Los desafíos de las prácticas integrales en la formación agronómica

Transcripción

1 Los desafíos de las prácticas integrales en la formación agronómica Cecilia Blixen Erik Russi RESUMEN La Universidad de la República (UdelaR) de Uruguay ha iniciado un proceso de reforma, que entre otros busca mejorar la integralidad de sus funciones. Uno de los mecanismos ha sido la generación y fortalecimiento de Unidades de Extensión a nivel de las Facultades. Este es el caso de la Facultad de Agronomía, que no contaba con una unidad de gestión específica que dinamice y fomente las actividades de extensión, además de vincularlas con las actividades de investigación y enseñanza. La forma de operativizar esta vinculación ha sido a partir de la generación de los Espacios de Formación Integral (EFI), que buscan generar ámbitos curriculares enfocados en problemas reales de la sociedad. En este marco el grupo de Sociología Rural, a iniciativa de un grupo de estudiantes, generó la propuesta de un curso taller que aborda problemáticas de un territorio donde confluyen intervenciones de la sociedad civil organizada, la UdelaR y el Estado. El objetivo central de este trabajo es analizar este proceso general de la UdelaR, centrando el foco en la Facultad de Agronomía y puntualmente en el diseño y ejecución del curso taller Sociedad, Estado y Universidad: encuentros y desencuentros en torno al desarrollo.

2 La Universidad en obra En los últimos años, la Universidad de la República de Uruguay (UdelaR) ha iniciado un importante proceso de reforma, que entre otros objetivos tiene el de transitar hacia un crecimiento en la integralidad de sus funciones, enseñanza, investigación y extensión, tal como se expresa en su Ley Orgánica. Según Tommasino (Pro Rector de Extensión) La generalización de prácticas integrales donde los procesos de aprendizaje integren la extensión y la investigación será uno de los elementos centrales de la Segunda Reforma Universitaria. 1 Continúa diciendo que avanzar en este sentido será posible en la medida que se construya una universidad integral, que articule las funciones e involucre en este proceso a los distintos servicios que la integran y también a la comunidad, que deberá ser implicada para la búsqueda de las problemáticas y las soluciones. Las acciones emprendidas buscando avanzar en este sentido han sido muchas, entre ellas destaca, por su centralidad en relación al proceso que se busca desencadenar, la generación y fortalecimiento de Unidades de Extensión a nivel de los distintos servicios universitarios o Facultades. Las unidades de Extensión son concebidas como catalizadores de la extensión y de las prácticas integrales en los servicios ( ) Deberán impulsar la integralidad en la capilaridad de los servicios. La integralidad vivirá y se reproducirá en los servicios o será un proceso estéril que no repercutirá ni en la dinámica interna de la institución, ni permitirá que la Universidad sirva críticamente a la sociedad de la cual es parte. (Tommasino, 2009). La generación de las Unidades en los distintos servicios es acompañada por la generación de una Red de Extensión que tiene como objetivo Impulsar y profundizar la extensión universitaria para generalizar prácticas integrales a los efectos de contribuir a la transformación de los modelos establecidos de formación universitaria. Esta Red tendrá como integrantes a los diferentes programas de extensión, los espacios cogobernados relativos a Extensión de cada servicio, los departamentos, institutos o áreas que estén interesados y dónde las Unidades de Extensión serán los nodos de la red al interior de cada servicio. (SCEAM, 2009). Además se ha propuesto como parte de este proceso, la curricularización creciente de actividades de extensión. La incorporación de las prácticas integrales ( ) en la currícula de las distintas carreras o formaciones profesionales requiere de la consideración de diferentes 1 Tommasino, H Generalización de las prácticas integrales. Los aportes de la extensión para su implementación. Revista En Diálogo (Año I, N 3). SCEAM, Montevideo.

