Lenguaje 1 a 3 Básico Lección 2: Lenguaje Oral y Ambiente Letrado, condiciones básicas para la enseñanza de la lectura y escritura

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1 Curso: Titulo: Unidad: Nº 2 Lenguaje 1 a 3 Básico Lección 2: Lenguaje Oral y Ambiente Letrado, condiciones básicas para la enseñanza de la lectura y escritura Módulo: Desarrollo Objetivos de Aprendizaje Lenguaje Oral y Ambiente Letrado, condiciones básicas para la enseñanza de la lectura y escritura El lenguaje oral es una de las piedras angulares de la lectura inicial. Según los autores del libro From Neurons to Neighborhoods (2000), desde los primeros días de vida, el desarrollo de habilidades de comunicación y lenguaje es uno de los mayores logros que la persona debe realizar. Cuando nuestros alumnos ingresan a primer año básico, se espera que hayan realizado algunas actividades de lenguaje oral básicas para cualquier aprendizaje. Por ejemplo, son capaces de: Seguir instrucciones verbales simples. Escuchar y responder a cuentos, canciones o rimas que han leído o que les han leído. Participar en discusiones grupales con sus compañeros. Comprender que la comunicación es tanto verbal como no verbal. Respetar turnos para hablar. Al terminar tercero básico es esperable que los niños puedan ser capaces de: Seguir instrucciones verbales complejas, responder preguntas para resolver problemas. Dialogar y formular preguntas en torno a lo que han leído en forma grupal o independiente. 1 Ministerio de Educación

2 Participar de discusiones grupales demostrando comprensión de lo que sus pares exponen o los puntos de vista distintos que puedan tener. Usar el lenguaje no verbal para reforzar el contenido de un mensaje. Poner atención a quien habla y esperar su turno para hablar. Cómo llegamos a estos objetivos? Qué puede hacer el profesor para ayudar a sus alumnos a llegar a esta meta? En educación preescolar, las educadoras de párvulo tienen muy claro cómo desarrollar el lenguaje oral, pero cuando los alumnos pasan a primer año básico, se nos olvida que hay que seguir trabajando esta forma de comunicación con los alumnos, y pensamos que el énfasis de nuestro trabajo ha de ser enseñar aspectos más complejos del lenguaje, como pueden ser la decodificación o las reglas de escritura. Es fundamental para la lectura que existan muchísimas instancias de lenguaje oral, incluso hasta la enseñanza media! Hacer que los alumnos hagan exposiciones, que se involucren en discusiones grupales, que conversen acerca de cómo resolver un problema, que recreen instancias de comunicación de la vida diaria son sólo algunos ejemplos de cómo trabajar la oralidad en los primeros años de educación básica. Desde el punto de vista de la enseñanza de la lectura, ese tipo de experiencias son fundamentales para la promoción de la lectura. Los alumnos que participan de instancias de comunicación oral suelen tener un vocabulario ampliado y una muy buena comprensión auditiva, factor clave para el desarrollo de la lectura inicial (Snow, Burns & Griffin, 1998; Block & Pressley, 2002). Las investigaciones realizadas en los últimos años han demostrado que tanto las experiencias tempranas de lenguaje, en particular el lenguaje oral, como un ambiente rico en textos, favorecen la adquisición de habilidades tempranas de la lectura que facilitan su desarrollo y el éxito académico Ehri & Sweet, 1991; Gunn, Simmons, & Kameenui, 1995; Mason & Allen, 1986; Sulzby & Teale, 1991). Qué es un ambiente letrado? Un ambiente letrado es un entorno en el cual los estudiantes interactúan con textos de diversos tipos en forma permanente. En un ambiente letrado, el profesor dispone de instancias de lectura, escritura, expresión oral y audición reales, o similares a las situaciones de la vida real en las que los alumnos deberán utilizar estas habilidades. Por ejemplo, encontrar información en un diario, ordenar alfabética o numéricamente documentos, leer para informarse, leer por gusto, escuchar un cuento, escribir una lista, llenar un formulario, etc. Por lo general, algunas de 2 Ministerio de Educación

