se convierta en una realidad. También, cuando realizamos un trabajo festivo y alegre con y por el otro y cuando las organizaciones suman las máximas voluntades de construcción de escenarios de inclusión en derechos humanos, desarrollo humano y democracia. John Jairo Serna Sánchez Universidad Católica de Oriente ón en 8 derechos hechos del callejón humanos, sin desconocer su idiosincrasia. Lisardo Torres Henríquez, Personero

9 evidenciar la capacidad de conversar que tiene un territorio y sus comunidades, porque unas comu dialogan no se hacen daño. Padre Rafael Castillo,director de la Fundación Red Desarrollo y P Montes de María. Cuando uno trabaja por la comunidad está construyendo paz. Y también cu es importante que a toda la gente se le respeten sus derechos y hace algo para que todo ser hu cado y respetado en lo que hace y las comunidades puedan resistirse a la violencia. No se cons le piden a uno que olvide. Gloria Ramírez Organización de víctimas Asovida Granada, Antioquia entes mecanismos encaminados a solucionar los conflictos violentos y trasformarlos en relaciones entendimiento para alcanzar unos niveles sostenibles de desarrollo y garantizar el respecto de los manos. Es activar en los ciudadanos, mediante estos mecanismos, procesos de reflexión profunda sabilidad en la solución de un conflicto social. Rosa Liliana Ortiz Perdomo, directora ejecutiva Observatorio Surcolombiano de Derechos Humanos y Violencia.Las comunidades y organizacion han apostado a una paz sostenible, en armonía con la naturaleza y las prácticas tradicionales de paz integral no solamente es la ausencia de los actores armados sino un proceso de paz desde la Parte de esto se refleja en la Ley 70 de 1993 sobre comunidades afrocolombianas y en el trabaj realizado en busca de su autonomía, una autonomía vista desde el fortalecimiento de su autoridad elaboración de sus planes de vida y su organización en sus consejos comunitarios. Padre Sterlin ciosvicario de la pastoral afro de la Diócesis de Quibdó en Chocó. Construir paz es el ejercic ciudadano de convertir en obra el deseo de bien que hay en los corazones, cuando tenemos la esp creemos que es posible aportar, poner en juego nuestra opción por una sociedad en la que la con respetuosa se convierta en una realidad. También, cuando realizamos un trabajo festivo y alegre otro y cuando las organizaciones suman las máximas voluntades de construcción de escenarios de derechos humanos, desarrollo humano y democracia. Es John la determinación Jairo de Serna un gobierno SánchezUniversidad de convertir lo que fue Cat Es la construcción y promoción de maneras nuevas-renovadas una promesa electoral de en un vivir, Plan de pensar, Desarrollo hablar, con enfoque sentir y a de derechos y que ayude a la reconstrucción del tejido social y códigos, signos, valores, ideales, creencias, ritos y expresiones económico de una región. artísticas, La paz se transmitidos construye con los aportes de y generació que transforman realidades y generan esperanza desde conciencia la de perspectiva la ciudadanía y con de la voluntad la no de violencia. hacer que las Esto pro cosas sucedan, particularmente en el Cesar, que le está apostando a temas nunca mujeres con actos humanizantes que promuevan relaciones de antes equidad, explorados: justicia, la reinstitucionalización, amor, inclusión, la so manejo de los conflictos, reconociendo derechos y restitución exigiendo de derechos, el cumplimiento el emprendimiento, de la participación los deberes. con Pasto decisión, la inclusión política territorial y cultural y la aseguranza gional Suroriente Colombiano Una manera de construir democrática, la que paz es asegurar es trabajar los avances del en departamento red, como y la lo hac red de asociaciones municipales de víctimas del Oriente transformación antioqueño, social y la conducta en la política que de nos una región une que la ha necesida aprendido a espantar los miedos y a rescatar su institucionalidad. por los derechos de las víctimas. Por ejemplo, aportamos a la verdad través de los proyectos aportamos a una cultura de no violencia cuando ofrecemos Cristian Moreno, atención Gobernador psicosocial del Cesara las víctimas y solo a la elaboración del duelo sino también a cerrar los ciclos de violencia y transformar el im ganza. Luz Dary Valencia Asociación Provincial De Víctimas a Ciudadanos (Aproviaci)Orient La construcción de paz se inicia al valorar y respetar, en su justo sentido y dimensión, los der jurídicos fundamentales de los habitantes del territorio a través del cumplimiento de las obligacio y el Gobierno. Construir paz es formar, organizar y articular a la ciudadanía para que asuma e de sus intereses socioculturales, socioambientales, políticos y económicos comunes, sobre la base d samiento, más responsable, solidario, equitativo y respetuoso para consigo misma y con los demá Es la construcción y promoción de maneras renovadas de vivir, pensar, hablar, sentir y actuar a través de códigos, signos, valores, ideales, creencias, ritos y expresiones artísticas, transmitidos de generación en generación, que transforman realidades y generan esperanza desde la perspectiva de la no violencia. Esto procura hombres y mujeres con actos humanizantes que promuevan relaciones de equidad, justicia, amor, inclusión, solidaridad y manejo de los conflictos, reconociendo derechos y exigiendo el cumplimiento de los deberes. Pastoral Social Regional Suroriente Colombiano La construcción de paz se inicia al valorar y respetar, en su justo sentido y dimensión, los derechos naturales y jurídicos fundamentales de los habitantes del territorio a través del cumplimiento de las obligaciones del Estado y el Gobierno. Construir paz es formar, organizar y articular a la ciudadanía para que asuma el rol de defensa de sus intereses socioculturales, socioambientales, políticos y económicos comunes, sobre la base de un nuevo pensamiento, más responsable, solidario, equitativo y respetuoso para consigo misma y con los demás. José Macareno Acosta Asociación Nacional de Usuarios Campesinos (ANUC) Sincelejo La paz no se debe construir únicamente mediante una confrontación armada en la que se debilita al enemigo del Estado. Su construcción es un proceso social complejo en el que se deben generar dinámicas educativas y culturales