PROBLEMAS DE LA COMERCIALIZACIÓN DEL PESCADO EN CANARIAS. Miembros del CCR- Sur de Canarias.

Transcripción

1 PROBLEMAS DE LA COMERCIALIZACIÓN DEL PESCADO EN CANARIAS. Miembros del CCR- Sur de Canarias. 1.- INTRODUCCIÓN. OBJETIVO DE ESTE INFORME. El Caladero de pesca canario se caracteriza por la escasez de sus plataformas insulares, lo cual limita la abundancia de recursos demersales (de fondo) y por la escasa productividad primaria de sus aguas (aguas oligotróficas). Ello determina que la producción pesquera no sea abundante. Según consta en la página Web de la Viceconsejería de Pesca del Gobierno de Canarias en el año 2009 la producción de pesca fresca fue de unas 9000 toneladas (unas de pescado pelágico y unas de pescado demersal). El Caladero de pesca canario, por sus características (escasas plataformas y aguas oligotróficas) es un caladero poco productivo. En el año 2009 (datos pág Web de la Viceconsejería de Pesca del Gobierno de Canarias) la producción de pesca fresca fue de unas 9000 toneladas (unas de pescado pelágico y unas de pescado demersal). La flota canaria está compuesta por unos 950 barcos. Dentro de esta podemos diferenciar básicamente dos tipos de flota: - La flota artesanal costera: unos 900 barcos de pequeño porte (menos de 10 m.), realizan pesca del día, normalmente se organizan en Cofradías de Pescadores donde realizan la primera venta, algunas lo hacen a través de OPEPS. - La flota atunera cañera: unos 30 barcos de mayores dimensiones (de 15 a 30 m.), realizan mareas de varios días en aguas canarias y los de mayor porte faenan en Marruecos, Madeira, etc. Normalmente se asocian y organizan a través de O.P.E.P.S. La mayor profesionalización de estas organizaciones permite comercializar sus productos a nivel local, nacional e internacional, tanto en fresco como en congelado. En este informe nos centraremos especialmente en la comercialización del pescado fresco canario aportado por ambos tipos de flota. La producción anual, no cubre la demanda de consumo local. La globalización del mercado permite dos competidores claros. El pescado fresco africano (Marruecos, Mauritania y Senegal), llega diariamente a través de aeropuertos. En el año en el aeropuerto de Las Palmas se descargaron más de toneladas. Las importaciones de pescado congelado de algunas especies de terceros países como el panga, la perca, etc. compiten duramente en algunos canales de comercialización: catering escolar, restauración y hostelería, etc. 2º) Análisis de los problemas que afectan a la comercialización del pescado fresco canario y sus posibles soluciones. A continuación analizaremos los problemas y sus posibles soluciones, indicando cuales son específicos de Cofradías o de OPEPS y cuales son comunes. Principalmente cabe destacar: 1.- Falta de una identificación clara que permita diferenciar el pescado fresco canario (Cofradías y OPEPS). 1

