TECNOLOGÍAS EN APOYO A LA CAPRINOCULTURA VOL. I

Transcripción

1 TECNOLOGÍAS EN APOYO A LA CAPRINOCULTURA VOL. I CRÉDITOS Las fotografías y las figuras son de la autoría intelectual de los mismos, excepto cuando se mencionen específicamente otras fuentes o autores. La información y las opiniones emitidas en esta publicación son responsabilidad de los autores y pueden diferir de las del CNSP Caprinos Este programa es público, ajeno a cualquier partido político. Queda prohibido el uso para fines distintos a los establecidos en el programa. Realizado con el apoyo de la SAGARPA a través del Programa de Desarrollo de Capacidades, Innovación Tecnológica y Extensionismo Rural 2013

2 presentación Tecnologías en apoyo a la caprinocultura Vol. i La caprinocultura es una de las actividades pecuarias de mayor importancia socioeconómica en México, ya que las características y las bondades de la cabra y sus productos contribuyen al bienestar de los caprinocultores y sus familias, así como al del consumidor final. Las cabras se encuentran, preponderantemente, en manos de pequeños productores: los casi 9 millones de cabras son criadas en cerca de 220 mil unidades de producción distribuidas en todo el territorio nacional, particularmente en La Mixteca (Oaxaca, Guerrero y Puebla) y en las zonas áridas y semiáridas del norte y el centro del país, donde han mostrado tanto sus habilidades de adaptación a condiciones difíciles, como su potencial de producción cuando mejoran esas condiciones. Sin embargo, la producción actual de carne y leche de cabra no satisface la elevada demanda de los diferentes nichos del mercado en desarrollo. De acuerdo con el Plan Rector del Comité Nacional Sistema Producto Caprinos, resulta estratégico impulsar no sólo el inventario nacional, sino también su producción y productividad. Por lo anterior, en el Plan Anual de Fortalecimiento del Comité Nacional Sistema Producto Caprinos 2013, se contempló contribuir a la tecnificación de los procesos de producción y transformación por medio de la elaboración y publicación de tecnologías orientadas a mejorar la productividad y la sustentabilidad de los principales sistemas de producción caprina del país. Así, se definieron y abordaron 6 áreas del conocimiento (alimentación, forrajes y pastizales, genética, reproducción, prácticas generales y sanidad) y las tecnologías de la leche y de la carne. Para su elaboración, se recurrió a académicos y profesionistas de diferentes instituciones de enseñanza, investigación y extensión, así como a expertos que se desempeñan como consultores privados. Como resultado de esto se presentan en esta publicación las Tecnologías en Apoyo a la Caprinocultura Vol. I; cabe señalar que debido a la respuesta de los expertos y al amplio campo de conocimiento del sector, se trabajarán más tecnologías en un Vol. II en el ejercicio presupuestal Es importante aclarar que no están incluidas ni todas las áreas temáticas, ni todas las tecnologías disponibles o necesarias. Es recomendable multiplicar el ejercicio, para atender las demandas regionales o locales, como ya se hace en algunas entidades federativas, cuyo esfuerzo es reconocido. Cabe señalar que el documento estará disponible en la biblioteca virtual del CNSP Caprinos: comité nacional sistema producto caprinos México, D.F., diciembre de 2013

3 RepRoducción cría y preparación de las cabritas de Reemplazo José de Lucas Tron / tronj@unam.mx Omar Salvador Flores / omsafl@hotmail.com Profesores e investigadores de la FES Cuautitlán de la UNAM planteamiento del problema a Resolver, la oportunidad o la necesidad. Las cabritas de reemplazo representan, en buena medida, el éxito o fracaso futuro de la unidad de producción, dado que son la base de la producción de los siguientes años. Una cabrita mal criada tardará más en integrarse al rebaño de cría, el costo de su alimentación será más alto, demandará más atención y además, su tasa reproductiva se verá afectada; asimismo, se incrementan los costos de su mantenimiento, se reduce la proporción de animales productivos en el rebaño y se retrasa el avance genético. La importancia de las cabritas de reemplazo estriba en que, en la mayoría de las unidades de producción (sobre todo en las de producción intensiva), pueden representar entre el 20% y 30% del rebaño de cría; en otras palabras, de cada 100 cabras, entre 20 y 30 pueden no ser productivas, hasta que no críen por primera vez. Por lo tanto, es fácil entender por qué las cabritas de reemplazo improductivas limitan las posibilidades de producción y de ingresos de la explotación. descripción de la Tecnología cómo elegir las cabritas de Reemplazo. Si se cuenta con registros, éstos deben ser utilizados para identificar a las posibles candidatas, teniendo en cuenta los antecedentes productivos de sus padres o parientes, de acuerdo al tipo de producción (carne o leche). Con el objetivo de elegir a los mejores animales, dichos registros deberán ser analizados por un técnico capaz de interpretar los parámetros,. Por ejemplo, para la producción de carne, es necesario considerar las evaluaciones de ganancia de peso, el tamaño de la camada, etcétera, tanto de sus padres como de sus medios hermanos u otros; para la producción de leche se, puede considerar la producción de su madre, su abuela o sus medias hermanas. Si no existen registros, las siguientes recomendaciones pueden ayudar a elegir a las cabritas de reemplazo: para carne: De ser posible, elegir a las cabritas procedentes de machos nacidos de parto múltiple (2 o más crías). De preferencia, escoger cabritas nacidas de parto gemelar o múltiple. Elegir aquéllas que tuvieron los mayores pesos al nacer y al destete (de preferencia aquéllas nacidas de parto múltiple) y, sobre todo, que tengan un buen desarrollo y peso en el momento del empadre (65% de su peso vivo). Elegir cabritas sin defectos físicos severos (revisar la tecnología de eliminación de caprinos del rebaño), sobre todo en la boca (por ejemplo braquignatia, Fotos 1 a y b). Si se busca tener partos la mayor parte de año, elegir cabritas nacidas en épocas de pocos nacimientos. para leche: Elegir las cabritas de madres con mayor producción, las cuales estén por encima del promedio del rebaño, en lo que respecta a la producción de leche. Las cabritas de machos que tuvieron cabras con mayor producción.

