Autoras: Sandra Dema Moreno, Ana Gabriela Fernández Saavedra, Laura Manuela García Sánchez y Raquel González Nicieza.

Transcripción

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2 Autoras: Sandra Dema Moreno, Ana Gabrela Fernández Saavedra, Laura Manuela García Sánchez y Raquel González Nceza. Trabajo de campo: Ana Gabrela Fernández Saavedra, Laura García Sánchez y Vvana Eugena Manrque Gutérrez. Dseño de la portada: Ángela González Nceza. Dseño y maquetacón: Marco Recuero. Traduccón al asturano: Araz S.L. Fnancacón: Agenca Asturana de Cooperacón al Desarrollo. Las autoras. 2

3 ÍNDICE PRÓLOGO 6 AGRADECIMIENTOS 9 INTRODUCCIÓN 11 PRIMERA PARTE: DIAGNÓSTICO DE LA SITUACIÓN DE LAS ONGD ASTURIANAS DESDE UNA PERSPECTIVA DE GÉNERO 13 Capítulo 1: Las dferentes concepcones de género presentes en las ONGD asturanas, Sandra Dema Moreno 14 1 El género como categoría de análss y de ntervencón socal 15 2 Qué es el género para las ONGD asturanas? La negacón de la desgualdad y la falta de sensbldad acerca de las cuestones de género Género y desgualdad El género: requsto formal que exgen las entdades fnancadoras Género gual a mujer El carácter relaconal del género El género como problemátca específca de los países del Sur 23 Capítulo 2: Género y desarrollo, Sandra Dema Moreno 26 1 De la nvsbldad de las mujeres a la ntroduccón de la perspectva de género en el desarrollo Mujeres en el desarrollo (MED) Género en el desarrollo (GED) 29 2 Las concepcones de las ONGD asturanas sobre género y desarrollo 29 3

4 2.1 Un proyecto de desarrollo que benefca a la comundad, benefca tambén a las mujeres? Ocuparse de las necesdades específcas de las mujeres, puede crear dvsones y es perjudcal para el desarrollo comuntaro? Los procesos de desarrollo afectan de forma dferente a hombres y mujeres? es necesaro analzar su mpacto dferencado en unos y otras? La ncoherenca de los dscursos sobre género y desarrollo 41 3 Por qué ntegrar la perspectva de género en el desarrollo? Justfcacones 42 Capítulo 3: La actuacón de las ONGD asturanas desde una perspectva de género, Sandra Dema Moreno y Ana Gabrela Fernández Saavedra 44 1 El género en los proyectos de cooperacón para el desarrollo y ayuda humantara De la nvsbldad de las mujeres a la ntroduccón de la perspectva de género en el desarrollo. Algo más que concepcones teórcas La falta de transversaldad y la especalzacón por sectores en los proyectos de cooperacón para el desarrollo La ntegracón de la perspectva de género en la planfcacón Las relacones con las contrapartes y la ntegracón de la perspectva de género Haca una ntegracón sostenble de la perspectva de género: éxto que se busca, fracaso que no sempre se admte Las dfcultades a la hora de ncorporar la perspectva de género en los proyectos de cooperacón 58 2 El género en los proyectos de educacón y sensblzacón Obstáculos que dfcultan la nclusón de la perspectva de género en los proyectos de educacón y sensblzacón Las estrategas que utlzan las ongd que ntroducen la perspectva de género en los proyectos de educacón y sensblzacón 67 Capítulo 4: La ntegracón de la perspectva de género en el nteror de las ONGD, Sandra Dema Moreno y Laura Manuela García Sánchez 68 1 Hombres y mujeres en la estructura de las organzacones Por qué hay menos mujeres que hombres en la dreccón de las ONGD? 71 2 La escasa nsttuconalzacón de las polítcas de género Falta de reflexón y posconamento conjunto en el nteror de las ONGD acerca de las cuestones de género Las resstencas organzatvas 76 4

5 2.3 Las resstencas en las acttudes: la tradconal socalzacón de género y la ndferenca o el rechazo de los varones 81 3 Actores, herramentas y procedmentos para nsttuconalzar la perspectva de género en las ONGD El papel actvo de las mujeres de las ONGD Género y estatutos La ntroduccón de una polítca de género El género en las polítcas de recursos humanos 86 4 Género y cultura organzaconal La negacón de la desgualdad en las ONGD El uso de lenguaje sexsta Cómo nterpretamos el cambo? La falta de nuevos modelos en las relacones de género 91 Conclusones y recomendacones 94 1 Conclusones 95 2 Recomendacones 97 SEGUNDA PARTE: DE LA TEORÍA A LA PRÁCTICA 99 Talleres partcpatvos para generar concenca de género en las ONGD Dseño del taller Desarrollo de la experenca partcpatva Reflexón y toma de concenca sobre la concepcón de género presente en la ONGD Reflexón colectva dentro de la ongd sobre su actuacón Compromsos dervados de la experenca partcpatva Haca la transformacón de la práctca de la ongd desde una perspectva de género 109 BIBLIOGRAFÍA 112 ANEXO METODOLÓGICO 116 5

