Familias Pehuenche: rol de la familia extensa en el cuidado de hijos de padres temporeros, experiencia comuna de Lonquimay.

Transcripción

1 Familias Pehuenche: rol de la familia extensa en el cuidado de hijos de padres temporeros, experiencia comuna de Lonquimay. Carolina Andrea Araneda Paillao Asistente social Lonquimay, 2015 Canción para hacer dormir a un niño mapuche (Beatriz Pichimalen) Gumaytapuñén may, gumaytapuñén may kupage guru may, kupage guru may xa pita puñén may, xa pita puñén may amutugué guru may, xa pita puñén may amutugué guru may kupaytá guru may, amutugué guru may umutuguépuñén may, xa pita puñén may, xa pita puñén may, xa pita puñén may Traducción: Lloran los niños, lloran los niños Vinieron los zorros, vinieron los niños Tuvieron miedo Váyanse zorros, váyanse Los niños tuvieron miedo Duerma, niño, duerma El zorro ya se va. El documento que a continuación se presenta pretende exponer una realidad que he podido observar de manera cercana y que es vivida por familias de nuestro país y en específico las niñas y niños del sector cordillerano de la novena región de la Araucanía. Por una parte se expone la situación infancia vista desde la perspectiva legal considerando documentos que se encuentran vigentes en nuestro país tales como la Convención de Derechos de Infancia con el objetivo de contextualizar el tema a presentar; por otro lado, se expondrá la dimensión cultural de las pautas de crianza utilizadas por estas familias, economía familiar y realidad local, para posteriormente llegar al tema que se quiere mostrar: el rol que cumple la familia extensa en la crianza y cuidados de hijos de padres temporeros de la comuna de Lonquimay. Para esto se consideran experiencias similares encontradas en documentos bibliográficos.

2 Recién en el siglo XVIII las sociedades occidentales, debido a diversos factores los avances médicos que prolongan la vida infantil, el desarrollo de la educación que motiva a los/as educadores/as a aprender más sobre esta población, entre otros, visibilizaron a los/as niños/as en tanto sujetos sociales, y se les comenzó a considerar como algo diferente a versiones en miniatura, débiles y calladas de los adultos 1. La Política de Infancia y Adolescencia de nuestro país se sustenta en el enfoque de derechos, donde es primordial el interés superior, el bienestar y protección del niño y de la niña en toda circunstancia que les afecte. Esta política expresa el reconocimiento de la responsabilidad básica de los padres y familia en la crianza y cuidado de sus hijos/as y la igualdad o responsabilidad compartida en esta tarea entre la madre y el padre. En esta misma línea nuestro país ratificó en el año 1990 la Convención de Derechos de Infancia, la cual busca promover los derechos del niño y en específico en el artículo número dieciocho, el que hace referencia al cuidado y protección del niño, señala: Es responsabilidad primordial de padres y madres la crianza de los niños y es deber del Estado brindar la asistencia necesaria en el desempeño de sus funciones 2. Sin embargo, Qué sucede cuando una familia que se encuentra en una precaria situación económica que por lo mismo debe separarse y buscar nuevos y lejanos puestos laborales? Qué sucede cuando el cuidado de los hijos se deja a cargo de un tercero delegando la labor de padre y cuidador o dejando esta responsabilidad en unos de los padres? Por otra parte, qué sucede con estos hijos que por motivos económicos deben muchas veces ser cuidados por abuelos, tíos, hermanos mayores o instituciones educativas, de este tema surgen muchas interrogantes que se plantean para realizar este documento, el cual pretende dar una mirada a la realidad que enfrentan muchas familias mapuche pehuenche de la cordillerana comuna de Lonquimay en la región de la Araucanía de Chile, por ejemplo: de qué forma la vida en comunidad contribuye al desarrollo de estos niños y niñas, qué rol cumplen las redes de apoyo que participan de este fenómeno. 1 Papalia y Wendkos (1987), citado en Pautas de Crianza Mapuche año 2006 pág. 9 2 UNICEF (2006). Comité Español, página 16