4 De ubres con pezones fáciles de ordeñar. Que provengan de madres que no hayan tenido problemas a lo largo de su vida productiva (abortos, prolapsos vaginales o uterinos y otros). una raza carnicera (como la Boer), a criar cabras lecheras (como la Saanen, la Alpina, la Anglonubia o la Toggenburg). Entre unas y otras razas, es diferente la estrategia de gestación para obtener cabritas de reemplazo, las cuales se puedan aparear a una edad temprana. El productor debe considerar que las razas lecheras no se aparean bien (no aceptan al macho) todo el año; en general, lo hacen de mediados de mayo-junio de un año a mediados de febrero-marzo del siguiente, mientras que, las cabras Criollas o Granadinas aceptan al macho prácticamente, todo el año, aunque también puede presentarse un descenso de la actividad reproductiva de febrero a mayo. Teniendo en cuenta lo mencionado en el párrafo anterior y el tiempo que requieren (estando bien alimentadas) para iniciar su vida reproductiva, es muy importante cuándo deben nacer las cabritas, para que puedan aparearse durante del primer año de edad. Fotos 1 a y b. Los defectos en la boca pueden ser detectados desde edades tempranas; en las fotos, se muestra una cabrita cuyos dientes incisivos quedan atrás del rodete dentario (braquignatia). cuándo se inicia la cría de las cabritas de Reemplazo. La cría de las cabritas de reemplazo se inicia desde la gestación. Las cabras de las que se espera obtener cabritas de reemplazo deben estar bien alimentadas (ver las tecnologías de alimentación), con el objetivo de que tengan un buen desarrollo y ganen peso rápidamente. Poca gente sabe que durante esta etapa comienza a darse la posibilidad de que una cabra tenga una buena reproducción en su vida adulta. Otro aspecto importante a tener en cuenta es la raza con la que se trabaja. No es lo mismo criar cabras de A manera de ejemplo, se plantean dos posibilidades: la primera posibilidad considera a una cabra de una raza que tiene problemas para aparearse todo el año, como es el caso de las lecheras. Si se desea que las cabritas de esta raza se puedan aparear dentro de su primer año de vida (dando por descontado que se cuidarán los aspectos de alimentación, salud, y otros), las cabritas deberán nacer en noviembre-diciembre; de este modo, tendrán la posibilidad de ganar el peso y alcanzar un desarrollo suficiente, para la época en la que se pueden aparear por primera vez. La segunda posibilidad se puede aplicar en cabras Criollas o Granadinas, las cuales no tienen mucho problema para aparearse todo el año en México (aunque, como ya se mencionó, les resulta un poco más difícil aparearse durante los meses de febrero a mayo); ésta característica facilita que cabritas nacidas en otras épocas y que cumplan con los requisitos de alimentación y de salud, una vez que alcanzan el peso y el desarrollo suficientes puedan aparearse dentro de su primer año de vida. Se debe tener en claro que los anteriores son sólo ejemplos, dado que, muchos de los manejos reproductivos van de la mano de los recursos alimenticios con los que se cuenta. La situación será diferente si se trata de animales mantenidos en estabulación o en agostadero; en este último caso suplementar puede ser mucho más costoso y probablemente, sea mejor esperar a que el reemplazo inicie su vida reproductiva

5 a una mayor edad (pariendo su primera cría al segundo año de edad) y así pueda alcanzar el peso necesario. Esta situación debe analizarse y planificarse con mucho cuidado y con antelación; además, se debe contar con el apoyo de un técnico. cómo se cría una cabrita de Reemplazo. Se debe cuidar la alimentación y salud de las madres de las cuales se obtendrán las cabritas de reemplazo, en especial durante el último tercio de la gestación (ver tecnología de cuidados de las cabras en el momento del empadre-parto). En buena medida, esto garantiza una buena lactación y, con ello, un buen crecimiento y un desarrollo adecuado de las cabritas durante la lactancia. Durante la lactación, la alimentación de las madres debe permitir una buena producción de leche, ya sea para alimentar a los cabritos o bien para la producción. En los sistemas de producción en los que se deja a las crías con sus madres, las cabritas deben disponer de alimento concentrado a placer, acorde con las necesidades de esta etapa de crecimiento; las cabritas deben estar ubicadas en un área de exclusión (conocida también como creep feeding), tal como se muestra en la Foto 2. Esto tiene dos ventajas: la primera es que ayuda a que la cabrita se convierta en rumiante más rápido; y la segunda, que el destete resulta menos estresante (traumático) para el animal y no afecta su desarrollo. Cuando se trata de sistemas más intensivos, en los cuales las cabritas son separadas muy temprano de sus madres, se crían en corraletas como las que se muestran en la Fotos 3 a y b, donde reciben leche (o substitutos de leche y alimentos balanceados). Fotos 3 a y b. Corraletas de cría en sistemas intensivos (Foto 3 a cortesía de Alina Gómez A). Con el objetivo de facilitar el manejo de las hembras en su vida productiva, una práctica recomendable es descornarlas antes del destete; para ello, se pueden utilizar diferentes métodos, tales como el cautín o las pastas cáusticas que se pueden encontrar en el mercado. En las Fotos 4 a y b, se presenta un cautín eléctrico para descornar y unas cabritas recién descornadas. Foto 2. Grupo de cabritas de reemplazo con sus madres. Obsérvese el área de exclusión o creep feeding, donde las cabritas disponen de suplemento a placer (cortesía de Alina Gómez A). Fotos 4 a y b (pág. siguente). Cautín para descornar y cabritas ya descornadas.

