Adolescentes en situación de calle: vínculos que permite crear la música

Transcripción

1 Adolescentes en situación de calle: vínculos que permite crear la música Autores : MAEYAERT, An (an_maeyaert@hotmail.com) PACE, Pablo (lindocoquito@yahoo.com.ar) ROURICH, Patricio (patriciorourich@hotmail.com) Institución: Asociación C.H.I.C.O.S., Rosario, Santa Fe, Argentina Eje: Arte, cultura y salud mental Área: Adolescentes en situación de calle

2 El presente trabajo es el relato de una experiencia de Taller de música en un Centro de Día dependiente de la Dirección General de Niñez, Infancias y Familias, de la Municipalidad de Rosario, en cogestión con la Asociación Civil C.H.I.C.O.S. Esta institución tiene como destinatarios a niñas, niños y adolescentes de 12 a 18 años que por diversas circunstancias viven o trabajan en la calle. Contexto institucional El Taller de Música surge en el mes de Noviembre del año 2009 con el objetivo de acercar a los niños, niñas y adolescentes que allí concurren una propuesta artística accesible, concreta y de creación colectiva desde un lenguaje particular como lo es el de la música. El Centro de día se plantea como un dispositivo de trabajo que aborda la problemática de niños, niñas y adolescentes en situación de calle y otras situaciones de vulneración de derechos, con el objetivo de diseñar estrategias de acompañamiento que apunten a la restitución de sus derechos y a una existencia más plena para cada uno de estos niños. A esta institución concurren cotidianamente gran cantidad de niños, niñas y adolescentes que se encuentran atravesados por diversas y complejas problemáticas, que tristemente caracterizan a este tiempo económico, social e histórico, impactando fuertemente en sus subjetividades como la situación de calle (quienes viven en la calle o pasan muchas horas en ella), la exclusión familiar e institucional, el consumo de sustancias, la prostitución, el maltrato, situaciones de auto y hetero agresividad, exposición a graves riesgos, sufrimientos físicos y emocionales, fuertes crisis subjetivas y pasajes al acto. El equipo técnico institucional que aborda la problemática esta conformado por 8 personas: tres psicólogos, un profesor de teatro, una técnica en familia y minoridad, una maestra jardinera y un operador de calle. Las tareas del equipo son amplias, al interior de la institución los chicos pueden desayunar, bañarse, realizar su aseo personal, lavar sus prendas, disfrutar de un tiempo de juego libre, participar de la propuesta de taller específico de ese día, almorzar y concurrir al aula radial de nivel primario para aquellos que no hayan terminado sus estudios en dicho nivel. Todas estas acciones con acompañamiento de alguno de los adultos responsables, si se evalúa necesario. Además, es tarea del equipo, realizar entrevistas psicológicas, ofrecer acompañamiento médico, realizar visitas familiares, articular con otros profesionales diseñando estrategias conjuntas de intervención,

3 vincularnos a otras organizaciones e instituciones referentes, continuar capacitándonos en la tarea, entre muchas más. Objetivos El objetivo general del taller es ofrecer una propuesta artística accesible, participativa y colectiva. Quienes sostenemos cotidianamente el abordaje de estas situaciones consideramos que el trabajo en la trama vincular, la creación del vínculo operativo, es el medio a través del cual vamos a comenzar a desplegar una posibilidad de intervención y para llegar a ello, vemos en lo artístico una vía posibilitadora. Por ello pensamos que la música por ser connatural al hombre forma parte de lo esencial que tenemos como seres humanos y que ella nos permite explorar creativamente nuestro mundo interno, enriqueciéndonos, logrando comunicar, liberándonos al expresarnos y vincularnos positivamente con otros y con nuestro entorno. Modalidades de trabajo La experiencia del trabajo en varios talleres y espacios del Centro de día nos enseñó que no siempre es fácil generar una escucha respetuosa y paciente del otro. Por eso, y para evitar que el taller se convierta en una mera descarga de energía pegando individualmente en los instrumentos, introdujimos actividades de audición al principio del taller. Así, en el primer taller, planteamos el juego del Rey del silencio, para sostener el principio pitagórico de que toda música nace del silencio. Este principio será recordado a lo largo del taller, cada vez que empezamos a tocar un tema ya arreglado. Otras propuestas lúdico-sonoras presentaron varios instrumentos musicales, géneros de música, músicas del mundo, etc. Notamos que con el juego apareció un clima propicio de trabajo que favorecía el desarrollo de las propuestas rítmicas que seguían. Los juegos generaban entusiasmo y cierta disposición para la escucha, lo cual es muy importante a la hora de tocar música. También nos convocaban a disfrutar de este espacio de encuentro. Una vez instalado un buen clima de trabajo, sacamos los instrumentos: distintos instrumentos de percusión y algunas flautas. Luego de un momento de improvisaciónexploración individual, enseñamos un ritmo, que vamos armando y ensayando a lo largo de varias sesiones. A pesar de las ansias de los chicos por aprender nuevas propuestas rítmicas, insistimos en el hecho de que siempre podemos mejorar lo que ya sabemos tocar, mediante la escucha, la atención y las ganas de compartir.

