PROPUESTAS DE POLÍTICAS PÚBLICAS PARA LAS FAMILIAS * PLAN NACIONAL DE DESARROLLO

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1 PROPUESTAS DE POLÍTICAS PÚBLICAS PARA LAS FAMILIAS * PLAN NACIONAL DE DESARROLLO La estructuración de las familias Actualmente, las familias continúan teniendo un papel importante en la protección, formación y desarrollo de los seres humanos y son la instancia social en la que más confían las personas; sin embargo, éstas no son estructuras sociales y afectivas estáticas. Tradicionalmente, se manejaba el supuesto de la existencia de armonía entre la vida doméstica y la vida del trabajo: La primera era responsabilidad de las mujeres. A este ámbito no se le asigna ni reconoce valor, no se contabiliza en el PIB, excepto cuando los servicios son proporcionados por terceras personas o por empresas. La segunda se le asignaba a los hombres, a quienes se les responsabilizó de la función de proveedores. El mundo del trabajo se fue estructurando pensando en que estas tareas serían realizadas por ellos con dedicación completa al trabajo y sin otras responsabilidades. Los cambios ocurridos en materia económica, social, cultural y demográfica en México en los últimos treinta años, han modificado profundamente la estructuración y organización de las familias y de los servicios del Estado. El rompimiento de esta precaria armonía previa, ha ido generando demandas desequilibradas a los seres humanos como miembros de un hogar, como * Iniciativa Ciudadana y Desarrollo Social, INCIDE SOCIAL, A.C. Dirección: Hilario Pérez de León No. 80; Col. Héroes de Chapultepec; C.P , Del. Benito Juárez, México, D.F. Tels.: (55) ; (55) Correo e: incidesocialac@yahoo.com.mx 1

2 trabajadores y como ciudadanos, usuarios de los servicios públicos, sin que a la fecha se vean los caminos por donde podrían restablecerse las conciliaciones necesarias entre: individuo, ciudadano, familia, trabajo y Estado. 2. Las políticas públicas para las familias En el país nunca ha existido una política de Estado dirigida en forma expresa, a proteger y apoyar a las familias en su integralidad. Las políticas sociales y las económicas se dirigen o inciden en las personas en forma individual y a veces utilizan o convierten a las familias en instrumentos para alcanzar a sus miembros individualmente. En materia de apoyo alimentario a las familias, los programas se han ido transformando paulatinamente en apoyos monetarios para la adquisición de productos con proveedores privados y con procesos de focalización y de corresponsabilidad. Otra política central para mejorar el bienestar de las familias, ha sido el desarrollo y ampliación de la cobertura del sistema de educación formal laico, público y gratuito. Las debilidades del actual sistema educativo mexicano desde la perspectiva de su incidencia en las familias se manifiesta en una creciente segmentación en la oferta de educación que profundiza la desigualdad entre los grupos familiares, la calidad se ha deteriorado, los horarios escolares son muy cortos, los costos implícitos para las familias han aumentado y la planta docente, la infraestructura y los programas se han desactualizado, comparado con la velocidad del cambio tecnológico de los últimos años. 2

3 El sistema escolar tampoco se ha ajustado a los cambios ocurridos en las formas de organización del tiempo de las personas y las familias, lo que ha limitado el papel que pudiera tener para contrarrestar tendencias negativas en el uso del tiempo de los niños y de los jóvenes. Los servicios educativos y los de salud ofrecidos por el Estado presuponen que las personas encargadas de acudir a ellos cuentan con disponibilidad de tiempo ya que serían las mujeres las que se encargarían de esto (llevar a los hijos, atender reuniones de padres de familia, entre otros). Los servicios de salud enfrentan una desintegración y segmentación histórica, insuficiencias presupuestales y de personal especializado y profesional, déficit de abasto y actualización de equipo e insumos para la salud, cuotas de recuperación impagables para las familias empobrecidas y un deterioro en la calidad y calidez de los servicios. Históricamente, el acceso a la seguridad social a través de algún miembro ha sido un anhelo de las familias mexicanas. Sin embargo, la caída del empleo formal y de los salarios reales en los últimos 30 años junto con otros factores, ha llevado a ésta a una situación crítica que ha afectado el desempeño y la calidad de los servicios que se prestan. Por otra parte, la importancia de la política de población en la transformación de las familias es incuestionable, impacto más nítido ha sido disminuir el tamaño de las mismas con efectos positivos y negativos como son la disminución del tiempo necesario para la crianza y cuidado de los hijos, la disminución del costo para sostenerlas, la distribución del ingreso entre menos miembros, la reducción de la 3

