lenguaje en el niño de 0 a 6 años

Transcripción

1 La comunicación y el 1 lenguaje en el niño de 0 a 6 años vamos a conocer El proceso comunicativo y la expresión 2. El desarrollo del lenguaje en la edad infantil 3. Etapas en el desarrollo del lenguaje 4. Principales alteraciones del lenguaje y al finalizar esta unidad... Conocerás las pautas básicas para el análisis de situaciones comunicativas. Podrás favorecer el desarrollo evolutivo de la comunicación y el lenguaje en el niño de 0 a 6 años. Utilizarás las estrategias básicas para detectar y analizar las principales alteraciones en la comunicación que se producen a esas edades.

2 7 CASO PRÁCTICO INICIAL situación de partida Empiezas a trabajar en una Escuela Infantil y has asistido a la reunión inicial para organizar la asignación de grupos a cada tutor. A ti te ha correspondido el grupo de bebés de hasta 12 meses, al tiempo que formarás parte del grupo de evaluación y apoyo de uno de los grupos de 2 a 3 años, en el que se va a escolarizar a un niño con alteraciones en la expresión oral aún por determinar. Los padres están muy alterados y el pediatra, descartando problemas auditivos y de articulación oral, les ha recomendado una escolarización temprana para que el niño se relacione con otros niños y adultos y, de esta manera, estimule su comunicación. estudio del caso Una de las cuestiones más importantes que debes considerar se refiere a las diferencias evolutivas que se dan en los ritmos de adquisición de las estrategias comunicativas y expresivas durante la etapa de la Educación Infantil. Esas diferencias hacen que el enfoque educativo sea muy distinto, dependiendo de la edad de cada grupo de niños. Esto es particularmente importante en el caso de los bebés de hasta 12 meses, donde tanto las posibilidades para comprender los mensajes como las capacidades expresivas son significativamente distintas. Por otro lado, las capacidades comunicativas difieren mucho de unos niños a otros, no solo por la etapa madurativa, sino también por el contexto familiar y de estimulación social en el que vive cada niño. Eso hace que, en algunos casos, las diferencias sean tan grandes que los padres se alarmen al observar la lentitud en las adquisiciones de sus hijos en comparación con otros niños de su edad o con sus hermanos mayores. En algunas ocasiones (muy pocas) estas diferencias son la antesala de una alteración o trastorno y, aunque son otros los responsables de analizar e iniciar los procesos de diagnóstico y tratamiento, es, sin embargo, en la Escuela Infantil donde se detectan las situaciones de riesgo más temprano y en contextos más normalizados. Por todo ello, es importante que conozcas las principales técnicas y herramientas para obtener datos fiables sobre los que construir, con acierto, esas primeras valoraciones durante la etapa de Educación Infantil.

3 8 Unidad 1 1. El proceso comunicativo y la expresión 1.1. La comunicación en el desarrollo infantil a El niño necesita interactuar con otros niños para aprender a comunicarse y a intercambiar conocimientos y emociones. vocabulario Filogenia: origen y desarrollo evolutivo de las especies y, en general, de las estirpes de los seres vivos. Ontogenia: desarrollo evolutivo de cada individuo en concreto. Existe un cierto paralelismo entre ambos desarrollos. El niño es, desde su nacimiento, un ser social. Esta afirmación es conocida y aceptada por todas las generaciones científicas a lo largo de la historia. Será a partir de la interacción con el medio social en el que viva donde se desarrolle su verdadera faceta humana, donde adquiera las herramientas básicas de la cultura y del conocimiento, y donde, en definitiva y parafraseando al ilustre psicopedagogo Carl Rogers, se produzca el «proceso de convertirse en persona». En este largo y productivo proceso juegan un papel primordial la comunicación y el lenguaje, verdaderas herramientas de interacción e intercambio de normas, conocimientos y emociones. Si en algo se distingue el Homo sapiens del resto de animales es, sin duda, en el uso de esa herramienta, puente entre la mente individual y el grupo, es decir, entre el saber acumulado por la especie a lo largo de la filogenia y la expresión individual de cada uno (el conocimiento vital y experiencial de cada persona: su ontogenia). A lo largo de los tiempos, el ser humano ha ido desarrollando esta auténtica herramienta social que es la comunicación, mejorándola con el transcurrir de los siglos, y haciéndola más eficaz y elaborada. En cada contexto, se han elaborado códigos simbólicos distintos, pero con características comunes y equiparables. Destacan, particularmente, los distintos idiomas y dialectos, así como el desarrollo de otros «lenguajes», como la iconografía, la lengua de signos y gestual de las personas sordas, los sistemas de programación informática, etc. Este progresivo perfeccionamiento de la comunicación y del lenguaje es el reflejo, a su vez, del desarrollo de la inteligencia. Hay estudios que describen un acertado paralelismo entre el nivel intelectual y el grado de elaboración lingüístico. De hecho, existe una estrecha relación entre el índice de encefalización (volumen craneal, esto es, tamaño del encéfalo) y la aparición de las primeras lenguas elaboradas. Del mismo modo existe una correlación directa entre el nivel cultural y académico de un colectivo y el grado de elaboración de su código lingüístico. Uno de los indicadores del nivel intelectual de una persona puede ser el número de palabras que conoce y usa adecuadamente, al igual que el desarrollo cognitivo de un niño es paralelo a la cantidad de palabras que es capaz de reconocer y utilizar. Desde este punto de vista, debemos tener en cuenta que la comunicación es uno de los pilares prioritarios del desarrollo infantil. Contribuir a que su desarrollo se produzca de forma favorable y a mejorarla en todos sus aspectos debe ser una de las principales finalidades del educador. Según Janie Rees Miller «la interacción adulto-niño es la fuerza que origina el aprendizaje lingüístico, así como su requisito». En el Real Decreto 1394/2007, de 29 de octubre, en el que se establece el Título de Técnico Superior en Educación Infantil y se fijan sus enseñanzas mínimas, la comunicación se presenta como una de las competencias fundamentales: Desarrollar los recursos expresivos y comunicativos del niño y la niña como medio de cre-cimiento personal y social.

