La base de la moral heterónoma y de la moral autónoma.

Transcripción

1 El camino de la prosocialidad O hacia la adquisición del sentido moral desde un enfoque predominantemente psicogenético. Prof Lic Mirta Graciela Fregtman Dice Piaget en algunos escritos sobre educación, al respecto de la educación moral: Se pretende que el niño en su forma de relacionarse con el adulto y con otros niños, esté regido por el respeto y la admiración, basándose en sus valores. No se pretende una valoración por miedo o por estatus, es decir, que tenga que obedecer por ser niño, al contrario, se pretende en el mayor grado posible una autogobernación y que pueda tener la confianza y el respeto suficiente para expresar sus puntos de vista, así como para también escuchar y respetar los de otros. En resumen se pretende fomentar: el pleno desarrollo de la personalidad humana y el respeto por los derechos del hombre y por las libertades fundamentales. El desarrollo cognitivo en un sujeto corresponde al tránsito por un camino que parte de un estado de puro egocentrismo hasta la posibilidad de la reversibilidad. Esto puede observarse en el diferente nivel de complejidad de problemas matemáticos que se pueden resolver; en las reglas gramaticales que se pueden atender; en las relaciones sociales y vínculos objetales que se pueden establecer. Ubicaremos a los fines de estudio, al niño en el Período operatorio concreto, para observar la evolución en sus acciones, desde distintos ángulos o áreas, y elegir así, por lo significativo y paradigmático, lo relacionado con la prosocialidad y el sentido de la moral. Ambos sentimientos tienen su momento inicial en el período preoperatorio, aunque hay estudios que atestiguan que se hallan prólogos a los 6 meses José Andrés Rodríguez en 2010, escribió: Los bebés nacen con sentido moral o, por el contrario, éste es resultado exclusivo de la socialización? Algunos expertos en psicología infantil, como Sigmund Freud o Jean Piaget, consideran que los niños nacen sin ningún tipo de sentido moral. No obstante, según un estudio de la Universidad de Yale (EE.UU.), los bebés de apenas 6 meses de edad ya están preparados para realizar juicios morales, es decir, saben distinguir entre lo bueno y lo malo. Distinguir el bien del mal es fundamental para vivir en sociedad. La moral es el conjunto de valores que rigen el comportamiento humano Para el recién nacido, nada es bueno o malo desde un punto de vista moral. Aún siendo diferentes sus teorías, Sigmund Freud, alemán, padre del psicoanálisis, Jean Piaget, el biólogo suizo o el psicólogo estadounidense Lawrence Kohlberg consideran que el bebé nace sin ningún tipo de sentido moral coincidiendo en señalar que la misma se desarrolla en cada persona, atravesando una serie de fases, que son las mismas para todos los seres humanos y que se dan en el mismo orden secuencial. Montserrat Conde, profesora de psicología en la (UNED) Universidad Nacional de Educación a distancia, afirma que la expresión de la conducta moral está en manos de los agentes socializantes, fundamentalmente de la familia. Sin embargo según una investigación dirigida por Paul Bloom, en el Infant Cognition Center, de la Universidad de Yale (EE.UU), los bebés nacen con un código ético embrionario, concluyendo los autores, que los niños de 6 meses pudieron haber elaborado juicios morales. Tras analizar varias experiencias los investigadores creen que autores como Freud, Piaget o Kohlberg están equivocados y que los bebés nacen con ciertas nociones, aunque muy básicas, sobre qué está bien y qué está mal. Es difícil demostrar cualquiera de las dos posturas pero considerar como verdadera esta última supone aceptar que hay un código moral universal. No concuerdo con esta opinión. Será en la infancia y en la adolescencia cuando aprendan e interioricen normas y valores que jugarán un importante papel en la identidad y la personalidad 1

