EL PERIODISMO CIENTÍFICO, PUENTE

Transcripción

1 Crónica EL PERIODISMO CIENTÍFICO, PUENTE ENTRE LA CIENCIA Y LA SOCIEDAD JORNALISM AND EMERGENT SCIENCE: A MEETING IN MONTREAL José Manuel Báez Director de Programas y Estudios de la FECYT y codirector del Seminario La Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología ha puesto en marcha el Seminario «Periodismo científico en un mundo diverso» para seguir implementando su proyecto denominado «Diálogo Ciencia y Sociedad». En el Seminario hubo representación de todos los continentes y se pudieron plantear muchas cuestiones de interés común, aunque con enfoques diversos. Los temas en los que coincidieron todos los participantes fueron la necesidad de formar periodistas en un área esencial y compleja como la ciencia, de que éstos mantengan siempre su independencia en su labor y eviten ser unos intrusos en este campo. Los conferenciantes también resaltaron la necesidad de una eficiente instrumentalización de la información al servicio de las necesidades sociales. Las primeras iniciativas D esde el comienzo de su andadura en el año 2002, primer ejercicio efectivo de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT), nuestra relación con el periodismo científico ha sido constante y muy diversa. La FECYT tiene entre sus objetivos el acercamiento entre la ciencia y la sociedad. De hecho, en su plan de trabajo cuenta con un programa específico denominado «Diálogo Ciencia y Sociedad». En el año 2002, el entonces Ministerio de Ciencia y Tecnología encargó a la FECYT la gestión de la Convocatoria de Ayudas a la Divulgación. En dicha convocatoria, por primera vez y a iniciativa de la FECYT, se insertó un apartado específico para las actividades de periodismo científico. Lo cierto es que, a pesar de esta iniciativa, el número de propuestas recibidas en este apartado fue muy escaso, cercano al cero absoluto. Además, desafortunadamente, entre las pocas recibidas, ninguna mereció una calificación que permitiera su financiación, en términos de equidad en una convocatoria competitiva. 13

2 José Manuel Báez, director de Programas y Estudios de la FECYT, durante su participación en el seminario «Periodismo científico en un mundo diverso». Poco después, a finales de 2002, se conocieron los resultados de una encuesta nacional que la FECYT había encargado sobre la «Percepción social de la ciencia y la tecnología en España». El estudio mostraba claramente la insatisfacción generalizada de la sociedad con el tratamiento, tanto cuantitativo como cualitativo, que los medios de comunicación de masas dispensan a los temas científicos y tecnológicos. Así las cosas, al final del primer año de vida de la Fundación se había tomado conciencia muy clara de que el periodismo científico, que es un elemento clave para una comunicación fluida entre la ciencia y la sociedad, presentaba serios problemas en su implementación en nuestro país que eran percibidos claramente por la ciudadanía como una carencia. Por otra parte, el Congreso de la red PCST en el marco del Forum de las Culturas, así como la prolongada relación de la FECYT con el Observatorio de Comunicación Científica, de la Universitat Pompeu Fabra, ofrecían una oportunidad única para debatir con expertos nacionales y extranjeros sobre el asunto. Una oportunidad especial para compartir experiencias, preocupaciones y visiones de futuro con periodistas científicos que desarrollan su actividad en marcos culturales y sociales diversos, y con los que cabe, al menos, analizar qué problemas y soluciones puede haber en común. Foro de experiencias 14 A la vista de los deseos que guiaron la iniciativa de la Fundación para poner en marcha este Seminario, cabe decir que su desarrollo no pudo ser más satisfactorio, tanto desde el punto de vista de volumen de asistencia, como de su diversidad: hubo representación de todos los continentes, de más de una veintena de países, varios organismos internacionales y una mayoría de las comunidades autónomas de nuestro país. Pero aún fue más satisfactorio desde el punto de vista de la riqueza de la experiencia adquirida y del flujo comunicativo que se estableció entre los diferentes puntos de vista, las temáticas abordadas, por no hablar

