Barcelona Treball. Gestión empresarial. Informe sectorial Cofinancian:

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1 Barcelona Treball Gestión empresarial Informe sectorial 2013 Cofinancian:

2 Las 10 claves para conocer el sector La gestión empresarial se sustenta y funciona a través de las personas mediante equipos de trabajo que alcanzan los resultados definidos por la empresa. El sector La gestión empresarial no conforma un sector económico propiamente dicho, sin embargo, sí se puede hacer un tratamiento similar al que se hace para cualquier otro sector productivo. De hecho se puede definir la gestión empresarial como el conjunto de técnicas y habilidades dirigidas a mejorar la productividad, sostenibilidad y competitividad, garantizando la viabilidad de la empresa a largo plazo. En este sentido, las tareas asociadas a la gestión empresarial no pretenden incidir directamente a un incremento de las ventas, pero sí lo hacen de manera transversal, dado que mejoran el funcionamiento interno y externo de la empresa y, en consecuencia, su productividad. En este sentido, la gestión empresarial se ocupa de aspectos como la gestión de los recursos humanos, la gestión financera y administrativa la gestión del conocimiento y de las tecnologías de la información que se requieren, de la calidad y de la gestión jurídica entre otros aspectos relacionados con la organización interna de la empresa. Principales ámbitos de actividad El sector de la gestión empresarial está formado por dos grandes ámbitos de actividad: el primero es la organización, los recursos humanos y la gestión del conocimiento y de la producción que definen la manera de trabajar y de relacionarse con agentes internos y externo de la empresa; y desarrollar la actividad productiva de la empresa, este conjunto de actividades garantizan el funcionamiento de la empresa y la producción del servicio o producto que genera. Y por otra parte, la administración, las tareas apoyo a la gestión y el control de la calidad, que a pesar de actuar como servicios de apoyo, permiten entre otras cosas, asegurar el cumplimiento de la normativa de calidad en los procesos de producción, asesorar y apoyar en materia legal, administrativa o financiera en el resto de ámbitos de la empresa. Tendencias Los/las gestores/as empresariales están tendiendo a implantar herramientas tecnológicas basadas en la gestión por procesos (BPM: Business Process Management) más que en un enfoque funcional tradicional. Por otra parte, las empresas están impulsando, cada vez más, la participación del personal en los proyectos empresariales para retener el talento, generar confianza e incrementar la estabilidad de las plantillas; muy a menudo estos cambios son consecuencia de la sustitución de los organigramas piramidales por organigramas dinámicos. Peso económico Teniendo en cuenta que la gestión empresarial no conforma un sector típico, es complejo establecer cifras en cuanto a crecimiento económico. No obstante, conviene destacar algunos aspectos que relacionan la gestión empresarial con dicho crecimiento, los siguientes: un volumen elevado de empresas que no invierten en capital humano experimentan pérdidas de productividad, las empresas que consiguen una certificación de calidad ven incrementada su rentabilidad, y las empresas que implantan alguna arquitectura orientada a servicios experimentan crecimiento económico. Asimismo, el peso de las escuelas de negocios y universidades privadas dedicadas a la capacitación de personas en materia de gestión empresarial ha crecido en los últimos años. La ocupación La creciente profesionalización de los/las directores/as o gerentes de empresas ha contribuido a incrementar el valor que se otorga a la gestión empresarial para el desarrollo del negocio. En este sentido, las personas que dirigen las Año 2013 /Pág.2

3 empresas apuestan cada vez más por potenciar el rol de los/las responsables de la gestión empresarial. En consecuencia, el sector puede experimentar un crecimiento en número de personas que se pueden incorporar al mercado de trabajo y en reconocimiento de la valía de las funciones que efectúan. Adicionalmente, disponer de habilidades para gestionar el cambio, la producción en entornos complejos, el necesario equilibrio entre vida personal y profesional o la innovación, requerirán de una constante formación y actualización de los equipos directivos. Perfiles profesionales más demandados El sector de la gestión empresarial se caracteriza por requerir, en su mayoría, de personas cualificadas. Los perfiles profesionales se caracterizan por tener un nivel formativo de grado o licenciatura en Administración y Dirección de Empresas, Economía o Derecho. Asimismo, es imprescindible dominar la lengua