4 interacción con otras generaciones y con los pares y menores redes de apoyo familiar, ante circunstancias adversas. Los cambios demográficos, sociales y económicos originan distintos arreglos legales y de hecho en las familias. El tipo de familia predominante en México es la nuclear, pero son crecientes los hogares unifamiliares y la presencia de unidades de convivencia y familias formadas por personas de un mismo sexo o sin relaciones de parentesco, así como las familias extensas, compuestas y las recompuestas. Algunas consideraciones México desarrolló una importante infraestructura y programas sociales en cinco campos centrales del bienestar de las familias: alimentación, educación, salud, vivienda y seguridad social, con lo que logró elevar el nivel de bienestar de las familias a lo largo de varias décadas en una tendencia que parecía sostenida hacia el mejoramiento. Sin embargo, desde hace 30 años, esa tendencia no ha podido ser retomada y se observa un estancamiento. El capital humano, la inversión social implícita y los activos acumulados por las familias no han podido acrecentarse a la velocidad necesaria para enfrentar el reto demográfico del país. Por el contrario, parecen estar envejeciendo, deteriorándose o perdiéndose, con el riesgo que ello conlleva de mayores retrocesos en el nivel y la calidad de vida de la población y de las familias. En todo ello y a pesar de la enorme riqueza de experiencias en políticas y programas sociales, una ausencia sistemática se refiere a intervenciones públicas que promuevan la realización de los derechos humanos de las familias y la 4

5 atención de su bienestar considerado como núcleo básico de socialización y protección del ser humano. La incapacidad del Estado y de la sociedad en general para ver los efectos en el largo plazo de la no realización de ciertas tareas necesarias para la reproducción y el desarrollo de los seres humanos, está dejando vacíos de atención que repercuten en las problemáticas psicosociales que se viven actualmente como son el aumento de la violencia, deserción escolar, adicciones, entre otros. Propuestas Es urgente desarrollar una política pública dirigida a las familias (entendidas en su diversidad y complejidad): 1. que recoja las experiencias ya existentes en la instrumentación de políticas sociales pertinentes, suficientes y oportunas; 2. y defina claramente responsabilidades y articule acciones de instituciones públicas, privadas y sociales. Las intervenciones públicas que se diseñen deben considerar aspectos del bienestar de las personas y de las familias que hacen a lo afectivo y al desarrollo emocional, a las relaciones humanas pacíficas y a todos los aspectos culturales de la vida incluida la transmisión de saberes y reconocer el aporte que las familias hacen en esos campos. Las políticas de familia deben considerar a todos los miembros: hombres, mujeres, infancia, jóvenes adultos y adultos mayores y evitar la reproducción de asimetrías y la exclusión de los hombres en los procesos de cambio cultural. 5

6 Promover una nueva generación de legislación de lo familiar que actualice las leyes locales a las circunstancias cambiantes y a los nuevos problemas que se hacen evidentes en el ámbito de las relaciones familiares. No limitar al DIF a ser solamente la institución rectora de la asistencia social en México y tampoco obligarlo a justificar todas sus intervenciones como acciones dirigidas a población con vulnerabilidad, y ampliar sus posibilidades de acción. Ampliar el número de escuelas de horario prolongado, ya que significan una opción fundamental para atender a los niños y las niñas mientras los padres trabajan. Diseñar y aplicar un programa de apoyo social a las actividades de reproducción doméstica que considere: Ampliar la oferta pública, privada y social de servicios de guarderías, centros de desarrollo infantil y de educación preescolar, entre otros. Ampliar y adecuar los horarios de los servicios públicos y privados para la atención de las madres y padres trabajadores y sus hijos. Incluyendo a las familias que participan en la economía informal, tengan turnos de noche o fines de semana, entre otros Promover una campaña de concientización en materia de género en el terreno laboral y doméstico para modificar los patrones culturales. Promover la incorporación de cambios legislativos como pueden ser licencias por paternidad, servicios de guarderías y licencias por cuidados paternos, para reconocer y facilitar la participación del hombre en los trabajos domésticos. Articular y consolidar un programa laboral y social que incluya las políticas de conciliación de la vida laboral y familiar, por lo que se deben destinar los 6

7 recursos financieros necesarios para garantizar los derechos sociales de las personas. Diseñar y aplicar indicadores de género para medir el impacto y evaluar las políticas de conciliación de la vida laboral y familiar Apoyar la investigación sobre la realidad de las familias 7