6 Es altamente recomendable que, a determinada edad, las cabritas sean separadas de los cabritos machos, así como de los sementales, hasta que llegue el momento de su apareamiento. Después del destete, las cabritas de reemplazo deben disponer de dietas balanceadas (concentrados), las cuales les permitan tener un buen crecimiento y un desarrollo adecuado, alcanzado con ello la madurez con mayor rapidez, es decir, que adquieran forma adulta en menor tiempo (Foto 5 a y b). Previo al inicio del apareamiento, es aconsejable revisar la condición corporal de las cabritas (ver tecnología sobre el tema). Éstas no se deben aparearse en condiciones inferiores a 3; asimismo, es recomendable colocarlas con machos vasectomizados (celadores) o con mandiles, los cuales impidan el servicio, pero mantengan una buena libido (apetito sexual), unos 15 días antes. Esto es conocido como efecto macho, el cual permite estimular a las cabritas para que entren en celo (estro) y ovulen mejor (ver tecnología correspondiente). Una vez que las cabritas de reemplazo han alcanzado un desarrollo y una condición corporal adecuadas, deben ser apareadas con machos adultos, los cuales hayan sido evaluados de manera previa (ver tecnología correspondiente), y cuenten con una alta capacidad de servicio, De preferencia, la proporción deberá ser alta, es decir, pocas hembras por chivo (Foto 6). Foto 6. Grupo de cabritas primalas con un semental adulto (cortesía de Alina Gómez A.). Ámbito de Aplicación. General: todas las unidades de producción que cuentan con un ciclo completo deben elegir, criar y preparar a sus cabritas de reemplazo. Fotos 5 a y b. Corrales de cabritas de reemplazo, las cuales reciben una dieta diferenciada (fotos cortesía de Eva Valdés L. y Alina Gómez A.). necesidades para su Aplicación. Esta tecnología puede ser aplicada por cualquier productor sin capacitación previa. Se necesitan insumos e infraestructura, así como asistencia técnica.

7 preparación de las cabras en el Momento del empadre y el parto José de Lucas Tron / tronj@unam.mx Profesores e investigadores de la FES Cuautitlán de la UNAM planteamiento del problema a Resolver, la necesidad o la oportunidad. Por una parte, la preparación de la cabra en el momento del empadre (o corrida, como se le conoce en algunos lugares) tiene dos objetivos: obtener la mejor tasa de fertilidad durante el empadre (la cual se mide por la cantidad de cabras paridas de las que se expusieron a los machos) y alcanzar la mejor prolificidad (medida por la cantidad de cabritos nacidos de las cabras que parieron) (Fotos 1 a y b). Por otra parte, el objetivo de preparar a la cabra en el momento del parto es mejorar el peso de los cabritos al nacer, aumentar su capacidad de sobrevivencia y tener una buena lactancia (cantidad y calidad de leche), que se traduzca en un peso alto de los cabritos en el momento del destete o bien en kg de leche producidos para su transformación o venta. Fotos 1 a y b. Cabras con trillizos producto de una buena preparación al momento del empadre y el parto (foto b cortesía de Eva Valdés L.) El apareamiento, el empadre o la corrida es la acción de juntar a los chivos con las cabras para que éstas sean servidas o apareadas y tengan crías. Se conoce como época de empadre al período que permanecerán los chivos con las cabras por decisión del productor o del técnico. La falta de preparación de las cabras al momento del empadre suele afectar la tasa reproductiva (fertilidad y prolificidad) del rebaño: Por esta razón, la preparación de las cabras, tanto antes, como durante el empadre, debe ser una práctica rutinaria de manejo reproductivo en el rebaño.

8 descripción de la Tecnología. Los aspectos más relevantes para la revisión de las cabras, antes del empadre y el parto, son los siguientes: Evaluar la condición corporal (estado de carnes o condición física; ver tecnología de cómo evaluarla). Determinar la edad (ver la tecnología correspondiente). Establecer la condición general de salud del animal y, en especial, de la ubre, de las patas y de la boca (estado de los dientes). preparación de las cabras Revisar la condición corporal. La condición corporal está muy relacionada con la tasa productiva del rebaño; por ejemplo, influye en la cantidad de cabritos que la cabra puede tener, por lo cual la condición de la cabra debe ser buena. La forma de evaluar la condición corporal es a través de un método de palpación, el cual consiste en tocar la región lumbar (zona de los riñones), así como la grupa y la región del encuentro, como se muestra en la Foto 2; esto permite determinar, a partir de la cantidad de músculo y de grasa con el que cuenten, si los animales están flacos, regularmente flacos, en buena condición, ligeramente gordos o gordos. En general, las cabras con buena condición física (por ejemplo, con una calificación de 3 a 4 (en una escala de 1 a 5)), quedan cubiertas (cargadas) con más facilidad y liberan más óvulos, por lo que pueden parir más cabritos. Las cabras flacas o muy gordas tienden a producir menos crías. Si la revisión muestra que las cabras están flacas y de todos modos se aparean, tardarán más en quedar cargadas y tendrán menos cabritos. Con el objetivo de corregir esta situación, se les debe ofrecer una buena alimentación, la cual permita mejorar el estado de carnes (ganancia de peso); de este modo se aumenta la fertilidad (cabras cargadas) y la cantidad de cabritos que nacerán (prolificidad). La pregunta que se puede hacer el productor es: si las cabras están flacas, durante cuánto tiempo, qué alimento y en qué cantidad se les debe dar? Existe una práctica de alimentación conocida como flushing (sobrealimentación), la cual consiste en proporcionar una suplementación (basada en un concentrado, forraje o pastoreo en praderas, de buena calidad), antes y durante el empadre, con el objetivo de que la cabra gane peso y mejore su condición corporal. En la Foto 3, se muestra un rebaño en una condición muy pobre, el cual está siendo preparando para el empadre y, en la Foto 4, se observa una canoa elaborada con materiales sencillos de PVC, madera y quiote, que servirá para la suplementación con melaza; en las Fotos 5 a y b, se muestra otro rebaño suplementado con bloques nutricionales, elaborados por los productores quienes contaron con el asesoramiento de una veterinaria. Foto 2. Evaluación de la condición corporal, palpando la región lumbar y la del encuentro. Foto 3. Rebaño en condición corporal pobre, el cual se va a preparar para el empadre.