4 La comunicación y el lenguaje en el niño de 0 a 6 años Elementos del proceso de comunicación humana Desde el planteamiento de la teoría de la Información, la comunicación es un proceso de transmisión y recepción de información (mensajes) entre dos sujetos (emisor y receptor), utilizando un código compartido (por ejemplo, el idioma castellano o español) y a través de un canal (por ejemplo, la lecto-escritura), dentro de un contexto determinado. Podríamos representarlo gráficamente de la siguiente manera: CONTEXTO CANAL EMISOR MENSAJE RECEPTOR CÓDIGO a Jean Piaget ( ). Este enfoque es acertado, pero demasiado frío, ya que no contempla otros elementos subjetivos, no visibles, fruto de las relaciones interpersonales que conlleva el proceso comunicativo. Así, desde la concepción cognitiva se considera la comunicación interpersonal como una producción creativa de significados por parte del emisor, en la que participa reactivamente el receptor. De esta manera, se entiende que la comunicación es un reflejo del pensamiento y de la socialización del sujeto, en tanto que supone la principal herramienta para conocer el mundo, a los demás y a uno mismo. Esta es la concepción que desarrolla Jean Piaget, autor al que nos referiremos en varias ocasiones. Los elementos básicos del proceso serían los siguientes: Un intercambio cooperativo: la cooperación hace referencia a que ambos hablantes actúan siguiendo unas reglas compartidas y complementarias. Para poder comunicarse con alguien, debe existir entre ambas partes una disposición cooperativa de hacerlo, de comunicarse al unísono. Sin esta disposición previa, la comunicación no resultará eficaz. Un contexto cognitivo común: los conocimientos previos que poseen los hablantes determinan la extracción y producción de significados. En última instancia, lo que comunicamos tiene que ver con lo que pensamos y conocemos. Solo es posible una comunicación si comprendemos los mensajes compartidos, esto es, si son significativos e importantes para nosotros. Por eso, ante la información redundante y repetitiva, «desconectamos». caso práctico inicial Para que la reunión inicial de curso en la Escuela Infantil sea útil, es necesario que los interlocutores (educadores infantiles, dirección del centro, personal de apoyo, etc.) dialoguen siguiendo estos mínimos de comunicación eficaz.

5 10 Unidad 1 Contexto cognitivo común Intercambio cooperativo Contexto espacial y temporal compartido a Componentes de la comunicación eficaz. Contexto especial y temporal compartido: Indica el marco presente, pasado o futuro en el que tiene lugar la acción, y toma como referente el momento de emitir el enunciado. La comunicación no solo tiene que ver con los interlocutores, sino también con su contexto social y cultural. EJEMPLO Alguna vez has visto hablar a dos niños de edades muy distintas? Apenas si puede decirse que eso sea comunicación porque no aparecen los tres elementos anteriores: no existe un interés por compartir, ni su cognición es similar, ni el contexto vital de cada uno es equiparable. saber más El Conductismo es una de las grandes teorías de la Psicología y el estudio del comportamiento. Desde sus inicios, a principios del siglo XX y hasta la actualidad, postula una visión asociacionista donde el contexto, a través del control estimular y de los reforzadores, determina la conducta del sujeto. Así, la verdadera clave del aprendizaje y del desarrollo, para los conductistas, se refiere a la fuerza que tenga dicha asociación y al tiempo que dure. Los elementos señalados anteriormente son fundamentales para garantizar una comunicación eficaz y son producto de los aprendizajes que los niños van adquiriendo a lo largo de su desarrollo. Posteriormente veremos cómo se produce este desarrollo y cuáles son sus etapas De la comunicación al lenguaje Una vez estudiados los componentes básicos de la comunicación, vamos a referirnos a su expresión más significativa: el lenguaje. Podemos definir el lenguaje como un conjunto de signos y reglas que permiten expresar la experiencia individual a los demás mediante un sistema simbólico común, haciendo así posible la comunicación interpersonal. No debemos confundir el concepto de lenguaje con lengua. La lengua sería ese sistema simbólico común que utiliza el lenguaje (por ejemplo, el castellano o español, el catalán, el inglés, etc.). A lo largo de la historia han sido numerosas las teorías que se han centrado en el estudio del lenguaje y en su desarrollo. Para algunos autores, como Watson (1925), el lenguaje se limita a la conducta de hablar, sin importar otros aspectos como la estructura y la función del lenguaje. Skinner (1957) continúa con esta perspectiva conductista y defiende la idea de que el lenguaje está sometido al control estimular externo y se adquiere progresivamente como consecuencia de los refuerzos y su posterior asociación con las palabras que designan objetos. Por ejemplo, cuando la madre da un vaso de agua a su hijo, al tiempo que le dice agua, hace que el niño asocie esta palabra con el refuerzo agradable que supone saciar su sed, lo que facilita que aprenda ese término, lo asocie con un estímulo agradable y lo incorpore a su repertorio lingüístico. Esta visión del lenguaje es muy determinista y excesivamente simplista, por lo que gran parte de la comunidad científica la considera insuficiente. Lo que realmente interesa del lenguaje es su estructura (reglas y organización) y su función (comunicación e interrelación social). Así, Chomsky defiende la idea de que existen unas reglas universales, innatas y comunes a todas las lenguas (gramática universal) y algunas reglas específicas de cada lengua o idioma (gramática generativa). Así, el chino y el castellano o español pueden parecer muy distintos y en algunos aspectos lo son (por ejemplo, la utilización de códigos alfabéticos diferentes), pero la estructura de los mensajes y sus reglas gramaticales básicas son las mismas.

6 La comunicación y el lenguaje en el niño de 0 a 6 años 11 En los primeros meses de vida y hasta los 2 ó 3 años, el niño es especialmente sensible a detectar y adquirir esas reglas universales e incorporarlas a su conducta verbal. Esto explica la facilidad que tienen los niños a la hora de aprender una lengua distinta a la materna. EJEMPLO Como sabes, es muy habitual que niños de otras nacionalidades o culturas se incorporen a nuestras Escuelas Infantiles. En ocasiones se pueden generar situaciones de cierta angustia cuando ni los padres ni el niño saben hablar nuestro idioma. Con el paso del tiempo, todo tiende a normalizarse y suelen ser mucho más rápidos los progresos en el aprendizaje del niño que en el de los padres, cuyas dificultades con el idioma se mantienen. A veces son los niños quienes les enseñan y traducen. A qué crees que se debe esta diferencia tan significativa? a Noam Chomsky (1927). Chomsky, en su teoría de la Gramática Generativa Transformacional, defiende la idea de que una de las reglas universales del lenguaje es la estructura sintáctica de las frases, que sigue siempre la misma secuencia, aunque varíe el orden: FRASE SINTAGMA NOMINAL SINTAGMA VERBAL ARTÍCULO La NOMBRE niña VERBO come ARTÍCULO una NOMBRE tarta ACTIVIDADES a Ejemplo de una estructura sintáctica. Este autor defiende también la existencia de dos niveles estructurales en toda frase o enunciado: Una estructura profunda, referida a ese orden básico y universal que comparten todas las lenguas. Una estructura superficial, referida a la forma particular y concreta de cada frase. La primera se rige por unas reglas generales y la segunda se refiere a unas reglas transformacionales (de ahí el nombre de teoría Gramática GenerativaTransformacional). Ya desde las primeras frases que el niño construye se observa esta estructura, aun cuando, por la inmadurez de sus estructuras glosofaríngeas, estas producciones puedan parecer erróneas o poco estructuradas. 1. Analiza la estructura de un grupo de frases, aparentemente distintas, incluso de idiomas diferentes, y comprueba si esta estructura sintáctica universal existe. 2. Escucha cómo empiezan a hablar algunos niños pequeños de tu entorno. Graba sus conversaciones y trata de aplicar este esquema teórico al analizar las grabaciones.