3 Ser un niño en esta zona: La cordillerana Comuna de Lonquimay se ubica a unos 150 kilómetros de la capital de la región, Temuco. Con una población de habitantes, de los cuales habitan en la zona urbana y habitan en las zonas rurales de la comuna 3 Lonquimay posee la superficie territorial más extensa de la IX región y por consiguiente existen grandes distancias entre los centros poblados más importantes y las localidades con escasa población con respecto al territorio. Las inclemencias del tiempo hacen que las actividades económicas sean reducidas, existiendo tres principales: la producción pecuaria (bovina, caprina, ovina y caballar), la producción maderera (producción de leña, metros rumas y aserraderos) y la tercera actividad económica es el turismo que paulatinamente se ha ido instalando. La gran mayoría de las familias de la zona cordillerana presentan una economía de subsistencia siendo una fuente principal de recursos los subsidios entregados por diferentes programas de apoyo social del Estado Chileno (subsidio único familiar, bonos programa Ingreso Ético familiar, entre otros). Es por esta razón que es imprescindible realizar una actividad remunerada que como ya mencionábamos anteriormente, debe realizarse fuera de la comuna. En la Cordillera de la región de la Araucanía vive una gran mayoría de familias Pehuenche, que significa gente del pehuen, son quienes viven de la recolección del piñón, fruto de la araucaria árbol típico de la región, el territorio Pehuenche se extiende desde Trapa Trapa hasta laguna Icalma, comprendiendo los valles que riegan los ríos afluentes del Bio-Bio, este hábitat se caracteriza por la presencia de grandes montañas entre ellos cuatro volcanes (Antuco, Copahue, Callaqui y Lonquimay) quienes rodean las áreas de poblamiento indígena 4. Se destaca también el paso fronterizo Pino Hachado. El padre de familia es quien debe salir en busca del sustento económico y en algunas ocasiones también la madre, para lo cual generalmente se dirigen a comunas del norte de 3 Oficina de Protección de Derechos de Infancia, Centro Cordillerano, Diagnóstico Comunal año 2008, página Fondo de solidaridad e inversión social, Ministerio de Planificación y Fundación Integra Región de la Araucanía, Sistematización Programa Veranadas comuna de Lonquimay, año 2006, página 15)

4 Chile tales como: Copiapó, Melipilla, Valle de Aconcagua, etc., también denominado por éstos El norte, donde cumplen funciones en las frutícolas en actividades que se extienden por todo un año tales como la plantación, poda de árboles, recolectores de frutas, etc. Es decir, participan de todo el proceso productivo de frutos, tales como uvas, frutillas y/o manzanas. Cada cierto tiempo estos padres regresan a sus hogares, proveyendo de dinero al núcleo familiar, abasteciendo de alimentos a la familia, vestuario y entregando afecto a los que se quedan en casa, casi siempre son tiempos cortos porque luego deben volver a sus labores cotidianas. Las familias, las mujeres, los niños, y los viejos se quedan en la casa en el campo. La mujer debe hacerse cargo de los animales, de vigilarlos, de cuidar las siembras, y muchas veces de sembrar y de cosechar. Además de la casa, de los niños, del cuidado de personas mayores, y de reuniones y otras cosas de la familia. La carga que les queda es pesada y se apoyan entre familiares tanto los que se quedan, como los que se van. Cuando son ambos padres quienes salen a trabajar, los hijos se quedan al cuidado de sus abuelos, hermanos mayores, vecinos o tíos. Debido a que las familias se ubican territorialmente cercanas entre sí, se favorece la vida en comunidad, permitiendo que los niños que se quedan al cuidado de abuelos, hermanos mayores o tíos puedan sentirse acompañados frente a cualquier necesidad. En la cultura Mapuche, che quiere decir gente y cuando hablamos de niño o persona pequeña se dice pichike che, concepto que se utiliza para denominar a la persona pequeña, comprende el lapso de tiempo desde que ésta nace hasta que logra cierta autonomía sobre las cosas, aproximadamente entre un mes y los diez o doce años 5. La condición socio económica de una familia mapuche y la tenencia de tierras influyen en la cantidad de hijos que tendrá esta familia hoy en día, este cambio desde una idea de más hijos, mejor desarrollo y trabajo se ha modificado por menos hijos, mejor futuro para ellos mismos, por lo cual ya no es común ver familias numerosas, tal como lo es a 5 Quidel y Pichinao, citado en Pautas de Crianza, año 2006, página 20.