inglesa y tener conocimientos avanzados de aplicaciones informáticas, sobre todo en el campo de la ofimática. Asimismo, en función del ámbito de actividad donde se ocupen es conveniente disponer de formación especializada en gestión de recursos humanos o en gestión de la calidad. El conjunto de habilidades necesarias para llevar a cabo un buen proceso de gestión empresarial pasan, entre otros, por la capacidad en la toma de decisiones, el desarrollo nuevas ideas, el liderazgo de proyectos, la motivación de equipos de personas, la adaptación al cambio o la innovación. Ocupaciones más demandadas En relación con la evolución del empleo descrita anteriormente, muy probablemente el reciente reconocimiento de la importancia y los beneficios que aporta a las empresas disponer de personal cualificado en gestión empresarial, abre nuevas vías de acceso a empleos relacionados con estos ámbitos de actividad. Sobre todo en cuanto a los perfiles vinculados a la gestión de los recursos humanos y la gestión del conocimiento, por ejemplo, el/la headhunter o el consultor/a en e-business; y al del control de la calidad, por ejemplo, el auditor/a ambiental o el consultor/a de calidad, el experto/a en tecnologías BMP, o el gestor/a en responsabilidad social corporativa, etc. Proyección futura Las empresas tenderán cada vez más hacia la implantación de tecnologías asociadas a la gestión empresarial por procesos. Sin embargo, la realidad muestra que muchas organizaciones han impulsado modelos mixtos de gestión que combinan la filosofía funcional (áreas y departamentos) con la filosofía por procesos. Sin embargo, en un futuro, la apuesta por la gestión por procesos se deberá hacer efectiva para asegurar la supervivencia de las organizaciones. Por otra parte, conviene destacar que desde 1991 hasta 2010 el número de certificados de calidad emitidos en las empresas españolas ha pasado de 53 a y, previsiblemente, el número de certificaciones se incrementará dado los beneficios en cuanto a rendimiento, disminución de costes e incremento de venta que proporciona la obtención de estas certificaciones. Debilidades La gran debilidad del sector es la dificultad que tienen las empresas para gestionar el cambio que supone pasar de un enfoque funcional a un enfoque por procesos, mucho más intensivo en tecnología. En este sentido, las carencias a nivel tecnológico que presentan las personas que se ocupan en puestos de responsabilidad del sector, que a la vez son las responsables de llevar a cabo este cambio, constituyen el principal freno para el desarrollo y evolución de la gestión empresarial. Otro reto importante que afrontarán las empresas será el de saber hacer frente a los cambios necesarios en un entorno de contracción de la actividad económica, reducción de márgenes e incremento de la competencia que, en muchos sectores, es global. Oportunidades La situación económica actual puede suponer un impulso en la implantación de procesos automatizados que incrementen la eficiencia de la gestión empresarial y que optimicen costes. Asimismo, aprovechar el conocimiento de las personas trabajadoras de una empresa, fomentando su participación, puede generar nuevas ideas, ampliar el campo de negocio o abrir nuevas oportunidades empresariales. Año 2013 /Pág.3

4 01Presentación del sector La gestión empresarial, que se encuadra dentro del sector de los servicios a las empresas, no conforma un sector económico por sí mismo, sino que se trata de un conjunto de puestos de trabajo homogéneos inherentes a cualquier organización empresarial, lo que permite hacer un análisis igualmente homogéneo (en términos de especificidades, tendencias, oportunidades de ocupación, etc.) que el de cualquier otro sector productivo. Teniendo en cuenta esta premisa, en este informe se hace un tratamiento parecido al de un sector económico cualquiera. No obstante, la no conformación de un sector típico tiene implicaciones en la búsqueda de datos específicos (económicos y de ocupación), hecho que no impide, sin embargo, extraer conclusiones del resto de análisis del sector. Así, aunque el sector de la gestión empresarial no se puede considerar un sector propiamente dicho, sí se puede afirmar que tanto los ámbitos de actividad que lo conforman como los puestos de trabajo asociados resultan imprescindibles para asegurar un buen funcionamiento interno y externo de las empresas y para alcanzar el éxito empresarial. La gestión empresarial no es ni más ni menos que el establecimiento de un conjunto de técnicas de trabajo en la empresa que abarcan todos los ámbitos productivos de ésta y a todas las personas que la integran, es decir, engloba aspectos como la planificación estratégica, la gestión de los recursos humanos, la gestión del conocimiento, la gestión financiera y administrativa, la gestión de la calidad en el proceso de producción o de los aspectos jurídicos, entre otros elementos relacionados con la organización interna de la empresa. Además, la gestión empresarial no solo trabaja para desarrollar los ámbitos de gestión mencionados de manera individual, sino que también define el tipo de relación que deben tener entre sí y con el resto de la organización. En este sentido, es el gestor de las empresas y su equipo de trabajo quienes definen el comportamiento y el sistema de comunicación que debe regir las relaciones laborales y personales entre las personas que trabajan. Año 2013 /Pág.4

