El cine como herramienta pedagógica en la enseñanza de la historia. Planteamiento del problema y justificación del proyecto.

Transcripción

1 1 El cine como herramienta pedagógica en la enseñanza de la historia. Proyecto presentado por Daytona Primer Concurso Nacional de Prácticas Innovadoras de Educación y Capacitación De Jóvenes y Adultos Planteamiento del problema y justificación del proyecto. El presente proyecto tiene como destinatarios a los formadores de educadores, a quienes se pretende entregar una nueva herramienta de trabajo, a fin de enriquecer sus métodos educativos, que les permitan mejorar la enseñanza de la historia y de otras materias relacionadas con las ciencias sociales. En efecto, tal como se ha documentado tanto en diversos países de América Latina como en Europa, la enseñanza de la historia ha topado hasta ahora con dificultades equiparables con las que tiene la de las matemáticas o ciencias. 1 Algunas de las causas de este fracaso ya son bien conocidas. En primer lugar, los programas de historia contemplan un pasado desvinculado del presente, mientras a los estudiantes lo que más les interesa y preocupa es el momento actual y sus tendencias de transformación al futuro. 2 Por otra parte, los libros de texto de historia están atiborrados de fechas, datos, nombres y cortos enunciados sobre lo que hizo tal o cual personaje, o sobre lo que sucedió en tal o cual fecha. Es inútil, a partir de estos textos, tratar de comprender cómo era la vida en una determinada época histórica, a qué tipo de problemas se enfrentaba la gente, cómo vivía, cómo trabajaba y se relacionaba con otras personas, etc. Es decir, todo lo que pudiera interesar a los estudiantes, todo lo que permitiría entenderles a sociedades diferentes a la suya, están fuera de los libros de texto. Estos mismos libros contienen con frecuencia simplificaciones y deformaciones que afectan negativamente la formación histórico social de los jóvenes. Y así, por ejemplo, el cambio histórico se explica muchas veces por la acción voluntaria de personajes destacados, personajes que además parecen tener rasgos novelescos, son buenos o malos, heroicos o villanos... No debe extrañarnos que, como consecuencia, nuestros alumnos atribuyan a los grupos humanos antiguos rasgos de nuestra mentalidad y conocimientos actuales. 3 Ahora bien, el fracaso de la enseñanza de la historia no sólo repercute en una pobre formación en las ciencias sociales de las nuevas generaciones, sino 1 Véase, entre otros, Beatriz Aisenberg y Silvia Alderoqui, Didáctica de las ciencias sociales, Piados, Buenos Aires, 1994, Marc Ferro, Cómo se cuenta la historia a los niños en el mundo entero, FCE, México, 1995 (1981); Javier Pérez Siller y Verena Radkau (coord.), Identidad en el imaginario nacional. Reescritura y enseñanza de la historia, BUAP, Puebla/ El Colegio de San Luis / Instituto Georg- Eckert, Alemania, México, 1998; Josette Poinssac- Niel, La tecnología de la enseñanza de la historia, Oikos- Tau, Barcelona, 1977; 2 Véase, entre otros, J. Poinssac- Niel, op.cit. 3 Marchan Iglesias y Francisco García citan el trabajo de un alumnos argentino que escribió: los grupos humanos del Paleolítico, cansados de vagar de un lugar para otro, decidieron dedicarse a la agricultura ( Una metodología basada en la investigación para la enseñanza de la historia, en: B. Aisenberg y S. Alderoqui, op. cit. pp ) 1