7 12 Unidad Comunicación, expresión y lenguaje Dentro de cualquier situación comunicativa, la comunicación, la expresión y el lenguaje son tres conceptos que forman parte de un mismo proceso. Observa el esquema que te ofrecemos a continuación para entender como interactúan entre sí: COMUNICACIÓN EXPRESIÓN LENGUAJE LENGUA HABLA saber más La competencia emocional es una de las áreas que despierta mayor interés entre las nuevas corrientes educativas. Por eso es un tema de investigación e innovación pedagógica de instituciones como la Asociación Mundial de Educadores Infantiles. Te recomendamos que visites su página web: La lengua o idioma es un sistema de signos que engloba un vocabulario y una serie de leyes gramaticales y fonéticas. Es un producto social del proceso psíquico del lenguaje y un conjunto de convenciones socialmente establecidas por una determinada cultura. Para que el niño pueda asimilar e integrar esta cultura, necesita aprender y utilizar esta lengua. Saussure destaca también la importancia del concepto de habla, y plantea cómo la lengua se materializa en el habla, que es la ejecución individual de la lengua por parte del sujeto que se comunica mediante la utilización de dicha lengua. Lenguaje, lengua y habla forman una tríada: los tres son componentes del desarrollo lingüístico y a cada uno le corresponden diversos procesos y aprendizajes que influirán en el conocimiento del entorno social y cultural del niño, así como en el desarrollo de su competencia social y emocional. El lenguaje y su expresión, la lengua, está formado por tres componentes: el fonético, el léxico y el gramatical, que constituyen el sistema de la lengua: El componente fonético-fonológico abarca el conjunto de sonidos del idioma, y sus modelos o tipos ideales, los fonemas. Este componente se desarrolla mediante la percepción e imitación de los sonidos y sus combinaciones en las palabras. El componente léxico-semántico corresponde al vocabulario, a la comprensión y uso de la lengua (palabras) en función de su significado. El componente gramatical abarca la morfología (leyes de transformación de las palabras) y la sintaxis (combinación de palabras dentro de la oración). Es un componente que surge más tarde que los anteriores componentes y su alteración puede limitarlos. Por todo ello, es evidente que la comunicación es un proceso complejo y global de gran importancia para el niño y su desarrollo. No obstante, no debemos pensar que el lenguaje es la única forma de expresión y el único elemento de la comunicación. El lenguaje, como expresión oral en forma de palabras y frases articuladas es, posiblemente, la forma de comunicación más completa, pero no la única.

8 La comunicación y el lenguaje en el niño de 0 a 6 años 13 Existen otras formas de expresión igualmente útiles que, en ocasiones de forma complementaria o por sí solas, constituyen sistemas de comunicación tan eficaces o más que la propia palabra hablada. Acaso no expresa emociones un dibujo o un cuadro? No es un artículo periodístico (lecto-escritura) la mejor herramienta para conocer en profundidad una noticia? Alguna vez has visto cómo las personas sordas se comunican con los movimientos de sus manos? Estos son solo algunos ejemplos de formas de expresión diferentes a la expresión oral. Estudiaremos este tema en la Unidad 3, pero te ofrecemos a continuación una breve relación: Expresión oral: es el lenguaje articulado, esto es, la palabra. Responde a las reglas gramaticales mencionadas anteriormente y es la forma de comunicación que más nos identifica como humanos. Aunque tiene distintos formatos (lenguas e idiomas), todos siguen una estructura común y universal, tal y como nos lo plantea Chomsky. Expresión gestual: está muy relacionada con el área emocional y se refiere fundamentalmente a la expresión facial, verdadero espejo de las emociones. También hay que considerar la expresividad de las manos que son las herramientas más elaboradas de nuestro cuerpo, capaces de expresar emociones y de reportar afecto (caricias, abrazos, etc.). Capítulo aparte merecerá el hecho de poder utilizarlas como sustitutivas de la palabra (por ejemplo, la lengua de signos de las personas sordas o como apoyo, es decir la palabra complementada). Más adelante nos referiremos a estos Sistemas Alternativos y Aumentativos de la Comunicación. Expresión corporal: es una versión de la expresión gestual y se corresponde con lo se denomina lenguaje no verbal. Puede referirse a la postura y al movimiento, tanto en los casos de conducta espontánea (por ejemplo, posturas de acercamiento o rechazo) como en aquellas conductas más elaboradas, como por ejemplo el uso de la danza y el baile como catalizadores de emociones. A lo largo de la historia, y como una necesidad expresiva vinculada a la comunicación, el hombre ha utilizado su cuerpo para manifestarse, a través de gestos, acciones y movimientos. Se puede decir que es en este contexto donde la danza hace su aparición como un fenómeno expresivo cognitivo, social y cultural. a El alfabeto Dactilológico Universal es un ejemplo de la lengua de signos empleada por las personas sordas. saber más La lengua de signos es la lengua natural de las personas sordas que les permite acceder a la información esencial para su desarrollo. Es una lengua visual con estructura propia. La Ley 27/2007, de 23 de octubre, reconoce las lenguas de signos y regula los medios de apoyo a la comunicación oral de las personas sordas, con discapacidad auditiva y sordociegas. a La danza es una forma de expresión corporal que nos ayuda a catalizar nuestras emociones.

9 14 Unidad 1 vocabulario Pensamiento divergente: Resolución de problemas a través de reglas no convencionales, creativas y originales. Pensamiento convergente: resolución de problemas siguiendo reglas convencionales y estandarizadas. a La expresión plástica favorece en los niños el desarrollo de la creatividad y del pensamiento divergente. Expresión gráfica: aunque sabemos que la lecto-escritura no se adquiere en Educación Infantil, sin embargo, sí podemos afirmar que es en esta etapa cuando se sientan las bases que constituirán el aprendizaje de estas habilidades. Sin duda, la evolución del gesto gráfico o trazo comienza desde los primeros trazos espontáneos (por ejemplo, con pintura de dedos), hasta la reproducción de modelos simbólicos sencillos y el reconocimiento de letras y palabras, pasando por la reproducción de trazos más complejos y el punteado. En definitiva, estas adquisiciones son muy importantes para el desarrollo del niño puesto que suponen su acceso a la cultura a través de la palabra impresa. Expresión plástica: al igual que el caso anterior, se establece, fundamentalmente, a través del dibujo y de las creaciones manuales, como el modelado de materiales con las manos (arcilla, plastilina, etc.), así como con el uso de las primeras herramientas de transformación (cortar con tijeras, puntear con el punzón, pegar materiales con colas, anudar, rasgar, etc.). Es un reflejo de lo que podemos llamar arte infantil, y supone una fuente productiva que despierta la inteligencia creativa, el pensamiento divergente y la diversidad en todas sus facetas. Expresión musical: la música, como la danza, supone la oportunidad de que el niño canalice sus emociones al tiempo que reconoce e identifica las de otras personas. Dentro de este apartado son especialmente importantes las canciones infantiles, porque a través de ellas el niño reconoce y representa mentalmente la realidad de una manera divertida y en colaboración con otros. Otras formas de expresión: existen tantas formas de expresión como facetas intelectuales. Así podríamos hablar de la expresión matemática (con los números y los procesos de identificación, clasificación, función y relación matemática), la expresión espacial (referida a la utilización instrumental de formas, objetos, volúmenes y áreas), etc. ACTIVIDADES 1. Plantea situaciones cotidianas y ejemplos referidos a la conducta comunicativo-lingüística de niños que conozcas, a partir de los conceptos tratados (comunicación, expresión, lenguaje, lengua y habla). 2. Analiza distintas formas de expresar una realidad concreta, como por ejemplo, algún elemento de la naturaleza (el agua, el sol, los árboles, etc.). Plantea ahora una situación educativa donde trabajes estas formas de expresión. 3. Identifica cuál es el lenguaje y cuál es la forma de expresión en las situaciones expresivas o comunicativas que te ofrecemos a continuación: a) Un pianista reproduce una melodía descifrando una partitura. b) Un actor hace una representación mediante una técnica de «mimo». c) Un niño realiza un dibujo y se lo enseña a un adulto. d) Un niño se acerca a su madre y a la vez que la abraza le dice: «mamá».