6 PRÓLOGO Según el Programa de Nacones Undas para el Desarrollo las mujeres representan el 70% de las personas pobres en el mundo, dos tercos de la poblacón mundal analfabeta y el 80% de las personas refugadas del planeta. Estos datos cuanttatvos justfcan por sí solos la multplcdad de voces que desde las últmas décadas del pasado sglo XX venen reclamando en los dstntos foros nternaconales la regulacón y aplcacón efectva de polítcas que mejoren la stuacón de las mujeres en el mundo. Entre los objetvos de estas polítcas se encuentran la defensa de los derechos de las mujeres, la gualdad de género y el logro del prncpo de equdad en el desarrollo. La consecucón de estos objetvos se ha convertdo en un factor fundamental para luchar de modo efcaz y sostenble contra la pobreza a nvel mundal y la ntegracón total de las mujeres en el conjunto de las socedades. Así parece haberlo comprenddo la comundad nternaconal. La Declaracón del Mleno, así como otros acuerdos dervados de las Cumbres de Nacones Undas, establecen entre sus objetvos la Igualdad de Género. Por su parte, la Unón Europea, a través de la resolucón de 20 de dcembre de 1995 sobre la Integracón del Enfoque de Género en la Cooperacón para el Desarrollo, nsta a los dstntos gobernos membros a consderar el desarrollo desde una perspectva de género. Así lo ha asumdo la polítca española de cooperacón, la cual establece como una de sus prordades sectorales la gualdad de oportundades y la partcpacón e ntegracón socal de la mujer (Ley 23/1998, de 7 de Julo, de Cooperacón Internaconal para el Desarrollo). Obvamente, estos planteamentos han de llegar tambén al conjunto de las organzacones no gubernamentales para el desarrollo (ONGD). Es fundamental la ntegracón de la perspectva de género en el funconamento ordnaro de estas organzacones, así como la ncorporacón de una estratega transversal de género en sus programas y proyectos de cooperacón. Además, deberán proactuar en la promocón de accones específcas para la gualdad entre la cudadanía en la que se localzan. Sólo de esta forma se avanzará haca la emancpacón de las mujeres, aumentando sus recursos y capacdades. Y sólo así se consegurá en últma nstanca aumentar la autonomía de la mujer en la realdad actual, su presenca en los espacos socales y polítcos y mejorar su stuacón en el ámbto económco, tradconalmente desfavorable. Todo ello pone de manfesto la necesdad de realzar análss de stuacón formales de las dstntas ONGD. El Grupo de Género de la Coordnadora de ONGD del Prncpado de Asturas así lo ha entenddo y se lo ha trasmtdo al Máster en Gestón de Organzacones de Cooperacón para el Desarrollo y de Intervencón Socal de la Unversdad de Ovedo quen, con el apoyo de la Agenca Asturana de Cooperacón al Desarrollo, ha mpulsado la realzacón del estudo bajo la dreccón de la profesora Sandra Dema Moreno que aquí se presenta. Nos gustaría resaltar el elevado grado de satsfaccón que nos genera su publcacón, ponera en Asturas, por cuanto reúne una sere de característcas que creemos que lo han de convertr en referente de la temátca en estudo. Algunas de estas característcas a destacar del msmo son el sóldo fundamento conceptual, la exhaustvdad a la hora obtener los datos, la metodología cualtatva utlzada y la relevanca de las conclusones y recomendacones extraídas. Por todo ello, nos gustaría anmar a una lectura reflexva y sosegada de esta publcacón. De ella puede obtenerse un conocmento sumamente enrquecedor de la ntegracón de la perspectva de género en las ONGD asturanas así como del largo camno aún a recorrer de cara a consegur la plena erradcacón de la pobreza y el reparto equtatvo de los recursos entre mujeres y hombres. Dreccón del Máster en Gestón de ONGD y de Intervencón Socal Unversdad de Ovedo 6

7 Conocmento y autoanálss son dos conceptos báscos en el desarrollo de cualquer accón. Ésta es la base que desde el prncpo ha estado en la mente de quenes formamos parte del Grupo de Género de la Coordnadora de ONGD del Prncpado de Asturas (CONGDPA). Analzar la realdad de nuestras entdades, saber cuál es el concepto de género que manejan, su valoracón e mportanca y cuáles son sus actuacones en consecuenca, es un elemento vtal de conocmento. Debemos consegur desarrollar accones de presón polítca y socal que tengan como objetvo que Admnstracones, Insttucones y Organzacones socales mplementen y dfundan la perspectva de género. Y debemos tambén contrbur a la capactacón de aquellas organzacones que trabajan en el campo de la cooperacón y la soldardad medante accones formatvas. Hemos encontrado una alada ncuestonable en la Unversdad de Ovedo y la Axenca Asturana de Cooperacón al Desarrollu, que a través de su trabajo y apoyo han consegudo plasmar negro sobre blanco múltples cuestones que adqueren su justa y necesara mportanca cuando se vsblzan a través del papel mpreso. Quenes pretendemos dseñar una estratega de trabajo que cubra las necesdades en esta matera y establecer las accones técncas y polítcas necesaras que posblten esa transformacón socal, tan necesara para hacer de la gualdad un elemento de logro real en el marco de la Cooperacón en Asturas, sentmos que hoy hemos dado un paso más que revste una sngular mportanca. Éstas pretenden ser unas palabras que smplemente marquen el nco de una aventura que hoy ya goza de su especal cuaderno de btácora, la aventura más atrayente y sugestva, pero tambén la más justa y lógca. Emprendemos aquí la búsqueda de la equdad de género, un camno que ya no abandonaremos. Cruz Cuevas Vocal de Género de la CONGDPA 7

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9 AGRADECIMIENTOS Esta nvestgacón es el fruto del empeño y del esfuerzo colectvo y no habría poddo realzarse sn la ayuda de numerosas personas e nsttucones. En prmer lugar, agradecemos al Grupo de Género de la Coordnadora Asturana de ONGD (CONGDPA) el encargo para efectuar este dagnóstco acerca de la stuacón de las organzacones que componen dcha red. Las ntegrantes de este Grupo, además, nos ayudaron a dseñar la nvestgacón y a probar la herramenta metodológca de recogda de datos. Por otra parte, queremos agradecer a Náyade Lamadrd Coto y Carmen Osarz Meana, ntegrantes del Equpo Técnco de la CONGDPA, su nestmable labor de contacto e ntermedacón con las dstntas organzacones que partcparon en el estudo. A estas personas partcularmente debemos el éxto de haber poddo entrevstar a cas la totaldad de las ONGD que componen la Coordnadora. Agradecemos tambén a la CONGDPA por habernos ceddo su local y su nfraestructura tanto para la realzacón de las entrevstas como para las demás labores relaconadas con el trabajo de campo. Nuestro más sncero agradecmento a Isabel Menéndez por la atenta revsón del texto. A todas las ONGD partcpantes en el estudo gracas por haber contrbudo con su tempo y sus voces al desarrollo de la nvestgacón. Asmsmo, agrademos a la Dreccón del Máster en Gestón de Organzacones de Cooperacón para el Desarrollo y de Intervencón Socal de la Unversdad de Ovedo el apoyo y el mpulso para desarrollar este proyecto. Especalmente, por haber destnado y becado a tres de las alumnas del Máster en la edcón para que colaboraran en el msmo. Pero además, queremos expresar a Juan Vlanova nuestro agradecmento por su labor de medacón a lo largo del estudo. A Lus Ignaco Álvarez por haber revsado pacentemente el manuscrto y por sus acertadas sugerencas. Y a Jorge Coque por la supervsón de uno de los trabajos llevados a cabo en el Máster que fnalmente hemos decddo ncorporar a este lbro por consderarlo una buena práctca para mpulsar la toma de concenca y la ntroduccón de la perspectva de género en las ONGD. Por últmo, queremos expresar nuestro reconocmento a la Agenca Asturana de Cooperacón por su compromso con la nvestgacón y agradecerle tanto la fnancacón de la msma, como la de esta publcacón. La mejor satsfaccón para nosotras como equpo nvestgador sería que este estudo se convrtera en una herramenta que contrbuya a que las ONGD asturanas, y el resto de actores mplcados en la cooperacón para el desarrollo, avancen en su trabajo a favor de los derechos de las mujeres y en la búsqueda de un mundo más gualtaro. LAS AUTORAS 9