que, partiendo de nuestra memoria histórica, faciliten la construcción de una identidad nacional y un destino común, justo e igualitario para todos. Escuchar a las víctimas para comenzar a construir un mejor país será un claro indicador del desarrollo de nuestras comunidades hacia una cultura de paz. Defensoría del Pueblo Regional Meta Es el proceso mediante el cual el Estado, organizaciones de la sociedad, movimientos sociales y grupos insurgentes reconocen la existencia de un conflicto social armado interno-internacional, histórico y complejo, en el que convergen factores económicos, sociales, políticos, ideológicos y culturales que demandan buscar consensos en torno a una alternativa de desarrollo equitativo, ecosocial y de poder autogestionario de los ciudadanos y de las comunidades excluidas y marginadas. Miller Dussán Macareno AcostaAsociación Nacional de Usuarios Campesinos Sincelejo Construcción de pa justicia social alrededor de la cultura, las creencias y la idiosincrasia de cada región, con polític ayuden a consolidar una paz duradera. En el caso montemariano, esa construcción es a través de Plataforma Sur de Organizaciones Sociales, Huila formación en derechos humanos, sin desconocer su idiosincrasia. Lisardo Torres hechos del Henríquez, callejón 9 Per CORTESÍA BORJA PALADINI ADELL

10 La construcción de paz debe ser política de Estado. La edificación de la paz es educación, salud, trabajo, recreación, descanso, prosperidad y respeto por los derechos humanos. Es justicia garante Para hablar de construcción de paz hay que definir qué es el conflicto social, entendido como una situación en la que grupos con intereses comunes se contraponen y entran en confrontación aprovechando la ausencia o vacíos en la regulación del Estado. Construir paz es identificar esos intereses y vacíos para elaborar las regulaciones que impidan la confrontación que genera violencia y guerra. Cristóbal Lugo López Coordinador del Observatorio del Territorio Universidad de los Llanos Una manera de construir la paz es trabajar en red, como lo hacemos con nuestra red de asociaciones municipales de víctimas del Oriente antioqueño, en la que nos une la necesidad de trabajar por los derechos de las víctimas. Por ejemplo, aportamos a la verdad a través de los proyectos de memoria; aportamos a una cultura de no violencia cuando ofrecemos atención psicosocial a las víctimas y contribuimos no solo a la elaboración del duelo sino también a cerrar los ciclos de violencia y transformar el impulso de venganza. Luz Dary Valencia Asociación Provincial De Víctimas a Ciudadanos (Aproviaci) Oriente antioqueño La paz es una forma de vida marcada por las relaciones sociales en condiciones de justicia, equidad y de armonía con el desarrollo sostenible y el medio ambiente y que parte del respeto a los derechos humanos y a la vida digna. Su construcción es un proceso participativo e incluyente de cambio social para transformar el sistema y la estructura social. Propende por formar una nueva ciudadanía empoderada, capaz de generar espacios de reconciliación y acciones que amplíen la gobernabilidad y la democracia local y condiciones para el desarrollo humano y socio-económico, prioritariamente de poblaciones urbanas y rurales en condición de vulnerabilidad y exclusión. Cortesía ANIMARTE La construcción de la paz exige cambios estructurales que permitan superar un modelo político, económico y social que ha sido el principal generador de pobreza y de miseria, de exclusión social y de inequidad, lo que es un caldo de cultivo para el surgimiento y prolongación del conflicto político, social y armado. La acción constante enfocada en desvertebrar esta dinámica es lo que llamamos construcción de paz con justicia social, que debe involucrar la acción política para consolidar escenarios de justicia social; debe tener como punto de partida la sociedad de base y su construcción requiere que sea colectiva y desde la sociedad civil. Corporación Caguán Vive Caquetá Corporación Casa De La Memoria Quipu Huasi del respeto de los hombres y de las normas de la comunidad para obtener una sociedad más justa y equitativa y donde prevalezca el goce efectivo de los derechos. El diálogo como herramienta fundamental conduce hacia iniciativas de paz. Es lograr una cultura que transforme al individuo violento y lo haga elemento esencial para resolver el conflicto. Es el espacio donde converge la sociedad en un solo propósito: la reconciliación entre los colombianos. Carlos Arturo Pardo Alezones, Jefe Oficina Promotora de Paz del Departamento. Construcción de paz es mantener la justicia social alrededor de la cultura, las creencias y la idiosincrasia de cada región, con políticas incluyentes que ayuden a consolidar una paz duradera. En el caso montemariano, esa construcción es a través de un proceso de formación en derechos humanos. Lisardo Torres Henríquez, Personero de Zambrano, Bolívar Presidente de la Red de Personerías de los Montes de María 10 hechos del callejón

11 cultura de paz Construir la paz comienza por transformar los conflictos Por Ricardo Esquivia Ballestas Comisión Ciudadana de Reconcilicación del Caribe y Sembrandopaz 17 de enero de 2001, 80 paramilitares utilizaron piedras y palos para masacrar a 27 campesinos El en Chengue, corregimiento de Ovejas, Sucre. Ganaderos, hacendados, campesinos y empresarios de la región noreste del país, Bajo Cauca y Bajo San Jorge manifestaron su apoyo a los paramilitares y lo expresaron públicamente en una carta con firmas. Noticias como estas, aparecidas en medios de comunicación, muestran historias y una verdad dolorosa: la recurrencia a la violencia. Cómo es posible que esto suceda, que comunidades enteras lo hayan sabido previamente, lo hayan callado y, en ocasiones, hayan apoyado abiertamente a sus perpetradores? Y más grave todavía, cómo es posible que las autoridades estatales no lo hayan evitado? Tanto las acciones como las omisiones tienen raíces en una cultura de violencia que se ha enraizado entre los colombianos. Por eso, para garantizar que estos hechos no se repitan, hay que trabajar por transformar esa cultura de la violencia en una cultura de paz. Hace muchos años, en un encuentro en la Unesco, los expertos dieron una recomendación: Si las guerras nacen en la mente de los hombres es en la mente de