3 de la activa y relevante aportación que el público asistente tuvo en los debates. Un lujo difícilmente alcanzable en otras circunstancias que quedará para siempre en mi recuerdo fue la conferencia inaugural a cargo de John Noble Wilford: la expresión de las motivaciones originales que subyacen en su actividad profesional y el enfoque de una actividad mediante reglas relativamente simples y, a la vez, muy evolucionadas (como suele ocurrir con las mejores teorías científicas). Durante el desarrollo del Seminario pudo comprobarse cómo, en países como Uganda y Nepal, con niveles de vida lejanos de esto que se llama Primer Mundo, existen cauces para que el periodismo científico ayude a sendas poblaciones a mejorar sus rendimientos y a incrementar su nivel de vida, mediante formulas de realización, cuyo pragmatismo es una lección a tener muy en cuenta. Pudo también apreciarse cómo, en otros ámbitos más cercanos culturalmente a nosotros, como Latinoamérica, se sientan las bases para el desarrollo de una actividad que permita superar sus carencias económicas y dar un salto cualitativo para que sus pueblos puedan apropiarse de los resultados científicos. Algunos de nuestros colegas europeos aportaron diferentes tipos de experiencias y enfoques para la comunicación científica. Por su parte, los representantes de los medios de comunicación nacionales mostraron una diversidad de gran riqueza al analizar su actividad. 15

4 De todo este intercambio, pueden deducirse algunos problemas comunes, tales como la dificultad en la lucha por el espacio en los medios; por la audiencia en los diversos segmentos de población; la complejidad para encajar mentalidades tan diferentes como la de los periodistas y la de los científicos, debida, quizás, a las distintas consideraciones éticas de ambas actividades profesionales, y la confusión potencial entre el ámbito del periodismo y el de la comunicación (institucional o corporativa). Merece la pena destacar que los participantes coincidieron en la impresión de que podría hacerse un catálogo que recogiese aquellos problemas particularmente bien resueltos, a partir de las soluciones aportadas durante el Seminario. Soluciones comunes a problemas comunes La celebración de este apasionante Seminario permitió fijar una extensa panoplia de cuestiones de interés común aunque con enfoques diversos. Además de haber detectado algunos problemas generales, como conclusión más significativa hay que recalcar el hecho de que las soluciones a tales situaciones también pueden ser universales. Parece que la solución que suscita más consenso se refiere a la elevada profesionalidad y calidad que debe ser seña del periodismo científico. Esta característica implica una serie de elementos que hay que desarrollar: 16 La formación de especialistas en un área esencialmente amplia y compleja. El periodista debe concentrarse en su función y desarrollarla de forma atractiva para el público, puesto que esta es la mejor manera de ganar audiencia y de convencer a los directivos de los medios de la rentabilidad de la información científica. La independencia, entendida como una característica básica del periodismo que debe permitir al periodista evitar convertirse en un pseudocientífico, así como huir de la labor de comunicación institucional que, a veces, se confunde con el periodismo.

5 «El periodista especializado en ciencia debe hacerla atractiva para ganar audiencia del público y rentabilizar la información.» Precisamente, por la necesidad de evitar suplantar al científico, se debe desarrollar de forma muy específica la capacidad de interactuar con los científicos. De esta forma, se evitaría también el intrusismo forzado y la frecuente confusión entre la comunicación y el periodismo. Finalmente, el periodismo científico debe aportar valor al sistema, mediante una eficiente instrumentalización de la información al servicio de las necesidades sociales, que haga visible para la sociedad la ventaja del uso de la información científica y tecnológica. Para el impulso de todas estas iniciativas, la FECYT debe mantenerse atenta y aportar, en la medida de sus capacidades, su conocimiento y apoyo al periodismo científico como elemento clave para una mejor comunicación entre la sociedad y el sistema de ciencia y tecnología. Este Seminario ha sido un primer paso que ha permitido vislumbrar algunas respuestas y poner en marcha mecanismos de cooperación para alcanzar los objetivos de los diferentes actores del sistema. La Academia de Sociedad y Ciencia, que la red PCST decidió poner en marcha en el Congreso que precedió a este Seminario, contará a buen seguro con el periodismo científico entre sus actividades prioritarias. Para la FECYT es un reto y una necesidad conseguir que este elemento del diálogo entre ciencia y sociedad se desarrolle y responda a las necesidades de cada momento. Por ello, la Fundación apuesta por la celebración de nuevas actividades que sirvan para poner en marcha iniciativas útiles con todos los que han participado en estos dos trepidantes días de debate y diálogo. Para finalizar, es necesario aprovechar esta oportunidad para agradecer a todos los que han colaborado con la FECYT ponentes, visitantes de otros lugares, asociaciones de periodistas nacional y catalana y, como no podía ser menos, a la Universitat Pompeu Fabra y al Observatorio de Comunicación Científica su valiosa contribución y ayuda parar encontrar nuevos retos, nuevas metas y nuevas soluciones en esta apasionante aventura de poner el saber al alcance de la ciudadanía. 17