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1 Punta del Este- Uruguay 27 y 28 de Junio 2008 ISBN Titulo del Trabajo: Educación a Distancia en el Nivel Superior: Un análisis sobre las prácticas de evaluación de los aprendizajes. Mg. Marina Díaz, Esp. Silvia del Dago marinadiaz25@hotmail.com Área: Experiencias, desarrollo de procesos y evaluación de la Educación a Distancia Introducción La transformación tecnológica en la cual estamos inmersos modifica aspectos sustantivos de la educación relacionados a lo organizativo, contenidos, medios, comunicación y definición de roles del alumno y del profesor. La planificación como la práctica educativa se ha visto afectada por el desarrollo de las TIC. Al respecto, Alfonso Gutiérrez Martín (2003) sostiene que podrá deducirse que de esta influencia mutua entre educación y tecnologías informáticas surgen nuevos modelos de educación derivados de los actuales modelos de comunicación donde adquiere notabilidad la figura del docente por los modos de interacción que debe organizar en la tarea pedagógica donde las prácticas de evaluación se sitúan como centrales. En estos cambios que se advierten en el escenario pedagógico, la evaluación como parte constitutiva del proceso didáctico adquiere notabilidad. La evaluación se ha convertido en los últimos tiempos en tema recurrente, tanto en el debate didáctico como en las preocupaciones de los distintos estamentos que integran la vida educativa. En este sentido, los modelos de Educación a Distancia y su nueva generación basada en tecnologías denominadas e-learning o teleformación, aumentan la flexibilidad del aprendizaje al hacerlo menos dependiente del tiempo y el espacio. En los entornos de enseñanza virtual la evaluación de los aprendizajes se presenta con la misma o mayor relevancia que en los sistemas presenciales, pues

2 es de capital importancia en la enseñanza on-line la necesidad de recoger constante y suficiente información sobre la situación del sujeto de aprendizaje en cada una de las fases de su itinerario formativo, con el fin de orientarle a lo largo del proceso y ayudarle a superar las dificultades que se le pudieran presentar durante el estudio. ( ) Para ello se arbitrarán las pertinentes actividades complementarias de aprendizajes o consejos singularizados, que deberían apuntar al logro de los objetivos de formación antes no poseídos y previamente diseñados. Por tanto no podrá ser la evaluación una fase aislada y mucho menos final del currículo, sino integrada, formando parte de él como elemento sustancial del mismo. Pérez Juste (1996) citado por García Aretio L. (2001: 288) La evaluación debe ser entendida coincidiendo con García Aretio (2001) como la acción de obtención de la información sobre el estudiante y la naturaleza y calidad de su aprendizaje, integrada en el proceso formativo, sistemática y continuada, que nos permite juzgar alternativas previas a la toma de decisiones. La evaluación es un proceso reflexivo, sistemático y riguroso de indagación sobre la realidad, que atiende al contexto, considera globalmente las situaciones, atiende tanto a lo explícito como lo implícito y se rige por principios de validez, participación y ética. Evaluar implica valorar y tomar decisiones que impactan directamente en la vida de los otros. En tal sentido, es una práctica que compromete una dimensión ética, no siempre tenida en cuenta y asumida como tal. Se requiere de un proceso reflexivo que asuma una posición de análisis crítico en torno a las acciones que se realizan conjuntamente con las intenciones que se persiguen. En decir, es necesario preguntarse qué se pretende, qué valores están involucrados, cómo se realiza, qué efectos tiene, qué papel asumen los evaluadores, etc. La evaluación puede analizarse desde una perspectiva cuantitativa que refiere a pensar el concepto de evaluación como medición y desde una perspectiva cualitativa, se relaciona con la capacidad y la acción de apreciar, valorar, comparar, comprender. Desde el campo teórico podemos afirmar que esto tiene que ver con dos paradigmas diferentes: el positivista y el naturalista. En el marco de estos planteos interesa indagar las características que presenta la evaluación en entornos virtuales, para lo cual se toma como referencia las practicas de evaluación en los Cursos y Seminarios de Postgrado de modalidad