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11 INTRODUCCIÓN Esta nvestgacón es una ncatva ponera en Asturas, ya que es la prmera vez que se realza un análss sobre las organzacones no gubernamentales de desarrollo (ONGD) de nuestra comundad desde una perspectva de género. En el Estado español hay algunos estudos prevos que nos permteron sentar las bases del nuestro, s ben, como explcaremos más adelante, en este caso hemos decddo plantear algunos cambos metodológcos que consderamos más adecuados para cumplr con los objetvos prevstos. Este estudo, fruto del esfuerzo colectvo, surge del encargo del Grupo de Género de la Coordnadora de Organzacones no Gubernamentales del Prncpado de Asturas (CONGDPA) y se desarrolla gracas al apoyo de otras dos nsttucones, el Máster en Gestón de Organzacones de Cooperacón para el Desarrollo y de Intervencón Socal de la Unversdad de Ovedo, que destna a tres de sus alumnas para realzar el trabajo de campo, y la Agenca Asturana de Cooperacón Internaconal que la fnanca. La nvestgacón consste en un dagnóstco acerca de cómo las organzacones que ntegran la Coordnadora entenden y trabajan las cuestones de género, con el fn de que el Grupo de Género de la CONGDPA tenga una vsón general sobre estos asuntos que le permta desarrollar mejor su actuacón. En la elaboracón del dagnóstco nos planteamos tres grandes objetvos: 1 Entender 2 Averguar 3 Analzar cuáles son las concepcones de género que manejan las ONGD asturanas y s dchas concepcones son compartdas por el conjunto de las organzacones y fruto del debate dentro de las msmas. s las concepcones de género que utlzan las ONGD se ven reflejadas en su dnámca nterna y hasta qué punto la perspectva de género está nsttuconalzada dentro de las organzacones, tanto en sus planteamentos teórcos y en su cultura organzaconal, como en su estructura y funconamento nterno. s las ONGD ntegran o no la perspectva de género en sus accones y cómo lo hacen. Para ello, nos hemos nteresado por los proyectos de cooperacón para el desarrollo que realzan, así como por los de sensblzacón y de ayuda humantara. Tenendo en cuenta estos tres grandes objetvos, hemos estructurado el presente lbro en dos partes. La prmera parte consste en el dagnóstco de la stuacón de las ONGD asturanas. En los cuatro prmeros capítulos se trata de dar respuesta a cada uno de los objetvos expuestos. Esta prmera parte concluye con un apartado que recoge las conclusones y algunas sugerencas del equpo nvestgador para favorecer la ntegracón de la perspectva de género en la actuacón de las ONGD. En la segunda parte del lbro se presenta una experenca partcpatva llevada a cabo en Ingenería sn Fronteras (ISF) de Asturas, entdad partcpe de la Coordnadora Asturana de ONGD. Dcha experenca consstó en la realzacón de unos talleres que permteron a los ntegrantes de dcha organzacón tomar concenca crítca acerca de la concepcón de género que comparten y las consecuencas de dcha concepcón en sus accones tanto dentro como fuera de la organzacón. Hemos ncludo en el lbro esta experenca porque consttuye un ejemplo extoso que puede ser fáclmente trasladable a otras organzacones que tengan nterés por ntegrar la perspectva de género en su actuacón. Esta obra se completa con un anexo en el que se explca la metodología que se sguó para realzar el trabajo de campo. En la nvestgacón se utlzó una metodología de tpo cualtatvo basada en entrevstas en profunddad a personal técnco, drectvo y voluntaro de las organzacones ntegrantes de la Coordnadora Asturana de ONGD. De las 37 organzacones que componen la Coordnadora logramos realzar entrevstas en 31 de ellas. 11

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13 PRIMERA PARTE: DIAGNÓSTICO DE LA SITUACIÓN DE LAS ONGD ASTURIANAS DESDE UNA PERSPECTIVA DE GÉNERO

14 LAS DIFERENTES CONCEPCIONES DE GÉNERO PRESENTES EN LAS ONGD ASTURIANAS CAPÍTULO 1 Sandra Dema Moreno En la Coordnadora asturana de ONGD (CONGDPA) convven organzacones muy dversas que tenen dferentes vsones y formas de entender la cooperacón y el desarrollo. De la msma manera, tambén tenen planteamentos y poscones heterogéneos sobre las cuestones de género. Vamos a dedcar el presente capítulo a tratar de comprender la dversdad de poscones exstentes acerca de la perspectva de género, pero antes, queremos exponer de forma muy breve en qué consste dcha perspectva. 14

15 1 EL GÉNERO COMO CATEGORÍA DE ANÁLISIS Y DE INTERVENCIÓN SOCIAL El concepto de género es relatvamente recente, surgó en los años setenta a raíz de las revolucones del 68 y el auge de los movmentos socales, sobre todo del femnsta, expermentado en ese momento. La ntroduccón de la perspectva de género nos permte desentrañar las relacones entre mujeres y hombres y como consecuenca dar una nueva vsón de cuál es la realdad en la que nos movemos, lo que provoca una reformulacón del conocmento, así como de la práctca socal y polítca. El género plantea que las dferencas entre hombres y mujeres exstentes en el mundo no son fruto de dferencas bológcas, sno más ben producto de una construccón socal, o como Gayle Rubn (1975) propone, consecuenca del sstema sexo-género 1. A partr de la dferenca bológca entre hombres y mujeres se han establecdo unas relacones socales desguales, en las que mujeres y hombres asumen papeles, se mueven en espacos y detentan dentdades dferentes. Pero el problema no es la dferenca, sno el hecho de que las relacones entre mujeres y hombres se traduzcan en relacones de poder y subordnacón. La poscón socal de hombres y mujeres es dferente en todas las socedades, aunque ha do evoluconando con el tempo. De hecho, en las últmas décadas, las socedades contemporáneas desarrolladas han expermentado mportantes cambos en las relacones de género. Sn embargo, a pesar de dchos cambos, en todas las socedades conocdas las actvdades, valores y roles masculnos ocupan un lugar de superordad jerárquca mentras que las actvdades, roles y creencas femennas ocupan una poscón de subordnacón que se manfesta en desgualdades de tpo económco, polítco, socal y/o cultural, a lo largo del mundo 2. A través del proceso de socalzacón nterorzamos este sstema y aprendemos a comportarnos asumendo las normas y valores adecuados a nuestro sexo/género. En la famla, en la escuela, jugando, a través de la prensa, de la publcdad y del resto de nsttucones -polítcas, económcas y socales- aprendemos los valores y formas de comportamento de varones y mujeres; en defntva, nterorzamos los rasgos que cultural y socalmente dferencan a unos y otras. En este proceso de socalzacón, tenemos que referrnos, por una parte, a las nsttucones económcas, polítcas y culturales (agencas de socalzacón), en cuanto productoras de relacones socales de género y, por otra, a nuestras propas accones, a través de las cuales ntervenmos como agentes socalzadores en nuestras nteraccones personales. El género, por tanto, es una experenca estructurante del mundo y es tambén una categoría de análss que permte descubrr las dferencas construdas socalmente entre hombres y mujeres, que con las categorías de análss tradconales como la clase socal, la edad o la etna quedan ocultas. El género consttuye una forma dferente de mrar la realdad, que tene claras mplcacones en la construccón del conocmento así como en la práctca socal y polítca. Al ntroducr la perspectva de género en estos ámbtos, se produjo un proceso de cambo que llevó, por una parte, al cuestonamento de las explcacones y de los conceptos tradconales, sn perspectva de género y, por otra, al surgmento de nuevos análss y práctcas que ncorporan dcha perspectva. Los dferentes agentes mplcados en el desarrollo, como las Organzacones Internaconales, los poderes públcos o las ONGD, no han sdo ajenos a este proceso. 1 Esta autora entende que el género, de carácter socal, no puede analzarse de forma separada al sexo bológco, y ambos elementos consttuyen lo que denomna sstema sexo-género. 2 La stuacón de desgualdad entre hombres y mujeres en el mundo ha sdo y es un tema recurrente de análss, por lo que podríamos remtrnos a una nfndad de obras que tratan de exponer esa stuacón, plantear cuáles son sus causas y cómo medrla. A modo de ejemplo y para profundzar en esta cuestón sugermos tres de ellas: PNUD (1995), Jon Seager (2001) y Clara Murgualday (2005). 15