los hombres donde deben erigirse los baluartes de la paz. Esta frase resalta cómo el pensamiento está construido a partir de los principios y valores que nacen de la cultura a la cual se pertenece y cómo surgen las reglas y normas que rigen la conducta del ser humano. Para afianzar un pensamiento y una conducta orientados hacia la paz, varias organizaciones de diferentes sectores se han unido y compartido fuerzas para construir la paz desde una perspectiva de transformación de una cultura violenta en una en la que primen relaciones más pacíficas y sustentables. En muchas regiones de Colombia la reconciliación se ha fijado como el horizonte o el paradigma del trabajo por la paz, ante sus circunstancias y condiciones sociopolíticas, su cultura política, la fragmentación de su tejido social, los desastres por los efectos del conflicto armado y las falencias en el desarme, la desmovilización y la reinserción. Una razón más para definir ese horizonte ha sido que de estas poblaciones han salido víctimas y muchos de los victimarios que ahora deben tener la oportunidad de aprender a convivir y respetarse en el espacio que habitan. Frente a este desafío de la reintegración de los desmovilizados y los demás retos que enfrentan las comunidades, apostarle a una cultura de paz implica trabajar por la resolución de conflictos y la transformación de las relaciones sociales, a partir del tratamiento noviolento de las dificultades. Renovar la confianza y jalonar la paz En una cultura de paz, la transformación de las relaciones sociales debe partir de la renovación de la confianza, ya que su ruptura es el principal efecto de un conflicto. Esta Con sus bastones de mando como única arma, los pueblos indígenas promueven una cultura donde prime el valor de la palabra. Cortesía Ruta Pacífica de las Mujeres hechos del callejón 11

12 desconfianza separa las personas y rompe la comunicación, lo que a su vez fragmenta a una comunidad. En regiones colombianas como el Caribe, se ha abierto una brecha de desconfianza de tal magnitud que ya parece un abismo casi infranqueable. Hay desconfianza entre los integrantes de las comunidades, entre estos y sus líderes, entre la comunidad y las organizaciones que la componen, entre los miembros de las familias y, sobre todo, entre la población y el Estado. La falta de confianza no permite el diálogo, y sin este es imposible la comunicación, es muy difícil compartir ideas, sueños, temores, planes, dolores y mucho menos tener una buena convivencia. Acordada la reconciliación y la convivencia como horizontes de la superación de los conflictos y una vez trazados los rieles que conducen la cultura de paz, es necesario contar con una locomotora que la impulse y con muchos vagones para los pasajeros que se unan a lo largo del camino. En este tren, los vagones son cada una de las organizaciones y comunidades vinculadas, mientras la locomotora es una red o coalición formada entre las diferentes organizaciones que se identifican y colaboran. Es imperioso que estas comunidades se conviertan en espacios creativos de transformación restaurativa, que es ese estado que logra el ciudadano cuando resuelve un conflicto en particular, restaura su vida, sus relaciones familiares y comunitarias y cura sus heridas. Se llega a esa transformación cuando se ha rescatado la confianza y se ha sanado hasta tal punto que la persona puede perdonar y entrar en diálogo con los otros para planear un futuro común. Los ciudadanos, las ciudadanas y las comunidades que trabajan por esa transformación restaurativa logran pasar del temor a la confianza, que es el combustible que alimenta la locomotora. Un caso, el Caribe Desde 2008, iniciamos en el Caribe un proyecto para impulsar el proceso de construcción de paz, a partir de la idea de la locomotora. Lo hemos llamado Comisión Ciudadana de Reconciliación de la Región Caribe (CCRC), para promover una cultura de paz, acompañar a las comunidades y generar espacios de interlocución con instituciones estatales. En la actualidad, la CCRC cuenta con cerca de 200 organizaciones de ocho departamentos del Caribe provenientes de diferentes sectores: afrodescendientes, indígenas, mujeres, víctimas, desplazados, campesinos, jóvenes e iglesias, como la católica y las cristianasevangélicas. A la iniciativa se ha sumado también una universidad de cada uno de los departamentos de la región. En esta experiencia está sembrada la esperanza de fomentar una cultura de paz para el Caribe. Por eso, la CCRC impulsa un proceso de educación y capacitación en las comunidades y organizaciones con la metodología de la educación transformadora; es decir, aprender haciendo, y teniendo en cuenta la investigación acción participativa (IAP), una iniciativa del sociólogo colombiano Orlando Fals Borda. En la educación transformadora, el contexto social o comunitario es la base del aprendizaje; por lo tanto se trabaja sobre necesidades concretas de la comunidad, en una acción reflexiva que ayude a transformar la realidad. Este aprendizaje se hace mediante el diálogo como encuentro de aprendizaje pedagógico, con participación democrática real y empoderadora de los movimientos sociales de la región o localidad y para lograr una incidencia política. Este trabajo, actualmente, se aplica de forma integral en varias comunidades locales que están retornando a los departamentos del Caribe, como las de Macayepo, corregimiento del Carmen de Bolívar, Bolívar; Mampuján, corregimiento de María La Baja, Bolívar, y Pichilín, corregimiento de Colosó, Sucre. Se apoya a esas comunidades para que elaboren y presenten sus proyectos de vida y accedan a la justicia mediante una reparación integral transformadora; es decir, una reparación que va más allá de la restitución y la indemnización y que hace énfasis en una visión política a futuro de las personas que han sido víctimas, pues no se puede reparar a una comunidad que estaba en situación de pobreza restituyéndola a la misma miseria que tenía cuando fue victimizada o desplazada. En el municipio de Ciénaga de Oro, Córdoba, estamos trabajando con la alcaldía en la transformación de una cultura de violencia en una cultura de paz, por medio de la educación transformadora, la resolución y la transformación noviolenta de conflictos, la participación ciudadana y la promoción el Estado Social de Derecho. Asimismo, desde el Consejo Municipal de Paz se busca educar a las comunidades y a la población para transformar la vida del municipio, marchar hacia una paz duradera y acercar la población y la sociedad civil a la institucionalidad estatal, con el fin de recuperar la confianza, fortalecer lo público, facilitar la gobernancia y apoyar la gobernabilidad. Entendiendo y aceptando que los conflictos hacen parte de la vida social de las comunidades y de la población, es posible aprovecharlos para, mediante su transformación noviolenta, promover una cultura de paz como ingrediente especial en el proceso de construir una paz duradera y la reconciliación. Cortesía Soraya Hoyos 12 hechos del callejón

