El trabajo en equipo, diagnóstico y estrategias docentes de motivación en el Grado de Comunicación Audiovisual

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1 El trabajo en equipo, diagnóstico y estrategias docentes de motivación en el Grado de Comunicación Audiovisual Mª del Rosario Luna - Universidad de Extremadura mrluna@alcazaba.unex.es Guadalupe Meléndez González-Haba Universidad de Extremadura gmelgon@alcazaba.unex.es Resumen: Para el área de Comunicación Audiovisual el trabajo en equipo no es solo una competencia transversal orientada hacia la formación integral de las personas, involucra también a la formación profesional de los alumnos. No es factible integrar el mercado laboral de la comunicación audiovisual sin el dominio de esta competencia. Sin embargo, el trabajo en equipo es concebido por los estudiantes universitarios como una simple suma de las partes y no logran experimentar el sentido de pertenencia ante un objetivo en común. La comunicación plantea parte de los resultados obtenidos por un Grupo de Innovación Docente compuesto por profesores del Grado de Comunicación Audiovisual de la Universidad de Extremadura. Durante el desarrollo de la tarea se aplicó un instrumento de diagnóstico sobre las competencias que dominan los estudiantes para la resolución de trabajos en equipo. Los datos obtenidos arrojan resultados significativos. Las mayores dificultades detectadas parten de la percepción del trabajo en equipo como un problema, y de la incapacidad de valorar el resultado final de este modo de hacer de forma positiva. Sin embargo, una vez puesta en marcha la motivación -fundamentada en las condiciones actuales que rigen el mercado laboral- la percepción de los alumnos se ha visto modificada mostrándose éstos mejor predispuestos a realizar tareas en equipo. Palabras clave: trabajo en equipo, competencias profesionales, diagnóstico de competencias. ISBN-13: / D.L.: TF Página 1

2 1. Introducción El trabajo en equipo es concebido por los estudiantes universitarios como una simple suma de partes, resultando muy complicado que lleguen a interiorizar la cultura del consenso, que experimenten el sentido de pertenencia ante un objetivo en común o sean capaces de aplicar reglas de actuación para el logro de una meta. Estudios previos afirman que las competencias de trabajo en equipo no son alcanzadas por gran parte de los alumnos universitarios, pero hay titulaciones en las que este hecho cobra especial relevancia. En el área de Comunicación Audiovisual y Publicidad, el trabajo en equipo no es sólo una competencia transversal orientada hacia la formación integral de las personas, sino que afecta directamente a la formación profesional en tanto no es factible integrar el mercado laboral de la comunicación audiovisual sin el dominio de esta habilidad. Además, la responsabilidad del desarrollo de estas competencias no depende solo del alumno, sino que se deriva de los planteamientos pedagógicos del profesorado. Sin embargo, como paso previo a mejorar el rendimiento académico de los alumnos y formarlos para favorecer su desempeño profesional eficaz, se hace necesario que los profesores se perfeccionen en el ejercicio de educar tomando como punto de partida la realización de un diagnóstico de la situación actual de los estudiantes y el autoconocimiento que tiene de sus propias competencias y habilidades sociales. Los resultados de este estudio parten de un grupo de innovación docente de profesores del Grado de Comunicación Audiovisual de la UEx, que aplicaron un cuestionario como instrumento de diagnóstico sobre las competencias que dominan los estudiantes relacionadas con la resolución de trabajos en equipo. Un total de 125 alumnos pertenecientes a cuatro asignaturas diferentes impartidas durante el curso 2011/2012 participaron en el estudio. Los datos obtenidos arrojan resultados significativos, y si bien el uso de un cuestionario de autoevaluación de competencias tiene el riesgo de que los alumnos, con buen concepto de sí mismos, tienda a puntuarse bien, se revela que la sensibilización de los alumnos con respecto a la importancia del trabajo en equipo es un paso imprescindible para romper con los prejuicios y resistencias sobre el desarrollo de esta modalidad de trabajo. Las mayores dificultades detectadas parten de su percepción del trabajo en grupo como un problema, y la incapacidad de valorar el resultado final de manera motivadora. Sin embargo, una vez puesta en marcha la motivación, fundamentada en las condiciones actuales que rigen el mercado laboral, la percepción de esta competencia cambia. Resulta importante destacar que toda actividad planteada con un objetivo final, es mejor percibida por los alumnos que se muestran más predispuestos a desarrollarla, sumando resultados de aprendizaje positivos y conduciendo a la vez, a un posicionamiento diferente al inicial sobre lo que consideraban trabajo en equipo. ISBN-13: / D.L.: TF Página 2