4 Ser músico es tocar y escuchar Qué música eligir? En el campo de la educación artística de jóvenes existe un tema muy debatido: Hay que facilitar el acercamiento usando las músicas que ellos suelen escuchar, o hay que familiarizarlos con el repertorio clásico? Creemos que limitarse a trabajar con las músicas comerciales que escuchan generalmente los adolescentes en situación de calle, la cumbia villera y el reggaetón, cierra la posibilidad de explorar todo el universo musical. En este sentido, apostamos a facilitarles un acercamiento a una variedad de músicas: folclore nacional, músicas del mundo, rock internacional, y música clásica muchas veces considerada inadecuada para estos jóvenes. Todo depende de la forma en la que uno trabaja. Obras como Pedro y el lobo de Prokofiev, The young person s guide to the orchestra de Britten o el Carnaval de los animales de St-Saëns ofrecen maravillosas oportunidades para acercarse al mundo sonoro clásico. Durante seis talleres, empezamos el taller por la escucha de un fragmento del cuento musical Pedro y el lobo. Trabajamos, de forma lúdica, el reconocimiento de los instrumentos musicales a través de los personajes del cuento. Luego invitamos a los chicos a dejarse llevar por la música, y cerrando los ojos, tratar de visualizar las escenas. A algunos les daba vergüenza, pero otros vivieron esta experiencia con tal intensidad que casi se podía leer la trama en su cara. Experiencias que nos quedaron grabadas: Encuentro CHICOS - Cire En julio del 2010 realizamos un encuentro musical entre dos grupos de sujetos: los músicos del Centro de día CHICOS y los de Cire, Centro de día para personas con dificultades subjetivas. En una charla previa con los chicos, que los acompañantes del taller considerábamos necesaria, hablamos de temas como el respeto, la diferencia, etc. Uno de los chicos nos contestó: Qué diferencia? Si son personas como nosotros! Esta frase muy bien resume el primer encuentro, en que los músicos del Cire vinieron a visitarnos en el horario del taller de música. Cuando entraron, los chicos de CHICOS fueron a saludarlos y a invitarlos a sumarse a la ronda. Propusimos un tema de cumbia, y los del Cire se sumaron al ritmo, generando así una construcción discursiva sonora. Siguieron otras propuestas rítmicas de los dos grupos, la música fluyó y las miradas y sonrisas se intercambiaron. Muy espontáneamente se generó un intercambio de instrumentos. Después de la despedida, recibimos unas cartas de agradecimiento de los chicos del Cire, invitándonos a su casa.

5 Así sucedió: un viernes a la tarde, nos sumamos con nuestros instrumentos al taller de baile en Cire. Ni bien empezamos a tocar, que la pista se llenó de bailarines entusiastas. Esta vez también, el encuentro pasó con tanta naturalidad, que desembocó en una improvisación sonoro-corporal colectiva. La intensidad de lo vivenciado y la alegría generada se manifestaron en unos sinceros abrazos llegada la hora de despedirnos, y la promesa de seguir encontrándonos. Nos llamó la atención lo fluido, lo natural y lo sincero de este encuentro. La música hizo posible que dos grupos de sujetos muy distintos, que sufren diariamente de miradas prejuiciosas, pudieron expresarse y conectarse en toda su libertad, en su simple condición de para terminar usando las palabras de Maxi personas como nosotros. Dificultades inherentes al trabajo: para seguir reflexionando y creciendo Se conformó, en enero del 2010, un grupo de participantes regulares bastante heterogéneo. Algunos tienen previas experiencias de música, y muchas ganas de aprender y mejorar su técnica. De otros, la motivación no es tan clara, lo que lleva algunas veces a una difícil integración en el grupo la actividad. Otros chicos, que vienen con situaciones conflictivas de consumo, maltrato, entre otras, no pueden concentrarse durante tanto tiempo. La vergüenza es otro factor que a veces dificulta el proceso de aprendizaje. Muchas veces, los chicos se niegan a ensayar un ritmo que no les sale directamente. La mirada de los otros puede jugar un rol en esta limitación. Otra traba es lo corporal: nos proponemos trabajar el esquema corporal. La postura ideal para tocar, dispuestos para poder conectarse con la mirada, no es la que prefieren los chicos. Los juegos de percusión corporal, en los cuales hay que pararse y poner en movimiento el cuerpo entero, son rechazados por casi todo el grupo. Estas dificultades, que a veces generan tensiones, nos llevan a charlas grupales, en las que los chicos siempre reiteran sus ganas de seguir tocando. Esto nos hace repensar los objetivos del taller: buscamos el difícil equilibrio entre calidad de producción musical, y la experiencia grupal de compartir, conectarse, expresarse en libertad. Por un lado el efecto terapéutico de la libre expresión sonorocorporal, por otro lado, el derecho a la belleza. En palabras de nuestra coordinadora, Marcela Lapenna: No es porque son chicos en situación de calle, que hay que bajar las ambiciones de calidad artística.

6 Continuamos nuestra búsqueda del punto de encuentro entre nuestras ganas respectivas, que son diferentes para cada chico e incluso para cada grande.