DICTAMEN Nº. 216/2008, de 21 de octubre. *

Transcripción

1 DICTAMEN Nº. 216/2008, de 21 de octubre. * Expediente relativo a reclamación de responsabilidad patrimonial de la Administración Sanitaria a instancia de Dª. Z, por la asistencia sanitaria dispensada a su madre, Dª. X, en el Servicio de Urgencias del Hospital H. ANTECEDENTES Reclama la hija de una paciente enferma de Parkinson por una demora en el diagnóstico de infección respiratoria, que provocó que a la enferma tuviera que practicársele una traqueotomía de urgencia. La reclamante concreta los daños en tanto en los de carácter físico sufridos por su madre, como por los psíquicos que padece su padre, así como por el detrimento patrimonial que ha sufrido tras el episodio médico que conllevó la asistencia de la paciente, en el que incluye gastos producidos e ingresos dejados de percibir. EXTRACTO DE LA DOCTRINA La reclamante imputa a la Administración sanitaria un funcionamiento anormal del servicio público prestado en el Servicio de Urgencias del Hospital H, alegando las negligencias de ciertos doctores, que en la atención prestada a su madre el día 27 de mayo de 2006 simplemente detectaron infección urinaria, sin detenerse a reconocer los pulmones aun cuando manifestaba dificultad para respirar. A pesar del estado crítico y del gran deterioro de mi madre, el Servicio de Urgencias expide el alta domiciliaria sin escuchar mis ruegos y reclamaciones, debiendo ser llevada nuevamente a Urgencias el posterior 1 de junio, fecha en la que tras su examen, se pautó su ingreso hospitalario. Concluía que La consecuencia de haber esperado cuatro días para atender a mi madre debidamente y no haber controlado antes su respiración, es una intervención de traqueotomía irreversible y la necesidad de utilizar pañales por no controlar sus heces. Las afirmaciones de la reclamante constituyen meras apreciaciones personales de lo sucedido, carentes de respaldo probatorio alguno, sin que se vean confirmadas por los documentos obrantes en la historia clínica. Así, en el informe emitido el día 27 de mayo de 2006 por el Servicio de Urgencias, se desprende que el motivo de la consulta fue el dolor en cadera izquierda tras caída accidental de un sofá, dolor éste que refiere que se le irradia a la pierna. La atención inicial que se dispensó giró en torno a tal consulta, practicándose la correspondiente radiografía de la que resultó No se observan fracturas, y diagnosticándose contusión en cadera izquierda, por lo que se prescribió reposo y antiinflamatorios. No consta en el informe que la enferma presentara en esa fecha dificultad alguna para respirar, tal como afirma la reclamante, ni que en ningún momento se consultara por ese motivo. Es más, remitida desde Traumatología a Medicina Interna al estimar la familia que progresivamente presenta mayor rigidez, menor capacidad de maniobra, incapacidad para iniciar deambulación mayor de lo normal y como consecuencia de todo ello es incapaz * Ponente: Lucía Ruano Rodríguez 1

2 Dictámenes Consejo Consultivo Castilla-La Mancha de realizar las actividades instrumentales que antes hacía y su capacidad autónoma, se procedió a una exploración completa que comprendió, entre otras actuaciones médicas, la auscultación pulmonar, haciéndose constar en el correspondiente informe que tras la misma se observa Murmullo vesicular conservado, diagnóstico éste que la Inspectora Médica identifica con un resultado normal derivado de dicha auscultación. El diagnóstico derivado de la exploración completa y las diversas pruebas que se le realizaron fue Enfermedad de Parkinson con pérdida de función motora en piernas e infección de tracto urinario no complicada, procediéndose a solicitar valoración de Neurología, tras de la cual se reajusta la medicación para el Parkinson que padecía. Con este diagnóstico se estima que no está prescrito médicamente el ingreso hospitalario, remitiendo a la enferma desde Neurología al Control por su médico de familia y neurólogo correspondiente. Posteriormente, acude de nuevo a Urgencias a las 23:15 horas del 1 de junio siguiente, desprendiéndose del informe expedido en su día por dicho Servicio que La familia refiere que desde hace aproximadamente quince días ha empeorado de su estado funcional con mayor rigidez, descenso de su actividad física natural, menos habladora, más asténica. Desde esta tarde se encuentra más apagada, no es capaz de hablar, disnea brusca de reposo, más sudoración profusa, más frialdad piel-mucosas. Desde ayer estreñimiento. No síntomas catarrales. No fiebre. No otra sintomatología. Como se ha expresado en el informe, la disnea apareció bruscamente desde esa tarde, sin que presentara síntomas catarrales ni fiebre. Consta en el informe de Urgencias que se le realizó nuevamente un reconocimiento completo, resultando de la auscultación pulmonar: Murmullo vesicular disminuido y llegándose al diagnóstico de: Sepsis de probable origen urinario. Cuadro de íleo paralítico. Infección respiratoria con insuficiencia respiratoria global con acidosis respiratoria. Es, por tanto, en ese día y no antes cuando debuta la infección respiratoria y, por tanto, cuando empieza a tratarse, llegando, tras el fallo de varias intubaciones, a la realización de una traqueotomía siete días después, a fin de que la paciente pudiera respirar. Al alta conserva la cánula traqueal y se encuentra caminando con dos bastones, precisa ligera ayuda para movilidad en cama y ligera ayuda para vestido, siendo independiente para el resto de actividades diarias. La traqueotomía que tuvo que realizarse a la paciente no puede ser vinculada, de este modo, con un retraso en el diagnóstico que no ha existido, siendo más bien el resultado de una tórpida evolución de la dolencia respiratoria que se manifestó el 1 de junio y que, como se ha dicho, requirió la aplicación de un respirador artificial, situación que la enferma no pudo superar por sí misma en dos ocasiones. De lo expuesto se desprende que no ha existido una demora en el diagnóstico ni se ha actuado con negligencia, habiéndose puesto a disposición de la enferma todos los medios sanitarios precisos para el cuadro que presentaba en cada momento. La infección respiratoria que padeció debutó el día 1 de junio y no antes, por lo que no pudo ser diagnosticada en la primera visita a Urgencias, en la que la auscultación pulmonar que se practicó arrojó un resultado normal. 2

3 DICTAMEN Que no existiendo relación de causalidad entre el daño sufrido por Dª. Z y la asistencia sanitaria dispensada a su madre, Dª. X, en el Servicio de Urgencias del Hospital H, procede desestimar la reclamación de responsabilidad patrimonial examinada. 3

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