3 2. Objetivos Los objetivos de este estudio se inician con la conformación de un grupo de innovación docente integrado por profesores del Grado de Comunicación Audiovisual de la Universidad de Extremadura, que comprometidos con la tarea de fomentar el trabajo en equipo entre los estudiantes de la titulación, proponen un diagnóstico previo de las competencias de sus alumnos en este ámbito. Evaluando los resultados obtenidos en el cuestionario de diagnóstico, se procede a la reflexión conjunta de los datos, con el fin de conocer qué metodologías pueden resultar más adecuadas para el desarrollo de estas competencias y definiendo nuevos procedimientos para aplicar en un futuro, con el fin último de mejorar los resultados del rendimiento académico de los alumnos, formándolos para favorecer su desempeño profesional eficaz. 3. Metodología Para el diseño del instrumento de diagnóstico se revisó bibliografía específica en la temática y finalmente el equipo se centró en dos documentos: - Escalona, A. I, Loscertales, B., Climent, E. y Cuadrat, J.M. (2007): Diseño, aplicación y difusión de estrategias ECTS para la mejora docente en Geografía. Universidad de Zaragoza, Convocatoria de Ayudas 2006 del Plan de Mejora Docente y Académica de la Universidad de Zaragoza (proyecto en curso). Basado en GIDOCUZ (Escalona, A; Loscertales, B; Lardiés, R. y Lacosta, A.) (2003): Aportación metodológica para favorecer el aprendizaje de competencias genéricas en la licenciatura de Geografía. En Marrón Gaite, Mª.J., Moraleda Nieto, C. y Rodríguez de Gracia, H. (eds.): La enseñanza de la Geografía ante las nuevas demandas sociales. Toledo, Grupo de Didáctica de la Asociación de Geógrafos Españoles, Universidad de Castilla-La Mancha y Escuela Universitaria de Magisterio de Toledo, Sancho Saiz, J. y otros: La formación de trabajo en equipo del alumnado universitario con el aprendizaje cooperativo. En: giac.upc.es/jac10/09/doc_43.pdf Los documentos analizados dieron como resultado una nueva plantilla en la que se dejaron fuera algunas variables que se consideraban poco específicas en el contexto de nuestro estudio. Al mismo tiempo, se agregaron a los modelos de partida algunos ítems nuevos. Las variables que finalmente se aplicaron se agrupaban en cinco grupos: creación de equipos, gestión de conflictos en el equipo, organización y toma de decisiones, evaluación del trabajo en equipo y por último, creamos un apartado que valoraba las competencias del trabajo en equipo en el marco específico de las profesiones relacionadas con la titulación. En total 39 cuestiones codificadas en un cuestionario de tipo Likert que se aplicó a 125 alumnos del Grado de Comunicación Audiovisual, que estuvieron divididos por cursos y asignaturas (Tabla 1). Los alumnos de 2º y 3er curso fueron los más numerosos, acumulando el 84% de la muestra total. Los alumnos de 4º curso, fraccionados en dos asignaturas, sumaron un porcentaje menos significativo. ISBN-13: / D.L.: TF Página 3

4 ASIGNATURA CURSO Nº ALUMNOS % % acumulado Evolución de las Representaciones Icónicas Programación Audiovisual Información Audiovisual Online 4 8 6,4 90,4 Estructura del Sistema Audiovisual ,6 100 TOTAL ALUMNOS PARTICIPANTES Tabla 1. Reparto de alumnos participantes por asignatura y curso. A pesar que la plantilla ya había sido utilizada por otros grupos de investigación, una vez definida la plantilla definitiva con nuevas variables, se creyó oportuno volver a validarla, y se consultó acerca de la fiabilidad del instrumento de diagnóstico a diversos expertos. Los expertos consultados coincidieron en que la plantilla era adecuada, pero demasiado extensa, realizando la recomendación de efectuar una versión más reducida de la misma. Otra de las limitaciones que encontraron en la investigación, se basó en el hecho de estimar que un autoinforme es un instrumento pertinente para evaluar opiniones y actitudes pero posiblemente no sea la mejor herramienta para evaluar competencias. Es cierto, que el concepto de competencias implica un conjunto de habilidades que afectan a distintas dimensiones (cognitiva, destrezas, valores) y la mejor manera de comprobar su adquisición es en el hacer. Sin embargo el planteamiento de la investigación, los tiempos y los medios con los que contaba el grupo no permitían cambiar el enfoque inicial, el que por otra parte, como ha quedado expresado estaba basado en investigaciones previas. Una vez completados los cuestionarios por los alumnos, se tabularon los datos en una base de datos Excel, y a partir de la estadística descriptiva, se obtuvieron los resultados de la investigación. 4. Resultados En las preguntas que se referían a la creación del grupo, había un claro porcentaje de los alumnos que se inclinaban por el trabajo individual frente al trabajo en equipo, siendo un mínimo grupo el que prefería la opción grupal. La misma valoración tuvo la aceptación de cualquier perfil de trabajo: se percibe que no presenta ningún problema aceptar a los componentes impuestos, aunque son ellos los que claramente prefieren elegir a sus compañeros de trabajo antes de que les sean impuestos. Con respecto a la integración propia, son bastantes positivos y los resultados indican que no tienen problemas a la hora de integrar un proyecto. Por el contrario, cuando se trata de integrar a otros compañeros con dificultades, no se muestran tan optimistas y reconocen sus dificultades. ISBN-13: / D.L.: TF Página 4