5 02Principales ámbitos de actividad Organización, recursos humanos y gestión del conocimiento, y de la producción Una de las tareas más complejas en el trabajo de un gestor de empresas es la de tomar decisiones en relación con la contratación de personas para ocupar un puesto de trabajo en un área concreta de la organización y, posteriormente, seleccionar a la persona que reúna el perfil adecuado. Por otra parte, en las organizaciones es especialmente delicado el tipo de comunicación que se establece tanto vertical como horizontalmente con el personal. Asimismo, una de las claves del éxito de la gestión empresarial radica en una correcta gestión de la información, en la compartición de los conocimientos adquiridos entre los trabajadores y en la relación que existe entre la información y las decisiones que se toman en las empresas; en este sentido, una información deficiente o inadecuada puede comportar decisiones empresariales incorrectas. No se puede olvidar que la correcta gestión de los recursos que permiten alcanzar la producción deseada de los bienes o servicios de la empresa, en las condiciones, plazos y calidades esperadas es en lo alto de las actividades que se deben tener en cuenta en la gestión empresarial. De todos estos aspectos gestión de los recursos humanos, definición de la comunicación interna y externa de la empresa y gestión del conocimiento se ocupa el ámbito de la organización, los recursos humanos y la gestión del conocimiento y de la producción. Control de calidad, administración y apoyo a la gestión El ámbito del control de calidad, administración y apoyo a la gestión engloba las actividades destinadas a generar productos en conformidad con lo que establece la normativa, teniendo en cuenta las expectativas de la empresa con respecto a beneficios. La aplicación de la legislación vigente no solo afecta a la calidad final del producto, sino a todo su proceso de producción. Por lo tanto, el control de calidad se aplica a todo el sistema productivo de una empresa, lo que significa asegurar el cumplimiento de las normativas relativas a los riesgos laborales, ambientales, sanitarios, etc. Por otra parte, las tareas asociadas al control de calidad generan la necesidad de realizar otras tareas de menor valor añadido, pero igualmente importantes. Se trata, principalmente, de tareas administrativas. Las personas que las realizan dan apoyo al ámbito del control de calidad. No obstante, suelen trabajar también para otras áreas o departamentos de la empresa. Se puede decir que, en general, las tareas que se realizan dentro de este ámbito son de apoyo a las que esencialmente permiten la producción y que se han descrito anteriormente. Con todo, no se puede olvidar que sin las tareas de apoyo o staff no es posible lograr una correcta gestión empresarial y por tanto, se convierten en funciones tan necesarias como las anteriores. Año 2013 /Pág.5

6 03Tendencias del sector Las teorías de la gestión empresarial han evolucionado en consonancia a la tecnología y a las relaciones de producción, y se han vuelto cada vez más complejas, pero más eficientes y competitivas. Fijación de objetivos En las primeras etapas del desarrollo económico, las empresas se caracterizaban porque realizaban tareas repetitivas y fáciles de definir. La función principal del gestor/a de la empresa consistía en supervisar el trabajo que se realizaba, y se trabajaba bajo una fuerte disciplina y control; así, el resultado se medía según la producción. Además, el éxito empresarial se evaluaba en función de la satisfacción en cuanto a expectativas económicas de las personas propietarias de la empresa. Esta interpretación de la gestión empresarial, aunque ha cambiado sustancialmente, aun sigue presente en muchas organizaciones y, en este sentido, muchos gestores continúan dirigiendo sus empresas teniendo en cuenta estos parámetros. Actualmente, la realidad de los mercados (mercados extranjeros y muy competitivos), la automatización, las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, y las crecientes exigencias de la sociedad no sólo hacia