10 La comunicación y el lenguaje en el niño de 0 a 6 años El desarrollo del lenguaje en la edad infantil El lenguaje es una forma peculiar de conocimiento de los objetos y fenómenos del entorno. Para que el niño pueda conocer y experimentar ese entorno necesita sentirse seguro y protegido. Por este motivo, es a través de la lengua materna como se desarrolla inicialmente la comunicación y el lenguaje. Es necesario estructurar todos los aprendizajes infantiles a partir de esa lengua materna o natal. Son múltiples y variados los factores que inciden en el desarrollo del lenguaje desde sus comienzos Factores del desarrollo del lenguaje Los factores que influyen en el desarrollo del lenguaje se dividen en dos categorías: en primer lugar, los factores internos (biológicos y cognitivos) inherentes al propio niño. En segundo lugar, los factores externos, es decir, aquellos determinados por el ambiente. Factores internos Los factores internos necesitan de su propia maduración para desarrollarse, algo que es posible gracias a la presencia de factores externos o ambientales. Esta idea es muy importante porque ya sabemos que existe una interacción en forma de retroalimentación positiva entre maduración (nivel interno, biológico), aprendizaje (nivel externo, ambiental) y desarrollo (consecuencia de la interacción de los dos anteriores). Destacan dos tipos de factores internos: los factores biológicos, (maduración de los órganos y funciones responsables del lenguaje) y los factores psicológicos (funciones cognitivas que están en la base del lenguaje). Dentro de los factores biológicos hay que destacar: La maduración de las estructuras cerebrales, particularmente la corteza cerebral (áreas de Broca y Wernicke) responsables del procesamiento de la información y producción lingüística. Las estructuras glosofaríngeas (lengua, dentición, cuerdas vocales, laringe, etc.), del que depende el funcionamiento de la emisión de voz. El oído, del que depende la audición, función imprescindible para el desarrollo pleno de la articulación oral. Dentro de los factores psicológicos hay que destacar: La percepción es un complejo proceso de procesamiento de la información recibida inicialmente a través de los sentidos y en la que, a su vez, intervienen otros procesos relacionados con las funciones psicológicas superiores como la atención y la memoria. La atención es la capacidad de mirar y escuchar cada vez con mayor intencionalidad, durante más tiempo y de manera selectiva. Es necesario que funcionen también de una manera adecuada otros procesos cognitivos, como la imitación y la memoria icónica (referida a las imágenes) y ecoica (referida a los sonidos), cuyo desarrollo está claramente vinculado a la influencia de las condiciones ambientales. FACTORES INTERNOS BIOLÓGICOS maduracion de: PSICOLÓGICOS: maduracion de: saber más ESTRUCTURAS CEREBRALES ESTRUCTURAS GLOSOFARÍNGEAS EL OÍDO LA PERCEPCIÓN LA ATENCIÓN OTROS PROCESOS COGNITIVOS Los bebés son capaces de oír antes de nacer, pueden reconocer expresiones de la madre en la lengua nativa frente a otras expresiones de lengua extranjera y pueden realizar distinciones de sonidos que un adulto no puede.

11 16 Unidad 1 Factores externos Los bebés muestran una clara predilección por las características de la voz y del rostro humano y prefieren, por dichas características (circularidad, tono y volumen), la voz humana a otros sonidos, lo que les hace manifestar un mayor interés por interactuar con adultos. En este punto, es importante hacer referencia a la teoría del Desarrollo Sociolingüístico de Vigotsky, quien plantea la adquisición del lenguaje en el marco de la interacción social. El lenguaje es el vehículo de comunicación por excelencia de estas interacciones. Igualmente, conceptualiza el lenguaje como función reguladora del comportamiento en la interacción social: se ejerce de forma externa cuando el adulto utiliza el lenguaje para controlar las pautas de comportamiento del niño. Así, un entorno social rico en interacciones con unas pautas de comunicación elaboradas, que apoye la palabra con la letra impresa, el gesto y otros tipos de expresiones, contribuye positivamente sobre el desarrollo comunicativo-lingüístico del niño Funciones del lenguaje en la infancia a Jugando, el niño intercambia y se comunica, es decir, pone en práctica la función reguladora del comportamiento. El lenguaje tiene tres funciones básicas: Una función comunicativa como transmisor de información. Una función representativa como medio simbólico para nombrar e identificar los objetos y fenómenos del entorno. Una función reguladora del comportamiento social del niño, en tanto que supone interacción y reciprocidad emocional y conductual con los demás. La utilidad del lenguaje se manifiesta tempranamente y evoluciona en las primeras interacciones sociales, particularmente con la madre. Inicialmente se da una comunicación a nivel primario, vinculada a los sonidos de agrado y desagrado emitidos por el niño. Desde los primeros días, esos sonidos cumplen una función de regulación, comunicación y representación social. Podemos hablar de distintos periodos sensibles en el desarrollo de la comunicación y el lenguaje, así como en la adquisición y uso de una lengua y en el entrenamiento de un habla bien estructurada. Si durante esos periodos sensibles no se produce una adecuada estimulación externa, el desarrollo comunicativolingüístico puede sufrir alteraciones e incluso retrasos. Al final de la Unidad te proponemos que veas una película sobre un hecho real de aislamiento social de un niño que tuvo fatales consecuencias para su desarrollo comunicativo-lingüistico. Se trata del célebre caso estudiado por Itard y que Truffaut llevó magistralmente al cine en El pequeño salvaje. Antes de ser capaces de usar las palabras, los niños descubren que ciertos sonidos tienen la virtud de producir modificaciones en su medio. Este aprendizaje sobre la significación de los actos, sonidos y gestos le permitirá comprenden las emociones y deseos de los otros y, al mismo tiempo, influir con los suyos en los demás. a El pequeño salvaje de Truffaut. Esta posibilidad de relacionar objetos y acciones va a constituir un logro importante en el desarrollo comunicativo-lingüístico del niño durante su primer año de vida, donde destacan las funciones representativa y comunicativa del lenguaje.