13 una experiencia regional Mampuján: la memoria en tapices Por el grupo Mujeres Tejiendo Sueños y Sabores de Paz, de la Asociación para la Vida Digna y Solidaria (Asvidas), María La Baja Habíamos regresado del desplazamiento masivo de Mampuján, corregimiento de María La Baja, Bolívar. Traíamos el corazón lleno de dolor y en la mente el recuerdo de nuestros muertos, de nuestros hijos reclutados por los actores armados, de tantos momentos en que nos sentimos violentados y discriminados porque la mayoría somos afrocolombianos. Muchas mujeres traían todavía en el cuerpo las sensaciones dejadas por una historia de violación ocurrida en esos días de marzo de Era la hora de afrontar los hechos, de empoderarnos de nuestros derechos y de buscar los mecanismos para exigirlos. Empezamos a demostrar que las mujeres no solo sabemos cocinar, lavar, coser y lucir un buen cuerpo, sino que somos pujantes, preparadas y sanas para sanar a otras con nuestras mejores armas: el amor y la fe. En nuestro municipio, María La Baja, afiliamos nuestra organización de mujeres a la red Asvidas y nos propusimos ayudar a las víctimas y a nosotras mismas a superar el dolor y las situaciones espiritual, cognitiva, psicológica, conductual y social y cómo manejar el duelo de una manera adecuada. Y es que cuando el ser humano logra manejar su duelo, tiene mayores posibilidades de aumentar su autoestima, de reconstruir su proyecto global de vida y de recibir los beneficios que trae perdonar al otro. De esa manera buscamos contribuir a arrancar la raíz de la amargura y el rencor en las personas y, por ese camino, minimizar la violencia. En esa búsqueda encontramos personas clave de la Iglesia menonita, quienes ayudaron a prepararnos, nos enseñaron a darles acompañamiento a las víctimas y a manejar el duelo y gestionaron los recursos para realizar esa labor. Teresa Geisser nos enseñó la técnica de tela sobre tela o quilt para hacer tapices de arte primitivista como medio para conmemorar y superar el duelo en Mampuján. Así empezamos a trabajar con mujeres de otros corregimientos de nuestro municipio. Antes de salir, nos preparamos: oramos a Las mujeres de Mampuján tejen las historias de sus comunidades y dejan la memoria de su dolor. Cortesía AsVIDAS, MARÍA LA BAJA hechos del callejón 13

14 Dios para que nos guíe, nos dé sabiduría, para que ponga en nosotras las palabras adecuadas y para que lleguemos a las mujeres que lo necesitan. Además, leemos o repasamos lo que nos han enseñado, lavamos nuestra ropa, empacamos, nos despedimos y nos vamos. Viajamos a pie, en moto, carro o avión, depende de la lejanía. Llevamos muchas telas, tijeras, agujas, barro volcánico, masajeador, aceite, copias y lápices. Cuando estamos con el grupo, compartimos historias, vivencias y sentimientos, mientras una de nosotras va dibujando en un papel los hechos más sobresalientes. En ese momento hay confianza, confesión, llanto, rabia, desahogo, oración, liberación, perdón, y de esta manera se van exorcizando los duelos. Luego, mostramos los dibujos y todas empezamos a opinar sobre el contexto, el paisaje, los árboles, los ríos, si hay que dibujar lo ocurrido en la noche o el día, si hay que usar el camuflado o la ropa de civil, cuál debe ser el color de la piel, en fin, todas las características para que el telar refleje muy bien lo que se ha vivido. Ese es el momento de ir a las telas. Se escoge el color del fondo y sobre este se colocan las montañas o los edificios, las casas o las fincas, los árboles o los postes de luz, las características del ambiente rural o del urbano, el dolor o la alegría. Después, se cosen los personajes, se le dan los gestos a sus rostros y se llena el tapiz de historia. Entre el diálogo, el refrigerio y las puntadas, el trabajo va tomando forma. Allí hemos descubierto personas que han sufrido muchísimo y lo han superado. Son potenciales liderezas que han perdonado, sanado su corazón y hoy ayudan a otras a superar sus traumas. Ya en la tarde, vamos al arroyo o al río y nos aplicamos mascarillas en la cara y el cuerpo, nos hacemos masajes relajantes, cantamos, jugamos y hacemos rondas y juegos ancestrales. Este es un complemento al proceso de sanación que hemos tenido en el día y una experiencia de gran valor para todas. Una mujer nos decía: con los masajes me siento querida. Tenía tiempo que no me tocaban con amor y cuidado. En esta labor duramos de tres a cuatro días. Luego, las personas se llevan los materiales para tejer sus tapices y nosotras regresamos a Mampuján, donde las mujeres de la comunidad seguimos tejiendo los tapices iniciados durante el encuentro. Así, a cada comunidad le quedan uno o dos tapices como testimonio de la memoria histórica y de la certeza de que esa historia plasmada servirá para que no quede en el olvido, para contrarrestar la impunidad y para que a otra persona no le pase lo mismo. Para hacer el tapiz ellas escogen los colores, palabras y figuras que representan lo que han vivido. Cortesía AsVIDAS, MARÍA LA BAJA 14 hechos del callejón