los productos y servicios sino también en relación a los procesos que las empresas utilizan para producirlos (respeto al medio ambiental, respecto a los derechos humanos, responsabilidad social corporativa, etc.) han puesto al descubierto muchas carencias de este modelo de gestión tradicional, con la que las empresas y sus gestores empiezan a tener en cuenta otros factores para llevar a cabo una gestión empresarial que repercuta, no tanto en los beneficios económicos, sino en la imagen global que transmite la empresa. En este sentido, para los/las buenos gestores deberá ser prioritario fijar objetivos empresariales para medir el nivel de eficiencia de la empresa, lo que supone definir cuidadosamente la actividad de la organización, establecer el porcentaje de mercado que se quiere abastecer y fijar el tiempo para realizar la actividad. Por tanto, la gestión empresarial se ha convertido en un aspecto mucho más complejo que lo que era hace unos años: ya no se centra sólo en la consecución de beneficios constantes, sino que presta especial atención a otros aspectos que afectan a la vida diaria de la empresa, a su subsistencia ya su competitividad, lo que pasa por fijar unos objetivos empresariales y definir por qué, cómo y cuándo deberán realizarse. Gestión por procesos (BPM: Business Process Management) La estructura empresarial se ha basado, tradicionalmente, en un enfoque funcional, es decir, las empresas se estructuran en departamentos o ámbitos que tienen un personal y unas funciones específicas. Este planteamiento contrasta con el planteamiento a procesos, de relativa reciente aplicación, que consiste en definir una secuencia ordenada y lógica de actividades repetitivas que se realizan en la organización por una persona o un grupo de personas, o uno o más de un departamento, que es capaz de transformar unas entradas (inputs) en resultados (outputs) para un destinatario concreto (clientes) con un valor añadido (producto adaptado a las necesidades concretas del cliente). El desarrollo tecnológico y el ambiente dinámico y competitivo en el que se encuentran inmersas las empresas hoy en día, exige más que nunca la utilización de la gestión por procesos, ya que permite alinear los procesos productivos con la estrategia, la misión y los objetivos de la organización, y lograr niveles de efectividad adecuados. Existe innumerable documentación que reconoce la eficacia de la gestión por procesos y su vinculación con el éxito en la gestión empresarial. En este sentido, se considera como un sistema de gestión empresarial que incrementa la competitividad de las empresas. Del mismo modo, la gestión por procesos tiene una relación muy estrecha con un conjunto de herramientas empresariales ampliamente utilizadas como son: el modelo de excelencia EFQM (Fundación Europea para la Gestión de la Calidad), el cuadro de mando integral (CMI), el benchmarking, las arquitecturas orientadas a servicios (SOA), etc. Sin embargo, durante muchos años, organizaciones importantes como por ejemplo las instituciones públicas, han funcionado con éxito siguiendo una estructura funcional. Por este motivo, en muchas organizaciones todavía existe resistencia al cambio a la hora de implementar la gestión por procesos. Sin embargo, las empresas deberán tener en Año 2013 /Pág.6

7 cuenta la gestión por procesos no sólo para incrementar la eficiencia y la competitividad, sino también como un medio para satisfacer al cliente, ya que permite optimizar la aportación de valor añadido a los productos e integrar, al mismo tiempo, la gestión de la calidad. Cultura organizacional o empresarial Concebir las organizaciones como entidades con cultura identitaria, en las que existe un sistema de trabajo común entre las personas que lo integran constituye un fenómeno bastante reciente. Actualmente, las organizaciones se consideran un medio para coordinar grupos de personas (tienen departamentos y relaciones de autoridad) que generan productos y servicios concretos, sin embargo, una empresa se caracteriza por elementos que van más allá de los simples rasgos estructurales. En este sentido, es reconocida la repercusión que tiene la existencia de una cultura organizacional en los miembros de una empresa. No obstante, este concepto es relativamente nuevo en cuanto a su aplicación práctica en la gestión empresarial. Así, la presencia de una cultura organizativa ofrece una nueva visión de la empresa que permite a la dirección y a la gerencia comprender y mejorar el funcionamiento interno de la organización y persigue los siguientes objetivos: definir el comportamiento que debe tener el personal en la empresa, transmitir un sentido de identidad con la empresa a los trabajadores, crear un compromiso personal de los miembros de la