16 2 QUÉ ES EL GÉNERO PARA LAS ONGD ASTURIANAS? Como decíamos anterormente, en las ONGD asturanas hay una dversdad de posturas acerca de lo que se entende por perspectva de género. Esta dversdad tene que ver con las dferentes formas de entender la gualdad y las relacones entre varones y mujeres presentes no sólo en las organzacones, sno en el conjunto de la socedad. En este sentdo, las ONGD reproducen el dscurso socal exstente sobre esta cuestón. Fgura 1: Sensbldad sobre las cuestones de genero 6% 10% 6% 29% 49% Rechazo Invsldad Vsvldad Sensbldad Insttuconalzacón Como se observa en la fgura 1, apenas hay organzacones que muestren un rechazo explícto a las cuestones de género. Sn embargo, el 29% negan la exstenca de desgualdades de género. Por su parte, cas la mtad de las ONGD analzadas reconocen la exstenca de las msmas. Aún así, en las ntervencones de las personas entrevstadas se percbe una falta bastante generalzada de sensbldad y de formacón acerca de estas cuestones. Solamente el 16% restante corresponde a organzacones que se muestran sensblzadas con las cuestones de género, entre las cuales un 10% ha habltado mecansmos para lograr nsttuconalzar la perspectva de género tanto dentro de las propas ONGD como en las actuacones que realzan. Vamos a analzar detalladamente los dscursos que se formulan desde cada una de esas posturas teórcas. 16

17 2.1 La negacón de la desgualdad y la falta de sensbldad acerca de las cuestones de género En las entrevstas realzadas encontramos el caso extremo de organzacones que muestran profundo desconocmento sobre las relacones de género, como el caso del sguente voluntaro que reconoce no haber oído nunca hablar sobre género n saber lo que sgnfca: Qué es perspectva de género? No sé lo qué es. Es que no sé, no te puedo contestar porque no sé qué me estás preguntando (Voluntaro) 3. El desconocmento acerca de este asunto provoca que en esta organzacón no sólo se tenga una ncapacdad para detectar las desgualdades de género, sno que de hecho se neguen tales desgualdades: Por ejemplo, nosotros no hacemos una fuente o un pozo de agua y decmos: No, las mujeres beban de sete a nueve. La fuente y todos los proyectos que hacemos es para toda la poblacón, no hay nngún tpo de dscrmnacón. Es más, la gente que se nvolucra en los proyectos son de todos los géneros y de todas las edades. (Voluntaro). Este voluntaro afrma que los proyectos que ponen en marcha desde su organzacón son para toda la poblacón, sn hacer nngún tpo de dscrmnacón. No reconoce que la dscrmnacón sea un problema socal, sno que al revés, en su dscurso deja entrever que la dscrmnacón puede ser generada a través de los aquellos proyectos de desarrollo que traten de forma dferente a hombres y mujeres. El entrevstado dentfca gualdad con dentdad, con homogenedad y desconoce que es precsamente el trato déntco el que puede llevar a reforzar la dscrmnacón. La falta de sensbldad de este entrevstado acerca de las cuestones de género le mpde percbr que el tema del agua tene una ndudable mportanca, ya que como sabemos satsface sobre todo necesdades práctcas de las mujeres 4, relaconadas con su rol reproductvo y que cualquer proyecto de dchas característcas va a tener un mpacto dferencado en hombres y mujeres. Sn tener una postura tan extrema como la del anteror nformante, otras personas entrevstadas muestran un certo desconocmento acerca de las cuestones de género, sendo ncapaces de verbalzar en qué consste la perspectva de género, como es el caso de este drectvo: No, no tengo una defncón de perspec... No. O sea, te decía, no hay un trab..., así como en otras cosas yo creo que sí hay un trabajo más, eh, más, teórco, más de formulacón. [ ] Yo creo que el tema de género no ha sdo de los ejes prncpales que más se han trabajado en X [nombra a su organzacón], n en Z [nombra a la organzacón en Latnoamérca]. Tampoco. (Drectvo) 3 En los extractos de las entrevstas utlzados para lustrar el análss nos hemos servdo de dos ncales: la e dentfca a la entrevstadora y la a la persona entrevstada o nformante. Las aclaracones que precsamos hacer para facltar la comprensón del dscurso se ntroducen entre corchetes. Al fnal de cada fragmento, entre paréntess, aparece s la persona entrevstada pertenece al personal técnco, voluntaro o drectvo de las organzacones y s es hombre o mujer. 4 A lo largo de todo la obra se va a dferencar entre dos conceptos necesdades práctcas e ntereses estratégcos, basados en el trabajo ponero de Maxne Molyneux (1985). Las necesdades práctcas se dervan de los roles tradconales de las mujeres y su satsfaccón no modfca, sno que refuerza, la dvsón sexual del trabajo. Por el contraro, los ntereses estratégcos se formulan a partr del análss de la subordnacón de las mujeres con relacón a los hombres. La satsfaccón de estos ntereses llevaría a la modfcacón de las estructuras socales y a un equlbro en las relacones de género. Volveremos sobre esta cuestón más adelante. 17