15 una experiencia regional Arte y deporte para la vida Por Animarte Desde la niñez, fuimos parte de procesos artísticos en nuestras regiones y vimos los efectos del conflicto armado. Y hoy, con los años encima, sabemos que el teatro, las danzas folclóricas, el hip-hop, la música o el deporte son vías para trabajar por lo que buscamos: la recuperación psicosocial de las víctimas, la construcción de la paz, la educación en valores para la convivencia y la reintegración a la vida comunitaria de quienes alguna vez estuvieron en grupos armados ilegales. Las y los promotores artísticos, del deporte, de la participación juvenil, de vida y salud mental y los demás integrantes de Animarte tenemos un lema: La cultura y el deporte como procesos constructores de paz y reconciliación, que permitan el desarrollo integral de niños, niñas y jóvenes del área urbana y rural del municipio de San Carlos. Ese fue el propósito cuando nos articulamos en el año Surgimos cuando líderes de procesos comunitarios y representantes de organizaciones e instituciones de San Carlos nos sentamos a reflexionar, con el apoyo de la comunidad internacional, sobre lo que nos había dejado esa época de tanta violencia que había vivido nuestro municipio, especialmente en la última década. Fue en esas mesas de trabajo, con una participación activa, cuando decidimos enfrentar esas secuelas de la violencia y crear Animarte, como el resultado de un proceso participativo que partía de experiencias de organizaciones e instituciones locales de San Carlos como la Casa de la Cultura, el Instituto de Deportes y Recreación, el Teatro La Gotera, el Centro de Acercamiento para la Reparación y la Reconciliación (CARE), el proyecto Nuestra Opción La Vida y la Asociación de Juntas de Acción Comunal. Las historias de los integrantes, nuestras experiencias e iniciativas, nuestras propias vidas y nuestro conocimiento sobre San Carlos nos llevaron a trabajar en cuatro componentes. El primero, la promoción artística del teatro, la danza, las artes plásticas, la música, la percusión y el fomento a la lectura en niños, niñas y jóvenes. El segundo, el fomento de deportes como el fútbol, el baloncesto, el voleibol y el fútbol de salón. El tercero, la atención psicosocial. Y el cuarto, la promoción de la participación juvenil. Para alcanzar estos fines, conformamos grupos de promotores, quienes han estado a cargo de dinamizar los procesos comunitarios y lograr lo que queremos. Buscamos la inclusión y la participación de niños, niñas y jóvenes de las áreas urbana y rural de San Carlos en procesos artísticos y deportivos enfocados en la formación en valores y habilidades para la convivencia. Queremos contribuir a transformar los imaginarios, las actitudes y los valores individuales y colectivos que sustentan el uso de la agresión en los diferentes ámbitos de relaciones de los habitantes de San Carlos. Pretendemos favorecer las condiciones para una paz y una convivencia duraderas y, además, aspiramos a minimizar los riesgos que existen de que otra vez se repita el conflicto. Todo eso, sin duda, será una vía para la reconstrucción del tejido social. Estas aspiraciones nos han llevado a formar en valores y a generar espacios de encuentro familiar y comunitario para fortalecer los lazos de confianza que se han deteriorado por el conflicto. Y son las que nos han impulsado a promover y construir escenarios de encuentro entre la población reinsertada, sus familias y la comunidad. Por eso, por ejemplo, el hip-hop fue una vía para unir poblaciones que habían estado en grupos armados ilegales a sus familias y la comunidad, labor en la que ha contribuido de manera especial Mario Hurtado López, un voluntario de Animarte que cambió las armas por el arte y hoy es un promotor de esta experiencia artística. Él así lo expresa cuando Foto ANIMARTE habla del proceso: El hip-hop ha aportado a la construcción de paz y a la práctica de valores. Los resultados son positivos: la integración de niños y jóvenes de los diferentes barrios del municipio, el incremento de la confianza, la perseverancia, la tolerancia y el trabajo en equipo. Aspiramos a que con los años vayamos consolidando el proyecto y que sigamos contando con el apoyo del teatro La Gotera, Care, Isagen, la administración municipal, el programa Colombia Joven, el Programa Promoción de la Convivencia (PNUD) y el Programa de Voluntarios de Naciones Unidas, de los voluntarios de Naciones Unidas, del Programa Promoción de la Convivencia, de Isagen y de la administración municipal, porque sabemos que Animarte anima a que haya cambios, por lo menos en niños, niñas y jóvenes, y sus familias rurales y urbanas, que ya han experimentado el valor de la lúdica y la creatividad como una vía para lo que queremos: la paz integral de San Carlos. hechos del callejón 15

16 Democracia para la paz es dialogar en y con las regiones Los representantes de la ciudadanía de Cáchira, en Norte de Santander, realizaron varios encuentros de reflexión como parte de la elaboración del plan de desarrollo , con el fin de trazar su norte: la transformación de la situación de conflictividad asociada al conflicto armado y a otros como el ambiental, el territorial y el religioso. Después, se propusieron generar entornos favorables a la paz en su municipio y por eso priorizaron dos metas: hacer efectiva la participación ciudadana y hacer transparente el manejo de los recursos públicos. Así aumentaría la confianza de la sociedad civil y de la ciudadanía en su alcaldía municipal, lo que ha sido un principio básico de la democracia y una vía necesaria para construir la paz. Igual que en Cáchira, en varias regiones del país la sociedad civil y las instituciones del Estado han promovido y desarrollado experiencias orientadas a construir la paz en sus territorios a partir del fortalecimiento de la gobernabilidad democrática, especialmente en cuatro direcciones: una significativa participación ciudadana; la formulación de políticas públicas de inclusión social; la apertura de espacios y el aumento de capacidades para la incidencia política; y la creación de diálogos permanentes entre los sectores sociales de la región y entre la región y la nación. Cómo están contribuyendo estos aspectos a la construcción de paz en el país? Una participación ciudadana que dé vida al territorio Cuando nos proponemos conseguir la paz a través de la gobernabilidad democrática estamos hablando de un horizonte con una amplia presencia de las organizaciones sociales que dan vida a las comunidades y que hacen que haya vida en las instituciones del Estado presentes en el territorio, afirma el padre Sterlin Londoño, vicario de la pastoral afro de la Diócesis de Quibdó. Por eso, para él, se construye paz en la región cuando se gobierna en consenso con la ciudadanía y las organizaciones que la representan. En Chocó, esto ha sido llevado a la práctica por