9 El tiempo que se debe dar el suplemento está directamente relacionado con la condición corporal de la cabra. Por ejemplo, si la mayoría de las cabras están en una condición de 2, lo recomendable es suplementar durante unas 4 a 6 semanas antes y unas 4 a 6 semanas durante el empadre. Por el contrario, si la mayoría de las cabras están en una condición de 3, entonces bastará con dos semanas antes y tres o cuatro semanas después de iniciado el empadre. Foto 4. Suplementación con Melaza (fotos cortesía de Eva Valdés L.). Una forma práctica puede ser darles un suplemento compuesto por maíz (85%), pasta de soya (14%) y sales minerales (1%). Las cantidades varían de acuerdo al tamaño y peso de los animales (entre 300 g y 1 kg al día). No son lo mismo las cabras lecheras (como una Saanen, una Alpina o una Toggenburg), las cuales pesan de 50 a 60 kg y a veces más, a las Granadinas, las cuales pueden pesar de 35 a 45 kg. El técnico especialista en caprinos puede darle otras opciones de alimentación, además se puede consultar las tecnologías de alimentación. Dar de comer no es la única forma de mejorar la condición corporal, también es necesario eliminar los parásitos, dado que éstos afectan el apetito, quitan nutrientes y bajan de peso del animal. Es por esto que se requiere medicarlos contra los parásitos que tengan. Esto se logra revisando al animal para eliminar piojos, por ejemplo, o haciendo un análisis del excremento, luego de lo cual un médico veterinario puede recomendar medicamentos apropiados y asesorar acerca de las cantidades requeridas. no desparasitar adecuadamente puede significar tirar el alimento o el dinero de los medicamentos, además de una menor producción. Fotos 5 a y b. Rebaño en preparación para el parto, suplementado con bloques nutricionales (fotos cortesía de Eva Valdés L.). Un aspecto que debe ser cuidado es el estado de los dientes; muchas veces, el aprovechamiento de los alimentos no es el mejor, sobre todo en pastoreo, debido a que les faltan los dientes (Foto 6), que éstos se desgastaron (Foto 7) o que no coinciden con la parte superior de la boca (Foto 8). Una cabra con problemas de dientes tiene dificultades para obtener sus alimentos y masticarlos; los animales que presentan estas anormalidades deben ser eliminados del rebaño (ver tecnología sobre causas de eliminación).

10 Las cabras jóvenes requieren especial atención debido a que, en general, en el momento del empadre son menos atendidas por los chivos, tienen menor fertilidad y prolificidad, lo que se traduce en menos animales paridos y con menos cabritos. Parte del problema puede ser resuelto si las cabras son suplementadas para que ganen más peso y si se les colocan más chivos (principalmente adultos) en el momento del empadre. Si además se descuidan otros aspectos, como una buena alimentación al final de la gestación (4 a 6 semanas antes del parto), estas cabras pueden tener problemas en el momento del parto, dado que pueden abortar o bien predisponer la muerte de los cabritos. Para ver los cuidados y las recomendaciones para la cabra y el cabrito, se recomienda revisar la tecnología estrategia para disminuir la muerte en cabritos. Revisar el estado general de salud. Existen algunos padecimientos que afectan la salud de las cabras, los cuales deben ser considerados antes del empadre o del parto. Existen síndromes (enfermedades) como el de la cabra delgada (como las que se muestran en las Fotos 9 a y b), los cuales puede tener más de una causa y afectan, de manera permanente, la actividad reproductiva y productiva del animal, tales como la artritis encefalitis caprina, la paratuberculosis, la linfadenitis y otras (ver tecnologías sobre enfermedades), las cuales no pueden ser resueltas por medio de tratamientos y que, invariablemente, terminan con la muerte del animal. Cuando no se detecta o elimina a los animales enfermos en etapas tempranas y éstos permanecen dentro del rebaño de cría, afectan sus parámetros productivos y su salud. Por ello es importante el apoyo de diagnósticos tempranos y efectivos, así como la toma de medidas preventivas. Fotos 6, 7 y 8. Bocas de cabras con pérdida de piezas dentarias, desgaste o que no coinciden con el rodete dentario (fotos 6 y 8 cortesía de Alina Gómez A. y de Patricio Dayenoff, foto 7).

11 necesidades para su Aplicación. Es indispensable aprender a determinar, de manera acertada, la condición corporal (identificando las diferencias entre razas); revisar el estado de los dientes y determinar la edad para separar o marcar a las cabras jóvenes o primalas; revisar el estado general de salud del animal; invertir en alimentos suplementarios y medicamentos, así como en asistencia técnica calificada. Fotos 9 a y b (siguiente pág.). Hembras con síndrome de la cabra delgada (cortesía Eva Valdés Loranca)

12 preparación de los chivos para el empadre José de Lucas Tron / tronj@unam.mx Profesores e investigadores de la FES Cuautitlán de la UNAM planteamiento del problema a Resolver, la necesidad o la oportunidad. La preparación del empadre tiene como objetivo obtener la mejor tasa de fertilidad. Ésta se mide por la cantidad de chivas paridas, de las que estuvieron expuestas a los machos, durante la época de apareamiento o empadre. Asimismo, se tienen el objetivo de lograr la mejor prolificidad, medida por la cantidad de cabritos nacidos por cabra parida. El apareamiento o empadre es la acción de juntar a los chivos con las chivas para que éstas sean servidas o apareadas y tengan crías. Al período que los chivos y las cabras permanecerán juntos, ya sea por decisión del productor o del técnico, se le conoce como época de empadre. La presencia del chivo en el empadre influye de manera importante en la tasa reproductiva del rebaño, dado que, al tener que aparearse con muchas cabras, su objetivo debe ser dejarlas cargadas (gestantes). Es por eso que una fertilidad baja en el macho tiene repercusiones económicas muy importantes, dado que, al nacer menos cabritos o haber menos cabras paridas para ordeñar, los ingresos del productor son menores. Las causas por las que un chivo puede fallar en dejar cargadas a las cabras son diversas; por ello, se deben tomar las precauciones necesarias para evitar que esto suceda. descripción de la Tecnología. Para la preparación del empadre, se deben considerar los siguientes aspectos: Elegir la época de empadre (apareamiento). Decidir su duración, el número de cabras que se aparearán, el número de chivos que se utilizarán y el lugar dónde se llevará a cabo el apareamiento. Revisar los chivos antes del empadre (la edad, el aparato reproductor, la condición física, la actividad de monta). De ser necesario, revisar y preparar a los chivos (alimentación, patas, enfermedades, desparasitación). Preparar o arreglar los lugares donde se alojan los chivos (los corrales, las sombras, el agua y la comida). Revisar y preparar a las cabras. Contar con los apoyos para realizarlo, como petos marcadores o chivos marcadores. Por último, evaluar el empadre. Revisión y preparación de los chivos para el empadre.unas cuatro o seis semanas antes de empezar el empadre (o cuando se va a comprar un chivo), lo primero que se debe hacer es una revisión general del animal y, en especial, se debe revisar el aparato reproductor (es decir los testículos y el pene). Este procedimiento puede ser llevado a cabo por el técnico o el productor. Es imprescindible contar con cierta práctica para determinar si los animales son normales o si presentan anormalidades. La detección de cambios en la consistencia o forma del prepucio, del pene o de los testículos debe poner en alerta al productor y éste debe consultar a un técnico o médico especialista. Por desgracia, en muchas ocasiones, los cambios obedecen a infecciones. De éstas, la más frecuente en los testículos, es la brucelosis; sin embargo, las infecciones también pue-