3 estas instancias aparecen en los textos de estudio de Lenguaje y Comunicación, pero hay muchísimas otras actividades que el profesor puede incorporar en su sala de clases y así favorecer el aprendizaje de las habilidades lingüísticas que requieren de la lectura y escritura en la vida real. En el módulo de estrategias metodológicas explicaremos en más detalle algunas de estas actividades. Imaginémonos por un momento entrar a una sala en la que todos los alumnos están realizando actividades de lectura y escritura. Se les observa motivados y trabajando ya sea en grupos o en forma independiente. Algunos niños revisan libros de distintos temas no sólo en la biblioteca de aula o durante la hora de lectura, sino también cuando están trabajando en matemática o ciencias, en la hora de ciencias exploran libros para averiguar sobre un determinado tema o concepto. Los materiales de la sala de clase también están vinculados a actividades de lectura y escritura. Por ejemplo hay CDs en los que los alumnos pueden escuchar cuentos, hay pequeños cuadernillos que los alumnos pueden usar para escribir (inventar) sus propios libros, hay muchos lápices y otros materiales para ilustrar sus cuentos, e incluso hay un computador y diccionarios que los niños pueden usar cuando tienen dudas sobre alguna palabra o concepto. El mobiliario de la sala tiene etiquetas con palabras y dibujos en todas partes, de manera que los alumnos puedan relacionar el lenguaje escrito con aquello que representan. Se usa el calendario, los horarios, signos, instrucciones acerca de cómo usar determinadas palabras o frases. En síntesis, todas las actividades que ahí ocurren tienen que ver con el lenguaje y requieren de conversación entre el profesor y los alumnos en forma permanente. El profesor de este segundo básico que hemos descrito está estudiando el clima. En su sala los alumnos: Leen libros sobre el clima. Exploran palabras que están puestas en las paredes de la sala y que tienen que ver con el clima. Aprenden sobre nubes y distintos tipos de lluvia. Dibujan distintos tipos de nubes. Cantan canciones sobre el clima. 3 Ministerio de Educación

4 Escriben en sus bitácoras acerca de las condiciones climáticas de cada día. Completan un gráfico sobre la temperatura diaria y sus cambios. La oralidad en la lectura está asociada también al concepto de conciencia fonológica, que los alumnos comienzan a desarrollar antes de entrar a la escuela, como resultado natural de su interacción con el lenguaje. La conciencia fonológica se refiere a la capacidad de comprender que las palabras están compuestas de sonidos, y que pueden descomponerse en unidades más pequeñas tales como sílabas y fonemas. La conciencia fonológica ha demostrado ser un factor muy gravitante en el aprendizaje de la lectura, porque facilita el proceso de decodificación, mediante el cual el lector realiza la correspondencia grafema-fonema; es decir, a cada letra le asigna su sonido correspondiente, lo que le permite leer la palabra. En primer año básico se espera que los alumnos sean capaces de identificar los sonidos que componen las palabras, reconociendo, separando, y combinando fonemas y sílabas. Para desarrollar este objetivo, el profesor debe trabajar, primero en forma oral y luego usando textos escritos (palabras simples, y más adelante oraciones), patrones de sonidos, rimas, sonidos iniciales y finales dentro de palabras, y sílabas al interior de palabras. Vea el siguiente video que muestra a una profesora que ejercita la fluidez, conciencia fonológica y comprensión con sus alumnos: Luego analice el video contestando las siguientes preguntas: Observó la secuencia de actividades que la profesora realizó con los niños? Cómo comenzó? Cuáles de las actividades que realizó abordan el objetivo del cual hemos hablado? Qué otras actividades agregaría usted para abordar completamente este objetivo (Identificar los sonidos que componen las palabras (conciencia fonológica), reconociendo, separando y combinando sus fonemas y sílabas). El paso siguiente es ser capaz de leer palabras aisladas y en contexto, una vez que los alumnos han adquirido y ejercitado la correspondencia letra-sonido en diferentes combinaciones: sílaba directa, indirecta o compleja. Evidencias de haber alcanzado este 4 Ministerio de Educación

5 objetivo son actividades tales como el reconocer una letra o sílaba determinada en un contexto mayor, como puede ser una oración o frase (actividad que vimos realizar a la profesora atrapando sílabas en voz alta con los alumnos en el video anterior). Luego, se espera que los niños pasen de leer letras y sílabas a leer palabras completas en textos de mayor extensión (por ejemplo en un verso de una poesía de texto repetitivo). El profesor puede ejercitar esta actividad si tiene, en su sala, palabras que identifiquen los distintos objetos o lugares de la sala (puerta, escritorio, ventana, biblioteca, etc.), y pidiendo a los alumnos que caminen por la sala leyendo las palabras en voz alta. Finalmente, con un texto de estructura repetitiva ya trabajado varias veces, se puede invitar a los alumnos a leer frases y oraciones breves, repasando conceptos tales como sílaba, palabra, sonido inicial, sonido final, rima, vocales y consonantes. Los alumnos deben ejercitar frecuente y habitualmente la fluidez para lograr ser buenos lectores. 5 Ministerio de Educación