medio del proyecto de agendas ciudadanas Construyamos el gobierno que queremos, que desde 2007 facilita espacios de diálogo entre diversos actores de la sociedad y que ha conducido a concertar la Agenda de Paz, un instrumento que consolida los acuerdos entre actores de la institucionalidad pública y la sociedad civil en torno a la construcción de paz e impulsado por el Foro Interétnico Solidaridad Chocó. En otro lugar del país, Marquetalia, Caldas, un municipio con gran tradición de liderazgo social, en el que reinaban el silencio, el miedo y la desconfianza por la presencia de actores armados, también se comenzó a trabajar para recuperar el tejido social y la participación ciudadana, con el acompañamiento de la agencia de cooperación alemana GTZ. Para recuperar la confianza de las comunidades en el Estado, nos acercamos a las organizaciones sociales de cada localidad y realizamos encuentros en los que la gente volvió a hablar, a plantear sus necesidades y sus aspiraciones, afirma Hugo Hernán González, alcalde de Marquetalia. Los resultados de estos encuentros se llevaron a las asambleas, en las que la ciudadanía estaba representada por las juntas de acción comunal. Con ellas, la Alcaldía entabló un diálogo que incluyó ejercicios de presupuesto participativo y que se vio reflejado en programas y proyectos. Esto ha tenido un impacto muy importante en la construcción de paz porque la gente ha recuperado la confianza en los demás y en el Estado y sabe que lo que dice es importante y que se le tiene en cuenta, continúa el alcalde. Políticas públicas de inclusión social El fortalecimiento de la gobernabilidad también contribuye a la construcción de paz a través de políticas públicas orientadas a la inclusión social de las poblaciones más vulnerables y a garantizar sus derechos. En este sentido trabajan actualmente las organizaciones sociales y la Alcaldía de Cartagena, La inclusión social de la población afrocolombiana, como las demás, debe hacerse con participación de sus líderes. Cortesía Borja Paladini Adell 16 hechos del callejón

17 gobernabilidad y participación ciudadana Cortesía Ruta Pacífica de las Mujeres Las mujeres se disponen cada vez más a participar activamente en los asuntos públicos. que construyen conjuntamente tres nuevas políticas públicas para la ciudad: una política para mejorar las condiciones de vida de las y los jóvenes; una de infancia y adolescencia y otra para hacer que sea una ciudad adaptada a las condiciones de las personas con discapacidad. En el proceso de concertación de la política de discapacidad han participado 472 personas de todas las localidades, quienes representan los intereses de las más de personas discapacitadas que hay en Cartagena. Este proceso ha permitido crear lazos de confianza entre las personas, las organizaciones y los funcionarios públicos, reconocernos todos como ciudadanos y generar sinergias. Hemos ampliado el concepto de lo que somos y de nuestro quehacer para incluir a los discapacitados en nuestro propio mundo, afirma Julián Ospina, de la Fundación REI, que apoya a esta población. Algo semejante ha ocurrido en Meta con el proceso para construir la política pública de género, que ha reunido alrededor de 500 mujeres que representan la multiplicidad de organizaciones que ellas han conformado en municipios como Guamal, Puerto López, Villavicencio, Puerto Rico y Granada, entre otros. A partir de las apuestas, las visiones y las propuestas de mujeres jóvenes, afrocolombianas, víctimas, indígenas y campesinas, en el departamento se está definiendo la ruta a seguir en el tema de género, en un diálogo con las instituciones públicas que es acompañado por PNUD, Unifem, Acnur y el Fondo de Población de las Naciones Unidas. Incidencia política Una tercera forma de construir paz cuando se trabaja por la gobernabilidad es cualificar las capacidades de las personas y las organizaciones para ejercer liderazgo e incidir en la opinión y la esfera pública. Se construye paz cuando se trabaja para que las poblaciones que han estado marginadas del poder tengan opciones reales de llegar a él, dice el padre Sterlin Londoño. Con ese fin se han conformado en varias partes del país escuelas de formación orientadas a capacitar a la gente Los muchachos se han acercado a los líderes y han aumentado su confianza en las instituciones y sus habilidades para la participación activa. sobre sus derechos y las formas de ejercer veeduría ciudadana, entre otros aspectos. Por ejemplo, el proyecto Control Social Juvenil, que lidera la Contraloría General de la República, ayuda a formar docentes en temas de control social, y ellos, a su vez, acompañan a grupos de jóvenes para que hagan veeduría a un proyecto público. Con esos espacios los muchachos se han acercado a los líderes sociales, a la comunidad y a las autoridades; han aumentado su confianza en las instituciones y sus habilidades para la participación activa y han descubierto el sentido del trabajo organizativo. Esto es un aporte importante a la creación de capital social y a la paz, afirma Carlos Arturo Mora, director de Promoción y Desarrollo del Control Ciudadano de la entidad. Diálogos entre los sectores sociales y entre la región y la nación Con la gobernabilidad democrática se construye paz porque necesariamente la gobernabilidad propicia diálogos: entre los miembros de una comunidad, entre los sectores sociales que habitan un territorio, entre la sociedad civil y el Estado, entre grupos étnicos, géneros y poblaciones de distintas edades, entre otros. Y esos diálogos son base fundamental para construir paz. La señal de que se estaban dando condiciones para la paz en nuestro territorio llegó cuando la gente empezó a pedir la reparación de los puentes que se habían caído desde hacía mucho tiempo y que nos habían incomunicado con los municipios vecinos. Por eso, hemos priorizado las obras públicas que tienden puentes entre la gente, dice el alcalde de Marquetalia. Para los líderes y las lideresas de los territorios, un diálogo pendiente en el país es aquel que debe existir entre las regiones y la nación: Las propuestas gubernamentales no han respondido al clamor de las comunidades, las cuales están presentando propuestas de gobernabilidad que contribuyen a la paz. El Gobierno nacional debería escuchar estas voces, dice desde Chocó el padre Londoño. El país avanzará hacia la paz fortaleciendo la gobernabilidad democrática. Hay importantes avances jalonados por actores locales, quienes insisten, como lo dice el padre Sterlin, que se construye paz cuando la nación está en diálogo con las regiones y el país es gobernado de acuerdo con lo que se construye en sus territorios. hechos del callejón 17