13 den ser causadas por los golpes recibidos y éstos se curan con el tiempo. de cualquier manera, no es recomendable utilizar un animal con alteraciones en los testículos, el pene o el prepucio, mientras no se haya determinado cuál es la causa de dichas alteraciones. Si los testículos están normales, se debe tomar en cuenta su tamaño, dado que se sabe que, a mayor tamaño, aumenta la cantidad de cabras a las que pueden dejar gestantes. Con este objetivo, se toma una cinta métrica y se mide la parte media (el centro) de los dos testículos, tal como se muestra en la Foto 2; cuanto más grandes sean, será mejor (se debe tener cuidado que el tamaño no se deba a una enfermedad). Existen variaciones entre razas: no es lo mismo una Pigmea que una Saanen. Se cuenta con poca información acerca del tamaño mínimo recomendado, por ello lo mejor es elegir los de mayor circunferencia. La razón es que la circunferencia escrotal está relacionada con la cantidad de tejido testicular y éste con la cantidad de espermatozoides producidos; a menor circunferencia, menor producción de espermatozoides y viceversa, a mayor circunferencia, mayor producción: esto último se refleja en un mayor número de hembras preñadas y, por lo tanto, en una mejor fertilidad en el rebaño. Para revisar al chivo, es necesario sentarlo o colocarse detrás de éste; después, se colocan las manos desde la unión de los testículos con la pared del abdomen y, con las dos manos, se palpa hacia abajo, sintiendo y observando la consistencia, la forma y el tamaño, los cuales deben ser similares entre los dos testículos (Foto 1); se deberá prestar atención a la forma y a la consistencia de los epidídimos en la punta. Foto 2. Medición de la circunferencia escrotal. Las anormalidades más frecuentes son: la ausencia de uno o ambos testículos en la bolsa escrotal (piel que recubre a los testículos), como se muestra en la Foto 3; otras pueden ser que el tamaño sea pequeño; un aumento de tamaño de uno o los dos, con cambios de textura (dura o aguada), local o general; cambios de forma del testículo o los testículos, sobre todo en la parte más baja. Se debe revisar con cuidado, debido a que veces sólo está afectada la parte baja, la cual corresponde a la cola de los epidídimos. Foto 1. Revisión de testículos. Foto 3. Chivo sin testículos en la bolsa escrotal (conocido como criptorquideo).

14 Existen chivos que tienen los testículos separados (como se muestra en la Foto 4); algunos los relacionan con la forma de la ubre de las cabras o por tener una mejor respuesta al calor y a otros factores; sin embargo, hasta donde se sabe, no existen estudios sobre las relaciones entre esta característica y otras características productivas. Asimismo, si los testículos están sanos y tienen buen tamaño, el chivo puede ser utilizado sin ningún problema. En cuanto a la revisión del pene, ésta tiene que llevarse a cabo sacándolo del prepucio, con el objetivo de observar que esté en buenas condiciones. En la Foto 5, se puede observar un pene sano, el cual se caracteriza por su color rosado brillante (mientras que la punta o glande debe ser ligeramente más obscura) y la ausencia de lesiones. También es posible evaluar la calidad del semen (espermatozoides); sin embargo, esto requiere del apoyo de un técnico y de un equipo mínimo de laboratorio. Es altamente recomendable que se haga revisar una muestra del semen, si los chivos no están dejando preñadas a las cabras. preparación de los chivos para el empadre. Los chivos que van a ser utilizados en el empadre requieren de una preparación previa. Algunos aspectos que deben ser cuidados son los siguientes: Mantener a los chivos separados de las hembras. El empadre es una decisión del productor o del técnico y debe ser planificado con cuidado, para que se obtengan los máximos beneficios, ya sea en cuanto a la carne o a la leche. Revisar los testículos y el pene. Como ya se dijo, es importante revisar los testículos y el pene, para determinar si no tienen problemas. Foto 4. Testículos separados (cortesía de Rosa García) Foto 5. Pene sano sacado del prepucio para su revisión. condición corporal. Unas seis semanas antes del empadre, se debe revisar la condición corporal; si el chivo está flaco, es recomendable proporcionarle un suplemento con forraje de buena calidad y/o concentrado, el cual le permita ganar peso y condición. Se debe tener en cuenta que, durante la época de apareamiento, los animales adelgazan debido a que comen menos y al ejercicio que realizan. no es recomendable que los chivos se pongan gordos, porque esto también los afecta, dado que se cansan más rápido y sirven menos cabras (revisar la tecnología sobre evaluación de la condición corporal en cabras ). Revisar el estado general de salud de los animales. En el momento de evaluar al animal, se recomienda que se evalúe la condición física, se revise al animal y se verifique si están parasitados externamente y, si se sospecha que estén parasitados, por qué están flacos. De ser necesario, se deben tomar muestras de excremento para desparasitarlos y que así puedan aprovechar mejor el alimento y se repongan más rápido. La desparasitación se debe llevar a cabo con el objetivo de combatir los parásitos internos y externos presentes en la zona donde se encuentra el productor. Esto se puede determinar, enviando muestras de excremento a un laboratorio o bien