12 La comunicación y el lenguaje en el niño de 0 a 6 años 17 El siguiente paso en este desarrollo evolutivo lo constituye la expresión mediante la palabra hablada, es decir, el uso del lenguaje oral, necesaria consecuencia de todo lo anterior. De aquí en adelante, el niño no solo podrá comprender los deseos o indicaciones de los demás, sino también expresar sus necesidades y deseos. Estará poniendo en práctica la función comunicativa del lenguaje, que aprendió en la interacción social y que empieza a ejercer activamente. recuerda El desarrollo del lenguaje implica aspectos: cognitivos, socio-afectivos, auditivos y motores y requiere aptitudes sensoriales (ver, oír, tocar ) y actitudes perceptivas básicas (dar significado a las sensaciones que el bebé reciba) La escuela infantil y el desarrollo del lenguaje Estas son algunas de las características que debe presentar la escuela infantil para contribuir y favorecer el desarrollo de la comunicación y del lenguaje de los niños: Clima de relaciones afectivas y comunicativas de seguridad, confianza y comodidad para el niño. Estilo comunicativo eficaz del educador, respaldando la palabra con gestos y contacto corporal. Utilización de diversas estrategias de representación y desarrollo de la función simbólica. Sensibilidad (competencia y disponibilidad) del adulto para interpretar y atender algunas manifestaciones del niño. Valor pedagógico potencial de los intentos del niño al confiar en sus posibilidades y apoyar sus esfuerzos. Regularidad, estabilidad y previsibilidad en las comunicaciones que se establezcan con el niño. Desde el punto de vista curricular, estas son algunas de las competencias básicas que deberá desarrollar un Técnico Superior en Educación Infantil: 1. Contextualizar la intervención educativa en los aspectos expresivos y comunicativos, valorándolos con las diferentes teorías de la adquisición del lenguaje, su evolución, alteraciones e importancia en el desarrollo infantil. 2. Planificar estrategias y actividades favorecedoras del desarrollo de la expresión y comunicación, relacionándolas con las características individuales y del grupo al que van dirigidos e identificando las características de los diferentes tipos de expresión en función de la edad de los destinatarios. Del mismo modo, las necesidades comunicativo-lingüísticas favorecedoras del desarrollo del lenguaje en el niño se dan en la familia, desde el protolenguaje que promueve la madre en la primera díada dialéctica de la etapa bebé, hasta el refuerzo y apoyo emocional a las primeras producciones del niño (primera palabra, primera frase, etc.). Esto hace que el trabajo del educador infantil no se limite al aula con los niños sino que promueva acciones de comunicación y colaboración con las familias, manteniendo una misma línea educativa y facilitando la transferencia de los aprendizajes. El educador infantil debe ser capaz de analizar y valorar la idoneidad educativa de las pautas de comunicación con los niños en el hogar y en el aula, adecuando su intervención pedagógica y asesorando a las familias al respecto. a La escuela infantil desempeña un papel fundamental en el desarrollo del lenguaje de los niños.

13 18 Unidad 1 3. Etapas en el desarrollo del lenguaje caso práctico inicial Es fundamental conocer estas etapas evolutivas, así como las principales adquisiciones referidas a cada edad. Solo de esta manera podrás interpretar las conductas y aprendizajes de los niños de tu aula y, en función de ello, programar e intervenir positivamente. Desde las primeras semanas el bebé no solo es capaz de reconocer expresiones emocionales sino que es capaz de reaccionar ante ellas de una forma cada vez más ajustada. Esta capacidad va incrementándose con el progresivo desarrollo de habilidades cognitivas y con la ampliación del mundo social del niño. Pero desde el primer momento, también posee un mundo emocional propio; cuenta con un repertorio de emociones que nos indican que los estímulos externos o internos le proporcionan bienestar o malestar. El desarrollo cognitivo y social le permitirá ir adentrándose en el mundo de la comparación social. La culpa, el orgullo o la vergüenza son emociones que aparecen unidas a la capacidad de comparar y valorar la conducta en relación con otros y con una norma predeterminada. Pero el desarrollo del mundo social, en el que lo emocional juega un papel esencial, no puede entenderse sin el establecimiento de una relación de apego. La existencia de una relación afectiva es una de las bases fundamentales para asegurar un desarrollo adecuado. Esta relación cercana con los adultos y con sus figuras de apego será también el contexto en el que se inicie el proceso de la comunicación. Un logro importante del desarrollo del niño lo constituye el inicio de la comunicación mediante el lenguaje. A partir de la primera palabra que emiten, asociada de manera inequívoca con un objeto o fenómeno de la realidad, la inteligencia lingüística crece significativamente. No obstante, este proceso de aprendizaje comienza mucho antes de que el niño haya emitido su primera palabra. El bebé nace con unas predisposiciones innatas que le permitirán iniciar su proceso de adquisición del lenguaje siempre y cuando se desarrolle en un contexto interactivo y comunicativo propicio, donde el habla y la expresión gestual sean las estrategias comunicativas fundamentales. La etapa prelingüística: Estadio 1 (0 2 meses): las preadaptaciones para la interacción Estadio 2 (2 5 meses): el interés activo por las personas Estadio 3 (5 8 meses): el aumento del interés por los objetos físicos Estadio 4 (8 12 meses): la aparición de la comunicación intencional 1. Balbuceo El desarrollo fonológico: 2. Las primeras palabras 3. Las primeras frases 4. El predominio de los significados 5. La formación de conceptos

