EN NOMBRE DEL ESTADO DE HONDURAS LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA,

Transcripción

1 CERTIFICACIÓN La infrascrita Secretaria General de la Corte Suprema de Justicia; Certifica: La Sentencia que literalmente dice: EN NOMBRE DEL ESTADO DE HONDURAS LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, en la ciudad de Tegucigalpa, Municipio del Distrito Central, a los once días del mes de agosto del año dos mil once, por medio de la SALA DE LO PENAL, integrada por los señores Magistrados CARLOS DAVID CALIX VALLECILLO en su condición de Coordinador, RAUL ANTONIO HENRIQUEZ INTERIANO y JACOBO CALIX HERNANDEZ, dicta sentencia conociendo del Recurso de Casación por Quebrantamiento de Forma, interpuesto contra la sentencia de fecha ocho de enero de dos mil nueve, dictada por el Tribunal de Sentencia de Tegucigalpa, Departamento de Francisco Morazán, que condenó a la señora M. E. C. B., a la pena de diez (10) años de Reclusión por el delito de HOMICIDIO EN SU GRADO DE COMPLICIDAD en perjuicio de S. T. H., y a las Penas Accesorias de Inhabilitación Absoluta e Interdicción Civil.- Interpuso el Recurso de Casación el Abogado E. C. L. en su condición de Defensor Público de la señora M. E. C. B..- SON PARTES: Los abogados M. R. A. E. Y A. A. G., en su condición de Defensores Públicos de la señora M. E. C. B. como parte recurrente, y la abogada M. E. G., en su condición de Fiscal de Ministerio Público, como parte recurrida. HECHOS PROBADOS PRIMERO: El día 29 de agosto del año 2006, entre las once y doce del medio día, la acusada M. E. C. B. en compañía de tres individuos, transitaban por la calle principal de la colonia, cuando el señor S. T. H., se bajó de un taxi, siendo abordado por la señora M. E. C. B., quien en virtud de ello se detuvo; instante en que sus acompañantes lo abordaron, exigiéndole la entrega del arma de fuego que portaba, acto seguido le ordenaron se diera la vuelta, procediendo a disparar contra él en reiteradas ocasiones, provocándole diez heridas de arma de fuego, en su mayoría por la espalda, que le provocaron la muerte de manera inmediata. Mientras ésta acción era ejecutada, la señora M. E. C. B. se dedicó a la vigilancia del lugar; consumado el hecho se dieron a la fuga, la acusada corrió en dirección al lugar conocido como, mientras que sus acompañantes en dirección distinta. CONSIDERANDO I.- El Recurso de Casación por Quebrantamiento de Forma, interpuesto por el Abogado E. C. L., reúne los requisitos exigidos por la ley, por lo que procede su admisibilidad, siendo procedente pronunciarse sobre la procedencia o improcedencia del mismo.- II.- RECURSO DE CASACIÓN POR QUEBRANTAMIENTO DE FORMA: MOTIVO ÚNICO: La infracción por parte del juzgador de lo dispuesto en el Artículo 202 del Código Procesal Penal, por 1

2 inobservar en la valoración de la prueba, las reglas de la sana crítica, afectando con ello el fundamental derecho a la presunción de inocencia.- PRECEPTO AUTORIZANTE.- El presente motivo de casación se encuentra comprendido en el Artículo 362 numeral 3, del Código Procesal Penal.- EXPLICACIÓN DEL MOTIVO: El juzgador al dictar sentencia condenatoria en contra de la señora M. E. C. B. por el delito de HOMICIDIO en el grado de CÓMPLICE en perjuicio del señor S. T. H. M., viola las reglas de la sana crítica en su ley lógica de la derivación; afectando gravemente la presunción de inocencia que le asiste a la imputada, según el cual, toda persona es inocente mientras no se haya declarado su responsabilidad por autoridad competente, después de haberse probado los hechos en un juicio oral y público llevado a cabo conforme a los principios legalmente establecidos. El vicio denunciado se evidencia en la valoración intelectiva que el juzgador hace de la prueba de cargo, especialmente con relación a la declaración de la testigo protegido A, ya que, tratándose del único testigo que aporta elementos de incriminación en contra del imputado y como bien lo ha reconocido el profesor de la Facultad de Psicología y Derecho de la Universidad de Barcelona, el Doctor Miguel Ángel Soria Verde, quien en el Manual de Psicología Jurídica e Investigación Criminal destaca, que desde los inicios de la psicología experimental, los psicólogos han intentado alertar sobre la posibilidad de que la evidencia facilitada por los testigos en las salas de justicia no fuese una prueba tan confiable como se pensaba. Sobre ese mismo tema, también la doctrina jurídica se ha pronunciado y así tenemos que el Doctor JOSE I. CAFFERATA NORES, en su obra, La Prueba en el Proceso Penal, dice que, La amplia capacidad testimonial, solo se concibe frente a la correspondiente contrapartida de una valoración rigurosa, sobre todo, desde que se pudo verificar que, además de la mendacidad deliberada, también pueden estar plagados de errores los testimonios de personas que narran con plena buena fe con el propósito honesto de decir verdad.- Es por ello que en la práctica jurídica y con la finalidad de llevar a cabo una adecuada valoración de la prueba testifical, se viene haciendo uso de al menos tres métodos, siendo uno de ellos el del Análisis del Contenido de las Declaraciones Basado en Criterios; con el cual se ha demostrado que a través del análisis interno de las declaraciones, es posible evaluar la veracidad del testigo, lo que se complementa, además, con el cotejo, de esa misma declaración, con el resto de las pruebas reunidas, a fin de lograr una correcta evaluación de su eficacia probatoria. En la presente causa y considerando que el fallo se basa, 2