organización más allá del mero compromiso contractual, y retener el talento, el que incrementa la estabilidad de la organización. Por tanto, la existencia de una cultura organizativa genera y refuerza un vínculo social que permite mantener unidas a las personas que forman parte de una corporación, y proporciona las normas adecuadas de lo que tienen que hacer y decir. En definitiva, la cultura organizativa define cómo deben comportarse las personas que trabajan en una empresa para representarla según unos valores predefinidos. Así, los valores son fundamentales para la existencia de una cultura organizativa, proporcionan una dirección común para todas las personas que trabajan y establecen las directrices para su compromiso diario. Por lo tanto, toda organización con aspiraciones de excelencia debería tener definidos los valores y las normas que determinaran el comportamiento del conjunto de las personas que trabajan en ella. Apuesta por la calidad Durante los últimos años, se ha podido observar cómo se ha forjado una nueva cultura de la calidad en el ámbito empresarial y como el número de certificaciones emitidas a las empresas se ha incrementado exponencialmente. Conviene destacar que los motivos que deberían impulsar a las empresas a implantar medidas de calidad deberían ir más allá que los de cumplir la normativa vigente. De hecho, existen estudios que demuestran que las empresas que implantan sistemas de gestión de calidad con el único objetivo de cumplir la normativa no obtienen los beneficios que se esperan, y lo mismo sucede con las empresas que señalan las presiones de los clientes como fuente de motivación para obtener certificaciones de calidad. En este sentido, la obtención de certificaciones de calidad debería estar motivada por otros aspectos más relacionados con la excelencia empresarial, y debería incorporarse en la cultura organizacional. Es más, algunos estudios afirman que la implantación de estas medidas tiene efectos positivos sobre la calidad de los productos y los servicios, que amplía la cuota de mercado, y que incrementa la productividad y la rentabilidad de la empresa, logrando un mejor resultado económico-financiero. Hay que tener en cuenta, sin embargo, que en un entorno cada vez más globalizado, con más competencia y con un mayor acceso a la información, la calidad no es un elemento diferencial sino que se convierte en un requisito. Lo que hace 10 años podía suponer cierto grado de ventaja competitiva es hoy un factor higienizante: el mercado ya descuenta que las empresas ofrecen productos de calidad y por lo tanto las posibles fuentes de ventaja competitiva deben venir necesariamente de otros elementos. Conocimiento profundo del cliente y libertad de actuación En las estructuras empresariales rígidas, el conocimiento de las necesidades del cliente se concentra más entre las personas con más poder interno o en cargos de mayor responsabilidad y la orientación al cliente no existe en el resto del personal o en otras categorías profesionales más bajas. Esto tiene consecuencias sobre el trabajo que realizan las personas ya que lo enfocan hacia la satisfacción de su superior más inmediato sin profundizar en los requerimientos de la clientela. En este sentido, las empresas tienden a poner en marcha iniciativas que fomenten la participación y la colaboración entre el personal (verticalmente y horizontalmente) para captar todas las oportunidades que ofrece un entorno de trabajo en equipo. Asimismo, los superiores confían en su personal y dan más libertad a sus trabajadores y trabajadoras para realizar tareas de forma autónoma, lo que se traduce en un incremento de la autoconfianza, en la aparición de ideas innovadoras y en la creación de un entorno de trabajo colaborativo y dinámico. Uno de los efectos más evidentes, en muchos casos, de la mayor delegación de responsabilidades y la asunción de más libertad de actuación es el incremento de la motivación de las personas, que ven cómo se establecen nuevos retos en su entorno profesional. 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8 Cambios organizativos en las empresas: de los organigramas piramidales a los organigramas dinámicos Las empresas son organizaciones vinculadas a su entorno. Los cambios que se producen en este entorno tienen repercusiones directas o indirectas sobre las empresas. Para sobrevivir las empresas tienen la necesidad de adaptarse al entorno y dar respuesta a los cambios constantes que se van produciendo. Por este motivo, en la actualidad y cada vez más en el futuro, se están abandonando las estructuras organizativas basadas en la jerarquía y las relaciones verticales para adoptar organigramas con un componente eminentemente horizontal y dinámico, por lo que se van