5 Con respecto a los posibles conflictos que pudieran surgir durante el trabajo en equipo, con un alto porcentaje, los alumnos se ven capacitados para resolver los conflictos que pudieran surgir en las diferentes etapas por las que pasa un trabajo en grupo, así como para, de manera casi unánime, reconocer de manera positiva el trabajo de los compañeros, actuar de manera tolerante y compartir los derechos y deberes con ellos. De igual manera, reconocen su empatía y asertividad, así como su capacidad de negociación, apareciendo un grupo apenas representativo que afirma no tener esas habilidades. Quizás es en las últimas cuestiones, referidas a las críticas y a los problemas personales, cuando son más autocríticos con ellos mismos y expresan resultados más repartidos entre las posibles respuestas. En las cuestiones relativas a la planificación y organización de las tareas del trabajo del equipo, llama la atención, que si bien los alumnos creen que planifican bien a la hora de afrontar un trabajo en equipo, un numeroso porcentaje de ellos manifiesta su acuerdo con la premisa que sostiene que el tiempo invertido en un trabajo de este tipo, es mayor al que se realiza individualmente. Además, los resultados para la implicación entre uno y otro, no parecen mostrar una opinión representativa. Sin embargo, de nuevo reconocen su responsabilidad y flexibilidad y colaboración, algo que parece contradecirse con cuestiones anteriores, como la de la implicación o tiempo invertido. Los estudiantes aceptan bien opiniones e ideas de compañeros, así como información relevante para el desarrollo del trabajo. Incluso un buen porcentaje de ellos reconoce anteponer los intereses comunes a los individuales, aunque manifiestan tener dificultades a la hora de tomar decisiones consensuadas por todos los miembros del grupo. Por último, nos parece importante destacar, que los alumnos ante la innovación en trabajo de grupo o individual no pronuncian resultados unánimes, debatiéndose entre las posibles respuestas. En lo referente a la manera de evaluar el trabajo en equipo, revelan la preocupación por la totalidad del resultado, y no solo por la parte asignada, así como la capacidad de asumir las consecuencias que pueden derivarse de las acciones del grupo. Por último, en los resultados pertenecientes a la categoría que relaciona la importancia del trabajo en equipo con las profesiones más específicas del sector audiovisual y que desempeñarían como futuros titulados en Comunicación Audiovisual, los alumnos, son unánimes: la mayoría reconocen la importancia del trabajo en equipo como habilidad para desempeñar un trabajo. Sin embargo, y aunque en menor medida, un buen porcentaje cree que este tipo de dinámicas repercute positivamente en la calidad del resultado final. 5. Conclusiones El uso de un cuestionario de autoevaluación, una vez comprobada su eficacia, quizás no se configura como la mejor herramienta de diagnóstico para la evaluación de competencias del alumnado. O al menos, no la única a utilizarse. Los alumnos, independientemente del trabajo que realicen siempre van a verse con competencias desarrolladas y por ello tenderán a darse a sí mismos, una ISBN-13: / D.L.: TF Página 5