2 Desarrollo del sentido moral El desarrollo del sentido moral es fruto de varios factores interrelacionados: el desarrollo cognitivo, las experiencias del niño con su entorno (sobre todo, los hechos que provoquen en él reflexión) y rasgos de comportamiento genéticamente condicionados. Es muy difícil establecer a qué edad los niños son capaces de comenzar a distinguir el bien del mal. La adquisición de estos valores, aunque se dé al inicio de la infancia, "se estabiliza luego de un largo período de tiempo no coincidente para todos" Dijo la Madre Teresa de Calcuta No importa si los chicos no te escuchan, igual te están mirando. Los padres son fundamentales en el desarrollo moral del niño, luego a medida que éste crece, el rol de la escuela y de sus pares adquiere gran relevancia. Aumentan las horas que los niños pasan en el colegio, encontrando sus principales referencias en dicha comunidad escolar. De manera transversal, los valores deberían estar presentes en todas las materias y asignaturas escolares. La falta de tiempo, las propias crisis personales o valores erróneos de los padres pueden entorpecer el desarrollo moral de los hijos y suele suceder que éstos, actualmente, se dirigen a la escuela para que ésta corrija las posibles carencias morales que hay en casa. En realidad los educadores, terapeutas, líderes comunitarios también pueden adolecer de dichas carencias y sólo tienen la función de suplementar o complementar. "Por norma general, los niños entienden bastante bien su rol"; los pequeños conocen las diferencias entre qué pueden y deben hacer los adultos y qué actuaciones no son apropiadas para los niños. La conducta moral del niño no sólo va a depender de su capacidad de juicio moral sino también de su desarrollo cognitivo. Ambas son variables a tener en cuenta. Las teorías cognitivo - evolutivas presuponen que existe un genuino desarrollo moral, es decir, un progreso desde formas primitivas de moralidad hasta otras más avanzadas, si bien hay diferencias entre los autores respecto a cómo caracterizar ese desarrollo. En 1932, Jean Piaget publicó un libro titulado "El criterio moral en el niño" que se convertiría en una de las obras mas importantes sobre el desarrollo moral en la niñez. Piaget no se limitó a estudiar si los niños obedecen o no las normas, o si son capaces de valorar como "malas" o "buenas" ciertas conductas, sino que quiso profundizar en el modo en que interpretan y juzgan problemas morales relacionados con la justicia, la obediencia, la mentira, el robo o el castigo. Fue el primer autor en destacar la necesidad de distinguir entre 2 formas cualitativamente diferentes de experiencia social en la formación de la moralidad infantil: 1- las interacciones que tienen lugar entre iguales y 2- las que establece el niño con las figuras de autoridad. Según Piaget, cada tipo de relación de objeto, o estadio por el que atraviesa es fuente de un tipo diferente de moralidad. La base de la moral heterónoma y de la moral autónoma. Los adultos suelen esmerarse en enseñar a los niños distintas normas, (prudenciales o cómo cuidarse de acciones peligrosas o riesgosas; normas básicas de relación con los otros o cómo preservar el bienestar físico y psicológico; evitar la mentira; respetar la propiedad, etc.) y utilizan diversas formas de control para intentar que se cumplan. Aún con estilos educativos o características intelectuales diferentes, los padres no siempre facilitan la comprensión del significado de normas, límites y castigos. Es así que es probable que el niño experimente la 2

3 autoridad de los padres como si fueran órdenes, exigencia, obediencia y la imposición de sanciones o premios. Según Piaget, este tipo de relación promueve necesariamente una moralidad heterónoma o de obediencia a la autoridad, basada en el respeto unilateral del niño al adulto y en el acatamiento de normas que son externas a su conciencia. Será a través de un extenso recorrido, donde incluimos la adquisición de la reversibilidad, cuando el sujeto, ya adolescente o adulto podrá desarrollar una moralidad autónoma, basada en el principio de justicia y no en el de autoridad. En la moral autónoma el niño se apropia de ciertas normas que en un principio son externas, y las interioriza reelaborándolas. Piaget sostiene que estos dos tipos de moral se suceden evolutivamente, sin que se trate de etapas en sentido estricto. Los niños empiezan su vida social siendo fundamentalmente heterónomos debido a su egocentrismo (centración sobre sí mismo y por ende dificultad para adoptar distintas perspectivas) y sólo a medida que se superan estas características con el progreso intelectual es más probable que su moralidad adopte una forma más autónoma. Pero Piaget no niega que las dos formas de moralidad puedan coexistir en distintas etapas de la vida por razones que van más allá de los aspectos puramente intelectuales. Piaget era consciente de que la autonomía moral no era una "etapa" que se alcanzaría de una vez por todas en la vida. Si al individuo no se le da la oportunidad de practicar la cooperación y el respeto mutuo, y si las propias instituciones sociales promueven el conformismo por encima de la reflexión, entonces difícilmente se impondrá la autonomía moral sobre la heteronomía. Es practicando otras relaciones que el niño superará el estado de subordinación moral. La sociedad provee a los niños numerosas experiencias de interacción con otros niños. Comienza el momento de descentración. La ocasión de experimentar la relación de paridad surge de estas interacciones y, es a partir de ellas, como el niño se involucra crecientemente en actos de cooperación y reciprocidad. El tipo de respeto que nace de las interacciones entre iguales es muy diferente del que siente el niño por una figura de autoridad adulta. Se trata de un respeto mutuo, donde todos tienen los mismos derechos y ninguno debe subordinarse a los mandatos de otro. A este respeto mutuo, al que uno acuerda voluntariamente, lo llamaré ética. De la moral a la ética (prosocialidad) Piaget plantea en Seis estudios de psicología que el resultado más evidente de la aparición del lenguaje es el permitir un intercambio y una comunicación permanente entre los individuos. Estas relaciones interindividuales crecen a partir de la segunda mitad del 1er año merced a la imitación, relacionando sus progresos con la actividad sensorio motriz. Por medio de la imitación aprende, sin técnicas heredadas. Ese aprendizaje al inicio se produce por simple excitación, por los gestos análogos del otro, de sus propios movimientos, principalmente de sus manos, luego en base a sus recuerdos y finalmente recordando movimientos complejos y/o recombinando. La imitación de los sonidos sigue un curso semejante, especialmente cuando están asociados a movimientos. Así surge el lenguaje de palabras; y con ellas la vida interior que es posible poner afuera, ex presar, poner en común, comunicar, comunicarse. Agrega Piaget, que existen categorías de hechos: - Los hechos de subordinación y las relaciones de coacción espiritual ejercida por un sujeto con más poder (padre, madre, luego maestro, médico) sobre el niño o subordinado (véase relación con la religión o sistemas demagógicos sobre las masas). Con el lenguaje al niño se 3