2 Descripción del problema: La actual normativa comunitaria y nacional sobre el etiquetado solo obliga a reflejar como zona de captura o cría, grandes zonas de pesca FAO. El pescado fresco canario y el africano cercano (Marruecos, Mauritania, Senegal, etc.) se engloban en la zona FAO 34. El consumidor no conoce estas zonas, y aunque las conociese no podría saber cuando es de Canarias o de estos países. Muchas especies canarias son las mismas. El pescado canario suele ser más fresco, normalmente del día y resulta de mayor calidad. Por ello, podría tener un cierto mercado en aquellos consumidores dispuestos a pagar un sobreprecio por él. Sin embargo, en la práctica, algunos distribuidores venden pescado africano como pescado canario, otros mezclan pescados de ambas procedencias. Posibles soluciones: Un cambio de normativa en el etiquetado que exigiese detallar más la zona de Captura o cría. Otra opción sería que el Gobierno de Canarias, desarrollase una marca de calidad para el pescado canario. Pensamos que la mejor opción sería una marca estilo PescadeRías, puesto que engloba origen, sostenibilidad y además exige unos standards de calidad en la pesca y comercialización de los productos pesqueros. Por lo que se abarcaría un amplio rango de consumidores tipo. 2.- Escaso control del mercado local y de los precios (Cofradías). Descripción del problema: En muchas Cofradías unos pocos compradores de pescado adquieren la totalidad de la producción diaria. Imponen unos precios fijos, que no han aumentado prácticamente nada con el tiempo. Suelen vender en cadenas muy cortas, directamente a mercados centrales, restaurantes, etc., obteniendo unos beneficios máximos, hasta un 300% en restaurantes. Además algunos de ellos importan partidas de pescado, por lo que su demanda al sector puede depender de la venta de estas. Este monopolio de la pesca local impide vender en grandes superficies, que necesitan garantizarse un suministro continuo. En muchos casos el pescador se resigna a estos precios injustos, porque se garantiza que va a cobrar de forma regular, teniendo la venta de la pesca asegurada antes de llegar a puerto. Pero, dados los bajos precios, en ocasiones sobreexplota el recurso para tener unos beneficios mínimos. Posibles soluciones: En general es conveniente una mayor profesionalización de las Cofradías en la comercialización. Muchos patrones y/o secretarios dedican mucho esfuerzo a asegurar el pago de los compradores, a intentar colocar todo su pescado, etc. Se barajan las siguientes soluciones generales: unir puntos de primera venta a nivel insular y en este caso posible reconversión de Cofradías a OPEPS y contratación de comerciales experimentados, desarrollo de una lonja virtual para favorecer el mercado a nivel regional. Es necesario analizar en cada caso estas posibilidades y otras. 3.- Canales de comercialización. Grandes superficies, pescaderías de las Cofradías, pescaderías locales y mercado en el interior (Cofradías y OPEPS). Descripción del problema: El pescado canario fresco se adquiere principalmente en las pescaderías de las propias cofradías, en las pescaderías tradicionales y rara vez en grandes superficies. El problema es que muy pocas Cofradías tienen pescadería. Y en ocasiones por una mala gestión terminan siendo traspasadas, perdiéndose la vinculación con el sector. Además las pescaderías locales tienden a desaparecer, manteniéndose muy pocas, la mayoría en los mercados locales. Los supermercados de cercanía (los de barrio) han eliminado la pescadería y se han reducido prácticamente a nivel de grandes supermercados y superficies. 2

3 Respecto a las grandes superficies, cabe destacar que algunas Cofradías, a base de constancia y de asegurar la calidad de su pesca se han hecho hueco en este mercado, introduciendo pelágicos pequeños y medianos y algunas especies de demersal: viejas, samas, etc. Ello resulta positivo, pero consideramos que no se debe depender exclusivamente de estas y conviene seleccionarlas, ya que en algunas el pescado es usado como reclamo en las ofertas. Esto va en contra de la imagen que se le debe dar al pescado, como producto de calidad. Tanto en las grandes superficies, como en otros canales (catering), por su bajo precio, están comprando más especies foráneas, que locales. El precio de sus transformados hace difícil competir con estos productos. En algunas islas, en muchas zonas de interior no hay ni pescaderías y los mercados son pequeños o inexistentes, por lo que los consumidores no tienen la posibilidad de encontrar pescado fresco canario. Posibles soluciones: Actualmente el consumidor está muy sensibilizado y considera abusivo los márgenes de beneficios de muchos intermediarios en la pesca y agricultura. Por ello las pescaderías de las Cofradías y OPEPS podrían tener bastante éxito. Institucionalmente debería potenciarse su creación, para ello el Gobierno de Canarias, competente en muchos puertos, debería facilitar el tema de concesiones y demás burocracia. Sería necesaria una buena campaña publicitaria y optimizar la gestión y profesionalización de éstas. En una segunda fase, si funcionasen bien, podrían crearse más pescaderías del sector fuera de los puertos locales. Por parte de las administraciones competentes debería potenciarse también a las Pescaderías locales y en las grandes superficies el sector demanda que les apliquen medidas para favorecer la promoción y compra de pescado canario y otro productos agrícolas (papas, plátanos) y ganaderos locales. Respecto al consumo en el interior, se han hecho experiencias a pequeña escala. El Gobierno de Canarias adquirió una pescadería móvil, que permitía abrir mercado en zonas de interior. Esta fue cedida al sector para su explotación. 4.- Oferta de productos transformados de la pesca local (Cofradías y OPEPS). Descripción del problema: El pescado canario fresco suele ofrecerse entero, y como mucho con pequeños transformados que se realizan ya en las pescaderías: lomos, filetes, tacos, etc. Cabe también destacar la producción de transformados típicos canarios, pejines, jareas y salazones. Algunos de ellos, pueden encontrarse con trabas sanitarias o pesqueras (tallas mínimas, etc.). El mercado actualmente demanda productos preparados más elaborados, incluso productos de última gama, para calentar y servir. El sector no adecua sus productos a esta demanda. Posibles soluciones: Realizar pequeños transformados, principalmente de pelágicos medianos y grandes: lomos, tacos, filetes en congelado o cortes en fresco, determinados cortes en pequeños pelágicos (sardina en mariposa), etc. Para ello se podría adquirir la infraestructura necesaria (maquinas de corte, pequeños túneles de congelado, etc.) o empezar encargando los trabajos a empresas que ya dispongan de esta maquinaria, y en función del éxito obtenido replantearse la adquisición de estas. Su realización facilitaría enormemente la entrada del pescado canario en caterings escolares, hostelería, catering de hospitales y otros canales, maximizando los 3