3 instancias en donde se concretarán. La primera son los Espacios de Formación Integral (EFI), que permitirán la curricularización de este tipo de actividades a nivel de las diferentes carreras. La segunda es la de los Itinerarios de Formación Integral (IFI), que asegurarán la continuidad de los procesos a lo largo de la trayectoria formativa de los estudiantes. 2. Estos espacios de formación deberán integrar conocimientos de diversas disciplinas, para los cual es necesario que los equipos docentes generen abordajes interdisciplinarios en el largo plazo. Además se entiende que en la medida que estos espacios se integren en algunos programas de extensión existentes, que se asumirán como programas plataforma, los procesos desencadenados serán más respetuosos de las dinámicas propias de la población con la cual se interactúa. 3 Sobre esto Cano (2010) afirma que Estos espacios e itinerarios son una fuerte apuesta a la transformación de la Universidad que viene germinando lentamente, en un proceso que implica cambios profundos para los estudiantes y docentes. El papel dinamizador de la extensión en esta reforma de la enseñanza es fundamental, centrando el aprendizaje universitario en la búsqueda de respuestas adecuadas a las problemáticas de la comunidad, de forma integral. Desde el punto de vista metodológico, la implementación de los EFIs, hace necesario rediseñar las formas de evaluación. En este escenario ya no es posible pensar en las tradicionales evaluaciones por disciplina sino que es necesario el diseño de formas de evaluación que permitan reflejar la complejidad y que además incorporen eventualmente a los actores no universitarios involucrados. Es claro que el camino que se ha iniciado implica numerosos cambios a nivel de la Universidad en su conjunto y también a nivel de los servicios universitarios y los equipos docentes que llevan adelante las distintas actividades. Este no solo es un cambio desde el punto de vista metodológico sino que implica un cambio en las actividades cotidianas de los actores universitarios, donde es fundamental el involucramiento y apropiación de la propuesta por parte de los docentes y la Universidad toda. Transitar este proceso implica cambios importantes en relación a cuestiones como la evaluación docente, los paradigmas en los cuales se ha basado la investigación desde la Universidad, el relacionamiento entre estudiantes y docentes y el relacionamiento de la Universidad con la comunidad. 2 Documento aprobado por el Consejo Directivo Central de la UdelaR. Para la Renovación de la enseñanza y curricularización de la extensión y actividades en el medio. 3 Idem 2

4 La Facultad de Agronomía y los Espacios de Formación Integral En el marco de las transformaciones propuestas para la Universidad, en la Facultad de Agronomía, se crea en el año 2009 la Unidad de Extensión y Actividades en el Medio (UNEAM). Esta Unidad tiene como objetivo general: Contribuir al fortalecimiento de los vínculos entre la Facultad de Agronomía y la sociedad uruguaya, a través del desarrollo de actividades de extensión y relacionamiento con sus actores, jerarquizando la función universitaria de la Extensión e integrándola a los procesos de Enseñanza-Aprendizaje y actividades de Investigación. 4 Una de las tareas fundamentales de la Unidad en los últimos meses ha sido propiciar la discusión a la interna de la Facultad de Agronomía sobre la generación de EFIs a partir de las actividades curriculares existentes o diseñar nuevas propuestas que se constituyan en espacios de formación integral. Es a partir de esta convocatoria, sumada a la iniciativa de un grupo de estudiantes, que el grupo disciplinario de Sociología Rural se integra a pensar en conjunto el curso Sociedad, Estado y Universidad: acuerdos y desacuerdos en torno al desarrollo. El curso surge inicialmente de la propuesta de curricularizar una pasantía estudiantil en la localidad de Bella Unión en torno al Sindicato de trabajadores de la caña de azúcar (UTAA). Es a partir de esta demanda que se generan los objetivos del curso que quedan plasmados de la siguiente manera: Brindar a los estudiantes elementos conceptuales y realizar prácticas de extensión universitaria, tendientes a la comprensión de las realidades, las dinámicas y las estrategias de distintos actores sociales y de diversas instituciones estatales en los procesos de Desarrollo Rural. Se agregan como objetivos específicos la incorporación de un marco conceptual con los temas fundamentales del desarrollo rural, la identificación de los principales actores presentes en el territorio, el análisis de los conflictos de intereses que se producen y las dinámicas sociales resultantes, y finalmente, aportar a los estudiantes herramientas que los introduzcan en el desarrollo de una praxis de extensión universitaria. 5 En el curso se proponen dos bloques, el primero de conceptualización y discusión de los principales conceptos que se quieren trabajar e incorporar, el segundo es una pasantía en el territorio. El segundo bloque se articula con el equipo docente del Centro de Formación 4 Modernel, P Atribuciones de la Unidad de Extensión y Actividades en el Medio (UNEAM). Sin publicar 5 Programa del curso 2010.