3 virtual ofertados por el Área de Educación a Distancia de la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional de Catamarca - Argentina. La presente indagación permite definir y caracterizar la evaluación de aprendizajes en los entornos virtuales para lo cual se plantean los siguientes interrogantes de investigación: Cómo definen a la evaluación los tutores de modalidad virtual? Qué aspectos caracterizan la evaluación virtual? Qué criterios sostienen para su configuración? Qué problemáticas se advierten en los instrumentos de evaluación y qué argumentan los tutores sobre la confiabilidad de la evaluación en dicho entorno? Qué diferencias presenta con la evaluación presencial? Qué alternativas consideran más aplicables para evaluar a distancia? Cómo evalúan lo actitudinal? Metodología Dada la complejidad del objeto de estudio, se propone el abordaje desde el paradigma cualitativo de investigación, a través del cual se busca comprender y profundizar en la problemática desde la perspectiva de los protagonistas. Los informantes son los docentes tutores de los Cursos y Seminarios de Postgrados de modalidad virtual de la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional de Catamarca. El estudio es de carácter exploratorio, ya que persigue la finalidad de dar una visión general, aproximada respecto al objeto de estudio y se enmarca en la lógica cualitativa. En el muestreo cualitativo se sigue el criterio de la representatividad (por cuotas, exhaustivo, por redes) Se optó por el modo exhaustivo ya que se selecciona a toda la población indicada en la problemática a estudiar y no a una muestra (Sagastizabal, M. A.; Perlo, C. L.1999:108). Las técnicas de indagación son la entrevista y la observación documental. En el marco de las técnicas de observación directa se trabaja con entrevistas. La entrevista es una técnica cualitativa que puede ser desde una conversación libre hasta una investigación estructurada. En la presente investigación se optó por: la entrevista no estructurada o en profundidad porque permite una mayor expresión individual y espontaneidad del sujeto, como así también el abordaje de cuestiones no previstas. (Sagastizabal, M. A.; Perlo, C. L.1999:118:119).

4 En relación a la técnica de observación documental como su nombre lo indica serían las aplicables al estudio de los documentos, hoy día de muy diversos tipos y de soportes muy variados, con la peculiaridad de que siempre nos darían una observación mediata de la realidad (Aróstegui Julio: 2001:402). Por medio de la observación documental se centrará el análisis en la siguiente documentación escrita: documentación bibliográfica, Proyectos de cursos y Postgrados, instrumentos de evaluación incorporados en el Campus de la Facultad de Humanidades. En relación al análisis de datos se trabaja con análisis de contenido, se denomina así al conjunto de operaciones, transformaciones, reflexiones, comprobaciones que se realizan para extraer significados relevantes en relación con los objetivos de la investigación. El fin de este análisis es agrupar los datos en categorías significativas para el problema investigado (Sagastizabal, M. A.; Perlo, C. L.1999:136). En cuanto al cuidado de la credibilidad de este estudio se propone como estrategia metodológica siguiendo a Forni F. y otros. (1993) La triangulación. Consideraciones Finales En la Argentina la Educación a Distancia a diferencia de otros países surge tardíamente. En la década del cincuenta comienzan a implementarse algunos programas de educación no formal y hasta los años noventa no se habían generalizado ofertas no presenciales. A mediados de la década del noventa las Universidades y otros centros de enseñanza presencial comienzan a incursionar en la Educación a Distancia aplicando las modernas tecnologías de la información y la comunicación. Dichas tecnologías inauguran un espacio diferente que contribuye a que el estudiante reciba una formación más personalizada y pueda adaptar el estudio a sus horarios personales. Se origina un escenario educativo diferente que se visualiza en el Campus Virtual donde se desarrollan los procesos de enseñanza y aprendizaje. Este espacio telemático permite la interrelación entre los distintos miembros, tanto tutores como estudiantes. Este nuevo concepto de educación se ha insertado paulatinamente en las decisiones y políticas institucionales de numerosas Universidades de nuestro país, mediante la creación de Áreas o Departamentos de Formación a Distancia. La

5 Facultad de Humanidades de la UNCa. en correlación con las realidades institucionales de otras Universidades que consideran la producción y el desarrollo del conocimiento como un instrumento estratégico de todo proyecto universitario; inicia propuestas de ofertas de formación a graduados de diferentes campos disciplinares. De esta manera desde el 2001 año en que se crea el Área de Educación a Distancia se comienzan a gestar e implementar propuestas de formación a Distancia contando a la fecha con una amplia oferta de formación. En la presente investigación se realizó un abordaje en los trayectos de los Cursos y Seminarios de Postgrado dictados mediante modalidad virtual total entre los años 2004 y 2007, con el objetivo de profundizar en la interpelación y discusión sobre las prácticas de evaluación. Pues, la virtualidad y la no presencialidad en los entornos de formación obligan a replantearse los procesos de evaluación puesto que las estrategias clásicas dejan de tener validez y deben diseñarse otras alternativas relacionadas claramente con los procesos de autogestión de la formación y de responsabilidad del propio sujeto. El abordaje se efectuó desde diversas perspectivas de análisis referidas a las concepciones de la evaluación, características, problemáticas, propuestas, normativa, etc. Si bien la evaluación desde su función político-administrativa es la herramienta que permite a la institución certificar ante la sociedad la calificación de sus estudiantes y graduados, acreditando determinada formación y permitiendo el paso hacia el siguiente escalón del Sistema Educativo; es también claro que la evaluación es un elemento constitutivo de los procesos de enseñanza y aprendizaje y como tal resulta fundamental para producir información que les permita a los estudiantes reconocer aciertos y dificultades en su proceso de aprendizaje y actuar en consecuencia. Actualmente, se está viviendo un cambio de paradigma donde el cognitivismo y el constructivismo destacan la importancia de la subjetividad y de los procesos, de la atención a las diferencias individuales y a la diversidad, la incorporación de las actitudes y los valores, entre otros. En este sentido, pensar en transformar la manera de concebir y practicar la evaluación requiere de cambios en la concepción de los estudiantes-usuarios, cambios en los profesores y cambios administrativos en relación con el diseño y