15 consultando a un técnico especialista, quien pueda indicar qué parásitos predominan en la zona o tienen los animales. Si el diagnóstico es positivo, entonces los animales deben ser desparasitados, ya sea interna o externamente o ambos, según sea el caso, o bien utilizar algún producto que desparasite sin bañar. Revisar las patas. Si las pezuñas están largas o deformes, será necesario recortarlas y darles forma. Este problema se presenta principalmente en chivos que están estabulados; es posible que los machos no monten a las cabras porque sienten dolor en sus patas o porque no son capaces de mantener un equilibrio adecuado. Las Fotos 6 a y b muestran unas pezuñas descuidadas, las cuales provocan que el animal camine mal y se apoye en un lado de la pezuña, mientras que la Foto 6 c muestra el recorte de pezuñas que se debe realizar para que recuperen su forma. Fotos 6 a, b y c. Pezuñas deformes de un semental, lo cual pueden afectar su monta (cortesía de Alina Gómez A.). Foto 7 Recorte de las pezuñas para que recuperen su forma. Revisar la boca. Al comprar un chivo o al elegirlo como semental, es necesario asegurarse que no presente problemas en la boca, similares a los se presentan en la tecnología de causas de eliminación en los caprinos, debido a que, si su alimentación se ve afectada, en especial si pastorea, puede trasmitirle estos problemas a las crías. Lo más recomendable es un chivo que cuente con todas sus piezas dentarias (de acuerdo a su edad), que éstas estén bien colocadas y que coincidan los dientes incisivos con el rodete dentario superior, como se muestra en la Foto 7. Foto 7. Chivo con dientes incisivos en buen estado y en su lugar. Revisar si los machos están montando. En el inicio del apareamiento, las cabras deben estar en estro (celo). Observe durante unos 30 minutos que el

16 chivo esté montando y sirviendo a las cabras; un chivo normal debe realizar unos tres servicios en este tiempo. La Foto 8 muestra un macho montando y eyaculando (sirviendo) una cabra. 2) Sombra. Si se trata de un potrero, éste debe contar con árboles; de lo contrario, se debe contar con un área techada dentro del corral, el cual puede ser de láminas que aíslen (por ejemplo de asbesto) o de varas o palma. Se debe tener en cuenta que las altas temperaturas afectan la fertilidad del chivo. Por esta razón, se debe cuidar que no estén expuestos a altas temperaturas, unos 50 días antes del empadre y durante éste. Es recomendable que los chivos estén en un lugar fresco y sombreado durante las horas más soleadas y de mayor temperatura. 3) Es muy conveniente que los chivos tengan a su disposición agua fresca y limpia, en todo momento. Foto 8. Macho montando las cabras al inicio del empadre. Revisar la edad de los chivos. En general, los jóvenes suelen tener un comportamiento reproductivo menor que los adultos, por lo cual, en el momento del empadre, se recomienda combinar un 25% de jóvenes con un 75% de adultos. Además se recomienda no poner chivos jóvenes sólo con hembras primerizas, ya que es preferible ponerlos con hembras adultas. 4) Se debe disponer de suficiente comida, ya sea forraje en un comedero o pasto en el potrero. Asimismo, es recomendable contar con sales minerales en un saladero (consultar con el técnico cuales son las recomendables). Las Fotos 9 a y b muestran corrales para chivos (macheros). Obsérvese que hay sombra y comederos, que el piso es de tierra y que hay suficiente espacio para que no estén apretados. el lugar de alojamiento de los chivos. Se deben considerar los cuatro elementos siguientes: 1) El corral o potrero donde se encuentran. Si se trata de un corral, éste debe ser amplio, para que los chivos puedan hacer ejercicio, y que cuente con un buen drenaje, es decir que no se acumule agua, lo cual podría causar enfermedades como el gabarro. De preferencia, el piso debe ser de tierra; se puede utilizar cemento en sitios donde el peligro de insolación sea mínimo o donde los animales estén a la sombra, para que el sol no eleve la temperatura del cemento. Fotos 9 a y b. Corrales de los sementales con características que no afectan su fertilidad (cortesía de Alina Gómez A.).

17 En resumen: es necesario revisar la condición general del chivo; para ello, se debe considerar su estado de carnes o condición física, la salud del aparato reproductor, la salud de las pezuñas, la edad, la boca (dientes incisivos) y que monte bien. necesidades para su Aplicación. Es indispensable aprender a determinar, de manera acertada, la condición corporal; revisar el aparato reproductor, con el objetivo de determinar anormalidades; revisar el estado general de la boca, el estado de los dientes y las anormalidades; determinar la edad, con el objetivo de darle trato especial a los chivos jóvenes; y, por último, revisar el estado general de salud del animal. Se debe contar con alimentos suplementarios y asistencia técnica, así como con las instalaciones adecuadas.

18 elección y realización de la época de empadre José de Lucas Tron / tronj@unam.mx Omar Salvador Flores / omsafl@hotmail.com Profesores e investigadores de la FES Cuautitlán de la UNAM planteamiento del problema que se debe resolver La elección de la época de apareamiento o empadre y la realización de dicha actividad son decisiones importantes que debe tomar el productor, como parte del manejo reproductivo de su rebaño. De la misma manera, como se ha señalado en otras tecnologías relacionadas con éste tema, la importancia del empadre radica en lograr la mayor cantidad de cabritos nacidos, si el objetivo es producir carne o la venta por kilogramos (si además se realizan los cuidados adecuados hasta el destete), mientras que, si el objetivo principal es la producción de leche, entonces, se podrá iniciar la lactación y se obtendrán buenas producciones y ganancias, si se tienen los cuidados adecuados durante la misma. En otras tecnologías, se señalan los aspectos que se deben cuidar para preparar a las cabras y a los chivos para el empadre. En este texto, se discutirá cómo elegir el momento (época) del empadre, la corrida o el apareamiento. descripción de la tecnología Para aplicar esta tecnología, es necesario conjuntar varios aspectos que han sido mencionados en otras tecnologías, como la evaluación de la condición corporal, la preparación de las cabras para el empadre y el parto, la preparación de los chivos para el empadre, las causas de eliminación de animales en el rebaño y las causas de mortalidad en los cabritos. Es por ello que, antes de aplicar esta tecnología, se recomienda su lectura y estudio. Existen tres aspectos que el productor debe tomar en consideración, al elegir una época de empadre: 1) Su rebaño debe alcanzar la mayor eficiencia reproductiva; esto se mide por: la tasa de fertilidad (las cabras paridas de las que estuvieron con los machos); de prolificidad (los cabritos nacidos de las cabras que parieron) y de cabritos destetados (cabritos logrados en el momento del destete de las cabras que estuvieron con los chivos). es fundamental recordar que cabras no paridas, pocos cabritos nacidos o poca leche producida (si ése es el objetivo) significan pérdidas importantes para el productor. 2) Se debe prever y cuidar que la alimentación sea suficiente y de buena calidad y que la sanidad del rebaño sea la adecuada, cuando las cabras estén en la última etapa de la gestación. De esta manera las cabras llegarán sanas, con buen peso (y/o buena condición física) y bien ubradas a los partos. 3) Es importante recordar que las cabras van a parir cinco meses después del empadre; por lo tanto, el productor debe estar seguro que el momento del nacimiento sea el más adecuado para que los cabritos puedan sobrevivir, dispongan de alimento y crezcan con facilidad y sanos. Una decisión incorrecta puede llevar a que la época de partos y de lactancia resulte un desgaste mayor para las cabras, tal como se muestra en la Foto 1.