4 beneficios de la venta del pescado especialmente en algunas especies (listado, sierra, etc.) y pudiendo competir con especies foráneas (panga, perca, etc.). Respecto a los transformados típicos es necesario contar con instalaciones (secaderos) y maquinaria necesaria que se ajuste a la normativa sanitaria. Con los pejines habría que asegurar la talla mínima, sin renunciar a la reducción de talla solicitada de 12 a 9 cm. 5.- Bajo consumo de pescado en población infantil (Cofradías y OPEPS). Descripción del problema: Los niños canarios comen pescado en sus hogares y/o en los comedores escolares. La mayor parte de los comedores escolares son gestionados por grandes empresas de catering de carácter semi-industrial, que suelen comprar filetes o lomos limpios sin espina de especies como la panga, perca y carbonero. La minoría son gestionados por empresas más artesanales o por el propio colegio, donde es posible comprar pescado local. En los hogares, el poco tiempo disponible por las familias, la falta de cultura de pescado y el alto precio de muchas especies, hace que el consumo en los hogares sea muy bajo. Los últimos estudios del FROM sitúan a Canarias a la cola de las Comunidades Autónomas en consumo de pescado a nivel familiar. El resultado final es que la mayoría de los niños canarios no consume las cuatro raciones semanales mínimas recomendadas, suele comer pescado foráneo con bajo valor nutritivo y con presentaciones aburridas y poco variadas, en consecuencia no le gusta el pescado, no conoce la variedad de especies existentes en su tierra, no tiene cultura de pescado que le permita apreciar e identificarse con los productos de su tierra, etc. En definitiva la mayoría le tiene manía al pescado y suelen sentir rechazo. Es importante reseñar que los niños de las poblaciones locales pesqueras no suelen ajustarse a este modelo, poseen una cultura del pescado y de la pesca y un consumo muy superior. Posibles soluciones: Introducir pequeños transformados de especies locales más nutritivas y sabrosas y competitivas por precio, en los catering escolares y en los hogares. En un futuro realizar productos mas elaborados (para calentar y servir). Las administraciones competentes, Ministerio y Comunidad Autónoma, deberían dedicar un mayor esfuerzo en las campañas de promoción de consumo de pescado canario, en especial infantil, también dirigidas a Hostelería, Restauración y Empresas de Catering locales. El sector se debería implicar más, realizando actuaciones propias. También deben dedicar más esfuerzo en la divulgación del mundo de la pesca y de los beneficios del consumo de pescado. En esta línea, destacar la realización de 4 guías y otro material divulgativo (cómics, guías de peces, material para profesores y alumnos) que ha realizado el FROM y la propia Secretaría General del Mar. Se está gestionando introducirlos en el sistema educativo canario. 6.- Importaciones de especies foráneas: panga, perca (Cofradías y OPEPS). Descripción del problema: La introducción de especies como la panga y la perca han supuesto una dura competencia. Su valor nutritivo es muy inferior a especies de túnidos y pelágicos pequeños de nuestro caladero, pero han tenido mucho éxito, ya que son muy baratas, vienen en formatos más fáciles de consumir (habitualmente 4