2 2 que influye negativamente en su formación y cultura general, en sus hábitos de estudio, en su preparación teórica y habilidades intelectuales. En efecto, como consecuencia de un aprendizaje basado en las estrategias de enseñanza mencionadas anteriormente, nuestros alumnos sólo están dispuestos a recibir o aprender conocimientos presentados como un todo estructurado y acabado; el análisis y la interpretación de las diversas posturas teóricas o fenómenos les está vedado. Creen firmemente que la ciencia es un conjunto de verdades establecidas que hay que aprender sin analizar, reflexionar, discutir. Al haber sido habituados a repetir los contenidos y no pensar mediante los conceptos o categorías que estos contenidos comportan, se sienten desarmados frente a cualquier nuevo problema. De ahí que desconfíen de sus propias habilidades intelectuales y sean incapaces de investigar por su propia cuenta. Planteado así el problema, tendríamos que interrogarnos sobre la posibilidad de que la historia deje de ser vista por los maestros como un conjunto de hechos y nombres a ser memorizados y, en cambio, empiece a comprenderse como uno de los elementos fundamentales de la cultura general de nuestros alumnos y una oportunidad para desarrollar sus capacidades intelectuales. En respuesta a esta problemática deseo plantear una propuesta de enseñanza de la historia con el apoyo de las películas de ficción. Voy a presentarla en forma resumida, pero antes de hacerlo, quisiera justificarla. En efecto por qué usar en clase las películas realizadas con fines comerciales y no didácticos? Las películas forman parte de nuestra cultura, de la misma manera como la literatura y otras expresiones artísticas. Sin embargo, hasta ahora sólo la literatura ha gozado realmente del prestigio en el ámbito escolar y se ha empleado con diversos fines. Se les ha pedido a los estudiantes que analicen sus contenidos como una forma de mirar e interpretar el mundo circundante. Se les ha recomendado fijarse en los recursos teóricos empleados por los escritores y poetas para enriquecer su propia capacidad de expresión y para desarrollar su sensibilidad, entre otros. Hoy no podríamos negar que las películas constituyen una de las más importantes expresiones de nuestra cultura y que están tan presentes en la vida de los niños y adolescentes como antes solían estar los libros. Para los chicos, el mirar las películas en el cine y en la televisión es un acontecimiento natural y cotidiano, fuente de diversión y entretenimiento, pero también de conocimiento de distintas sociedades y culturas, de valores y actitudes ante la vida, así como de los recursos que emplea el cine para expresarse. Su competencia para leer las imágenes es, sin duda, mayor que la que tienen las generaciones anteriores a la difusión masiva de la televisión y del video. Las películas de ficción, las buenas películas, cuidadosamente escogidas para el tema que queremos tratar en clase y en función de las características de nuestros alumnos, permiten hacer lo que no permite ningún libro de texto: 1. reproducir un fragmento de vida en alguna época y espacio geográfico con mucha mayor riqueza que los textos que se emplean en la escuela (arquitecturas, modas, formas de transporte, condiciones de vida, de 2

3 3 trabajo, formas de ocio, relaciones familiares y sociales, etc.). Se trata además de una representación que posee un alto grado de concreción y que integra los distintos elementos de la vida social, es decir, lejos de mostrarlos por separado, da cuenta de las distintas interrelaciones entre éstos; 2. producir la proyección y la empatía hacia lo que se presenta. La identificación emocional del alumno con los acontecimientos del pasado, permite comprenderlo en su dimensión humana y actualizar su sentido para nosotros; 3. superar la idea de una ciencia de historia compuesta por verdades que cuentan con el consenso de todos los científicos y que excluye la controversia (a través de la cual dicha ciencia se ha ido construyendo) 4 Toda película es una interpretación, que puede compararse con otras visiones del mismo acontecimiento a partir de la lectura de los textos, visionado de otras películas, etc; 4. comprender la realidad social como un fenómeno complejo, contradictorio, difícil de aprehender, que puede ser explicado de diversas maneras, dependiendo del marco teórico desde el cual es abordado, así como del interés de la investigación (en este sentido, es importante comparar la interpretación que ofrece la película de una época histórica con otras fuentes), y, por tanto 5. comprender que el conocimiento se construye en un contexto sociocultural y que admite diversas interpretaciones de la realidad social; 6. desarrollar la conciencia histórica mediante el desarrollo de la competencia narrativa e imaginación; 5 7. superar las fronteras artificialmente construidas entre las disciplinas. Las películas de ficción se prestan a los análisis multidisciplinarios, puesto que representan múltiples aspectos de la vida; 8. superar la visión nacionalista del pasado y darse cuenta de la dimensión mundial de la humanidad, de las diferencias culturales, etc; 9. transformar la relación entre el maestro, tradicionalmente único intérprete del texto, y el alumno, receptor del saber. Las películas permiten diversas lecturas e interpretaciones, condicionadas por las diversas experiencias previas de los espectadores, por lo que, los alumnos tienen una mayor oportunidad de participar en la construcción del saber; 10. introducir elementos lúdicos en las clases cuyo formato tradicional es sumamente rígido y serio. 4 Alicia R.W. de Camilloni, Epistemología de la didáctica de las ciencias sociales en : B. Ainsberg y S. Alderoquí, op.cit., pp A partir de los trabajos de Hayden White algunos representantes de la didáctica de la historia reconocen la importancia de la narración en la constitución de la conciencia histórica. Las expresiones narrativas se integran, a su vez, con los elementos visuales y pictóricos, no verbales, que todos conocen y que, por tanto no tienen que narrarse. Cfr. Verena Radkau G., Aprendizaje histórico: algunas consideraciones y propuestas didácticas desde una óptica alemana en: J. Pérez Siller y V. Radkau, op.cit. 3