4 le revelan las riquezas de un mundo de realidades superiores a él; este mundo se le aparece seductor y prestigioso. Baldwin dice que un yo ideal, poblado de órdenes y consignas le impone respeto y hace que las crea obligatorias y las acepte. Se desarrolla una sumisión inconsciente, intelectual y afectiva, debida a la coacción espiritual del adulto. - Los hechos de intercambio, las intercomunicaciones entre adultos o ya entre niños son decisivas en la medida que conducen a incentivar la acción propia y su relato, que las transforman en pensamientos. La memoria está relacionada con el relato, la reflexión con la discusión, la creencia al compromiso, el compromiso a la promesa, todo lo anterior al pensamiento y éste al lenguaje interior y exterior. (Pierre Janet) Así comienza el Super yo; sobre mí. Es la internalización afectiva de los padres y de los padres de mis padres sobre mi subjetividad. El camino que se sigue para la socialización es el mismo que se camina para alcanzar la moral compartida, o sea, la ética. Se está socializado si no se acuerda a aceptar las reglas de juego, aún adulto? Se es moral si se pervierte un acuerdo de todos, si se miente, se oculta, se actúa corrupta y ego céntricamente (fuera del estadio en que es normal)? Si no se acepta el código de todo el grupo, se está obrando socializadamente? El aceptar normas, es aceptar la Ley. Según Piaget esto sucede en un momento en el que es posible la aceptación de la ley del padre. Antes es obediencia, respeto, temor a la castración, huída, evitación pero no aceptación de las normas dictadas por la sociedad a través de nuestros propios padres. Por esto es que los niños hasta casi los 7 años de edad caprichean, y no saben discutir y aceptar puntos de vista diferentes, constituyen un monólogo colectivo (lo cual sucede asimismo en ciertos grupos de adultos). Siendo entonces que las primeras conductas sociales permanecen a mitad de camino de la auténtica socialización, son una auténtica primacía del punto de vista propio, la coacción espiritual (en esta sociedad occidental también material) ejercida por un adulto o alguien por encima del niño no es aún una coordinación diferenciada. Esta indiferenciación de lo propio y lo ajeno lleva a no tener que demostrar nada, sólo afirmar. No hay justificación ya que basta con afirmar algo, sin reflexión para un acuerdo. Según su pensamiento egocéntrico hay un solo conocimiento posible, el propio, por lo que no se necesita reflexión ni sustento. Es un tipo de inteligencia práctica del pensamiento. La intuición y la reconstitución del todo constituyen ya una anticipación articulada. Si la cooperación entre individuos coordina sus puntos de vista en una reciprocidad que asegura la autonomía y su cohesión y el agrupamiento de las operaciones intelectuales sitúa los diversos puntos de vista en un conjunto reversible carente de contradicciones, la afectividad se caracterizará por la aparición de nuevos sentimientos morales y una voluntad más organizada que desembocan en la integración del yo y un ajuste de su vida afectiva. 4