18 Como vemos, el entrevstado parece querer expresar que la organzacón no trabaja el tema de género pero no termna la frase, como dudando en hacerlo explícto. En la forma de culmnar la ntervencón deja claro que así como en otros temas relaconados con el desarrollo hay una reflexón, formulacón y conceptualzacón teórca, en las cuestones de género carecen de tal reflexón conjunta. Es más, como explca a contnuacón, este tema no ha sdo tratado en la organzacón n en España n en Amérca Latna. Algo parecdo ocurre en otras organzacones: Bueno, es que por perspectva [de género] qué se entende? No sé. No sabría decrte. No sé. Tengo claras muchas cosas sobre el género pero... No sé [...] En esta organzacón hay gente voluntara, hay gente trabajadora pagada. Hay hombres y mujeres y práctcamente todos hacen lo msmo, cobran lo msmo, ven lo msmo y partcpan en lo msmo. El hecho de ser mujer allí no mplca absolutamente nada. Vamos, la chca que está trabajando allí no baja la basura n este chco lleva papeles al banco. Es una cosa que de entrada está como muy asumda. Somos mogollón de personas que trabajamos y a cada una les toca algo pero en funcón de tus posbldades, de tus cualdades, de tus ganas. Pero nada más. El hecho de ser hombre o mujer en m organzacón es que n se plantea. (Drectva) Esta drectva tampoco es capaz de dar una defncón de perspectva de género, pero afrma conocer en qué consste. Tras varos ntentos, a sugerenca de la entrevstadora, ntenta relaconar la perspectva de género con su organzacón. Y a partr de ese momento construye un dscurso de negacón de la desgualdad, smlar al del prmer entrevstado. Establece que en su organzacón hay hombres y mujeres, pero no hay dferencas de género. Nega que hombres y mujeres desempeñen funcones relaconadas con sus tradconales roles de género. Asmsmo, asegura que a cada persona se le adjudcan las funcones de acuerdo a sus cualdades, ganas y habldades. Lo que la entrevstada gnora es que tales cualdades, gustos o habldades muchas veces están relaconadas con los roles tradconales de género, como veremos más adelante. Esta negacón de la desgualdad le mpde ver, entre otras cosas, las dferencas entre los hombres y las mujeres en el desempeño de los altos cargos de dreccón en la ONGD, que han sdo ocupados mayortaramente por personas del sexo masculno desde el orgen de la msma. 2.2 Género y desgualdad Dentro de la varedad de posturas que hemos dentfcado en las ONGD asturanas, aproxmadamente la mtad percben la exstenca de desgualdades de género, aunque con mportantes matces. Algunas organzacones dentfcan las dferencas entre hombres y mujeres, pero no ven que esas dferencas consttuyen desgualdades y por tanto no profundzan en las causas que provocan la desgualdad n ponen en marcha actuacones adecuadas para soluconar tales problemas. En otros casos, se reconocen las relacones de desgualdad, pero se lmtan al análss de las msmas. Fnalmente, un últmo grupo de ONGD, las menos, hacen hncapé en el elemento de accón y de transformacón de dchas relacones de género. Segudamente, vamos a analzar los dscursos que responden a estos tres planteamentos, así como las dmensones que las ONGD atrbuyen a las desgualdades de género. a) Desgualdad o dferenca? Desde algunas ONGD se percbe la exstenca de dferencas entre hombres y mujeres. Así, por ejemplo, la sguente nformante reconoce que unas y otros no tenen el msmo acceso a los recursos n a las prestacones relaconadas con la salud, ámbto en el que la ONGD está especalzada: Hay que tener presentes las dferencas de género en todos los proyectos, en todas las actvdades que hagamos. No sólo porque te lo exja a lo mejor una convocatora o una subvencón públca tenes que ncorporar la perspectva de género, pero sí que se note en tus proyectos. Tanto los que hacemos con mujeres, porque son concretamente de mujeres, como en los de cooperacón. O sea, que no se quede sólo en la teoría, sno en la práctca. Y cuando tú veas los resultados, pues que veas a lo mejor que la salud de la mujer está al msmo nvel que de los hombres. En el tema de salud sí que hay muchas dferencas, sobre todo en el acceso a los sstemas de salud. (Técnca) 18

19 Pero al no conceptuar tales dferencas como desgualdades o dscrmnacones no se profundza en las causas de las msmas. La entrevstada tene claro que hay que ncorporar el enfoque de género a las actvdades y proyectos de las ONGD y se refere concretamente a la necesdad de ntegrar el género en la práctca, para que no se quede solamente en la teoría, por la mera exgenca de las convocatoras públcas. Sn embargo, al no entender que las dferencas que percbe consttuyen desgualdades, las accones que desarrolla la ONGD son fundamentalmente de carácter asstencal, lmtándose a favorecer el acceso gualtaro de hombres y mujeres a los recursos. b) Género y reflexón Algunos/as entrevstados/as, como decíamos, percben que la stuacón de las mujeres en el mundo es desgual en comparacón con la de los hombres y consderan que el objetvo de la perspectva de género es analzar dcha desgualdad: Ser capaces de analzar el papel de los hombres y de las mujeres en cualquer actvdad y lograr valorar esa dferencacón y analzar las causas, el porqué. Y ver el papel que unos y otros están desarrollando... (Técnco) Entender que las decsones polítcas, económcas, socales, afectan de manera dferente a los hombres y a las mujeres. No ver solamente los resultados cuanttatvos y decr: mujeres tanto, hombres tanto; sno buscar algo más. Los motvos que hacen que los efectos sean dferentes, darse cuenta que los dstntos papeles que tenen las mujeres son dferentes y desguales. (Drectva) Estas ntervencones ponen de manfesto la exstenca de una stuacón de desgualdad y hacen hncapé en analzar las causas que subyacen a esas desgualdades. Sn embargo, se quedan en el análss, en el plano de la reflexón, sn destacar el elemento de accón que va lgado a la mplementacón de la perspectva de género. c) Género y accón Este elemento de accón apenas aparece en las entrevstas realzadas, sn embargo, es clave en el dscurso de esta técnca: [Género] es aquello de tener en cuenta a las mujeres y la necesdad del cambo de la socedad. No? Hacer las cosas un poco pensando en la necesdad de llegar a una gualdad que mplca cambar muchas cosas, fundamentalmente, mentaldades. Ésas son las más duras de cambar. (Técnca) Esta entrevstada, con muy buen crtero, pone énfass en el carácter transformador de la perspectva género. No se trata sólo de conocer cuál es la stuacón de varones y mujeres, sno tambén de actuar para cambarla, puesto que el objetvo de la perspectva de género es lograr la gualdad. Para lograr dcho objetvo habrá que modfcar muchos aspectos y la entrevstada señala la cuestón de las mentaldades, como el aspecto más dfícl de alterar. d) Las dmensones de la desgualdad En el dscurso de las ONGD que concben las relacones de género como relacones de desgualdad entre varones y mujeres, aparecen referencas a algunas de las dmensones de la desgualdad. En las dos sguentes ntervencones, los entrevstados vnculan la desgualdad con la mayor pobreza y la falta de oportundades educatvas de las mujeres: Las mujeres forman el colectvo más pobre del planeta, y además, a la hora de establecer prordades de escolarzacón, son las nñas las ultmas de la fla, con lo que se quedan muy a menudo sn r a la escuela. (Drectvo) Se realzan estudos genércos sobre pobreza, pero te vas dando cuenta que no todas las pobrezas son guales y, en concreto, el factor género afecta mucho a lo que es la pobreza. (Técnco) 19