4 4 Transformación de la relación pedagógica tradicional. No se trata de plantear que los filmes sean una suerte de panacea para la educación. Tampoco estoy de acuerdo con los enfoques que plantean la sustitución del profesor por la nueva tecnología. En la presente propuesta el maestro sigue jugando un papel central y no se excluye ninguno de los recursos tradicionalmente empleados en la educación escolar. Las películas juegan un papel motivador e introductorio, y sin embargo, su uso permitiría superar muchos de los problemas que aquejan actualmente la enseñanza escolar. En efecto, una película bien seleccionada para la clase, puede estimular el interés cognitivo de los alumnos sobre un tema o problema particular. Se trata de un principio fundamental en la educación: la escuela tradicional se ha topado una y otra vez con el problema de la introducción de contenidos definidos por los especialistas en el diseño curricular pero que, muchas veces, no corresponden a los intereses de los alumnos. Cómo promover el aprendizaje de algo que no les importa a los estudiantes? La motivación se ha dejado en gran medida al ingenio de los maestros y sólo algunos de ellos han encontrado maneras de lograrlo. Otros, más que a motivaciones han recurrido a presiones y amenazas. Pero qué calidad puede tener un aprendizaje logrado a fuerza y a contracorriente de los intereses reales? Una buena película debe presentarse a los alumnos, entonces, como una atractiva introducción al tema y de ninguna manera como una fuente de conocimiento suficiente sobre dicho tópico. La idea es que los alumnos comprendan que el filme se realizó a partir de una selección de los acontecimientos y una interpretación de lo que se muestra. 6 En este sentido, es importante enfatizar el hecho que la película no agota el conocimiento del problema representado y que constituye una visión parcial del mismo. Partimos de la idea que todo nuevo conocimiento se origina a partir de los anteriores, que funcionan como marco asimilador, a partir del cual se otorgan nuevos significados a los nuevos objetos de conocimiento. 7 Ello no implica que la clase debe reducirse exclusivamente al análisis de los conocimientos previos de los alumnos, puesto que ello no conduce a nuevos aprendizajes. La propuesta consiste en emplear las películas de ficción como introducción al nuevo tema, que conduce a la problematización el objeto de estudio. Dicha problematización debe seguirse con un proceso de descubrimiento o investigación, que lleve (bajo la dirección del maestro) a la respuesta a las distintas preguntas que suscitó en los alumnos la película, escogida por el profesor para la clase. El filme debe verse en la forma lo más abierta posible a todas las interrogantes, interpretaciones y discusiones. El maestro debe comportarse como un espectador más y participar junto con sus alumnos. Esta es la oportunidad que 6 Sobre la película como una doble interpretación pueden consultarse diversas obras y en particular: Robert C. Allen y Douglas Gomery, Teoría y práctica de la historia del cine, Piados, Barcelona, 1995 y José Enrique Monterde, Cine, historia y enseñanza, Laia, Barcelona, Beatriz Aisberg, Para qué y cómo trabajar en el aula con los conocimientos previos de los alumnos: un aporte de la psicología genética a la didáctica de estudios sociales para la escuela primaria en: B. Aisberg y S. Alderoqui, op.cit, pp