6 distribución de la enseñanza y con los sistemas de comunicación que la institución establece. Pues la educación con tecnologías y particularmente la formación virtual requiere de nuevos paradigmas en educación. Se hace necesario desdibujar la verticalidad de las relaciones docente-estudiante por la horizontalidad en pro de una mayor interacción del aprendizaje continuo y compartido. En la experiencia investigada se advierte que los tutores se orientan a una evaluación alternativa la cual, entre otros aspectos contempla que: Los estudiantes participen en el establecimiento de metas y criterios de evaluación. Las tareas requieran de los estudiantes el uso de procesos de pensamiento de alto nivel, tales como solucionar problemas y tomar decisiones. Las actividades prevean valoraciones de las habilidades y actitudes metacognitivas, habilidades para las relaciones interpersonales y la colaboración. Las tareas se configuren de una manera contextualizada en aplicaciones al mundo real. La evaluación tal y como es concebida en los trayectos formativos analizados permite la interacción tutor-estudiante, estudiante-estudiante, grupo-tutor, estudiante-contenido garantizando una mayor socialización de los resultados alcanzados y de la marcha del proceso lo que permite al tutor aclarar dudas y orientar las actividades próximas a desarrollar. Por otra parte, los instrumentos diseñados en la plataforma e-ducativa permiten la evaluación, autoevaluación y coevaluación por lo que se considera que cumplen las funciones de la evaluación: instructiva, educativa, de diagnóstico y de control ya que se advierten diversos ejemplos de actividades formativas en donde el estudiante define junto al tutor los criterios de actuación y en donde existen múltiples actividades e instrumentos para que el estudiante se autoevalúe, valore a su grupo de trabajo y reciba información del docente y de los estudiantes sobre su progreso educativo. En suma, la investigación sobre la evaluación de los aprendizajes en los Cursos y Seminarios de Postgrados permitió observar su desarrollo en tres fases: organización/planificación, seguimiento /orientación y valoración/comunicación de los resultados. Los tutores situaron la estructuración del proceso de evaluación en función de un marco referencial coherente con la propuesta pedagógica. En este sentido se precisó a la evaluación de los aprendizajes como continua, formativa y

7 sistemática tendiente a facilitar la reorientación del aprendizaje. Desde algunas miradas y en consonancia con lo anterior se define a la evaluación como constructiva e interactiva que permite generar conocimientos a través del intercambio, produciendo la intersubjetividad y la participación. La evaluación de los aprendizajes en el caso analizado reveló a la luz de las evidencias la reorientación permanente del proceso, el control de la calidad, la oportuna ayuda al estudiante, la colaboración mutua entre los tutores y el adecuado uso de la plataforma tecnológica. Harasim y otros (1996) al reflexionar sobre la evaluación en cursos en línea, sostiene que en un enfoque centrado en el estudiante, la evaluación debe ser parte del proceso de enseñanza y aprendizaje, debe integrarse a las actividades de enseñanza y a las interacciones entre estudiantes y tutores. Esto describe un proceso de evaluación formativa que se construye en la estructura de la clase. A medida que la enseñanza universitaria de tipo virtual se expande, crece la percepción de la evaluación como un asunto crítico. Pues se debe asumir que la evaluación tradicional es incapaz de revelar la complejidad de los resultados de los ambientes virtuales de aprendizaje centrados en el estudiante, que son radicalmente diferentes a un modelo didáctico centrado en el docente. En el marco de las nuevas tecnologías y los entornos virtuales se advierten que los docentes universitarios necesitan entrenamiento especial y ayuda técnica para desarrollar e implementar métodos de evaluación virtual como las simulaciones de alta fidelidad o los portafolios electrónicos. Para consolidar espacios de discusión y negociación en torno a las múltiples dimensiones que configura la problemática de la evaluación de los aprendizajes en los entornos virtuales, se hace necesario partir de la delineación de normativas claras y explícitamente definidas que sirvan de soporte para la toma de decisiones a nivel institucional y de las prácticas docentes virtuales en particular. Según Díaz Barriga (1993) existe necesidad de construir colectivamente tanto el concepto de evaluación como el del campo a evaluar, en una relación dialéctica. Significa no aceptar como dados estos conceptos sino elaborarlos juntos, vinculándolos a la concepción de hombre, de sociedad, de conocimiento, de relación individuo-conocimiento-sociedad que construyamos. Bibliografía

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