20 Estos entrevstados percben alguna de las dmensones de la desgualdad, como la pobreza o la falta de oportundades educatvas; pero no reconocen que la dscrmnacón de las mujeres en el mundo sea el resultado de una complejdad de causas y factores. Esta manera de entender la problemátca de género tene consecuencas drectas en las actuacones de algunas ONGD. Algunas de ellas ponen excesvo énfass en desarrollar proyectos específcos, crcunscrtos a un determnado ámbto de accón, como los proyectos de carácter educatvo, cuyo poder como nstrumento para alterar las relacones de género se sobreestma frecuentemente. Algunas ONGD van más allá y entenden que la desgualdad es un problema más complejo vnculado con la construccón socal del género: Sempre se relacona la perspectva de género con el varón o la mujer, como s fuera una cuestón bológca, cuando sabemos que es una cuestón cultural. A la mujer se le cataloga con unas determnadas tareas, con unos determnados crteros y al varón con otros. Entonces, lo que parece que es natural, es una construccón educatva y cultural. (Voluntara) Esta voluntara consdera que el género es algo más que sexo, rechaza las dferencas bológcas y entende que varones y mujeres asumen dferentes roles a causa de unas dferencas culturales, educatvas, hstórcamente arragadas. En defntva, hace referenca al proceso de socalzacón, al que nos referíamos anterormente, a través del cuál aprendemos las claves para comportarnos como varones y mujeres. Esta voluntara percbe que las desgualdades de género no son meramente desgualdades económcas, sno que tenen otras dmensones de tpo socal, cultural e ncluso sexual: Hombre, a nvel de trabajar con la gente, sí necesta más ayuda la stuacón de la mujer y por eso el desarrollo es mucho más mportante el de la mujer que el del hombre, porque queras que no, a lo mejor al hombre lo sacas de la crss económca, pero a la mujer tenes que sacarla de la crss económca y de la socal y de la cultural en la que vve. (Voluntara) Muy pocas ONGD subrayan el carácter unversal de las desgualdades de género, y de la msma forma sólo alguna reconoce que la problemátca de género está vnculada tambén al ámbto de lo prvado: Yo que me consdero más o menos formada, que tengo m profesón, que soy sensble a determnadas cosas, lo sufro a daro. Las relacones en casa no son guales, no nos ocupamos de las msmas cosas. Y no es sólo que fregue o cocne o deje de fregar, sno la concepcón de la relacón. La concepcón que ellos tenen. Pues magínate esto trasladado a otros espacos, otros lugares donde sufren realdades tan tremendas, donde se depende económcamente, donde no se las vsblza, eso es tremendo. (Voluntara) Esta entrevstada muestra claramente la mportanca del ámbto prvado en la confguracón de las relacones de género. Y hace una nteresante reflexón a partr de su experenca personal. La entrevstada se consdera a sí msma sensblzada por las cuestones de género, formada y con un trabajo estable y se compara con las mujeres del Sur. Evdentemente, hay stuacones que pueden favorecer o perjudcar las relacones gualtaras, pero éste es un fenómeno unversal que, como ella msma deja entrever al explcarnos su stuacón, trascende el nvel educatvo y/o la stuacón laboral de las mujeres. 2.3 El género: requsto formal que exgen las entdades fnancadoras Algunas organzacones han hecho vsbles las relacones de género no como consecuenca de su propa reflexón o por una exgenca del trabajo que desarrollan, sno por un factor externo, como es el hecho de tener que rellenar el apartado de género en los formularos de los proyectos: 20

21 De hecho en los proyectos está el epígrafe de la perspectva de género. Entonces es algo que te has de plantear, como mínmo [rsas]. (Técnca) No es que se trabaje especalmente n que se haga especal hncapé en el tema de género. Sí que en todos los proyectos se contempla, porque ncluso ya está estandarzado en los formularos, de manera que aquí ncorporamos un pequeño capítulo en el que se descrbe algún tema de enfoque de género. Pero dgamos que el enfoque de género no es uno de sectores prortaros, n de los aspectos a tener en cuenta dentro de la organzacón. Aunque, con motvo, sí que se contempla dentro del desarrollo de los proyectos. (Drectvo) Como este últmo entrevstado manfesta, el género no es una prordad de su organzacón a la hora de ntervenr. En esta organzacón se lmtan a rellenar el formularo correspondente a la hora de presentar un proyecto para que sea fnancado, puesto que es un requsto que se exge. Por tanto, no se ntroduce la perspectva de género porque detecten la necesdad o porque consderen que es precso para no contrbur a la desgualdad, sno para garantzar la fnancacón. Este drectvo señala además otro elemento de nterés y es que sólo ncorporan la perspectva de género cuando exste un motvo concreto, es decr, se ncorpora de forma excepconal, no en el trabajo cotdano y para soluconar cuestones habtuales. Con esta forma de funconamento, se refuerzan las relacones de género exstentes. El género, como vemos, está asumdo en las organzacones en tanto que no genera demasado rechazo explícto, pero su asuncón es muy superfcal, se queda en el cumplmento de un requsto meramente formal. Esta forma de entender el género es asumda por las ONGD porque no exge mayor trabajo n mayor compromso, pero además contrbuye a generar una dea un tanto pelgrosa, la aparenca de que algo se está hacendo. Algunas de estas organzacones n squera se toman este requsto formal demasado en sero, ya que confían en que los proyectos se fnancen a pesar de carecer de perspectva de género: Tampoco creo que realmente las nsttucones, a pesar de que lo dgan en sus bases, a la hora de la verdad s tú no tenes una perspectva de género, te vayan a rechazar un proyecto. A lo mejor te lo puntúan un poco menos pero no van a decr: "Este proyecto no vale"; no? (Técnca) 2.4 Género gual a mujer A muchas de las personas entrevstadas les cuesta explcar cuál es su concepcón sobre el género y los dscursos que construyen son confusos y contenen deas equvocadas, que más adelante encontramos reflejadas en el trabajo que desarrollan. Una de las confusones más frecuentes es la que asmla género a mujer, de ahí que muchas de ellas consderen que s realzan proyectos drgdos a mujeres, la perspectva de género queda automátcamente ntegrada: e Consderan que sempre que el proyecto se dedque a la mujer están ntroducendo la perspectva de género? Pues yo penso que sí. Yo penso que sí. (Drectva) O entenden que ntegrar la perspectva de género consste en satsfacer las necesdades propas de las mujeres: El género? Tener en cuenta las necesdades de la mujer, no? (Voluntara) 21

