LA AUTOEVALUACIÓN DE LOS PROFESORES EN EL MARCO DE UNA EVALUACIÓN DE CALIDAD

Transcripción

1 LA AUTOEVALUACIÓN DE LOS PROFESORES EN EL MARCO DE UNA EVALUACIÓN DE CALIDAD Reiteradamente se ha afirmado, que la evaluación de la calidad de la educación sólo tiene sentido si sus resultados son expresados en términos de mejora de la gestión del aprendizaje de los alumnos en el aula. Esto pone en la cima de la reflexión el papel que los procesos de transformación educativa cumple el profesor. Pero no siempre se aborda en dichos programas la evaluación del profesor eficazmente, y mucho menos se genera su participación en ella, para propiciar la toma de conciencia de los docentes, de sus logros y limitaciones, para hacer del proceso educativo un proceso de calidad. Cuando nos referimos a calidad podemos decir que es un concepto complejo que presenta manifestaciones diferentes que pueden considerarse complementarias. Estas pueden ser: - Las especificaciones claras de los servicios o productos acerca de los que se refiere la preocupación por su calidad. - la comparación entre los logros en la realidad y las especificaciones realizadas - la percepción que de esos logros tienen los protagonistas - el logro de la excelencia por medio de procesos eficientes que llevan a logros eficaces. - La evaluación actúa como el más poderoso factor de promoción de calidad educativa al garantizar la congruencia y eficacia del sistema en su conjunto. A través de ella se canaliza la actividad de alumnos y profesores. Cuál debe ser el marco del proceso evaluativo? Técnicamente solemos decir que los objetivos. Pero dichos objetivos educativos tendrán que ser reflejo de las capacidades, valores y actitudes que necesitan los seres humanos para poder sobrevivir, desarrollar plenamente sus posibilidades, vivir y trabajar dignamente, participar plenamente en el desarrollo, mejorar su calidad de vida, tomar decisiones fundamentadas y seguir aprendiendo Si los criterios y modos de evaluación movilizan los procesos educativos hacia objetivos no coherentes con las metas formalmente establecidas se convierte ella misma en un obstáculo para la calidad de la educación La evaluación debe tomar cuerpo en lo relativo a las decisiones de mejora, pues al hablar de educación como perfeccionamiento de la persona, la evaluación de la educación, es la evaluación de la mejora de o de las personas Lic. Elvira Teijido de Suñer 1

2 Calidad supone la idea de bien: sólo se concibe a la educación como buena, sólo lo bien hecho educa. La educación de calidad supone un proceso bien imaginado, bien concretado y bien evaluado La calidad de la evaluación dependerá de que esta sea integral, integrada e integradora concepto rico amplio y profundo. Esto implica la participación y el abordaje de todos los agentes intervinientes en el proceso, de todos los elementos y aspectos integrados en él. La calidad de la educación es el resultado de un conjunto de relaciones de coherencia entre expectativas, metas, productos, procesos y entradas al sistema educativo. La evaluación es un componente esencial de ese sistema Pero la naturaleza misma de la educación debe tener algunas implicancias en el concepto mismo de calidad. De la Orden se refiere a lo como un sistema de coherencias múltiples, en cuya raíz, al no considerar lo así se encuentra la crisis de la educación como una crisis de coherencia. Esta debe manifestarse sobretodo en la: - coherencia entre resultados y fines: funcionalidad - coherencia entre resultados metas y objetivos: eficacia o efectividad - coherencia entre procesos medios y resultados: eficiencia si aplicamos los criterios del Dr. Pérez Juste podríamos considerar: - totalidad: La educación para preciarse de ser tal debe mejorar o perfeccionar a la persona, debe mejorar toda la persona y a todas las personas. La evaluación debe de dar cuenta de ello - Integralidad y calidad: para pensar en un planteo que apunte a la integralidad es necesario contar con una meta, con un fin lo suficientemente rico para dar cabida a todo lo que sucede en el aula - Adaptación: se refiere a la adecuación del proyecto educativo a cada uno de los educandos. A través de un adecuado nivel de opcionalidad en el curriculum y en los aspectos que incluidos, se podrá atender a las diferencias humanas - Armonía y coherencia: estos principios deben darse a lo largo del paso del educando por el sistema educativo, generando un proceso perfeccionador de las personas comprometidas en él. Lic. Elvira Teijido de Suñer 2