14 La comunicación y el lenguaje en el niño de 0 a 6 años La etapa prelingüística En la etapa prelingüística o preverbal (hasta el primer año), el niño aprenderá a: Comunicarse intencionalmente, es decir, a establecer un vínculo con el adulto mediante gestos y vocalizaciones. Utilizar las funciones comunicativas básicas con las que desarrollará posteriormente sus primeras palabras. Conocer el entorno que irá dotando de significado a sus primeros intercambios comunicativos. En este periodo comienza también el desarrollo fonológico: el bebé realizará importantes aprendizajes respecto a los sonidos que constituyen su lengua. Así pues, durante esta etapa se van construyendo algunos de los componentes esenciales del lenguaje: La forma (los sonidos que van a formar las palabras). El contenido (los significados). Su uso (adaptación a la situación y contexto comunicativo). Para guiarnos por el recorrido que sigue el niño en este proceso de aprendizaje vamos a tomar como referencia la teoría del Desarrollo Lingüístico de Schaffer: Estadio 1 (0 2 meses): las preadaptaciones para la interacción. El rostro humano es el estímulo visual por el que el neonato siente mayor preferencia (es el objeto que mira con más frecuencia), y nuestra voz, especialmente la de la madre, es el estímulo auditivo que con más facilidad capta su interés. Estas preferencias innatas del bebé tienen un gran valor adaptativo: la cara y la voz van a constituir los principales canales de comunicación. Pero el bebé no solo viene preparado para establecer un cierto contacto con el otro, sino también para dar respuestas a ciertos patrones estimulantes que les proporcionan los adultos. Por ejemplo, si observamos el comportamiento del bebé cuando está siendo amamantado por su madre, vemos que hace frecuentes pausas que carecen de funcionalidad fisiológica, pero en las que la madre aprovecha para hablarle, estimularle los labios, acomodarlo, etc., hasta que el niño reanuda la succión. Se establece así una especie de diálogo corporal entre el hijo y la madre que algunos autores han interpretado como una forma primitiva de la conversación. Además, en el repertorio conductual inicial del bebé existen otras conductas que tienen un marcado carácter expresivo: llanto, sonrisa y arrullos. A pesar de lo que suelen pensar los padres, sus hijos no se comunican intencionalmente con ellos desde el nacimiento. El bebé, en este periodo, cuando llora o sonríe no nos intenta comunicar nada, simplemente expresa mediante el llanto o la sonrisa su estado de malestar o de bienestar. Pero los adultos interpretamos esas conductas «como si» el niño quisiera transmitirnos cierta información. Esas atribuciones intencionales tienen una importancia decisiva en el desarrollo comunicativo del niño, pues a partir de ellas va a ir aprendiendo que algunas de sus conductas (precisamente las más prosociales), generan respuestas en el otro. Estadio 2 (2 5 meses): el interés activo por las personas Este periodo se caracteriza por el interés activo que el niño va a mostrar hacia las personas; aparecen nuevas formas de interacción que reciben la denominación de «juegos cara a cara» porque consisten en intercambios de miradas, de a El diálogo corporal que se establece entre el hijo y la madre durante el amamantamiento ha sido interpretado por algunos autores como una forma primitiva de la conversación. a El rostro humano y la voz son los dos principales estímulos del bebé recién nacido.

15 20 Unidad 1 saber más Con la aparición de la comunicación intencional, el bebé se abre al mundo física, mental y emocionalmente. En breve tiempo sus intercambios recíprocos comenzarán a tener un carácter de causa-efecto. Se da cuenta de que sus acciones desencadenan respuestas en los demás. Son los primeros cimientos del pensamiento lógico. Aprende que puede influenciar en lo que le rodea. a El bebé empieza a orientar su conducta hacia objetos y personas mediante la orientación física del gesto y la postura. expresiones faciales, de movimientos corporales y de vocalizaciones acompañadas de expresiones de afecto positivo. Surgen, también, las primeras «sonrisas sociales», que no responden a estados de bienestar interno sino que son suscitadas por el otro en el contexto de situaciones interactivas. La mirada mutua también desempeña un papel fundamental en estos primeros intercambios. Estadio 3 (5 8 meses): el aumento del interés por los objetos físicos Se produce un cambio en los «intereses del niño»: el mundo de los objetos físicos le llama poderosamente la atención. Pero el niño no descubre solo los objetos, es el adulto el que los va introduciendo en su relación con él, actuando sobre ellos y haciéndoselos atractivos. Esa fascinación que el niño comienza a sentir por el mundo de los objetos físicos no va a bloquear su interés por las interacciones con los adultos más cercanos, de hecho a esta edad comienzan los juegos infantiles corporales con los adultos. También aparecen las conductas anticipatorias como consecuencia de que el niño puede predecir el curso de las acciones en las que ha participado una y otra vez, por ejemplo, cuando la madre se inclina hacia el bebé tendiéndole los brazos para cogerlo y él «anticipa» la acción levantando los suyos. Lo más característico de esta etapa es la profunda escisión que existe para el bebé entre el mundo de los objetos físicos y el mundo social. Su atención, sus acciones se dirigen bien a los objetos, bien a las personas pero no puede coordinar en un acto integrado ambos mundos. Estadio 4 (8 12 meses): la aparición de la comunicación intencional En los últimos meses del primer año de vida va a ser capaz de comunicarse con el adulto acerca de algo, de un foco externo de interés que puede ser un objeto, una acción o una experiencia interesante. A esta nueva forma de comunicar la denominamos comunicación intencional, y es posible porque ahora ya puede coordinar esos «esquemas» de objetos y de personas en un esquema triádico único, que en la fase anterior permanecían separados. Con esta nueva forma de comportamiento transmiten al adulto su intención respecto a un determinado objeto. Los actos que realizan los niños en estas formas comunicativas reciben el nombre de gestos y se caracterizan por: Acciones ritualizadas que consisten en suprimir o transformar partes del acto de tal manera que, por sí mismo, resultaría ineficaz para conseguir el fin perseguido. Por ejemplo, para intentar coger algo estiran el brazo, todo el cuerpo, los dedos, etc., hacia la dirección de ese objeto, en cambio el niño que intenta pedir el objeto, no realiza estas acciones, en general realiza acciones inadecuadas para ejercer efecto mecánico alguno sobre el objeto. Actos que están orientados a los objetos y a las personas, la orientación hacia el objeto suele hacerse mediante la dirección física del gesto; la orientación hacia la persona viene marcada habitualmente por la mirada del niño a la cara del otro y por la emisión de vocalizaciones. El repertorio gestual que el niño usa para expresar sus intenciones es variado (contacto ocular, mirada alterna al objeto y a la persona, vocalizaciones, señalización con el dedo...). No suelen emplear gestos aislados sino combinaciones de ellos.