5 Popular de Bella Unión (CFPBU), uno de los programas plataforma del SCEAM, que trabaja conjuntamente con los Sindicatos de trabajadores y pequeños productores de Bella Unión desde hace algunos años y que además ha acompañado el proceso de generación del CFPBU. De esta forma lo que inicialmente era una pasantía estudiantil comienza a tomar forma de EFI. Al momento de escribir este trabajo el curso todavía no se ha realizado, por lo tanto no se puede dar cuenta de una evaluación conjunta con los estudiantes y la comunidad, pero si se puede dar cuenta del proceso de generación y puesta en marcha de esta iniciativa, que pretende además poder ser repicada y multiplicada. En primer lugar la generación del esquema de trabajo, los temas a tratar, las actividades a realizar han exigido la participación de cuatro equipos distintos: los estudiantes que realizaron la propuesta inicial, el equipo de la UNEAM, el grupo de Sociología Rural y el equipo del CFPBU. Esta coordinación enriqueció el proceso pero también prolongó el tiempo necesario para la planificación y discusión de contenidos, además de exigir varias instancias colectivas de puesta en común de la información. Se debe agregar además que las actividades que se realizarán en territorio requieren de la articulación y coordinación con múltiples actores, y también el despliegue de cierta capacidad de logística por parte de los distintos equipos que se nuclean en este curso, actividad que normalmente no es demasiado compleja pero insume tiempo del equipo. Desde el punto de vista de la formación docente, Cano (2010) afirma que La extensión pone al docente a la intemperie del encuadre curricular instituido, lejos del resguardo del aula y de la seguridad de los problemas retóricos. Este movimiento desestabilizador es también una oportunidad, siempre que la respuesta no sea el desamparo teórico e instrumental para operar en el nuevo escenario. Es necesario concebir un nuevo encuadre capaz de sostener el quehacer docente en las dos dimensiones que presentan las prácticas educativas integradas a la extensión: la dimensión de la intervención y la de la formación de los estudiantes (cada una con sus objetivos, requerimientos y lógicas particulares). Esto complejiza la función docente y requiere de su parte una formación particular, que incorpore estrategias de intervención en extensión. Además requiere del conocimiento del territorio y sus principales actores, así como de las dinámicas particulares que se desarrollan en él. En relación a la curricularización del curso para estudiantes de otros servicios, la experiencia no ha sido sencilla, ya que la necesidad de cumplir con algunas exigencias burocráticas, hace que finalmente hasta el momento no sea posible asegurar que los estudiantes de otras

6 disciplinas que participen del curso puedan incorporarlo a sus currículas. Esto desestimula la participación estudiantil y limita las posibilidades de contar con un grupo que permita enfoques multidisciplinarios de la realidad sobre la cual se estará interviniendo. Si bien el proceso de planificación ha sido más extenso y complejo que en un curso para el aula, se entiende por parte del equipo que es necesario trascender las estrategias formativas a las que estamos habituados para transitar hacia una formación más integral de docentes y estudiantes. A partir de esta convicción es que se sustenta el trabajo del grupo en su conjunto. Pero es importante tener en claro que esta no es una convicción de todos los docentes de nuestra Universidad. Algunas preguntas en torno a los EFIs A partir del proceso de planificación y coordinación del curso han surgido algunas preguntas en torno al proceso que se inicia. La primera tiene que ver con como se incorporan los EFIS en una realidad universitaria con baja dedicación docente, escasa infraestructura, esquemas curriculares rígidos, cómodos, instalados en la dinámica de los distintos grupos docentes y naturalizados por los mismos. La segunda es sobre la capacidad que tendrán los EFIs, en tanto sean actividades acotadas por tiempos curriculares, de transformar el vínculo Universidad comunidad y la relación docente estudiante y de desarrollar verdaderos procesos de extensión crítica. Finalmente, un nudo importante en todo esto, es la capacidad que tendremos de transformar las estructuras generadas en torno a las actividades curriculares, que por momentos se presentan como inamovibles, pesadas y difíciles de cambiar. Noviembre del 2010

7 Bibliografía Cano, A Tres preguntas para la renovación de la enseñanza. Revista En Diálogo (Año II, N 5). SCEAM, Montevideo. Tommasino, H Generalización de las prácticas integrales. Los aportes de la Extensión para su implementación. Revista En Diálogo (Año I, N 3). SCEAM, Montevideo.