creando nuevos equipos de trabajo en función del tipo de proyecto a desarrollar. La adopción de estas estructuras descentralizadas y flexibles implica enfatizar la colaboración horizontal entre los miembros de la empresa, y requiere que la información de que dispone la organización esté ampliamente difundida entre todo el personal que la compone. Hay algunos aspectos clave para la implantación de los organigramas dinámicos tenga éxito. El primero está relacionado con la capacidad de crear equipos multidisciplinares y auto-dirigidos para trabajar en proyectos conjuntos. El segundo se concreta con la capacidad de diluir las fronteras entre los departamentos de la empresa para responder a los cambios del entorno y los requerimientos de los clientes con mayor rapidez. El tercer afecta a la necesidad de gestionar la información y compartir los conocimientos. El cuarto, se concreta en la interactuación con los clientes, los proveedores, los competidores y el resto de elementos del entorno. Y finalmente, el quinto, está relacionado con el esfuerzo para lograr la correcta coordinación e integración de las diversas actividades que se llevan a cabo en la empresa. Año 2013 /Pág.8

9 04El sector en cifras Datos económicos y de ocupación La formación en el ámbito de la gestión empresarial se concentra en dos grandes tipologías de entidades: universidades privadas y escuelas de negocio. Su facturación conjunta experimentó un incremento del 5% en 2009 y de un 5,9% en 2010, suponiendo una facturación conjunta de millones de euros. La importancia que se le confiere a la gestión empresarial queda reflejada en el hecho de que en España hay más de 150 escuelas de negocio reconocidas, aunque las 5 más grandes tienen una cuota de mercado del 54,5%. Durante el 2009, las empresas invirtieron entre un 5% y un 8% de su presupuesto en programas de capacitación del personal. Sin embargo, como consecuencia de la crisis los departamentos de recursos humanos han reducido alrededor del 20% sus presupuestos en formación. Algunos estudios afirman que en promedio es un 50% más caro buscar una nueva persona para cubrir un puesto de trabajo (gastos de reclutamiento y entrenamiento) que mantener al personal existente que ya tiene incorporada la cultura de empresa. En este sentido, es más económico incrementar en un 10% el salario del personal, ya que evita la fuga de talentos de la empresa. Entre el 70% y el 80% de las empresas que no realizan inversiones en desarrollo humano y capacitación profesional registran pérdidas en productividad, y presentan hasta un 50% de rotación del personal. Las investigaciones muestran que las empresas que han conseguido una certificación de calidad obtuvieron en los tres años posteriores a la certificación una rentabilidad media en torno al 20% superior a las empresas no certificadas. La productividad de un equipo de trabajo disminuye hasta el 60% cuando no se proporcionan incentivos económicos o cuando las personas que lo conforman no se sienten valoradas profesionalmente. El 92% de las empresas que han implantado una arquitectura orientada a servicios (SOA) afirma que fue la reducción de costes lo que impulsó su implantación. Las empresas que han implantado una SOA han obtenido un crecimiento del 51% gracias a estas estrategias. Los motivos por los que las empresas deciden poner en marcha soluciones BPM radican en los siguientes: un 26% para automatizar todos los procesos, un 25% para incrementar la eficiencia y un 24% para aumentar el rendimiento de los/las trabajadores/as. Según estudios recientes, la velocidad de incorporación de las NTIC 's en las organizaciones es todavía muy lenta como lo demuestra el hecho de que la reducción en el gasto de comunicación a través de los canales tradicionales (televisión, prensa, radio, etc.) ha sido mucho mayor que el incremento de la comunicación a través de los nuevos canales que ofrece la tecnología (esencialmente internet y sus diversas aplicaciones). Fuentes: Últimos datos disponibles. Introducción a la Gestión empresarial. Libro I. Pedro Rubio Domínguez. Instituto Europeo Empresarial; Journal of european industrial training; Club-BPM, RRHH digital portal on-line de recursos humanos; La web de los recursos humanos y el empleo; Morgan Stanley 2010, Estudios sectores DBK Año 2013 /Pág.9