16 La comunicación y el lenguaje en el niño de 0 a 6 años 21 Los actos comunicativos intencionales más importantes, en el ámbito de la conducta preverbal, son: a) Protoimperativos (gestos mediante los cuales el niño utiliza al adulto para conseguir algún fin, algún objeto deseado). b) Protodeclarativos (gestos que usan para conseguir compartir la atención del adulto respecto a un objeto señalado) El desarrollo fonológico Balbuceo Hacia los seis meses hace su aparición el balbuceo. Desde esa edad y hasta su primer cumpleaños los niños empiezan a emitir sonidos vocálicos combinados con sonidos consonánticos. Al principio se trata de sonidos aislados: «pa», «ma», «ta», que más tarde se unirán en secuencias «papa», «mama», que no constituyen todavía palabras, a pesar de su parecido con ellas. El siguiente cuadro presenta algunas características del balbuceo: saber más Para conocer las bases biológicas y psicológicas del desarrollo fonológico y evaluar e intervenir adecuadamente, el educador debe trabajar en colaboración con otros profesionales, como foniatras y logopedas. Son sonidos que el bebé emite aunque carezca de estimulación verbal, prueba de ello es que los bebés sordos también comienzan a balbucear. Los bebés de diferentes comunidades lingüísticas manifiestan las mismas preferencias cuando emiten sus sonidos. Este hecho puede explicarse por las características anatomofisiológicas del tracto vocal a esas edades y por la dificultad que entraña la coordinación de los órganos articulatorios para producir otros tipos de sonidos consonánticos. Durante el balbuceo el bebé emite sonidos que no pertenecen a su lengua materna. A partir de los 9 meses los bebés ya son capaces de producir los sonidos básicos de su lengua materna. Y comienzan a apreciarse una serie de características que no habían aparecido antes: balbucean de manera continuada con patrones entonativos muy claros de exclamación, de interrogación, de comentario, etc., dándonos la impresión de que están construyendo oraciones, pero que son ininteligibles (algunos autores lo denominan jerga). Igualmente, el niño utiliza el llanto como una conducta intencionadamente comunicativa, pasando de la expresión de malestar en el bebé, al uso instrumental cuando transcurren unos meses o incluso años. De esta manera, y para desesperación del adulto, el niño cuenta con una herramienta expresiva alternativa que, en ocasiones, resulta tremendamente eficaz. Las primeras palabras No podemos ser exhaustivos a la hora de fijar cuándo aparecen las primeras palabras con sentido porque, como estamos viendo, este sentido es algo muy individualizado (cada niño tiene su propia jerga) y contextualizado (la familia y contexto social del niño comprende y conoce lo que el niño quiere y expresa). a A partir de conductas como el llanto, el bebé aprende que sus actos generan respuestas en el otro.

17 22 Unidad 1 a Las primeras palabras que dice el niño se refieren a objetos y acciones. A partir de este momento, empezará a comunicar sus necesidades y deseos con el lenguaje oral. recuerda Para favorecer el desarrollo del lenguaje en los niños y niñas: Desarrolla aptitudes de observación. Evita la conducta directiva. Ajusta tu lenguaje al niño. Elimina las conductas negativas. Crea situaciones comunicativas. Estas primeras palabras actúan, inicialmente, designando a los objetos y también a las acciones que se relacionan con estos objetos, es decir, la palabra se constituye en señal de una acción. Esto es lo que permite que cuando al niño se le dice: Dame la pelota, vincule la denominación del objeto (la pelota) con la acción que se relaciona con la misma (dame la pelota). El siguiente paso en este proceso evolutivo lo va a constituir la expresión mediante el habla, es decir, el uso de un lenguaje oral más estructurado. De aquí en adelante, el niño no solo podrá comprender los deseos o indicaciones de los demás, sino también expresar sus necesidades y deseos con palabras. En este proceso de comprensión de la lengua y de su expresión es fundamental la imitación. Esta supone una estrategia de aprendizaje con unas propiedades muy positivas para el niño, en tanto que le supone realizar muchas conductas y producciones con poco esfuerzo. La importancia de la imitación es fundamental en el proceso de desarrollo de la lengua. Por este motivo, es objeto de estudio en otros módulos, fundamentalmente en el de«desarrollo cognitivo y motor». Las primeras frases Las primeras palabras que los niños emiten se denominan palabra-frase porque implican no solo la denominación del objeto, sino también de una acción que está unida a la significación de dicho objeto. Debe pasar un tiempo para que vayan diferenciando entre la palabra y la acción, y atribuyan a cada unidad de expresión (palabra) un significado más estricto, convirtiendo a la palabra en unidad de expresión y de significado. Paulatinamente, el niño va descubriendo ciertas regularidades en el uso del lenguaje y comienza a realizar combinaciones que le permiten expresarse con palabras que nunca ha escuchado, siguiendo su propia lógica interna. De este modo introduce, acompañando a las primeras palabras (nombres), otras como verbos, conjunciones, etc. Aunque en un principio puedan parecer ininteligibles, en realidad el niño está tratando de construir sus primeras frases. En lugar de decir: «Nene agua» puede decir: «Quere agua» o incluso: «Nene quere agua». Esto supone un paso cualitativo fundamental en su desarrollo lingüístico y de ahí hasta la construcción de frases gramaticalmente elaboradas tan solo hay entrenamiento, imitación e intervención educativa estimuladora. El contexto familiar sigue siendo crucial, por ello si el código lingüístico y la elaboración gramatical son muy elaborados repercutirá positivamente, siempre y cuando lo adapten a las posibilidades y necesidades comunicativas que el niño vaya presentando. El predominio de los significados Más adelante, a partir de los 2 años, empiezan a predominar las propiedades semánticas (de significado) del lenguaje: no es ya el sonido de la palabra, sino su significado. Con el predominio de los significados, las posibilidades de conocimiento y transformación del entorno a través del lenguaje se multiplican; se inicia el verdadero dominio del lenguaje y de otros códigos lingüísticos, como las señales de tráfico (semáforos, pasos de cebra, etc.) y otras señales iconográficas (símbolos de peligro, hospital, etc.). Las estructuras básicas de la lengua han de estar adquiridas, salvo aquellas habilidades específicas correspondientes a la lecto-escritura. Alrededor de los 3 o 4 años se pueden entrenar habilidades caligráficas que le permitan realizar trazos continuos con cierta precisión, ajustándose al renglón y reproduciendo

18 La comunicación y el lenguaje en el niño de 0 a 6 años 23 adecuadamente la forma, y que son condiciones esenciales para un rápido dominio de la lectura y la escritura tras su ingreso en la escuela. Alcanzar este desarrollo supone un largo camino que se inicia en el mismo momento del nacimiento, con la discriminación elemental de los primeros sonidos, el desarrollo de su oído fonemático y de las estructuras fonatorio-motoras. A partir de aquí comenzará la formación y posterior desarrollo de su expresión oral y de un lenguaje coherente, que le va a permitir expresar de manera efectiva su pensamiento y comunicarse eficientemente con los que le rodean. La formación de conceptos Son objetos, acontecimientos, situaciones o propiedades que poseen atributos de criterio comunes y que están diseñados, en cualquier cultura, mediante algún signo o símbolo aceptado (Ausubel): Permiten discriminar y agrupar todo tipo de cosas diferentes en una misma clase expresándolas como equivalentes. Esta equivalencia se fundamenta en atributos de criterio comunes y abarca a todos los elementos que los reúnen. Esta agrupación lleva, por consiguiente, a la separación de estos elementos de otros, considerados como no equivalentes. Se expresan en toda cultura por un signo o símbolo. Las dificultades que el niño encuentra al enfrentarse a los conceptos hacen que utilicen: Preconceptos (dificultades en la extensión de un concepto): Subgeneralización: el niño considera que una parte del concepto real es el concepto mismo. Sobregeneralización: el niño considera que el concepto real tiene muchos más atributos. Por ejemplo, puede llamar papá a todos los hombres o guau guau a todos los animales. Prototipos: Están muy relacionados con los preconceptos. El niño tiene un concepto general en el que incluye varios elementos, pero a la hora de decidir si un elemento pertenece o no a un concepto no es la suma de sus propiedades definitorias, sino la semejanza global entre diferentes elementos y el prototipo (imagen típica de un concepto). El resultado es que el niño construye una imagen parcial del mundo basada en preconceptos y prototipos, pero que le permite conocer poco a poco su realidad e irla integrando. a Las habilidades caligráficas empiezan a desarrollarse a partir de los 4 años, preparando el terreno para el aprendizaje de la lectoescritura. ACTIVIDADES 1. Teniendo en cuenta los aspectos evolutivos en la adquisición del lenguaje, debes elegir un bebé o un niño (entre 0 y 3 años) y observar cómo se comunica para determinar en qué etapa evolutiva del desarrollo del lenguaje se encuentra. 2. A partir de las observaciones obtenidas en la actividad anterior, explica tus conclusiones por escrito. Deberás argumentar cada una de ellas con ejemplos concretos y tratar de deducir cómo será el desarrollo posterior del lenguaje en el niño analizado.