3 Estos recaudos o requisitos llevan a pensar que la educación que una evaluación eficaz que implique la eficiencia, es la única alternativa posible y hace al sentido mismo de la evaluación de calidad. La eficacia que interesa es la del logro de la calidad teniendo en cuenta los medios que se utilizan para lograrla. La evaluación no puede dejar de lado la preocupación por la calidad de las metas educativas. Sólo con metas claras y, realistas y flexibles podremos asegurar una evaluación de calidad. Dichas metas educativas tendrán que ser reflejo de las capacidades, valores y actitudes que necesitan los seres humanos para desarrollar plenamente sus posibilidades, vivir y trabajar dignamente, participar plenamente en el desarrollo, mejorar su calidad de vida, tomar decisiones fundamentadas y seguir aprendiendo El análisis de la calidad del sistema educativo supone tres ejes prioritarios: que la educación permita el desarrollo del alumno, que logre el ejercicio pleno de la libertad, y que le brinde capacitación profesional. Para asegurarnos el cumplimiento de estas condiciones consideramos a la evaluación pedagógica como la valoración a partir de criterios y referencias preespicificados de la información técnicamente diseñada y sistemáticamente recogida y organizada sobre cuantos factores relevantes integran los procesos educativos para facilitar la toma de decisiones de mejora Los centros educativos y los equipos de profesores deberán valorar la evaluación como herramienta única de trabajo para mejorarlo dándole la debida atención integrándola de modo armónico con el resto de las actividades no desvirtuando su valor por medio de contenidos ni usos inadecuados. El objeto de la evaluación es la realidad educativa toda. Debe institucionalizarse, y en este sentido es el equipo directivo quien debe animar, sin persecuciones ni creando temores, la cultura evaluativa de la institución. La calidad de la educación depende del reconocimiento de que la evaluación es un hacer técnico de profesionales y ellos deben hacerse cargo de dicho proceso, para trascender sus juicios y tomar decisiones de mejora Debe concluir en un juicio profesional que demuestre la congruencia entre objetivos y resultados, así como los resultados no previstos. El juicio profesional supone no sólo el determinar los desfasajes respecto de los objetivos previstos, Lic. Elvira Teijido de Suñer 3

4 sino también el señalamiento de los logros, y la indicación de los caminos de mejora. Y en esto tiene esencialmente importancia la evaluación: Sólo un diagnóstico realista donde el protagonista sea cada escuela, cada docente, de cada región, podrá dar cuenta de ello. La evaluación actúa como el más poderoso factor de promoción de calidad educativa al garantizar la congruencia y eficacia del sistema en su conjunto. A través de ella se canaliza la actividad de alumnos y profesores. Si los criterios y modos de evaluación movilizan los procesos educativos hacia objetivos no coherentes con las metas formalmente establecidas se convierte ella misma en un obstáculo para la calidad de la educación La manera como se han diseñado e implementado las reformas, de arriba hacia abajo sin el consenso y la participación activa de los maestros, sin penetrar en la cultura de la escuela, sin contemplar la diversidad cultural y adentrarse en ella, es una causa, quizás la más importante, por la que las reformas no han tenido el éxito deseado. Qué papel tendrá la evaluación de calidad diseñada de igual manera sin la presencia del docente y sólo refiriéndose a cuanto conoce el alumno? La calidad de la evaluación está asegurada cuando es Sistemática y no solo ocasional Rigurosa y no arbitraria Canalizada y no dispersa Conocida y no subrepticia Deberá someterse a ciertas exigencias Uso de diversos métodos de exploración Coherentes con los fenómenos evaluados Interpretar e interrelacionar los datos Discutirlos y dialogarlos Tomar las decisiones de mejora Publicar las conclusiones y las decisiones Cuanto más cotidiana sea la evaluación mejorará el clima en que esta se inserta, sin tapujos ni ocultamientos y en la esperanza de que la educación es posible. El modelo supone que sea integral, clarifique los criterios aplicados, debe considerar resultados y desarrollo, dar espacio a la autoevaluación, y a la metaevaluación. Lic. Elvira Teijido de Suñer 4