3 decisivamente, en lo dicho por la testigo protegido A de quien el Tribunal de juicio dijo que su declaración es creíble, sin embargo, al evaluar lo manifestado por dicha testigo, a la luz de los criterios arriba indicados, se evidencian en su declaración graves inconsistencias que niegan ese grado de credibilidad que le otorga el juzgador, así, por ejemplo, las siguientes: a) La declarante a pesar que dijo conocer bien a la imputada, sin embargo, en la audiencia inicial la identificó con un nombre distinto al que lo hace en la audiencia de debate y al ser preguntada del porqué de esa confusión no supo dar explicaciones adecuadas, limitándose a decir que la verdad es que el nombre de ella no lo conoce, y que solo sabe que le dicen Y.; b) La testigo PROTEGIDO A, en la audiencia de juicio oral declaró que la imputada M. E. C. B., fue la persona que le quitó el arma al ofendido, pero en la audiencia inicial esta acción se la atribuyó a otra persona a la que ella identificó con el alias del y al ser preguntada por la defensa, del porqué esa acción se la atribuye ahora a la imputada; tampoco aquí pudo dar explicaciones satisfactorias, y atribuyó tan grave inconsistencia a que ella estaba nerviosa, nervios que, por lo visto la llevaron a confundir no sólo los nombres de dos personas diferentes, sino que también los sexos, pues en audiencia inicial le atribuyó la autoría de despojar del arma de fuego al ofendido a una persona del sexo masculino y después, en audiencia de debate, se la atribuye a la imputada, es decir, a una mujer; c) También la testigo, en su declaración, expone detalles inapropiado sobre temas que requieren conocimientos especiales, al declarar que las armas utilizadas por los atacantes del señor S. T. H. M. eran del calibre nueve milímetros, pero que al preguntarle qué conocimientos tiene sobre armas, dijo que ninguno y que eso lo aprendió en las noticias que salen en los periódicos, explicación que resulta totalmente inverosímil. Por otra parte al cotejar el relato de la testigo PROTEGIDA A con datos concretos del resto del material probatorio, se acentúan esas inconsistencias que internamente muestra, pues surgen insalvables contradicciones, como las que se presentan en las respuestas dadas por la testigo cuando se le pregunta sobre los hechos siguientes: a) Se le preguntó a la testigo PROTEGIDA A a qué hora sucedieron los hechos, a lo que respondió que no lo recordaba, entonces se le pidió que al menos señalara, en qué parte del día se produjo y la testigo respondió que fue entre la mañana y la tarde. Con ello se evidencia que la testigo no es capaz de anclar temporalmente la ocurrencia del hecho en donde perdiera la vida el señor S. T. H. M., pues no sólo la hora no la sabe, sino que ni siquiera puede ubicar el hecho en un momento aproximado del día, ya que al decir que el mismo se produjo entre la mañana y la 3