22 En la sguente ntervencón, un drectvo explca que ntegran la perspectva de género a la hora de detectar las necesdades de las mujeres báscamente porque la organzacón está compuesta mayortaramente por relgosas: Bueno, es que además gual que estamos hablando que X [nombra la organzacón] funcona con una composcón grande femenna. En Z [nombra la organzacón en Latnoamérca] tambén y yo creo que aún más, porque el peso de las congregacones relgosas, de las monjas en Latnoamérca es muy alto. Aún hoy sgue habendo muchísmas maestras. Yo he conocdo colegos que eran todas maestras, que las drectoras de departamento y de centro eran mujeres. (Drectvo) Este nformante entende, como en las entrevstas anterores, que la perspectva de género queda nserta sempre que haya mujeres en los proyectos. Para el entrevstado, género es gual a mujer, sn percatarse de que, aunque la composcón mayortara de la ONGD sea de mujeres, esto no garantza un trabajo en el tema de género. No obstante, que el género es cosa de mujeres es una dea bastante extendda en otras organzacones conformadas mayortaramente por mujeres, aunque no tengan vnculacón relgosa: Se oye hablar en tu organzacón de perspectva de género? Jo! Pues fíjate estamos en un 90% de mujeres... No es que lo hablemos, es que lo mponemos [rsas]. (Técnca) Esta técnca afrma que se oye hablar en su organzacón de perspectva de género porque el 90% de su composcón son mujeres. En este caso, se da por hecho que, al ser una organzacón cas toda de mujeres, todas ellas trabajan con perspectva de género por el hecho de serlo, como s fuera algo nnato. Además, la entrevstada asegura que la perspectva de género es algo mpuesto, una oblgacón dentro de la ONGD. Pero esta argumentacón es contradctora. S todas trabajan con perspectva de género por ser mujeres no parece que tenga mucho sentdo hablar de mposcón, cuando en una organzacón el 90% opna algo y logra trasladarlo al 10% restante, se habla de mayoría y cas podríamos decr que de consenso. Aún así, la entrevstada entende el género como mposcón. Sólo cabría expresarse en esos térmnos s el 10% restante ejerce una fuerte resstenca, y puede que así sea, ya que a pesar de que la composcón de la ONGD es mayortaramente femenna, en la actual Junta Drectva hay más hombres que mujeres. En la sguente ntervencón otra técnca ncde en la msma dea. Puesto que las mujeres son mayoría numérca entre el voluntarado y el personal contratado, están a favor de las cuestones de género, como s no puderan ser nsensbles a esta cuestón y vceversa: Hay que tener en cuenta que de todas las personas que trabajan aquí hay sólo un chco, por eso la perspectva de genero es aplastante y será por eso que no se habla, no? Tal vez lo damos por hecho, la asummos tanto que es por eso que no hablamos explíctamente, pero está mplícto en todo. (Técnca) Además, la nformante expresa que están tan a favor de las cuestones de género que no les hace falta hablar sobre ello. Entende que en su organzacón habrían logrado alcanzar una fase en la que el género se trabaja de forma automátca. Sn embargo, al pedrle una explcacón de cuál es su concepcón acerca de la perspectva de género, la nformante construye un dscurso muy deslavazado e nconexo: Hay madre! Perspectva de género? Yo supongo, Es que mra, tenendo en cuenta en todo momento un poco el tema de la mujer, el tema del lenguaje. Hasta para aplcarlo con todo lo que son las dfcultades a la hora de meterse en el trabajo, a la hora de tener una famla y todo eso, no? Yo creo que sí, es por ahí la cosa. (Técnca) 22

23 Género, en su opnón, es el tema de la mujer, no consdera la dmensón relaconal, entre mujeres y varones. Ejemplfca qué es el género menconando aspectos concretos, como el sexsmo en el lenguaje y las dfcultades laborales y de conclacón, pero no asoca este concepto a la desgualdad o a la dscrmnacón y carece de una vsón de las cuestones de género donde ponga de manfesto la dmensón socal, cultural, hstórca y polítca de la desgualdad de género. La consecuenca más nmedata de esta concepcón que dentfca género con mujer es que no se ntegra la perspectva de género de manera transversal, sno que se realzan proyectos específcos drgdos a mujeres y con ese tpo de proyectos se consdera que el género está ntegrado. Y en el resto de proyectos de desarrollo, la mayoría a juzgar por la actvdad que realzan las ONGD, se lmtan a ncorporar a algunas mujeres como benefcaras. 2.5 El carácter relaconal del género Pocas entrevstas menconan un elemento fundamental en la concepcón del género, el hecho de que cuando hablamos de perspectva de género no nos refermos a mujeres exclusvamente, sno a las relacones socales entre ambos sexos. Este elemento relaconal aparece claramente expresado en dos de las entrevstas: Bueno, el térmno género lleva mplícto hablar de relacones entre dstntos sexos, en las relacones desguales, entonces por eso te dgo, yo lo tengo claro, yo para mí. (Voluntara) [El género] sempre lo analzamos y lo entendemos como las relacones entre los hombres y las mujeres, el tpo de relacones y el vínculo daro cotdano que se crea a la hora de realzar las tareas, a la hora de decdr, a la hora de convvr daramente Es esa relacón, es esa poscón del hombre, ese rol, cómo podemos cambarlo, cómo podemos no cambarlo, depende. (Técnca) Estas entrevstadas hacen ncdenca precsamente en el carácter relaconal del género. Sn embargo, mentras que la prmera de ellas sostene que las relacones son desguales, la segunda no lo mencona. Tampoco percbe la dmensón global y estructural de las relacones de género, sno que lo restrnge a las cuestones conectadas a lo más nmedato, a las actvdades y la toma de decsones que se producen en la convvenca dara. La últma nformante hace una alusón al rol de los hombres y a la posbldad de cambarlo, percbe por tanto, la dmensón dnámca de los roles de género, pero no mencona la mportanca de cambar el rol de las mujeres, tal vez porque consdere que ellas ya lo están hacendo. 2.6 El género como problemátca específca de los países del Sur Otra de las concepcones frecuentes en las ONGD analzadas es la percepcón de que las desgualdades de género son un problema específco y cas exclusvo de los países del Sur: S todavía en nuestro país nos quejamos de que exste una dscrmnacón sexual, cuando esto lo llevamos a los países del Sur es elevado a una potenca [rsas]. Entonces no creemos que se pueda llevar a cabo nngún proyecto armónco de desarrollo, sn la promocón de la mujer; tratando de ncorporarla. (Drectvo) Nosotros trabajamos en los países del Sur, para promoconar la mujer, lo que te decíamos antes, consegur que la mujer tenga una formacón a todos los nveles, para que salga de esa gnoranca en la que está. Que no es buena, porque no se la reconoce. (Drectva) En muchas de las entrevstas realzadas no se apreca el carácter unversal de las desgualdades de género o, al menos, se mnmza su mportanca. Y además, no se relacona la problemátca de género con desgualdades que ocurren en esta socedad, o con cuestones cercanas a las ONGD. 23