5 nivel país. Existe una preocupación por darles bienestar a los hijos, darles abrigo, alimentación, vestuarios y educación. La familia mapuche es la primera unidad social de educación, es el primer contexto en el que se desarrollan pautas de socialización para incorporar a los niños y niñas a la vida en sociedad, en este proceso también participan distintas generaciones: abuelos, padres, madres, tíos, hermanos etc. Ser familia significa escucharse, conversar y respetar a los integrantes de esta. Este respeto y consejo se plasmaba en espacios en que se compartía en familia. Al compartir se conversa, se cuentan los problemas, se demuestran sentimientos. En el pasado antiguo y en el más inmediato esto se hacía de manera cotidiana, era la forma en que el cariño se expresaba. El compartir y conversar es un valor que se mantiene, no obstante se expresa en prácticas que se adaptan a los nuevos contextos, por ejemplo, en la búsqueda de material para realizar este documento la investigadora conversa con una joven de 23 años del sector Pehuenco quien tiene una hija de 3 años, juntos con su pareja debe salir a trabajar al norte durante la temporada de verano 2015 para costear sus estudios superiores en Temuco, la hija se queda a cargo de la madre de la joven. Esta joven señala que es muy importante conversar todos los días por teléfono con su madre y con su hija ya que de esta forma se sienten menos lejanas y a la abuela que cuida a su hija le resuelve dudas sobre el cuidado de la niña que solo ella como madre comprende; esta joven que deja a su hija siente que es imprescindible la ayuda que le brinda su madre ya que sin ésta ella no podría estudiar ni trabajar, le da confianza dejarla ya que sabe que será bien cuidada. Para la cultura Mapuche las personas mayores son muy valoradas y respetadas. Se respeta y valora enormemente la presencia de los abuelos son las raíces, el tronco de la familia, su compañía, apoyo y el aprendizaje que se obtiene de ellos, apreciándose la

6 importancia del kimun concepto que quiere decir: sabiduría, conocimiento o conocimiento que ellos portan 6. Las redes comunitarias que existen en este contexto aportan en la crianza de los niños, tales como: las Escuelas, Jardines Infantiles, Postas rurales, Juntas Vecinales, Iglesias etc. La existencia de estas redes comunitarias permiten que las familias que no tienen presente a uno o ambos padres cuenten con apoyo externo, éstas se convierten en factores protectores para los niños, niñas y familia que se queda en el hogar. Si bien el cuidado es delegado a un tercero, cabe destacar que existe una preocupación y como ya se mencionó anteriormente es necesaria la salida de la comuna para conseguir el sustento económico. Conclusión Si bien como ya hemos mencionado el cuidado y protección de los hijos es de responsabilidad de los padres, existen diferentes realidades en nuestro país, en las cuales como ya hemos visto los cuidadores deben delegar esta responsabilidad en un tercero, el cual muchas veces es abuelo (a), tío (a) o un hermano (mayor), este hecho es parte de cuidar y proteger a un hijo ya que se deja con alguien que puede hacerse cargo y en quien confían. De esta forma, se releva el rol que las redes de familia extensa o comunitaria pueden jugar en relación al cuidado y protección de los niños, apelando entonces a instancias donde la parentalidad adquiere un sentido más amplio, que el biológico. En especial, en localidades con presencia de una cultura con énfasis en la fortaleza de los lazos familiares extensos y comunitarios. Salir a buscar el sustento económico también es una forma de cuidar a un hijo, de darle alimentación, vestuario, entre otros. Es parte de ocuparse del bienestar de este hijo, pero cabe mencionar que el afecto, el cariño y la presencia física no son permanentes. 6 LLanquileo, Cristina. Desarrollo Familia y cultura Mapuche: aportes para un enfoque intercultural en los programas de infancia, noviembre 2011, página 35.

7 Emocionalmente afectará en la relación de afecto la presencia temporal de un padre temporero?, es una interrogante que podría ser parte de una futura investigación, especialmente pues no existe mucha información sobre el tema, o no ha sido explorado, mucho menos en esta zona. Bibliografía Centro Interdisciplinario de estudios de género CIEG, Facultad de Ciencias Sociales, Universidad de Chile, Departamento de Salud Pública, CIEGES, Universidad de la Frontera. Marzo, Pautas de crianza mapuche. Estudio: Significaciones, actitudes y prácticas de familias mapuche en relación a la crianza y cuidado infantil de los niños y niñas desde la gestación hasta los cinco años. UNICEF Comité Español Junio de 2006, ( Oficina de Protección de Derechos de Infancia, Centro Cordillerano, año 2008, Diagnóstico sobre los derechos de los niños, niñas y adolescentes de las comunas de: Lautaro, Perquenco, Curacautín y Lonquimay. Fondo de solidaridad e inversión social, Ministerio de planificación. Fundación Integra Región de la Araucanía, año 2006 Sistematización programa Veranadas comuna de Lonquimay. Cristina LLanquileo Romero Consultora e Investigadora Principal Asistente Social, Mg Antropología. Desarrollo Familia y cultura Mapuche: aportes para un enfoque intercultural en los programas de infancia, noviembre 2011