4 tarde, lo ubica en un espacio de tiempo tan dilatado que va desde que sale el sol hasta que este se oculta, lo que vuelve inexacto su relato; b) A la testigo PROTEGIDA A también se le preguntó que Cuántos disparos escuchó?.- Primero dijo que no se acordaba, después manifestó que fueron como dos, significando con ello que no hubo muchos disparos; esta parte del relato tampoco coincide con los datos concretos de los hechos, como ser, los resultados de la autopsia realizada al cadáver del señor S. T. H. M., y los indicios recolectados en el lugar de los hechos, ya que con estos se evidencia que la muerte del ofendido se produjo en un verdadero tiroteo en el que participaron más de una arma, de cuyos disparos al menos diez impactaron en la humanidad del señor S. T. H. M., y no como lo dijo la testigo, quien solo escuchó como dos disparos; todas las inconsistencias que muestra el relato de la testigo PROTEGIDA A vuelven su testimonio poco confiable y por tanto inválido para sustentar un fallo de condena y siendo la única prueba directa que introduce elementos de incriminación en contra del encartado, y aun cuando aceptamos que, en ciertos casos, la declaración de un solo testigo puede constituir prueba suficiente para enervar la presunción de inocencia de un indiciado, pero para ello el testimonio de ese único testigo, debe de reunir algunas particularidades como ser la VEROSIMILITUD DEL TESTIMONIO. Esto supone que la declaración del testigo debe ser lógica en si misma y estar rodeada de una serie de corroboraciones periféricas que la confirmen. Resulta Honorables Magistrados, que la declaración de la testigo PROTEGIDA A no cumple con esas pautas de verosimilitud del testimonio, surgiendo de ello una serie de ambigüedades e insalvables dudas y contradicciones, lo que genera un estado de incertidumbre y de fundadas sospechas, inconciliables con la formación de una base firme sobre la que se construya una convicción inculpatoria. Por lo que concluimos que en la presente causa se han infringido las reglas de la sana crítica en su ley lógica de la derivación, al extraer un cargo delictuoso de una prueba que no reúne los requisitos de certeza necesarios para constituirse en una prueba de cargo válida, vulnerando con ello el fundamental derecho a la presunción de inocencia de la señora M. E. C. B.. Reclamación hecha para la subsanación del yerro: Siendo que el yerro que provoca la interposición del presente recurso se produce en el fallo mismo, por lo que solo es posible su corrección a través de esta vía y de ello resulta que no hubo reclamación ex-ante.- DE LA PROCEDENCIA SOBRE EL UNICO MOTIVO DEL RECURSO DE CASACIÓN POR QUEBRANTAMIENTO DE FORMA INTERPUESTO POR LA DEFENSA.- I.- El recurrente plantea que 4

5 los juzgadores inobservaron en la valoración de la prueba, las reglas de la sana crítica y se evidencia en la valoración intelectiva que se hace de la prueba de cargo, especialmente con relación a la declaración de la testigo PROTEGIDA A, en aspectos tales como que la declarante dijo conocer bien a la imputada, pero en la audiencia inicial la identificó con un nombre distinto al que lo hace en la audiencia de debate; en la audiencia de juicio oral declaró que la imputada fue la persona que le quitó el arma al ofendido, pero en la audiencia inicial esta acción se la atribuyó a otra persona; también en su declaración, expone detalles inapropiados sobre temas que requieren conocimientos especiales, al declarar que las armas utilizadas por los atacantes del señor S. T. H. M., eran del calibre nueve milímetros, pero que al preguntarle qué conocimientos tiene sobre armas dijo que ninguno; se le preguntó a la testigo a qué hora sucedieron los hechos, a lo que respondió que no lo recordaba; en relación a los disparos primero dijo que no se acordaba, después manifestó que fueron como dos, significando con ello que no hubo muchos disparos; por lo que se concluye que en la presente causa se han infringido las reglas de la sana crítica en su ley lógica de la derivación, al extraer un cargo delictuoso de una prueba que no reúne los requisitos de certeza necesarios para constituirse en una prueba de cargo válida.- II.- Es de recordar que con el sistema de libre convicción o sana critica racional, este alto Tribunal está limitado para valorar alternativamente la prueba evacuada en primera instancia, limitaciones que son impuestas por los principios de Oralidad e Inmediación; ya que sólo se le está permitido a la Sala, establecer si las probanzas son válidas, si las conclusiones a que se llega responden a las reglas de la logicidad y si hay motivación suficiente y legal.- Para esta Sala de lo Penal, no se aprecia que los sentenciadores hayan fundado sus conclusiones irrespetando las reglas de la sana crítica, o que al momento de valorar la prueba, el A quo haya arribado a conclusiones contradictorias, incompletas e incoherentes, siendo que en la sentencia se plasman conclusiones lógicas y concordantes, además de verdaderas, que se extraen como consecuencia de las pruebas legalmente evacuadas en el debate.- III.- Sin el ánimo de valorar alternativamente la prueba evacuada específicamente la declaración del testigo PROTEGIDO A (folios # 112, y 115) los juzgadores sí han arribado a conclusiones razonables en relación a dicha declaración, para el caso en cuanto a que debe restársele credibilidad porque la testigo se refirió a la imputada con el nombre de ; dicha testigo al momento del debate y rindiendo declaración en el interior de la cabina de protección visual, reconoció a la imputada previo a describir sus características 5