5 filete limpio congelado) y tienen un sabor neutro (no sabe a pescado) ideal para consumidores no expertos. Sin embargo existe cierto recelo e inseguridad del consumidor, puesto que existe información sobre retenciones de partidas en Estados Unidos. De hecho, en Alemania se han creado marcas ecológicas de panga y perca, como Binka Sea Foods que comercializa la panga del Delta del Mekong (Vietnam), con unas garantías sanitarias (control sobre la alimentación de los peces y el uso de antibióticos) y éticas (no hay explotación infantil y los beneficios van directamente a pequeñas cooperativas de acuicultores). El enfoque correcto sería exigir estos mínimos a los productores. ISLATUNA indica que la transformación de pescado canario incrementa el precio final, no pudiendo ser tan competitivo como estos productos foráneos. Posibles soluciones: Hace falta desarrollar transformados básicos de especies locales que sean competitivas en precios y realizar campañas locales informativas sobre la calidad y los valores nutricionales de nuestro pescado. Exigir a las administraciones más control en estos productos, potenciando las marcas ecológicas. 7.- Falta de medios de transporte (Cofradías de Pescadores). Descripción del problema: En algunas islas menores (no capitalinas) no existe un transporte frecuente. Un ejemplo de este problema es la Cofradía de Corralejo (Fuerteventura), ésta tiene grandes dificultades a la hora enviar sus capturas de viejas a Gran Canaria solo dispone de un camión semanal y su precio es excesivo. Posibles soluciones: Potenciar desde el Gobierno de Canarias algún transporte itinerante propio entre islas que minimice esta carencia al sector. 8.- Funcionamiento de las Cofradías (primera venta). Dependencia excesiva de las Ayudas y Subvenciones. Descripción: En la actualidad las Cofradías actúan como punto de primera venta. Estas nacen y se desarrollan con un fin social y tienen dos fuentes de financiación: las ayudas del Gobierno de Canarias (ayudas de gasto corriente y equipamiento) y el porcentaje de beneficios de la pesca que pagan los pescadores. El problema es que las subvenciones para gastos corrientes se han reducido a un 63% y se han suprimido las partidas para adquirir equipamientos y el porcentaje de beneficios que pagan los pescadores suele ser mínimo. Además los cofrades no suelen estar dispuestos a realizar aportaciones económicas para mejorar sus instalaciones (cámaras frigoríficas, maquina de hacer hielo, etc.). Por ello las Cofradías Canarias están viviendo una situación crítica. Algunas de ellas reciben una serie de complementos: restaurantes, travellift en los varaderos, etc. que suponen una fuente de ingresos extra que ayuda a hacer frente a los pagos rutinarios de luz, agua, sueldo de Secretario y otros operarios, etc. Pero las que no las tienen pueden resultar inviables. La Organización Común de Mercados solo reconoce a las OPEPS y no reconoce a otras organizaciones como las Cofradías. Ello tendrá su repercusión en las posibles ayudas que se deriven del FEP. Otro punto conflictivo es que la primera venta se inició en Canarias en el año En el año las últimas Cofradías fueron declaradas puntos de Primera Venta. Por lo que algunos armadores tienen el vicio de vender parte de la pesca directamente a restaurantes, sin pasar por primera venta. Y ello distorsiona el mercado y los precios. 5

6 Posibles soluciones: Realizar un cambio de mentalidad de los cofrades, para que sean conscientes de la situación de crisis actual y participen en mayor porcentaje en el mantenimiento de las Cofradías, cuyos servicios les permite vender su pescado. Ya vimos en la pasada reunión de Oporto que en Azores y Madeira, tanto el pescador como el comprador aportaban porcentajes muy superiores (4%). Y además existían cuotas mensuales. Aunque consideramos que el descenso de ayudas ha sido excesivo, creemos que es necesario ser más independiente de ellas. Para ello hace falta reflexionar sobre la necesidad de un cambio profundo en la gestión y funcionamiento de las Cofradías para que resulten rentables. También sería necesario un mayor apoyo institucional en facilitar las concesiones en puertos canarios que permitan la explotación de restaurantes, travellift y demás en todas las cofradías que se puedan. En los puertos locales el sector y sus organizaciones son vistos como una fuente de ingresos más, en vez de pensar en ayudar a su posible autofinanciación y supervivencia. Sería necesario que las Cofradías y otras organizaciones que realizan la primera venta y comercializan su pescado fuesen reconocidas por la OCM. Respecto a los armadores que no pasan la primera venta es necesario que las Cofradías los fuercen de alguna manera, no ofreciéndoles los servicios, etc. 9.- Pesca ilegal. Descripción del problema: la situación de crisis actual ha disparado la pesca ilegal, que compite deslealmente vendiendo a los restaurantes el pescado a menor precio. Posibles soluciones: Es necesario un mayor control de inspección sobre estas actividades OPEPS, funcionamiento y financiación. Descripción del problema: Los costes de mantenimiento de las OPEPS son elevados (mantenimiento de sus instalaciones, personal, etc.). El problema es que la producción en el caladero no es muy abundante, por lo que la rentabilidad no es muy elevada. En la actualidad, en el mercado existe una alta competencia por los precios, por lo que los márgenes son muy reducidos. Respecto a las ayudas al transporte, POSEICAN, las OPEPS solicitan que se subvencione un mayor volumen de capturas. Posibles soluciones: Las instituciones locales deberían facilitar y apoyar a las OPEPS en la medida de lo posible, logísticamente (facilitando el acceso a instalaciones, concesiones administrativas, etc.) y financieramente aportando ayudas si fuese necesario, etc. para ayudar a su viabilidad. No debemos olvidar que el fin último es optimizar los beneficios de la pesca de todos sus asociados. 6