24 Esta dea se refuerza al comparar la stuacón de las mujeres en los países del Norte y en los del Sur: Aquí [en el Norte], por ejemplo, es básco lograr una gualdad con el hombre a la hora del trabajo y sueldo y esas cosas. Lo que pasa es que estamos mucho más desarrolladas a la hora, por ejemplo, de la educacón. La educacón es una forma de desarrollo de la mujer, y el problema es en los países subdesarrollados, que no tenen esa educacón. La mujer, una vez que se eduque, ya se puede gualar con el hombre. (Voluntara) Las personas entrevstadas vnculan el nvel de desarrollo con la desgualdad de género y eso les lleva a afrmar que hay más desgualdades de género en los países del Sur que en los del Norte. Según la comparacón del índce de desarrollo humano y del índce de desarrollo de género de Nacones Undas, en líneas generales, la stuacón de las mujeres es mejor en países con nvel de desarrollo más alto. Sn embargo, el desequlbro y la desgualdad no sempre dependen del desarrollo económco (Cándda Gago 2006: 67). De hecho, hay países desarrollados con fuertes desgualdades de género como Japón o Luxemburgo, de la msma manera que hay países desarrollados con enormes desgualdades económcas. En ambos casos, el problema no son los recursos, sno el reparto de los msmos en funcón del sexo, la raza u otras varables. De hecho, la desgualdad de género en el mundo es un fenómeno unversal que trascende a las culturas, las razas, las clases socales o las fronteras. A las ONGD que comparten este planteamento les falta completar su análss, efectvamente, el modelo de desarrollo que tenemos perjudca a las mujeres, pero las personas nformantes no dervan su explcacón de esa premsa, sno que lo expresan de forma desvnculada de la stuacón global de desgualdad entre el Norte y el Sur. Por otra parte, este análss tene ndudables consecuencas en las accones que ponen en marcha, la más nmedata, como tendremos ocasón de analzar, es que tanto en el nteror de las organzacones, como en los proyectos de sensblzacón, desarrollados mayortaramente en el Norte, apenas se ncluye la perspectva de género. 24

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26 GÉNERO Y DESARROLLO CAPÍTULO 2 Sandra Dema Moreno Acabamos de analzar la dversdad de posturas y sensbldades acerca de las cuestones de género en las ONGD asturanas. En este capítulo vamos a mostrar que esa msma dversdad caracterza los dscursos sobre género y desarrollo. Algunas de las ONGD asturanas, aún hoy en día, se muestran nsensbles a la ncorporacón del género al desarrollo, otras tenen planteamentos cercanos al enfoque MED (Mujer y Desarrollo) y otras, por el contraro, se acercarían más a una postura GED (Género en el Desarrollo). Antes de entrar en el análss de los dferentes dscursos sobre género y desarrollo presentes en todas ellas, vamos a plantear brevemente cómo ha do evoluconando la ntroduccón de la perspectva de género en el desarrollo y cuáles son los prncpales enfoques teórcos exstentes. 26

27 1 DE LA INVISIBILIDAD DE LAS MUJERES A LA INTRODUCCIÓN DE LA PERSPECTIVA DE GÉNERO EN EL DESARROLLO La ntroduccón de la perspectva de género en el desarrollo no surge de forma espontánea, sno que es fruto del trabajo de los movmentos de mujeres, tanto de los países del Norte como del Sur, en su lucha por la gualdad. La ncorporacón de la perspectva de género está lgada a su vez al desarrollo de los derechos de las mujeres en el ámbto nternaconal, a través de las Conferencas Internaconales de Nacones Undas y de la presón mundal de muchas ONGD. En los más de cncuenta años que han pasado desde el fnal de la II Guerra Mundal ha habdo dferentes formas de entender el desarrollo y las mujeres no han sdo tratadas de la msma manera por todas ellas. Buena parte del pensamento en torno al desarrollo vgente hasta 1970 partía de una concepcón del msmo en térmnos fundamentalmente económcos; se trataba de aumentar la productvdad y aumentar los ngresos. Hasta ese momento, los programas de desarrollo gnoraban a las mujeres y sus destnataros eran exclusvamente los hombres. Sn embargo, la exclusón de las mujeres no equvale a la neutraldad de este tpo de polítcas, al contraro, frecuentemente tales polítcas han tendo un mpacto de género muy negatvo sobre el desarrollo de las mujeres, puesto de manfesto por la economsta Ester Boserup [1970], entre otras. Muchos de estos proyectos se dseñaron desde el llamado enfoque de Benestar 5. Tomando como base este enfoque se hceron polítcas de carácter desarrollsta, partendo del supuesto de que poblacón abundante era snónmo de mano de obra. Más adelante se consderó que, por el contraro, la causa de la pobreza eran las altas tasas de nataldad y se puseron en marcha polítcas de control de la nataldad, esterlzando a mujeres sn su conocmento y culpablzándolas de su stuacón de pobreza. Este tpo de actuacones se llevaron a cabo sn analzar que puede haber muchas varables que ncdan en la pobreza y en la fertldad, como la mejora de las condcones de vda y de gualdad de las mujeres, así como su empoderamento, o la asuncón por parte de los varones de sus oblgacones doméstcas y famlares, entre otras. De hecho, nvestgacones como las de Amartya Sen (1994) y Gta Sen, Adrenne Germane y Lncon Chen (1994), han revelado que el éxto de las polítcas de fecunddad no depende tanto del reparto de antconceptvos como de la gualdad y el empoderamento de las mujeres, así como de su capacdad para negocar con sus parejas estas cuestones. En todo caso, las polítcas que se realzaron bajo el enfoque de Benestar se lmtaban a reforzar el rol reproductvo de las mujeres. Su papel era el de meras ntermedaras, receptoras pasvas de una ayuda de carácter asstencal drgda a garantzar la supervvenca de las famlas. Este tpo de proyectos fueron muy populares y todavía se utlzan hoy día, su éxto en gran medda derva de que no cuestonan los roles de género y, por tanto, no consttuyen una amenaza para el orden socal establecdo. En la década de los setenta confluyeron dos elementos que marcaron un hto en la ntroduccón de la perspectva de género en el desarrollo. Por un lado, se produjo un cambo en la forma de entender el propo concepto de desarrollo. Ya no se trataba de buscar el crecmento acelerado de los países, sno un desarrollo sostenble. Lo que no sgnfca que haya que olvdar el desarrollo productvo, al contraro, hay que adaptarlo a las necesdades de la gente. En ese momento, el pensamento sobre el desarrollo pone en el centro las necesdades humanas. Por otro lado, a partr de los años 70, se produjo un auge de los movmentos femnstas -lo que conocemos como segunda ola del femnsmo- que nfluyó en la labor de Nacones Undas a favor de las mujeres (I Conferenca Mundal de la Mujer 1985, Década de la mujer ) y en la actvdad de las ONGD, ayudando a ntroducr la problemátca de genero en la agenda polítca nternaconal. Fue en estos años tambén cuando se denuncaron 5 Para un análss detallado tanto de este enfoque como de los desarrollados a partr de ese momento ver Carolne Moser (1991). 27