6 físicas, como la persona que participó en el hecho imputado, por lo que al haberla mencionado con otro nombre no es determinante para restarle credibilidad a sus dichos.- En la audiencia inicial, la testigo se refiere que el le quitó el arma a la víctima y refiere que eran dos armas (veáse folio 9 vuelto); dicha declaración sí lleva consistencia con la rendida en juicio oral, en la cual como se dijo, individualiza a la acusada, no llevando razón lo alegado en cuanto a quien despoja del arma a la víctima, lo cual no es determinante para desacreditar la declaración del testigo, la que concatenada con el resto de la prueba evacuada, muestra la evidencia de que fue la imputada la que en primera instancia aborda a la víctima, para que después sus acompañantes le disparasen varias veces, no siendo relevante para la credibilidad de dicha versión quien tomó el arma de fuego que portaba el agredido.- Otro aspecto que cuestiona el censor, es el hecho de que el testigo Protegido A, aceptó no ser experto en armas, pero sí dijo que vio portar un arma calibre 9; pero igualmente, no es de recibo dicho cuestionamiento ya que se acreditó que a la víctima se le dio muerte con armas de fuego, sin que tenga relevancia el calibre de las mismas en relación a la versión que dio el testigo, quien no necesita ser un experto en armas para distinguir los calibres de las mismas; como tampoco puede ser exigible que un testigo deba conocer necesariamente en un hecho violento con qué tipo de calibre se está ejecutando.- En relación a que el testigo A, no dio una hora exacta de ocurrido el hecho y de que menciona haber escuchado dos disparos, este cuestionamiento no es suficiente para no dar por convincente dicho testimonio, ya que en cuanto a la hora del hecho, el testigo mencionó que ocurrió entre la mañana y la tarde, que coincide con el hecho probado que establece entre las once y doce del medio día, y en cuanto al número de disparos si bien de acuerdo al factum de la sentencia fueron mas de dos, menciona la testigo que cuando le empezaron a disparar dice no recordar cuantos escucho, y dice unos dos, versión que tampoco le resta credibilidad, ya que quedó establecido con el resto de la prueba que fueron varios los disparos recibidos por la víctima, provocados por varias personas, y el hecho de no mencionar con exactitud el número de disparos no provoca la incredulidad de la deponente; es por ello que no se aprecia que los sentenciadores hayan fundado sus conclusiones irrespetando las reglas de la sana crítica, específicamente la regla de la Razón Suficiente en su elemento de la Derivación; en consecuencia esta Sala de lo Penal, considera que en el fallo recurrido no se han violado las reglas de la sana crítica, ni se ha dejado de valorar prueba decisiva; en consecuencia, se declara Sin Lugar el Recurso de Casación por Quebrantamiento de Forma 6

7 interpuesto por la defensa en su único motivo.- POR TANTO: LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, en nombre de LA REPÚBLICA DE HONDURAS, por UNANIMIDAD DE VOTOS DE LA SALA DE LO PENAL, y en aplicación de los artículos 303, 304, 313 atribución 5, y 316 reformados de la Constitución de la República; 1 y 80 número 1 de la Ley de Organización y Atribuciones de los Tribunales; 359, y 369 del Código Procesal Penal; y 8 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos.- FALLA: Declarar SIN LUGAR el Recurso de Casación por Quebrantamiento de Forma, en su único Motivo, invocado por los Abogados M. R. A. E. Y A. A. G., en su condición de Defensores Públicos de la señora M. E. C. B., como parte recurrente, a quien se le siguió juicio por el delito de HOMICIDIO EN SU GRADO DE PARTICIPACION DE COMPLICIDAD en perjuicio de S. T. H..- Y MANDA: Que con certificación del presente fallo, se remitan las presentes diligencias al Tribunal de origen, para que se proceda a ponerla en efectiva ejecución.- Redactó: EL MAGISTRADO CALIX H..- NOTIFIQUESE. FIRMAS Y SELLO.- CARLOS DAVID CALIX VALLECILLO.- COORDINADOR.- RAUL ANTONIO HENRIQUEZ INTERIANO.- JACOBO CALIX H..- FIRMA Y SELLO. LUCILA C. MENÉNDEZ. SECRETARIA GENERAL. Extendida en la ciudad de Tegucigalpa Municipio del Distrito Central, a los ocho días del mes de septiembre del año dos mil once; Certificación de la sentencia de fecha once de agosto de dos mil once, recaída en el Recurso de Casación Penal con orden de ingreso en este Tribunal No. 233=2009. LUCILA C. MENÉNDEZ SECRETARIA GENERAL 7