5 La evaluación será de calidad cuando las autoridades impliquen a los miembros de la escuela en el diagnostico de su propia situación y apoyen sus esfuerzos en el logro de la calidad. Un primer camino es la autoevalución Qué significa autoevaluación? Significa el reconocimiento personal de las propias fortalezas y debilidades de cada agente en relación con los objetivos propuestos. La autoevaluación como cultura institucional debe abordar todos los estamentos de la organización, y debe ser el punto de partida o la base de toda evaluación. Podríamos decir que es un primer escalón de la participación en la cultura evaluativa de una institución. Mirada la evaluación desde el rol del profesor, debe ser esencialmente una confrontación de la teoría con la práctica. En ella se podrá evidenciar la capacidad del profesor para la evaluación reflejada especialmente en la posibilidad de reflexionar acerca de la enseñanza, tomando como marco el aprendizaje de los alumnos. Estaremos hablando de autoevaluación del profesor, cuando él juzgue en esta reflexión, el rol que ha jugado en el proceso, pueda reconocer sus posibilidades y limitaciones, y también pueda proponerse decisiones para su propio perfeccionamiento. Esta reflexión del profesor se supone coherente con un modelo de aprendizaje centrado en la reflexión del alumno, reflexión que también aplicará a su propio aprendizaje Ambos cumplirán un proceso metacognitivo. La propuesta supone el hacer de la autoevaluación un ingrediente insoslayable de la cultura institucional. En esto tomarán un rol esencial los responsables de la evaluación del docente: los directivos. Ellos serán los deberán crear un clima donde la autoevaluación sea una reflexión compartida. Esencialmente la calidad de la evaluación estará asegurada cuando esa reflexión compartida se concrete sin amenazas, sin fiscalizar, sin enjuiciar, sin descalificar, sin imponer. El primer paso para la creación de la cultura será el compartir con el profesor los criterios de evaluación del docente, e incluso la información de los instrumentos a utilizar y los momentos en que se aplicarán. Sería altamente positivo en realidad generar la participación de los docentes en la elaboración de dichos instrumentos y criterios elaborados a la luz del proyecto educativo y de los objetivos planteados para el año académico. Definido así, estos instrumentos servirán de marco de referencia de la autoevaluación del profesor. Podríamos pensar en dos tipos de autoevaluación: individual de cada profesor, y grupal o colegiada del grupo de docentes. Ambas pueden combinarse, y sus posibilidades se concretan en un clima de confianza, y aprendizaje mutuo. Lic. Elvira Teijido de Suñer 5

6 En la individual, lo esencial, es que el docente asuma la autoevaluación como actitud personal, sin imposiciones. El directivo puede iniciar los encuentros evaluativos con cada docente, solicitándole comparta con él su autoevaluación, siempre especificando el marco de referencia con claridad, y el resultado del encuentro como conclusión y búsqueda de mejora. Como complemento puede instrumentarse la grupal, destinada a la autoevaluación del equipo docente de la institución, en orden a su propia capacitación y definición de líneas de mejora. Podrán integrarse a ella técnicas como el análisis del método del incidente o los seminarios con el método de cases. Qué ventajas suponemos traerá a la vida académica universitaria esta técnica y su inserción en la cultura institucional? Creará un clima de dialogo y encuentro, comprobación, diagnóstico, intercambio, y ayuda caminando hacia la toma de conciencia del sentido real de la evaluación y la educación en dicha institución al compartir los logros en un camino de aprendizaje mutuo. BIBLIOGRAFIA De la Orden, Arturo La calidad de la educación CINAE, Buenos Aireas 1983 Pérez Juste, Ramón La evaluación como medio para la mejora de la eficacia y de la calidad del aprendizaje, de la educación y de las instituciones educativas en XII congreso Nacional y I Iberoamericano de Pedagogía Sociedad Española de Pedagogía, Madrid 2000 Rosales, Carlos Evaluar es reflexionar sobre la enseñanza Narcea, Madrid, 1997 Teijido de Suñer, Elvira La Evaluación y la calidad de la educación en Filmus, Daniel (comp) Los condicionantes de la calidad educativa Ediciones Novedades Educativas, Buenos Aires, 1995 Teijido de Suñer, Elvira La Evaluación y la calidad de la educación Anales del XI Congreso Español de Pedagogía, San Sebastián 1996 Lic. Elvira Teijido de Suñer 6