18 Los derechos sindicales: un reto para la paz Los sindicatos del país, especialmente en las regiones en donde han sido más activos, han vivido y sufrido en carne propia la violencia que ha envuelto el proceso por la reivindicación de sus derechos, como lo demuestran algunos ejemplos de las últimas décadas. El 3 de marzo de 1988, grupos paramilitares provenientes del Magdalena Medio ejecutaron a 21 trabajadores de las fincas Honduras y La Negra afiliados al Sindicato de Trabajadores Agrícolas de Urabá (Sintagro). Entre 1991 y 2003, el Observatorio de Derechos Humanos de la Vicepresidencia de la República reportó 632 homicidios contra trabajadores bananeros del Urabá antioqueño, mientras que la Escuela Nacional Sindical (ENS), 595. El caso de la Unión Sindical Obrera (USO), la organización laboral más longeva del país, creada en 1923 y con fuerte arraigo en Barrancabermeja y las zonas petroleras, es otro de los casos que reflejan la situación de ese sector. Desde 1985 la acción violenta contra los sindicalistas de la USO se acrecentó. La Escuela y el Observatorio de Derechos Humanos coinciden en una cifra de 20 asesinatos entre 2000 y Panoramas similares se han registrado a lo largo y ancho del país en organizaciones de muchos de los sectores de la economía. En el caso del magisterio, las violaciones a los derechos humanos de las que han sido víctimas los miembros de Fecode, la federación sindical colombiana más numerosa, constituyen una situación de no menos gravedad que las otras. Una sola de las asociaciones que integran dicha federación, Adida (Asociación de Institutores de Antioquia), reporta un promedio de 251 asesinatos entre 1986 y Por todo lo anterior, la situación de derechos humanos de los trabajadores sindicalizados es uno de los grandes retos a solucionar en el país. No sería posible pensar en construcción de paz si esta no incluye la restitución y el respeto de los derechos de un sector clave para el proceso democrático, como es el sindical. Esto evidencia que la problemática del sindicalismo en Colombia va mucho más allá de una simple situación de cifras. El 4 de julio de 1991, la Asamblea Nacional Constituyente le entregó al país una nueva Carta Política con la que se dio un paso importante en el marco institucional de las luchas laborales en Colombia: el trabajo pasó de ser una obligación social, como lo indicaba la carta de 1886, a un derecho constitucional. Más allá de los triunfos en la normativa constitucional, el panorama para los trabajadores en el país vaticinaba nuevas y más difíciles luchas por el pleno establecimiento de sus derechos, como lo demuestran los asesinatos y amenazas contra los sindicalistas de diferentes regiones de Colombia. En un tema tan complejo como el de la violencia contra sindicalistas, las aristas van desde percepciones culturales desfavorables sobre el sindicalismo hasta acciones de violencia de parte de actores del conflicto armado, especialmente en regiones en donde la insti- tucionalidad del Estado ha sido históricamente deficitaria. Por eso, es fundamental que Gobierno nacional, centrales obreras, gremios y academia, con el acompañamiento de la comunidad internacional, enfrenten conjuntamente el análisis y la discusión del problema en busca de soluciones. Desde septiembre de 2009 se ha logrado posicionar este proceso de debatir y pensar el problema de la violencia contra los sindicalistas. En una misma mesa ya se han sentado sindicalistas, empresarios y representantes del Gobierno nacional para que, a través de un diálogo franco y constructivo, planteen sus diferentes puntos de vista y busquen cómo superar una situación tan preocupante. El proceso, que continúa, se ha puesto en marcha con el apoyo del PNUD y de un grupo de ocho embajadas acreditadas en Colombia, lo que ha demostrado la importancia de estas mesas de diálogo para buscar salidas en medio de las diferencias. En noviembre próximo, con la realización de un seminario internacional sobre derechos humanos y sindicalismo en Colombia, la importancia de estos escenarios cobrará una mayor fuerza como herramienta para construir la paz desde la reivindicación de los derechos de una población hasta ahora muy victimizada. Por lo pronto, hay consenso sobre la importancia de avanzar en la dirección que señaló la nueva Constitución al establecer que las luchas laborales en Colombia son un derecho constitucional. Los hostigamientos que han recibido los educadores son una prioridad a atender. Foto Astrid Elena Villegas 18 hechos del callejón

19 justicia, derechos humanos y derechos de las víctimas La justicia y los derechos humanos en la construcción de paz Justicia, paz y democracia son objetivos mutuamente incluyentes y complementarios para consolidar el Estado de Derecho en una sociedad. Desde una perspectiva de prevención de conflictos, la vigencia de los derechos humanos, la existencia de mecanismos de acceso a la justicia y el eficaz funcionamiento de sus instituciones son premisas básicas y necesarias para el desarrollo sostenible y una paz duradera. Así, el Estado de Derecho se extiende más allá de competencias y estructuras. Se trata del sistema de valores de una sociedad, referido a los códigos sociales y económicos de conducta, a la voluntad política, las actitudes Las comunidades indígenas también han trabajado para que se haga justicia y se garanticen sus derechos. individuales y colectivas y, sobre todo, al respeto de los derechos humanos en el marco de los estándares internacionales, que constituyen la garantía para la prevención ciudadanos. hacer efectiva la misión institucional y responder a los derechos de los conflictos. Asimismo, fortalecer la justicia exige el pleno respeto al principio El camino hacia la paz comprende reformas estructurales, económicas, sociales y legales. Y la justicia no es ajena a ello; por el contra- cuenta el equilibrio y separación de poderes establecidos por toda de independencia