5 Entonces Los 1eros sentimientos morales surgen del respeto unilateral del niño hacia padres o adultos. MORAL DE OBEDIENCIA HETERÓNOMA Con cooperación y nuevas formas de intercambio social arribaremos a la MORAL AUTÓNOMA Y RESPETO MUTUO. Génesis del deber: Podemos reconocer con Piaget, la siguiente génesis del concepto del deber, o deber ser, 1º cumplimiento indeterminado por ejemplo no mentir. En este momento el niño no miente porque no hay que mentir. En un 1er estadio se cumple simplemente por la justificación de la sinrazón. Quizás también porque el padre o la madre se lo dicen, para seguir siendo amados, o por identificación. Es necesario ubicar a este niño o niña apenas habiendo transitado la etapa fálica, con necesidad de ser querido y de identificarse con alguno de sus padres. A este 1º estadio también podemos denominarlo como de Imitación del Otro. Las reglas emitidas por los otros, por algún Otro, otro sujeto significativo, dan imagen del otro social, generalizado, sujeto social; aunque también transmiten, cuando las cumplo, imagen de mí. Es decir, la teoría psicoanalítica, explica esto diciendo que así se constituye el yo ideal, a partir de la identificación porque lo dice Él, el padre, la Ley o Ella, la madre; por la aceptación involuntaria o inconciente de ese recién constituido ideal del Yo. 2º el respeto es lo más importante! No se mentirá por respeto. No se roba por respeto. Se obedece por respeto. El respeto es afecto más temor. Ahora la regla es y debe ser cumplida porque lo dice el padre, más allá de toda significación o reflexión (que aún no la hay). A este 2º estadio también podemos denominarlo como de Por respeto, es decir el afecto (involucrado en la identificación y en la elección de objeto) más el temor (temor a la castración) ambos residuos del complejo de Edipo, conducen al surgimiento de la obediencia a la regla, norma, ley, Ley. También el poder debe incluirse por el nuevo advenimiento del orden social o de la inserción en el sistema social. La descentración, la aceptación de que existe otro diferente de mí, la posibilidad que hayan otras razones además de la mía, otros puntos de vista; sólo el avizorar esas otras razones, reglas, verdades relativas, hacen que comience el sujeto a intentar explorar el mundo, salir del cascarón familiar, partir hacia el conocimiento de otros mundos más allá de mi mundo, salir del egocentrismo por una abertura que conducirá al conocimiento de lo que no es él mismo y al aceptar otras verdades válidas llegará a situarse en la reversibilidad de pensamiento. En algún momento del desarrollo el pequeño sujeto debe haber sentido que el adulto, el grande, la mamá, el papá, la maestra, el doctor, los abuelos, eran quienes todo lo sabían, quienes poseían la totalidad del conocimiento, de las razones. Poco a poco advertirá que él puede acceder a ese mundo, sólo falta caminar y emprender el camino y es así que podrá respetarse a sí mismo. Surge el respeto mutuo, por el otro y por mí. Erik Erikson sitúa el nacimiento de este sentimiento en la primera edad o primeros tiempos de vida. Sí, es cierto, allí se instala, pero ahora, ese sentimiento es simbolizado, representado, pensado. La autoestima, la seguridad y confianza surgidas entonces se pondrán de manifiesto mostrando una base segura de apego, cuando pueda hacer amistades en las instituciones a las que ingresa fuera del ámbito familiar: sitios de educación, deportes, recreación, aprendizajes varios, amigos. 5