19 que, dependiendo de la fecha en la que nazcan y de la raza a la que pertenezcan, podrán integrarse o no al rebaño de cría en su primer año. Esto es más claro en las razas cuya estación de apareamiento tiene una duración intermedia. Además de lo anterior, otro aspecto que debe ser considerado es si el productor quiere uno o más partos por año. Si se escoge que sea un parto anual, las siguientes recomendaciones pueden resultar útiles: Foto 1. Cabra Boer en lactancia. Esta cabra no fue preparada de manera adecuada durante la gestación y no recibe la cantidad y la calidad de alimento adecuado durante la lactancia. Conjuntar estos tres puntos no es sencillo, por lo que es necesario ajustar los diferentes aspectos que afectan a la reproducción, al decidir cuándo se llevará a cabo el empadre. Por ejemplo: - Que la época de apareamiento esté de acuerdo con la raza que se crie. La actividad reproductiva de las razas que existen en el país, principalmente las lecheras (Saanen, Toggenburg, Alpina y Anglonubia), disminuye entre los meses de febrero y mayo. Sin embargo, el comportamiento de las criollas es diferente. - Que en la zona o en el rancho se disponga alimento, tanto antes y durante el empadre, como en las etapas críticas de la gestación y de la lactancia. - Que el clima en el momento del parto sea óptimo o que se cuente con instalaciones en las que el animal se encuentre cómodo y protegido. - Que los problemas de sanidad sean menores, en especial, en la época de parición/lactancia. En ocasiones, existen aspectos prácticos, los cuales pueden influir en la decisión acerca de cuándo empadrar, por ejemplo, situaciones comerciales como: la demanda, la venta y el precio de los cabritos o de la leche, etcétera. Asimismo, la integración al rebaño de cría de las cabras de reemplazo puede pesar en la decisión, dado a) Si se quiere aumentar la probabilidad de que la mayoría de las cabras queden gestantes y se tengan partos múltiples, el empadre se debe realizar a la mitad de la estación de apareamiento. En la mayoría de las razas que se explotan en el país, este momento coincide con el otoño (de septiembre a diciembre). b) Se debe utilizar el "efecto macho". Aunque hay que tener en cuenta que da mejores resultados cuando se utiliza al inicio o final de la estación de apareamiento o cuando se emplea en cabras de razas con anestro estacional poco profundo. Su utilización resulta muy útil para estimular a las cabras en cualquier empadre y que así sea posible que los sementales detecten sus celos. Se recomienda separar a los machos, por lo menos con 20 días de anticipación, y elegir a aquéllos con buen apetito sexual o libido (que busquen a las hembras en estro, que las monten y que las sirvan) y, si es posible, utilizar a varios machos, para evitar los efectos de la poca estimulación provocados por las variaciones individuales (ver la tecnología Utilización del efecto macho para empadrar cabras fuera de la estación reproductiva). c) Si las cabras están delgadas, se las debe suplementar, antes y durante el empadre, para mejorar la tasa de fertilidad y de prolificidad. Es recomendable evaluar la condición física del animal (Foto 2; ver la tecnología Estimación de la condición corporal en caprinos), unas 6 semanas antes del inicio del empadre; si la condición es mala, se debe suplementar con un alimento que

20 les haga ganar peso y condición (ver tecnología Preparación de las cabras para el empadre y el parto). Una vez iniciado el empadre, se debe mantener la suplementación, pero evitando la sobrealimentación. Por el contrario, si, al llevar a cabo la evaluación (6 semanas antes del empadre), los animales están muy gordos, se les debe disminuir el alimento, para reducir su condición (alcanzar 3 ó 4). d) Cuidar y preparar a los chivos (revisar la tecnología Preparación de los chivos para el empadre). e) Eliminar animales con posibles problemas reproductivos (revisar la tecnología Causas de eliminación o descarte en el ganado caprino). Foto 3. Cabra con tres cabritos, producto de una buena elección de la época de apareamiento y de cuidados de la cabra y del chivo, antes y durante el empadre. f) Se debe colocar una proporción adecuada de machos (al menos 3 por cada 100 cabras); si se usan menos, se debe evaluar de manera adecuada el tamaño testicular, el apetito sexual, el estado físico o de carnes, la salud general y, si es factible, la calidad del semen (ver tecnología..) Foto 4. Cabras Boer en lactancia, las cuales mantienen una condición corporal aceptable, debido a que se cuidó el rebaño de cría, durante la gestación y la lactancia. Foto 2. Evaluación de la condición corporal antes del empadre. Cuando se ponen en práctica todas o la mayoría de estas recomendaciones, se logran partos con varios cabritos, como la cabra que se muestra en la Foto 3. Asimismo, pueden tener una mejor lactancia, lo cual se refleja en un buen crecimiento de los cabritos y un menor desgaste de las cabras, como se muestra en la Foto 4. Si el objetivo es obtener más de un parto al año o distribuir a las cabras en más de una época de parición (ya sea para tener cabritos en diferentes épocas o para tener producciones de leche más amplias), entonces, se recomienda: a) Además de utilizar el efecto macho, si es necesario, se debe suplementar a las cabras y colocar una buena cantidad de machos. b) En este sistema de apareamiento, el tema de la alimentación es especialmente importante, debido a que los períodos de suplementación son mayores, lo cual puede resultar en un aumento de los costos de producción.