10 05Perfiles profesionales más demandados Perfiles profesionales de mayor cualificación Perfil formativo La formación reglada necesaria para trabajar en el sector de la gestión empresarial depende del ámbito de actividad en el que se desarrolle el trabajo. No obstante, la formación que se requiere más habitualmente para trabajar en los ámbitos de la organización y recursos humanos y de servicios staff (administrativos, legales, financieros, etc.) es la de grado o licenciatura en Administración y Dirección de Empresas, Economía o Derecho y, de manera complementaria, se piden másteres o posgrados de especialización en Gestión Empresarial o en Gestión de Recursos Humanos. Con respecto a los perfiles profesionales más vinculados al ámbito del control de calidad, se requieren grados (o las licenciaturas o ingenierías equivalentes) en el ámbito concreto de trabajo, por ejemplo, medio ambiente, obra civil, telecomunicaciones, etc. Por otra parte, es imprescindible tener conocimientos avanzados de aplicaciones informáticas para la gestión de la información y la documentación, y dominar más de un idioma, preferentemente el inglés, sobre todo para aquellos perfiles profesionales que deben mantener relaciones empresariales con otras organizaciones, por ejemplo, empresas multinacionales. Además, los profesionales de mayor cualificación en el ámbito empresarial deben tener capacidad para analizar datos cualitativos y cuantitativos, y aplicar este análisis a la toma de decisiones, ya sea para asesorar a una persona externa o interna de la organización, para desarrollar estrategias de negocio o para realizar una comunicación interna al personal. Perfil competencial En este sector, cada puesto de trabajo requiere de competencias particulares, por ejemplo, es imprescindible que el contable siga estrictamente la normativa contable existente y que el consultor en gestión del conocimiento tenga capacidad para analizar información y para relacionarla. No obstante, las competencias comunes que generalmente se necesitan para trabajar en el subsector de la gestión empresarial son: proactividad; capacidad gerencial, analítica y conceptual; inteligencia emocional; orientación al cliente; saber trabajar por objetivos; capacidad para tomar decisiones con o sin presión; capacidad de aprendizaje y de utilización de los conocimientos adquiridos; y capacidad para saber transmitir y recibir información estratégica con agentes externos y/o internos de la empresa. Ejemplos de ocupaciones del catálogo del Web Barcelona Treball Consultor/a en gestión del conocimiento Auditor/a de calidad Experto/a en normativas y directivas de la Unión Europea Especialista en gestión global del patrimonio inmobiliario Año 2013 /Pág.10

11 Perfiles profesionales de menor cualificación Perfil formativo La formación reglada necesaria para los perfiles de menor cualificación también depende en gran medida del ámbito de actividad en el que se desarrolle el trabajo. No obstante, el nivel formativo de estos profesionales está vinculado al número de horas lectivas demostrables en la materia concreta; por ejemplo, para desarrollar las tareas de un/una prevencionista en higiene industrial hace falta obtener un certificado de 600 horas de formación en esta especialidad y, para ejercer de traductor online, hay que obtener un certificado de nivel avanzado en la lengua específica, que se corresponde con el nivel B2 del marco europeo común de referencia (MECR). En este sentido, no existe una titulación común requerida para estos perfiles, sino que, por su diversidad de funciones, en cada uno se exige el certificado concreto que acredite que pueden realizar las tareas vinculadas a la ocupación. De manera complementaria, hay que tener un conocimiento avanzado en la utilización de aplicaciones ofimáticas para la gestión de la información. Además, es conveniente acreditar conocimientos básicos de lengua inglesa. Perfil competencial Las competencias más importantes que se exigen en estos perfiles profesionales son las siguientes: preocupación por el orden y la calidad del trabajo; orientación al cliente; saber transmitir y recibir información operativa con agentes externos y/o internos de la empresa u organización; y capacidad de organización y planificación de su propio trabajo. Ejemplos de ocupaciones del catálogo del Web Barcelona Treball Prevencionista en higiene industrial Detective privado/a Traductor/a online Prevencionista en seguridad en el trabajo Año 2013 /Pág.11

12 06Escenarios de futuro Debilidades Dificultades para gestionar el cambio de un enfoque funcional de la gestión empresarial a un enfoque por procesos. En este sentido, el tejido empresarial español aún le falta mejorar la calidad de los procesos de negocio y alinearlos con la tecnología. En relación con el punto anterior, las personas que ocupan puestos de trabajo con responsabilidad en el sector de la gestión empresarial presentan carencias a nivel tecnológico, lo que dificulta la aplicación de sistemas basados en nuevas tecnologías que mejorarían la gestión empresarial. La importancia que las empresas otorgan a los beneficios que aporta la gestión empresarial en España y en Cataluña aún está muy por debajo