19 24 Unidad 1 a A través del juego simbólico, el niño atraviesa por estas tres etapas: realismo, animismo y artificialismo. saber más Las características y evolución del pensamiento infantil, así como el desarrollo de sus ideas y conceptos los estudiarás con más profundidad en el módulo «Desarrollo Cognitivo y Motor». El niño explica el mundo de una forma característica y peculiar, con arreglo a su experiencia y a su capacidad perceptiva y cognoscitiva, que le diferencia sustancialmente del adulto. Sus interpretaciones del mundo, de forma mágica, a veces pueden resultar similares a las creencias que manifiestan algunos pueblos primitivos, como por ejemplo cuando creen que «una canción puede atraer la lluvia». La representación que el niño hace del mundo que le rodea se va a manifestar a través de tres formas características: a) Realismo Se puede definir como la confusión que se da entre el mundo real y el mundo interior o imaginado por el niño. Es la confusión entre lo físico y lo psíquico. Todo lo que siente, conoce o ve, cree que forma parte de la realidad externa; nada para él es interno y subjetivo. Veamos los siguientes ejemplos: Un niño de 4 años cree que «pensamos con la boca y la lengua» o que el pensamiento y la voz son lo mismo. Puede correr despavorido en el juego del lobo cuando piensa que realmente está siendo perseguido por este. Siente la necesidad de mirar debajo de la cama para asegurarse de que no está la bruja porque imagina que puede estar escondida ahí. Cree que los sueños están realmente en la habitación por la noche. Podemos hablar también de otra clase de realismo que es el nominal, que consiste en la creencia de que las palabras forman parte de los objetos, son indisociables de ellos: así, el Sol no podría llamarse de otra manera, porque es el Sol. b) Animismo Es la tendencia que se manifiesta en el niño a través de la cual considera las cosas como vivientes y conscientes (esta última posibilidad es menos frecuente). Para el niño menor de 6 años, todo aquello que tiene actividad tiene vida: así, una piedra arrojada al aire, el coche que rueda, el viento que mueve los árboles, están vivos. Esta idea va a evolucionar y será a partir de los 8 años cuando diferencie entre el movimiento propio y el adquirido. En ese momento comprenderá que el tren no tiene vida, sino que es el hombre el que hace que se mueva, o el viento el que mueve las nubes. c) Artificialismo El interés sobre el origen de las cosas lleva a los niños a plantearse y a plantear a los adultos ciertas cuestiones. Es frecuente oír a los niños, entre 3 y 6 años, preguntas del tipo: «Quién ha hecho el sol?», «dónde estaba yo antes de nacer?», etc. La forma en la que resuelve el niño menor de 6 años estas cuestiones es a través del artificialismo, es decir, cree que es el hombre quien fabrica o hace la naturaleza. Cuando se le pregunta a un niño: «por qué se mantiene el Sol en el aire?», contestará: «porque un señor lo ha lanzado al cielo»; o «cómo nace el sol?», «por medio de una cerilla». El viento lo produce un hombre que sopla mucho, o la lluvia es producida por toneles de agua que se derraman desde el cielo. Estas son algunas de las sorprendentes respuestas que dan los niños. La causa de estas creencias está en la forma peculiar de pensamiento prelógico, y en la explicación de las cosas por su utilidad: «el Sol es para calentarnos», «las montañas para pasear».

20 La comunicación y el lenguaje en el niño de 0 a 6 años 25 Otro aspecto importante en esta creencia es la idea que tienen de los padres como seres omnipotentes y omnipresentes; por eso, el hombre es el que ha hecho todo lo que hay en la naturaleza. Este desarrollo de la comunicación y del lenguaje sienta las bases para el aprendizaje escolar futuro y el conocimiento social y cultural, no solamente en lo referente a la lengua materna, sino al aprendizaje y desarrollo global, pues ya la palabra se ha constituido en el medio a través del cual se expresa fundamentalmente el pensamiento. Observa en la siguiente tabla, las características de las diferentes etapas en el desarrollo fonológico: recuerda Para algunos autores, como Chomsky y Vigoysky, el lenguaje en particular y la comunicación en general, son imprescindibles para el adecuado desarrollo cognitivo e intelectual. Estimularlo y favorecerlo son, por tanto, fines fundamentales tanto para padres como para educadores. Balbuceo: ETAPA Las primeras palabras: Las primeras frases: El predominio de los significados: La formación de conceptos: CARACTERÍSTICAS Emisión de sonidos vocálicos y consonánticos combinados. Sonidos aislados que no constituyen palabras. A partir de los 9 meses, balbuceo continuado con patrones entonativos. Palabras sueltas que designan objetos y acciones. La palabra se constituye en señal de una acción. Utilización de la imitación como estrategia fundamental de aprendizaje. Paso de la palabra-frase a combinaciones gramaticales más complejas. Utilización de una lógica interna para construir sus propias frases. El contexto familiar ejerce una influencia crucial en el desarrollo lingüístico. A partir de los 2 años predominan las propiedades semánticas del lenguaje. Progresivo desarrollo de las habilidades caligráficas. Comienza el desarrollo de la expresión oral y del uso de un lenguaje coherente, que permiten al niño comunicarse con los que le rodean. Desarrollo de un pensamiento conceptual. Utilización inicial de preconceptos y prototipos. Representación del mundo a través de tres formas: realismo, animismo y artificialismo. ACTIVIDADES 1. Plantea a diferentes niños entre 3 y 6 años, situaciones donde puedas comprobar la forma que tienen de explicar los fenómenos del mundo, como por ejemplo, cómo funciona un coche, por qué llueve, o qué es un planeta. Escúchalos y dialoga con ellos sin corregirles, anotando sus ideas y explicaciones en un cuaderno. 2. A partir de las anotaciones obtenidas en la actividad anterior, deberás exponer a tus compañeros las conclusiones que hayas obtenido. Clasifica cada explicación dentro de una etapa fonológica concreta.