5 5 se le abre para permitirles participar en la construcción de los conocimientos en vez de imponérselos. Esta estrategia de trabajo en el aula puede conducir también a ejercicios de autorreflexión. Transcurrido cierto tiempo y una vez que los estudiantes hayan adquirido cierta pericia en este método de aprendizaje, puede pedírseles que reflexionen sobre él: cómo hemos aprendido? qué importancia ha tenido en este proceso el planteamiento de las interrogantes, el debate, nuestras experiencias previas, la confrontación de las diversas interpretaciones? Se trata de una discusión que permitirá, si el maestro así lo desea, examinar el propio proceso de construcción de conocimientos. Creo que se trata de una reflexión de una enorme importancia para la formación de nuestros estudiantes, puesto que les permitiría comprender que las teorías que ellos han ido conociendo durante su permanencia en la escuela se han ido construyendo en contextos históricos y sociales determinados. Por tanto deben analizarse con relación a las condiciones de su surgimiento y no en forma abstracta, como si se tratara de verdades absolutas, descubiertas o construidas de una vez para siempre. El empleo de las películas en clase permitirá relacionar más estrechamente la experiencia que los alumnos adquieren en el aula con las formas en que conocen el mundo fuera de la escuela. Para lograrlo, puede compararse el tema o los recursos estéticos del filme visto en clase con otros que los estudiantes hayan presenciado en otros momentos. Las películas pueden ayudar a comprender mejor las formas de representación de lo real no verbales. Para ello es necesario elevar las competencias de los estudiantes para el análisis de las imágenes visuales y sonoras. Junto con ello, es posible desarrollar en ellos la capacidad de traducir las distintas formas de representación a otras, a pasar de un código de expresión a otro. La importancia de este tipo de habilidades ha sido subrayada por los autores interesados en el desarrollo de las habilidades de pensamiento. 8 Finalmente, el empleo de las películas en clase debe redundar en el desarrollo de la recepción crítica de los mensajes audiovisuales. La estrategia que aquí hemos propuesto implica entre otros, el distanciamiento frente al discurso empleado en el filme que supone la reflexión sobre el tipo de representación e interpretación de la realidad que ofrece la película. Programa del Diplomado El Diplomado El cine como herramienta pedagógica en la enseñanza de la historia, consta de tres módulos. El primero de ellos tiene como fin familiarizar a los profesores con las distintas facetas del fenómeno cinematográfico: su carácter histórico- social, sus dimensiones económicas y tecnológicas, sus atributos culturales y estéticos y sus funciones comunicativas. Se trata también de enseñar a los profesores a comprender el discurso audiovisual y, en específico, el que emplea el cine. 8 Existe una amplia bibliografía al respecto; entre otros es interesante consultar a Matthew Lipman, Thinking in Education, Cambridge University Press, Cambridge, 1991 y a W. Elliot Eisner,, Procesos cognoscitivos y curriculum, Martínez Roca, Barcelona,

6 6 El segundo módulo tiene como objetivo principal explorar la posibilidad de emplear el cine en apoyo a las clases de historia y/o de las ciencias sociales en general, como un elemento que contribuya a superar las dificultades que tradicionalmente ha enfrentado la enseñanza de estas materias, basada en representaciones abstractas y fragmentadas de la realidad social, en un aprendizaje que privilegia lo memorístico y en cierta incapacidad para crear una relación adecuada entre los conocimientos previos y los intereses de los estudiantes, por un lado, y los contenidos que se les ofrecen, por el otro. Se busca motivar la reflexión sobre aspectos fundamentales de la pedagogía, así como sobre el uso didáctico del cine en el aula. El tercer módulo está diseñado para centrar el análisis en la enseñanza de la historia con el apoyo de las películas de ficción. Módulo I. Cine e Historia. Temario: Sesión 1. Sesión 2. Sesión 3. Sesión 4. Sesión 5. Sesión 6. El cine como objeto de estudio. 1. El cine como producto socio- cultural 2. El cine como arte 3. El cine como medio de comunicación. La película y su espectador. 1. La cultura del espectador y la construcción de la mirada. 2. El espectador como decodificador 3. El espectador como interlocutor. El lenguaje del cine. 1. Es el cine un lenguaje? 2. El plano y el montaje. Las características de la imagen cinematográfica. 1. El encuadre y el plano. 2. Técnicas de la profundidad. 3. Las características creadoras de la cámara. La representación sonora. 1. La influencia del sonido en la percepción del espectador. 2. La relación sonido- imagen. 3. Usos expresivos del sonido. La puesta en escena. 1. Concepto de representación. 2. El escenario y la escenografía. 3. Vestuario y maquillaje. 4. Iluminación. 6