6 buena puntuación. Es cierto que en el caso de los alumnos de último curso - consecuencia quizá de un mayor grado de conciencia y evaluación personallos resultados se ajustan más a la realidad de las dinámicas de las clases, y su evaluación coincide con los trabajos realizados. Sin embargo, para futuros proyectos en esta línea de investigación, proponemos herramientas de diagnóstico que partan del profesor para que sea él, o en ocasiones otros alumnos, los que evalúen el trabajo en equipo. En este sentido, las rúbricas de trabajo en equipo se configuran como buenas herramientas de uso. La sensibilización de los alumnos con respecto a la importancia del trabajo en equipo resulta imprescindible para romper con los prejuicios y resistencias que poseen sobre esta modalidad de trabajo. Ya ha quedado demostrado en las mediciones que perciben el trabajo en grupo como un problema, incluso cuando han elegido ellos mismos a los miembros de su equipo. La dificultad se plantea por no considerar al trabajo como algo útil (mas allá de la nota), ilusionante y motivador. Además la percepción de implicación desigual de los miembros del equipo en cada trabajo es el principal foco de conflicto entre ellos. Solo ante actividades muy motivadoras para ellos son capaces sin problemas de coordinarse, dar lo mejor y trabajar a favor del equipo (y no de uno mismo). Una vez puesta en marcha la motivación fundamentada en las condiciones reinantes en el mercado laboral no ha sido difícil lograr que se muestren receptivos a desarrollar la competencia de cara al futuro profesional. Nos parece importante destacar que toda actividad planteada con un objetivo y una utilidad final, es mucho mejor recibida por los alumnos mostrándose más y mejor predispuestos a desarrollarla. Si además las dinámicas acarrean resultados de aprendizaje positivos conducirían a un posicionamiento y percepción diferente a lo que consideran es el trabajo en equipo. Por último, con respecto al profesorado participante en el proyecto, queremos destacar que la implementación de las técnicas de trabajo cooperativo y colaborativo es muy importante para el desarrollo de las competencias de los alumnos, pero es imprescindible el trabajo en paralelo a una mayor formación del profesorado en estas técnicas y una adaptación de los espacios y aulas en las que se imparten las clases, para un mejor desarrollo de las dinámicas que conduzcan a resultados satisfactorios. Además resulta evidente que ese trabajo y formación debe realizarse de manera conjunta en tanto la coherencia, permanencia y sistematicidad de las acciones multiplican favorablemente los resultados. El trabajo en quipo en torno a un proyecto por parte del profesorado compromete. La experiencia compartida anima repercutiendo en la motivación personal y la implicancia conjunta. 6. Referencias bibliográficas Escalona, A. I, Loscertales, B., Climent, E. y Cuadrat, J.M. (2007): Diseño, aplicación y difusión de estrategias ECTS para la mejora docente en Geografía. Universidad de Zaragoza, Convocatoria de Ayudas 2006 del Plan de Mejora Docente y Académica de la Universidad de Zaragoza (proyecto en ISBN-13: / D.L.: TF Página 6

7 curso). Basado en GIDOCUZ (Escalona, A; Loscertales, B; Lardiés, R. y Lacosta, A.) (2003): Aportación metodológica para favorecer el aprendizaje de competencias genéricas en la licenciatura de Geografía. En Marrón Gaite, Mª.J., Moraleda Nieto, C. y Rodríguez de Gracia, H. (eds.): La enseñanza de la Geografía ante las nuevas demandas sociales. Toledo, Grupo de Didáctica de la Asociación de Geógrafos Españoles, Universidad de Castilla-La Mancha y Escuela Universitaria de Magisterio de Toledo, Sancho Saiz, J. y otros: La formación de trabajo en equipo del alumnado universitario con el aprendizaje cooperativo. En: giac.upc.es/jac10/09/doc_43.pdf Ayestarán, S., Aritzeta, A. y Gavilanes, J. (2006). Rumbo a la innovación. Trabajo en equipos y cambio cultural en las organizaciones. Zamudio: Cluster del Conocimiento. Barnett, L. (2004). Motivación, tratamiento de la diversidad y rendimiento académico: el aprendizaje cooperativo. Barcelona: Graó. Luna, M. del Rosario (2008): La enseñanza audiovisual para el fomento de competencias múltiples. Comunicar Revista Científica Iberoamericana de Comunicación y Educación, 31, XVI, Septiembre de Trujillo, F. y Ariza, M. A (2006). Experiencias educativas en aprendizaje cooperativo. Granada: Grupo Editorial Universitario. * La realización de este trabajo ha sido financiado con las Ayudas para el Catálogo de Grupos de Investigación del Gobierno de Extremadura y el Fondo Social Europeo en la convocatoria ISBN-13: / D.L.: TF Página 7