6 3º este estadio llamado Heteronomía es al que arribaremos si maduramos lo suficiente para tornarnos adultos. No todo sujeto que crece cronológicamente, en años calendario, culmina todos los estadios de los períodos que lo conducen a ser adulto. Es necesario atravesar y superar ciertos escollos, obstáculos, con éxito. Y abandonar el privilegio egocéntrico es uno de ellos, quizás una de las regresiones más difíciles de superar, por los privilegios ilusorios que supone conseguir. Hetero significa otro, separado, diferente o que se rige por un poder o ley externos. Sujeto a un poder externo o ajeno que impide el desarrollo de su voluntad y naturaleza: Nomía, norma. En el infante la heteronomía, para el psicoanálissi, será entrar en un mundo por fuera de su gamo, salida exogámica. Desde la psicología genética, sería pensar que se descentra, que puede entender 2 variables simultáneas de un objeto, accede a la semireversibilidad. Hasta los 7 u 8 años la identificación con la imagen paterna o figura de autoridad hace que el respeto se disocie: por un lado el Afecto puesto sobre el objeto como motor del pensamiento y el Temor. El temor ante la Ley hace que se pueda querer obedecer para evitar el castigo, más que por entender de qué se trata el acto justo. Luego vendrá otro momento de desarrollo en el que las leyes se adopten por convicción de que la justicia es justicia más allá del respeto, el miedo, el afecto, la identificación o porque sí como una razón de la sinrazón, pero eso es pasión, es parte del amor, no rige para la conducta legal). Así partimos de Imitar la imagen paterna a la ambivalencia sistemática (origen de la culpa respecto de las figuras de autoridad). El Respeto se disocia en: - Las leyes, las reglas, las normas, las consignas hasta los 7 años se cumplen porque son Sagradas. - A los 7 u 8 años se cumplen por Obediencia. Inteligencia representativa ----Centración sobre la acción propia Y sobre lo figurativo de lo real. Después Coordinaciones de lo real Luego Coordinaciones de acciones que conforman un Sistema operativo de trasformaciones + Conservaciones o invariables que liberan Lo representativo de lo real, sus apariencias figurativas. De los 2 a los 8 años, estamos en el apogeo del juego simbólico Asimilación de lo real al Yo y su deseo. Y vamos evolucionando hacia Un objetivo del símbolo Y La socialización del Yo - Recién después se obedece por el sentido de justicia, que ha de llegar recién con el sentimiento de la reversibilidad logrado. Resumiendo Vamos de obediencia debida,.. a obediencia relativa afectiva. obediencia relativa afectiva..a respeto muto o reciprocidad por descentración (sentimiento más profundo y duradero) Este último incluye intercambios sociales. (Todos estos sentimientos son individuales e interindividuales) para culminar en coordinación de puntos de vista u operaciones y en cooperación en las acciones e informaciones. 6

7 De lo puro tierra, real, concreto, bebé, niño pequeño A puro cielo, imaginario, fantasía, adolescente, La moral se aprende en un contexto moral social, en un entorno que la practique. No se puede aprender la moral sólo se puede aprender las reglas del juego. (John Lennon, Todo lo que necesitas es amor) Decime qué es la moral. Quizás no sea casual Mientras redactaba estas líneas, traté de hallar el significado de la moral. Me preguntaba qué es la moral? Y recordé una canción con la que mi hermano ganó un importante concurso de Artes y ciencias allá por los 60 y pico. Los adolescentes, los jóvenes se preguntaban qué era eso que llamamos moral y encontraban la respuesta en lo opuesto a las contradicciones del sistema, de las personas, de las instituciones. Es decir que la moral tendría relación con la coherencia, la cohesión entre las distintas caras de alguna cosa, las ideologías no chocándose con los actos? Así decía la canción, idealista, soñadora, con que mi hermano ganó el 1er premio del concurso de Artes y ciencias, el Acusticazo, de Decime qué es la moral. Carlos Fregtman Escuchame me propongo que te pongas a pensar y desvíes tus ideas, decime que es la moral La moral es la costumbre de tenerte que aguantar lo que vos querés hacer por el bien de los demás Los demás también son vos pero vos no sos el más Hoy salimos a la calle todo el mundo es un ladrón que caro están los precios criticas a la inflación Tenés ganas de pararte, de repente a insultar lo que pasa, te acordaste que el negocio es de papá Vos decís que sos del lado que no quieren los demás No te gustan los burgueses ni los nenes de mamá Sin embargo te pasaste los tres meses en el mar No ves que nos engañamos vos yo el y los demás? La moral o moralidad (del latín mos, moris, costumbre y de ahí moralis 'relativo a los usos y costumbres') son las reglas, posicionamientos, normas o consensos por las que se rige y juzga el comportamiento o la conducta de un ser humano en una sociedad (normas sociales). En ese enfoque lo que forma parte del comportamiento moral está sujeto a ciertas convenciones sociales y no forman un 7

8 conjunto universalmente compartido. Además, la mayoría de las sociedades humanas parecen compartir un núcleo de consensos sobre la inaceptabilidad de ciertas conductas, ampliamente rechazadas (entre ellas la mentira ventajosa, el causar grandes daños a personas inocentes o desvalidas, etc.) 8