21 c) En la medida de lo posible, elegir, animales de estación de apareamiento larga (por ejemplo, las cabras criollas). d) Elegir las épocas de apareamiento, aunque casi siempre una o dos serán buenas y la tercera será regular o mala. Por ejemplo, si se buscan tres partos en dos años (es decir, empadres cada 8 meses), una posibilidad sería: empadre en noviembre (buena), empadre en marzo (mala a regular), empadre en julio (regular a buena). e) Para evitar lo anterior, en algunas explotaciones, el rebaño se divide en dos, lo que permite tener empadres casi cada 4 meses, de tal manera que se vuelve a aparear a las cabras que no quedan cargadas en el siguiente ciclo, evitando que pasen muchos meses sin parir. Asimismo, este método ayuda a que no se desordene el rebaño y a que se mantenga el control del mismo. f) Otro aspecto que se debe considerar es que el ganado debe estar sometido a controles muy estrictos (identificación, registros) o, de lo contrario, se puede provocar un desorden en el rebaño. g) Es importante tener en cuenta que este sistema de apareamiento sólo es recomendable, cuando se cumplen los puntos anteriores; de lo contrario, se puede generar un desorden en el rebaño. Asimismo, para mantener este sistema de empadres intensivos es necesario considerar: a) Cruzar el rebaño con sementales de razas de estación de apareamiento larga. En el término de 4 a 7 años, se han obtenido buenos resultados con los programas dirigidos al cambio de la estación de apareamiento. b) Seleccionar aquellas cabras que tengan una estación de apareamiento larga y, de preferencia, utilizarlas en los programas de cruzamiento. c) Elegir a los cabritos destinados a ser sementales y a las cabritas de reemplazo entre de aquéllos nacidos en la época que se desea modificar. Por ejemplo; si se buscan partos en otoño, elegir a los nacidos en esta época. d) Para poder determinar lo anterior, es recomendable contar con alguna forma de identificación y de registro de los animales, la cual permita conocer, además de estos aspectos, otros muy importantes, como, por ejemplo, si la cabra parió o no, cuántos cabritos tuvo, si los crió o se le murieron, qué edad tiene, etcétera. duración de la época de empadre Una pregunta frecuente es cuánto tiempo se debe dejar a los chivos con las cabras durante el empadre. La respuesta debe tener en cuenta lo siguiente: En primer lugar, los machos deben permanecer con las hembras el tiempo suficiente como para que tanto él como los otros chivos puedan servirlas a todas o la mayoría. Para que exista la probabilidad de que esto suceda, los machos y las hembras deben permanecer juntos por un mínimo de 20 a 21 días; éste es el período comprendido entre un celo (estro) y otro. Este tiempo debería ser suficiente para permitir que cada cabra presente al menos un celo; sin embargo, dado que no se puede garantizar que la cabra haya tenido el celo o que el macho lo haya detectado, se recomienda que, al menos, se le dé a cada cabra 2 (40 a 42 días) o 3 (60 a 64 días) oportunidades para ser servida. Algunos productores escogen 50 días (casi dos celos y medio por cabra). En segundo lugar, los animales deberían ser manejados como rebaño y no de manera individual. Es por eso que uno de los objetivos de definir la duración del apareamiento es posibilitar la programación de eventos que, con posterioridad, serán sumamente importantes, por ejemplo: poder preparar la alimentación del rebaño cuando está próximo el parto, preparar las vacunas, los sitios donde van a parir y al personal necesario para atender los partos. El mismo productor debe estar atento, para cuidar que no haya problemas y evitar que se mueran los cabritos, para poder realizar los destetes en grupo, ya sea para la venta o para darles el mismo alimento a los cabritos, durante y después de la lactancia, si van para engorda.

22 Tener cabras pariendo durante meses, sin poder determinar a ciencia cierta en qué fecha lo harán, impide atenderlas de manera adecuada. Para evitar esta situación caótica, el productor debe llevar un registro meticuloso de su rebaño o, de lo contrario, no podrá poner en práctica ninguna medida de manejo que le permita controlar y mejorar su producción. Los empadres muy largos no son recomendables, debido a que lo que se busca justamente, es mejorar la atención a los animales y esto se logra concentrando los partos. cuidados durante el empadre Una recomendación importante a tener en cuenta es en qué sitio se debe llevar a cabo el empadre. De preferencia, debe ser un corral amplio o un potrero o un área de pastoreo relativamente pequeña, con el fin de que el macho (o los machos) esté(n) cerca de las hembras que van entrando en celo (estro) y que las detecten, las monten y las sirvan, como se muestra en la Foto 5. es importante recordar que el primer objetivo del empadre es, precisamente, que el macho sirva a las cabras. Otra práctica recomendable es colocarle al chivo un peto con crayón, también conocido como arnés con crayón o chaleco con crayón (ver tecnología Diagnóstico de gestación en las cabras). Esto le permite al productor identificar a las cabras montadas, porque, cada vez que el macho monte una cabra, dejará una marca en la grupa. La Foto 6 muestra un chivo con peto y cómo quedan marcadas las cabras. Si no se cuenta con petos, una alternativa es aplicar una pasta de anilina (pintura para cemento) mezclada con aceite de coche, la cual se coloca en el pecho de los chivos todos los días, para que, de esta manera, marquen a las cabras. Las marcas ayudan a saber si el macho está o no montando; asimismo permiten detectar cuáles las cabras ya han sido montadas y/o servidas.. Las marcas también facilitan saber, a los días, cómo va el apareamiento de acuerdo al número de hembras marcadas, además que permiten observar si más de un chivo sirvió a una misma cabra y cuál de éstos está trabajando mejor, con base en el color de su crayón. Si después de 20 a -21 días, las cabras vuelven presentar marcas, se debe a que están repitiendo el celo, lo cual indica que el chivo puede estar fallando en servir o dejar gestantes a las cabras. Foto 6. Chivo con peto y cabra marcada con pintura del crayón. Foto 5. Sementales con un grupo de cabras en un corral; esto facilita la búsqueda y la monta. Obsérvese cómo el semental está oliendo a una cabra y ésta voltea a verlo. La detección a tiempo de las fallas puede permitir que el productor cambie de semental, evitando así que fracase el empadre. Casi siempre que una cabra es marcada por un macho fértil, la probabilidad de que quede cargada (gestante) es alta. Recomendaciones generales A continuación se presenta un resumen de los cuidados y recomendaciones hechas aquí.