7 7 5. Reparto y dirección de actores. Sesión 7. El tiempo y el espacio. 1. La representación del tiempo: condensación, elipsis, flashback, flashforward. 2. La representación del espacio y sus funciones (ideológica, narrativa, simbólica) Sesión 8. La narrativa cinematográfica I. 1. La impresión de la realidad, la ficción y la verosimilitud. 2. El autor y la instancia narrativa. Sesión 9. Sesión 10. La narrativa cinematográfica II. 1. La diégesis. 2. Los personajes y sus funciones. 3. Los géneros. La lectura y la interpretación del filme. Bibliografía básica: Allen, Robert C y Douglas Gomery, Teoría y práctica de la historia del cine, Paidos, Barcelona, Aumont, J., et.al., Estética del cine, Piados, Barcelona, Carmona, Ramón, Cómo se comenta un texto fílmico, Rei, México, Casetti, Francesco, El film y su espectador, Cátedra (Signo e imagen), Madrid, Martín, Marcel, El lenguaje del cine, Gedisa, Barcelona, Monterde, José Enrique, Cine, historia y enseñanza, Laia, Barcelona, Filmografía: Wajda, Andrzej, La tierra de la gran promesa, Polonia, Solanas, Fernando, Sur, Argentina/ Francia, Módulo II. El cine y la sociedad. Sesión 1. Sesión 2. La película como una expresión histórica. 1. Medio del cine. 2. Mentalidades e ideologías. El filme como discurso histórico: 1. La noción del historiador 2. La noción del discurso histórico. 7

8 8 Sesión 3. Sesión 4. Sesión 5. Sesión 6. Sesión 7. Sesión 8. Sesión 9. Sesión 10. La representación fílmica de la historia como una ficción: el empleo de las convenciones de veracidad y ficcionalidad. La interpretación fílmica de los temas socio- históricos I 1. Los temas históricos y su interpretación fílmica. 2. Los personajes históricos y su tratamiento en el filme. La interpretación fílmica de los temas socio- históricos II 1. La condensación, la omisión, los errores. 2. Los mensajes ideológicos. La concepción de la historia implícita en el filme I 1. La noción del referente histórico: a. La reconstrucción histórica. b. El referente como representación. c. La ausencia o problematización del referente. La concepción de la historia implícita en el filme II 1. La relación entre el pasado y el presente. 2. El modelo de la explicación histórica. Análisis de la historia desde el punto de vista cinematográfico I 1. La representación del tiempo histórico. 2. La representación fílmica del espacio histórico. Análisis de la historia desde el punto de vista cinematográfico II 1. La representación de los personajes históricos: la selección, historia/ficción en la construcción de los personajes, sus funciones. Las estrategias narrativas de la representación histórica. 1. El género y sus convenciones de representación. 2. Las voces narrativas y el punto de vista. 3. La clausura del relato. Bibliografía básica: Romaguera, Joaquim y Esteve Riambau (eds.), La Historia y el Cine, Fontamara, Barcelona, Rosenstone, Robert, El pasado en imágenes. El desafío del cine a nuestra idea de la historia, Ariel, Barcelona, Sorlin, Pierre, Sociología del cine, FCE, México, Filmografía: Fuentes, Fernando de, El compadre Mendoza, México, Buñuel, Luis, Viridiana, España/ México,

9 9 Gutiérrez Alea, Tomás, Memorias del subdesarrollo, Cuba, Módulo III. La enseñanza de la historia con el apoyo del cine. Sesión 1. Sesión 2. Sesión 3. Sesión 4. Sesión 5. Sesión 6. Sesión 7. Sesión 8. Sesión 9. Sesión 10. El cine: un medio educativo. El empleo pedagógico de las películas históricas. Historia fílmica e historia escrita. La construcción del referente histórico en la película. Tiempo histórico y tiempo fílmico. Los personajes históricos y su representación fílmica. El problema de la narrativa en la representación de la historia. La historia y la ideología: I La historia y la ideología II Conclusión. Bibliografía básica: Kohut, Karl (ed.), La invención del pasado. La novela histórica en el marco de la posmodernidad, Vervuert,, Frankfurt/Madrid, Monterde, José Enrique, Cine, historia y enseñanza, Laia, Barcelona, Salvador Marañón, Alicia, Cine, literatura e historia. Novela y cine: recursos para la aproximación a la Historia Contemporánea, De la Torre, Madrid, Torre, Saturnino de la, Cine formativo. Una estrategia innovadora para los docentes, Octaedro, Barcelona, 1997., Cine para la vida. Formación y cambio en el cine, Octaedro, Barcelona, Filmografía: Mora Catlett, Juan, Retorno a Aztlán, México, Scott, Ridley, 1492: la conquista del paraíso, Gran Bretaña/ Estados Unidos/ Francia/ España,

10 10 Echevarría, Nicolás, Cabeza de Vaca, México, Rossoff, Eduardo, Ave María, México/ España, Solás, Humberto, El siglo de las luces, Cuba/ Francia, España,