judicial y de autonomía funcional, teniendo en rio, se requiere de un largo proceso de cambio que se manifieste en sociedad democrática. Requiere, además, reconocer el rol que la la toma de decisiones y la formulación de políticas que conduzcan justicia cumple en la sociedad como un mecanismo de resolución de a fortalecer un sistema de justicia legítimo, en el que los actores no conflictos. Recuperar el papel que debe cumplir el sistema judicial, sean solo las instituciones interdependientes y competentes, sino primordialmente, es un primer paso imprescindible para construir también se incluya la participación de toda la sociedad. mecanismos jurídicos que respondan a las necesidades ciudadanas Por esta razón, la construcción de la paz debe ir acompañada y hagan efectivos los derechos. Para ello, se exige el compromiso de una política judicial dirigida al fortalecimiento de las instituciones para la protección de los derechos humanos y a asegurar reafirmar el deber de protección y la construcción del bien común. de las instituciones del Estado para avanzar en estos desafíos y así las condiciones, a largo plazo, de estos mecanismos institucionales de protección. Fortalecer la capacidad de respuesta de las esencialmente, el desarrollo de estrategias que aseguren también Este desafío va más allá del ámbito del Derecho Penal e incluye, instituciones del Estado, del sistema de justicia y del Ministerio mecanismos legales efectivos que puedan aplicarse con diversas Público implica disponer de los recursos humanos necesarios acciones jurídicas, incluidas la resolución de los conflictos sobre tierras, los problemas de Derecho Administrativo, el sistema de justicia para cumplir la función y que este personal sea altamente calificado, con base en una selección transparente y objetiva. También juvenil y otros aspectos fundamentales que se plantean en situaciones de conflicto o se requieren los recursos técnicos y financieros adecuados para postconflicto. Cortesía A. Ducuara / ACNUR hechos del callejón 19

20 Por su parte, los mecanismos de acceso a la justicia que se implementen tienen que buscar superar las barreras estructurales que alejan el sistema de justicia de las personas a las cuales debe garantizar sus derechos. Por esto, profundizar en el análisis y desarrollo de estrategias que permitan una visión integral del sistema de resolución pacífica de conflictos pasa también por reconocer las diferencias culturales, de género, lingüísticas, económicas y, asimismo, considerar otras expresiones del Derecho como la jurisdicción indígena y los mecanismos de resolución alternativa de conflictos. La legitimidad de los procesos El fortalecimiento del sistema de justicia por sí solo no es suficiente para generar condiciones en aras de una paz duradera y sostenible, sino que la legitimidad de los procesos de construcción de paz tiene como pilar fundamental el respeto por los derechos de las víctimas a la verdad, la justicia y la reparación y su garantía efectiva. La participación plena y activa de las víctimas y de sus organizaciones en el desarrollo de políticas, procesos y estrategias basadas en el reconocimiento de sus derechos y, además, en los procesos judiciales con condiciones de seguridad es un factor clave para dignificarlas como actor social, político, económico y cultural de la sociedad. El politólogo y filósofo italiano Norberto Bobbio se refiere a la importancia de democratizar los diferentes espacios sociales y, en tal sentido, expresa en su obra El futuro de la democracia: Después de la conquista del sufragio universal, si todavía se puede hablar de una ampliación del proceso de democratización, dicha ampliación se debería manifestar no tanto en el paso de la democracia representativa a la democracia directa, cuanto en el paso de la democracia política a la democracia social... En otras palabras, cuando se desea conocer si se ha dado un desarrollo de la democracia en un determinado país se debería investigar no si aumentó o no el número de quienes tienen derecho a participar en las decisiones que les atañen, sino los espacios en los que pueden ejercer ese derecho. Por ello, el proceso de construcción de la paz no es lineal sino que gira en torno a un diálogo incluyente y participativo de todos los sectores de la sociedad en los diferentes temas sociales, culturales, económicos y jurídicos. En este marco, la justicia se es importante reforzar el concepto de que constituye en un espacio de diálogo que la justicia es uno de los mecanismos en cumple un rol fundamental para consolidar torno al cual gira la resolución de conflictos en una sociedad democrática. Por este las bases del respeto a los derechos humanos y profundizar el Estado de Derecho en motivo, se requieren estrategias y acciones una sociedad. La participación activa de las que permitan ir creando los cambios políticos y culturales necesarios para que los víctimas, de los grupos tradicionalmente excluidos y de toda la sociedad es condición necesaria para la legitimidad de las pacíficas y se hagan efectivos la garantía y conflictos sociales se canalicen por las vías políticas que se adopten. el respeto de los derechos humanos. De la misma forma, el uso de estos La construcción de la paz es un proceso instrumentos por la mayor cantidad de en el que todos los sectores sociales están sectores sociales, en especial por aquellos involucrados y en el que la justicia cumple que tienen demandas básicas insatisfechas, un rol básico, ya que un Estado de Derecho es una variable crucial a la hora de evaluar se consolida solo a partir de la vigencia y la gobernabilidad del sistema democrático el goce efectivo de los derechos humanos e influir de modo más directo sobre la legitimidad del sistema de justicia. les, con las condiciones necesarias para siguiendo los estándares internaciona- Pero la tarea es aún mayor. No solo es garantizar la igualdad de oportunidades en suficiente crear instrumentos jurídicos idóneos para favorecer la participación activa y la acción de los poderes del Estado y de la el acceso a la justicia y con el compromiso de los diferentes sectores, sino que también sociedad hacia esos objetivos. Para las víctimas de la violencia, la construcción de paz sólo se logra cuando haya verdad y justicia. Cortesía Juan Molina 20 hechos del callejón