de los niveles de responsabilidad que se le confiere en otros países de la Unión Europea y los Estados Unidos. La insuficiente inversión de recursos económicos que están dispuestas a realizar las empresas españolas y catalanas en sistemas de gestión empresarial puede repercutir en los niveles de eficiencia y productividad que se exigen en un mercado globalizado. Amenazas No apostar por una gestión por procesos en un mercado cada vez más globalizado y competitivo implicará una pérdida de competitividad y de efectividad. En este sentido, las empresas españolas presentan un nivel de implantación de esta filosofía empresarial inferior al que registran empresas de la Unión Europea o de los Estados Unidos. Sin embargo, se observa un incremento exponencial en la implantación de estos sistemas durante la crisis económica, sobre todo durante los años 2010 y La baja inversión en tiempo y recursos humanos que realizan las empresas en planteamientos de estrategias relacionadas con la cultura empresarial u organizacional puede repercutir en su reputación en el mercado exterior y, en consecuencia, incrementar las dificultades que se presentan cuando las empresas quieren poner en marcha procesos de internacionalización. Fortalezas Los gestores y sus equipos de trabajo cada vez tienen perfiles profesionales más cualificados. Esto se debe al reconocimiento social y económico que se ha otorgado a la gestión empresarial en los últimos años. En este sentido, se prevé que la gestión empresarial y las tareas que tiene asociadas se vean reforzadas con más recursos humanos y materiales. Los puestos de trabajo vinculados a la gestión empresarial los ocupan personas con perfiles profesionales muy diversos. Por otra parte, las tareas que se realizan desde la gestión empresarial no se relacionan directamente con la producción, sino con la gestión interna del proceso productivo, con lo que el trabajo que desarrollan estos perfiles es transversal y afecta a toda la empresa. En este sentido, estos profesionales son personas muy polivalentes; lo que incrementa sus oportunidades ocupacionales ya que van más allá de las tendencias económicas que favorecen uno u otro sector productivo. La realidad demuestra que seguir protocolos empresariales en las reuniones de negocios incrementa el éxito de las empresas y contribuye a mejorar la percepción que tienen sobre la calidad del trabajo y la seriedad de la empresa, lo que genera confianza y, en consecuencia, contribuye a incrementar el volumen de negocio. El incremento de certificados de calidad emitidos a las empresas españolas constituye un elemento básico que mejora su imagen en los mercados nacional e internacional. Año 2013 /Pág.12

13 Oportunidades Aprovechar la situación de recesión económica para optimizar costes mediante la implantación de herramientas que mejoren la gestión empresarial, por ejemplo, arquitecturas orientadas a servicios. Poner en valor los beneficios que aporta a las empresas apoyar a las personas trabajadoras más allá de la relación contractual. Involucrar al personal con los proyectos empresariales, dado que muchas de las mejores ideas empresariales han surgido en momentos de recesión económica. En ocasiones, poner en marcha medidas que fomenten la participación de la plantilla en la planificación de proyectos empresariales permite detectar nuevas ideas que pueden generar nuevos nichos de negocio. Generar confianza en los trabajadores en relación al trabajo que realizan puede generar un incremento en su efectividad y en su eficiencia. Aprovechar las políticas de gestión empresarial para retener a las personas altamente cualificadas, buenas trabajadoras y que aportan valor añadido a la empresa. La adquisición de certificados de calidad puede suponer una oportunidad para las empresas para abrirse a nuevos mercados o para ampliar sus líneas de negocio. Año 2013 /Pág.13

14 07Enlaces de interés Organismos internacionales Directory of professional project management organizations-regional listing-asia/pacific Management Centre Europe American Management Association Organismos nacionales Asociación Española de Empresas de Consultoría Asociación Española de Dirección y Desarrollo de Personas Asociación de Gerentes de Riesgos Acontecimientos internacionales (ferias, congresos, etc.) Strategic Management Society Acontecimientos nacionales (ferias, congresos, etc.) Personal España Futura y Foro del Trabajo Congreso Nacional BPM Eficiencia operacional alineada a la estrategia Año 2013 /Pág.14

15 Portales temáticos internacionales Journal of European Industrial Training Club-BPM Portales temáticos nacionales RRHHDigital El primer periódico online de recursos humanos La web de los recursos humanos y el empleo Cofinancian: Año 2013 /Pág.15